Acabo de traducir esto, creo que es importante, posibles errores avisen por favor...
La Persona Πρόσωπο Prósopo de Adán como primer hombre y principio de la naturaleza-fisis humana.
Por “Grupo helénico de investigación dogmática”
http://www.oodegr.com/oode/genesis/adam6.htm
Hay un grave malentendido por parte de mucha gente acerca de la creación de Adán. Debido a que la noción teológica de las palabras «άνθρωπος
ánzropos hombre o ser humano» y "persona" no se entiende, otros aún persisten a una idea errónea del Génesis, y otros rechazan la historia de Adán como un cuento de hadas. Así que últimamente, se escuchan más y más voces en la Iglesia, pidiendo una aclaración de ciertas cosas que permitirán a los creyentes reconciliar la fe Ortodoxa con los hallazgos de la ciencia.
En este estudio veremos el significado teológico de las palabras «άνθρωπος
ánzropos hombre o ser humano» y «persona», en los marcos y contextos de esta aclaración.
Adán como el principio hipostático de la usía=sustancia o esencia humana.
En un estudio anterior, presentamos el significado correcto del "soplo" de Dios a Adán. Hemos demostrado que allí no se habla de "psique-alma", ni de "respiración" simple, ni de "vivificación" biológica. Habla del Espíritu Santo que le fue dado y lo hizo "psique-alma viva o vivificada" espiritualmente, elevándolo de "a imagen" al "como semejanza". Por lo tanto, no hay contradicción entre la Biblia y la ciencia, que nos habla de los descubrimientos paleontológicos de las civilizaciones, antes de la época de Adán. Entonces si la Santa Escritura NO presenta a Adán como Padre biológico de la humanidad, ¿por qué lo llamamos "primero en ser creado=protoplasto"? Aquí veremos el significado por el cual nos referimos a Adán como "el padre de la humanidad", como "persona" y como el primer "ser humano-ánzropo".
El respetuoso metropolita de Pérgamo, Ioannis Zizioulas, dice en su Dogmática:
"Es imposible referirse a la esencia-usía per se sin las personas concretas, es decir, no existe primera esta humanidad general. Muchas veces y hoy especialmente se habla mucho sobre la humanidad. La humanidad es la gente u hombres, seres humanos en concreto.
Y todo esto sale del dogma de la Santísima Trinidad. Por muy extraño que parezca, el impacto en la antropología es enorme. Ya que no hay sustancia desnuda y, por lo tanto, no podemos asumir como el principio de la raza o género humano la sustancia humana o el hombre platónico, el ideal, o como la naturaleza, el tipo género de Aristóteles, entonces, ¿cuál es el principio, comienzo y la causa, es decir, lo que hace al hombre uno, si no es su esencia-usía?
El tema también se discute en una de las cartas de san Basilio el Magno en diálogo con Amfiloquio. En una de estas cartas, se analiza todo este problema, y Basilio está de acuerdo con la opinión de que,
dado que nunca existe una sustancia humana desnuda como principio del hombre, el primer principio, principal predicado ontológico del hombre no es su esencia-usía. Pero definitivamente debe ser un ser determinado, y este es Adam. Es decir, mientras los antiguos griegos decían que nuestro origen, nuestra existencia la atraemos, como seres parciales e individuos por la común naturaleza humana, pero debemos como cristianos decir que somos atraídos a nuestra existencia por una persona, el Adán.
La causa de nuestro “ser” no es nuestra naturaleza, sino una persona”.
Así se explica por qué en el Génesis Dios dice: “Hagamos άνθρωπον
ánzropon hombre, ser humano, y en hebreo Adam, “a o como imagen y semejanza nuestra…” (Gen 1,26). Porque
Dios no ve la humanidad como una masa, sino como personas.
Y debido a que no hay "esencia-usía desnuda” según la teología Cristiana, antes de la creación del hombre, resumió la humanidad en la persona de Adám como una hipóstasis-base subsistencial de la fisis-naturaleza humana.
