No entendí quienes son los que apagan la luz y se retiran. No es mi caso... te he leído en muchas ocasiones con atención tratando de validar eso que dices, pero no lo veo válido desde la Biblia. Me refiero a esos puntos concretos de tu doctrina que estoy seguro son innecesarios.
Tampoco a decir verdad esto reviste importancia alguna. En relación a lo que vos llamás mi doctrina innecesaria tenemos puntos de vista diferentes. Pero lo cierto y verdadero es que Jesucristo viene a ser hombre por voluntad de Dios y no por voluntad de varón o de carne y sangre. Lo verdaderamente importante para mi es demostrar que si Jesús es hombre no lo es por María sino por Dios, más allá de que Dios la tome a María entera para hacer esto.
Yo partí en estos foros desde una posición ebionita que gradualmente fue tendiendo al escepticismo profundo frente a la existencia de Dios. No puedo decir que es la única razón, pero sirvió a fuerza de debates ir entendiendo cosas que me fueron fortaleciendo en mi decisión de no volver a renegar de Jesús. Eventualmente fui viendo que las escrituras hablaban de la Palabra de Dios (El Verbo en persona) desde el Testamento más antiguo y pasé de ser un incrédulo a un creyente por decisión (confesión). Antes creía porque eso era lo que me habían enseñado y por miedo a lo desconocido (la inexistencia). Pero cuando medité en medio de mis depresiones y angustias sobre lo último, no es que haya perdido el miedo a morir, sino que me dí cuenta que no tengo nada que perder creyendo y tengo mucho más que ganar.
Una de las cosas que han caído como los muros de Jericó es mi predilección por las explicaciones materialistas y cuando eso cayó pude empezar a contemplar (aunque yo no tengo visiones por mucho que las desee) lo sobrenatural.
Como hombre carnal soy un materialista recalcitrante... pero la disciplina de la que te he hablado me obliga a enfrentarme a esa doctrina.
Hay mucho que ganar incluso si uno está en el error. A mi tampoco me pagan por escribir y a veces tengo que darme coscorrones en la cabeza para recordar que antes que escribir en el foro sobre los temas que me gustan, debo terminar las tareas que me asigna mi jefe.
Verdaderamente asombroso. Me pareció ver este cambió en tí. Alabado sea Dios.
En cuanto al pecado original soy, hasta que se me demuestre lo contrario, un traduciano (i.e., creo que el alma se forma en la concepción habiendo Dios establecido el mecanismo de procreación y que allí por defecto se empieza a enquistar el pecado de Adán), pero defender el traducianismo no me obliga a afirmar que Dios no interviene directamente en la formación de nuestra alma. Esto implica que aunque no crea que Dios forma almas ex-nihilo y las mete en el feto, en el zigote o lo que sea... si creo que Dios participa en la formación de cada ser y tiene compasión de los abortados y los que tienen daño cerebral o algún otro impedimento. En este sentido creo que estas personas no son culpables ante Dios y que resucitarán en Cristo libres de todo pecado.
Hasta acá ni idea tenía yo de lo que es ser un traduciano pero bueno... gracias a vos ahora lo se porque lo busque en wikipedia.
De lo que leí te diria que yo, fuí casi toda mi vida de creyente, según wiki, un creacionista.
Hay que entender que el evangélico, si bien lee mucho la biblia, casi siempre sigue la partitura que se le dicta y se le enseña enfatizando los versículos que la conforman. Pero más tarde, y cuando comencé a leer la biblia sin un libreto predeterminado y con mucho más tiempo de oración que antes, descarté el creacionismo explicado en wiki, y hoy, según lo leído, vendría a ser un traduciano confeso.
De todas maneras no me gusta adoptar una doctrina entera, porque estas generalmente están definidas en muchos otros aspectos que uno ni siquiera conoce y con los que quizás no comulgue en lo absoluto.
Así y todo soy profundamente creacionista.
Creo que fue Dios mismo el que lo creó todo, pero en el tiempo creacional y que fue él y no otro, quien creó los mecanismos para la reproducción de las especies incluido por supuesto el hombre mismo.
