Jesús no viene a ser un descendiente de Abraham, según la carne sino que es contado como descendiente suyo, según la promesa.
En Abraham, la simiente natural Isaac, es reemplazada por la simiente santa prometida en Genesis 3:15.
Porque si bien a Abraham le fueron hechas las promesas, y a su simiente, no se esta hablando de las simientes, como si se hablase de muchos, sino que se está hablando de uno solo: A TU simiente.
Y sabemos que esta simiente, es Cristo y no Isaac.
Ciertamente Sara tu mujer te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Isaac; y confirmaré mi pacto con él como pacto perpetuo para sus descendientes.
Pero mas adelante Jehová le pide a Abraham que sacrifique a esta simiente suya, su único y al heredero de las promesas y lo sustituye por su propio hijo, Jesucristo.
"Y cuando llegaron al lugar edificó allí Abraham un altar, y ató a Isaac su hijo sobre la leña y cuando habiendo tomado el cuchillo iba a extender su mano sobre él para degollarlo, el ángel de Jehová le frenó diciendo: No extiendas tu mano sobre el muchacho, yo proveeré, por cuanto no me rehusaste tu hijo, tu único.
Y por cuanto has hecho esto, en tu simiente serán benditas todas las naciones de la tierra".
Y cumplido el tiempo esta simiente es provista por Dios según su promesa.
MATEO 1:1 Libro de la genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham.
...y Jacob engendró a José, marido de María, de la cual nació Jesús, llamado el Cristo.
Así Jesucristo hombre no es descendiente de Adán, Abraham y David según la carne sino según la promesa y se constituye en el mundo como un segundo hombre salido de Dios y como un nuevo Adán, el postrero.
JUAN 6
51 Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.
JUAN 16
28 Salí del Padre, y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo, y voy al Padre.