Adán como el primer hombre
Pero ¿por qué Adán y no alguien más? ¿No significa eso que él fue el primer hombre o ser humano? Así que veamos lo que escribe el respetado Metropolita de Nafpaktos-Lepanto, Ierotheos Vlajos, en su libro "La persona según la tradición Ortodoxa", págs. 76, 77:
"Podría mencionar una serie de pasajes patrísticos, en los que parece que los Padres, cuando hablan de la corona de la creación, la mejor obra de Dios, le llaman άνθρωπο
ánzropon ser humano, hombre.
Pero se debe de anotar que cuando lo llaman
άνθρωπο ánzropo hombre, ser humano, no se refieren a él con su ser meramente biológico, simple hipóstasis, sino con la presencia del Espíritu Santo dentro de sí mismo. San Juan Crisóstomo dice: porque hombre o ser humano no es solo el que tiene manos y pies, no solo el que es lógico, sino el que ejerce la piedad, la fe y la virtud con franqueza" (PG 46: 232).
No basta con nacer uno biológicamente para ser llamado ser humano, sino que también debe tener el Espíritu Santo en su interior. Y esto es importante, porque la misma relación que existe entre la psique-alma y el cuerpo, tal relación existe entre psique-alma y el Espíritu Santo. Por lo tanto, un ser humano vivo y real es aquel que está "jaritificado-gratificado o agraciado" por la Jaris (gracia divina increada) de Dios. De lo contrario, es un ser humano u hombre, pero está muerto para Dios, y, al ser dominado por varias pasiones-pazos, se parece a los animales".
Por lo tanto, de acuerdo con la fe ortodoxa, ya que άνθρωπο ánzropo hombre, ser humano es solo el que recibe el Espíritu Santo dentro de él, y Adán fue el primero en recibir el Espíritu Santo, él fue el ΠΡΩΤΟΣ ΑΝΘΡΩΠΟΣ PRIMER HOMBRE. Es por eso que Dios consideró a Adán como aquella hipóstasis que se convirtió en portadora de la naturaleza-fisis humana, y así le dio la paternidad espiritual de toda la humanidad. En este sentido, lo llamamos ΠΡΩΤΟΠΛΑΣΤΟ protoplasto PRIMERO EN SER CREADO. Porque él fue el primero en ser formado, además de “a imagen” también “a o como semejanza” de Dios.
El concepto de persona
Aquí es donde se introduce también el concepto y significado de relación. Porque Dios al darle el Espíritu Santo, creó una relación personal con él. Y eso fue lo que hizo a Adán "la primera persona" de la naturaleza-fisis humana, y su causa hipostática.
En el mismo libro del padre Ierotheo, en las páginas 77-80 leemos:
"A pesar que
los santos Padres hablando de Dios lo llaman Persona y hablando sobre hombre le llaman especialmente άνθρωπο ánzropo hombre o ser humano, sin embargo, el término persona en algunos casos lo atribuyen también al άνθρωπο ánzropo hombre o ser humano. Y, por supuesto, esto se hace con condescendencia y conciencia, porque conocen por experiencia propia vivida que hay una gran diferencia entre Dios y el hombre, entre creador y creatura. Dios es increado, mientras que el hombre es construido, creado...
... En otro caso, San Juan Damasceno atribuye al hombre los términos hipóstasis y persona. Escribe: Debido a que hay muchos άνθρωποι
ánzropi hombres o ser humanos, cada hombre es hipóstasis de Adán, y Eva es otra hipóstasis, y Seth o Siz es otra hipóstasis. Igualmente en el resto. Cada hombre es otra hipóstasis sobre los demás hombres, y cada buey también es una hipóstasis, y cada ángel es hipóstasis. De modo que naturaleza-fisis, forma y esencia o sustancia-usía es lo común y contiene las omousias (misma igual esencia) consubstanciales hipostasis, en efecto, hipóstasis es individualidad-atomo y persona, es decir, lo parcial o propio de cada uno sobre el contenido del mismo género. De este pasaje se ve que el hombre es hipóstasis, y como hipóstasis se identifica con la persona, por eso este término es atribuido también al hombre.
