Otra ocurrencia
Otra ocurrencia
Tras escribir lo anterior, pensé que lo que ocurriría con aquellos perros, no se daría en el caso de un ser humano.
No es necesario imaginar un personaje nuevo, cuando ya tenemos al bien estudiado por Edgar Rice Burroughs con su personaje de Tarzán, niñito inglés criado por los simios. Instintivamente fue como un mono con similares habilidades físicas como permitiera su distinta complexión, y sin embargo, pudiendo luego aprender todo cuanto pudo como hombre civilizado.
Han aparecido unos pocos casos de niñitos abandonados en regiones inhóspitas y hallados al cabo del tiempo, ya adultos, en condiciones salvajes.
Sin embargo, fueron pasibles de educación y adquirir la cultura propia de la civilización.
Así como ningún animal se vuelve hombre, ningún hombre se vuelve animal.
Cordiales saludos
Otra ocurrencia
Tras escribir lo anterior, pensé que lo que ocurriría con aquellos perros, no se daría en el caso de un ser humano.
No es necesario imaginar un personaje nuevo, cuando ya tenemos al bien estudiado por Edgar Rice Burroughs con su personaje de Tarzán, niñito inglés criado por los simios. Instintivamente fue como un mono con similares habilidades físicas como permitiera su distinta complexión, y sin embargo, pudiendo luego aprender todo cuanto pudo como hombre civilizado.
Han aparecido unos pocos casos de niñitos abandonados en regiones inhóspitas y hallados al cabo del tiempo, ya adultos, en condiciones salvajes.
Sin embargo, fueron pasibles de educación y adquirir la cultura propia de la civilización.
Así como ningún animal se vuelve hombre, ningún hombre se vuelve animal.
Cordiales saludos