Después de los 6 días de la Creación, Dios completó el mundo introduciendo un nuevo concepto, algo llamado "descanso" (Ver Beis HaLevi a Génesis 2:2). En el Séptimo Día, Dios descansó de Su labor de crear el mundo. En contraste a Dios, a los seres humanos no se les advierte descansar, tal como dice la Torá: "Día y noche, ellos no descansarán"(Génesis 8:22). El Talmud entiende, (Sanhedrin 58b) basado en este verso, que a los Noajidas(gentiles) no se les pide que descansen incluso por un periodo de "día y noche". Esto significa que mientras un judío tiene el mandamiento de descansar, o cesar de trabajar, en el Séptimo Día de la semana, (sábado, es decir Shabat), un noájida no tiene tal mandamiento. Por el contrario, tal plazo es prohibido al Noájida. Rashi, (a Sanhedrin 58b) llanamente explica que está prohibido para un noájida descansar o cesar de su trabajo. El resto de las naciones no tiene permitido descansar (a la manera judía) por causa del castigo a Adam, mientras que los judíos tienen permitido hacerlo porque la Torá se los exige como el mandamiento de Shabat, el cual es un obsequio único y únicamente dado a la nación judía. ( Maharsha a Shabbos 10b). "Rabbi Jaim HaKatan.