Tal correlación entre el hombre y la persona puede verse en algunos pasajes de la Santa Escritura. El apóstol Pablo, hablando de la unión y la comunión de Dios con el hombre, usa la expresión "cara a cara o persona a persona". Dice: “Porque ahora vemos confusamente como en un espejo de manera que quedan muchos enigmas e interrogantes que no podemos explicar. Entonces veremos y será claramente cara a cara, o en persona a Persona, (1Cor 13,12). Si pensamos que este pasaje se refiere a la oración del corazón, es decir, con el “como en espejo en enigma” refiere a la iluminación del nus (espíritu humano), y, con el “cara a cara o en persona a Persona” se refiere a la zéosis” o a la zeoría-contemplación espiritual, Como dice Ioanis Rismanidis: (“El pecado ancestral”, pag.29), entonces podemos entender que
el hombre se puede calificar como persona cuando se une con Dios a través de la zéosis y en el estado de la zéosis-θέωσις. Además, de hecho, éste es el hombre o ser humano real.
También, el mismo Apóstol, refiriéndose a un gran dolor y tribulación en Asia y a su liberación con la ayuda de Dios y las oraciones de los cristianos, dice: “Él es quien nos libró de aquel peligro grande, y nos seguirá librando, y en quien esperamos aún nos siga librando en adelante de otros peligros; cooperando también vosotros a favor nuestro con la oración, si muchas personas piden a Dios por nosotros, muchos le darán gracias por los favores que nos concede” (2Cor 1, 10-11)
Hoy en día, se usa hasta la saciedad el término persona y personalidad para el hombre... pero en la enseñanza ortodoxa, creemos que la ontología del hombre está en su Arquetipo, en el Dios que lo creó, ya que el hombre está hecho “a o como imagen” de Dios. Así que
"la existencia biológica no agota al hombre. El hombre es ontológicamente entendido por los padres solo como ser teológico. Su ontología es icónica” (Pan. Nellas: “animal deificado”. ed. Supervision, Athens 1979, pp. 33, 34).
... Pero creo que podemos usar el término persona también para el hombre con mucho cuidado y después de hacer algunas aclaraciones. Una de estas es que, como el término άνθρωπο
ánzropo hombre o ser humano, según los Padres, no solo podemos atribuirlo a todos los que viven, sino sobre todo a los que participan a la catártica, iluminadora y deificadora o glorificadora energía increada de Dios, y así el término persona, podemos usarlo para aquellos que se están moviendo hacia la zéosis o glorificación por la Jaris increada y están deificados o glorificados. Igual que “a imagen” es en potencia semejanza, y la semejanza es en energía “imagen”, así también el hombre con su existencia biológica es ser humano en potencia y persona. Se convertirá realmente en άνθρωπο
ánzropo hombre o ser humano, cuando participe de la energía increada de Dios. Ya que Dios es Persona, significa que el hombre se convierte en persona cuando se une con Dios“.
Por tanto, según lo anterior, Adán no es un simbolismo simple, como mucha gente quiere creer, sino una verdadera PERSONA, la primera persona humana y el primer άνθρωπο
ánzropo hombre o ser humano, en el sentido teológico de estos términos. Él es aquel en quien Dios dio primero Su Espíritu Santo, y creó con Él la RELACIÓN PERSONAL. Por lo tanto, Adán se constituye el primer άνθρωπο
ánzropo hombre o ser humano que se hizo VERDADERO άνθρωπο
ánzropo HOMBRE O SER HUMANO y PERSONA y no en “potencia” que es todo otro hombre que fue creado "a imagen de Dios". Con esta cualidad o atributo, Adam también se convierte el ΠΡΩΤΟΠΛΑΣΤΟΣ
protóplastos PRIMERO EN SER CREADO, no en el concepto significado biológico que muchos piensan.
Así que no hay ninguna contradicción entre la Santa Escritura y la ciencia. Ni contradicción teológica ni antropológica con los hallazgos de la paleontología, lo que demuestra que había seres humanos “en potencia” incluso antes de Adán.
Pero, debido que el tema es enorme, tenemos la intención de regresar con más aclaraciones...
Grupo helénico de investigación dogmática.
http://www.oodegr.com/oode/genesis/adam6.htm
Traducido por Χρήστος Χρυσούλας Jristos Jrisulas
http://www.logosortodoxo.com/psicoterapia-ortodoxa/dogmatica-empirica-ii-la-caida-del-hombre/
JARIS!!!!
Ver el archivo adjunto 3307494
