-Por diversas plataformas en Internet es posible hoy en día ver una gran cantidad de películas turcas, muy bien traducidas al castellano. Cosa que sorprende es que todas las personas parecen ser muy religiosas, incluso, espirituales. Si el televidente no lo sabe, pensará que son cristianos, por el énfasis que se da a la oración, el bendecirse mutuamente y a la esperanza de despertar en el Paraíso de sobrevenir la muerte. Claro, se extrañará las menciones a Mahoma y El Corán, pero también que no haya escenas de sexo y se digan palabrotas. En compensación, se resaltan los valores tradicionales que el occidente cristiano ha venido perdiendo en forma vergonzosa. Pienso que nadie imaginaría que esas personas se estuviesen refiriendo a otro dios que no sea nuestro único y verdadero Dios.