La creación del hombre, para mi, consiste en su formación a partir del polvo de la tierra y en la conversión de este hombre en un ser viviente cuando Dios sopla en su nariz aliento de vida.
Y esto solo se produce con Adán.
La mujer es tomada del hombre vivo y el resto de los vivientes salen de esta pareja viva.
Lo que para vos tal vez sea meter el alma en el cuerpo para mi es el soplo de vida y este soplo de Dios tuvo lugar en la sola carne, transformándola en carne viviente o viva.
Dios no formó a la mujer del polvo sino que la tomó de un Adán ya vivo y por eso no sopló en la nariz de ella.
En el génesis tenemos a Dios formando al hombre de la tierra y lo tenemos soplando en su nariz el aliento de vida.
Luego lo tenemos a Dios durmiéndolo a Adán y sacando a su la mujer de él mismo. Lo que yo llamo la división de la carne.
Luego me tenés a mí teniendo relaciones con mi esposa y a mi esposa embarazada.
Y más tarde a mi primer bebé.
Te aseguro que Dios no anduvo por mi casa con un balde de barro formando a mi hijo.
Tampoco lo metió en la panza de mi mujer y cuando mi primogénito nació no lo vi soplandole nada en la nariz.
Si vi a la partera pegándole en su colita para hacerle llorar.
El problema del pecado original es que aunque ustedes lo llamen así, en realidad es la doctrina de la "culpa hereditaria".
Yo lo llamo asi pero solo como una etiqueta conceptual y porque es más fácil hacerse entender por los demás.
Yo no creo que el hombre sea un ente espiritual en un cuerpo de carne.
Creo que el hombre es carne con vida o carne viva.
Esto no quiere decir que no pueda encapsular ciertas areas del hombre bajo distintas etiquetas.
Y entiendo que se le llame "alma" a lo que vendría a ser la "voluntad" o el "yo" de esa carne viva.
Pero Ezequiel 28 claramente enseña que la culpa no se hereda. Cada quien es culpable de su propio pecado. Todos nacemos con naturaleza pecaminosa, si, pero somos culpables de nuestros pecados, no de nuestra naturaleza.
Obvio.
El comportamiento es propio de cada quien y la culpa surge de un comportamiento inapropiado. Por ende ni el comportamiento se hereda ni tampoco la culpa.
Y como vos decís no podemos ser culpables de nuestra naturaleza. La biblia dice bien clarito quien es el culpable. Por el pecado de Adán todos fuimos constituidos pecadores.
¿Y porque?
Porque la carne nace de la carne y no hay una nueva creación con cada niño que nace.
Caín salió de Eva y Adán y Eva salió de Adán.
No somos hijos de Dios sino de nuestros padres.
Dios delegó en la primer pareja la multiplicación.
El solo creo a la primer pareja y esa pareja tuvo su propia descendencia.
Khalil Gibran dijo: Tus
hijos e hijas son hijos e hijas de la
vida deseosa de sí misma. No vienen de ti, sino a través de ti.
Pero esto es totalmente falso.
Nuestros hijos vienen al mundo por nuestra voluntad o por la voluntad de nuestra carne.
La voluntad de Dios en esto se resume a: Multiplicaos y llenad la tierra.
No vienen a través nuestro sino de nosotros.
Cristo ya murió en la cruz y solo aquellos que le rechazan son culpables ante Dios por sus obras de maldad y su naturaleza pecaminosa... precisamente porque ya se proveyó el medio para quedar libre.
Es correcto. De todas maneras los hombres nunca fueron culpables de su naturaleza ni los serán. No se puede ser culpable de una naturaleza que se hereda. Si en cambio, como bien decís vos, serán culpables de su propia maldad.
En cuanto al Verbo, creo que es Dios y que Dios se hizo carne. En eso estamos más de acuerdo que en cualquier otra cosa. Pero yo no veo necesidad de una desvinculación con la simiente de David en Romanos 1:3, ni veo obligación alguna de interpretarlo como mero formalismo, lenguaje de adopción o alegoría.
Okey.
Resulta que si algo tengo claro es que el Verbo de Dios no puede pecar y al ser uno mismo con el hombre (espíritu+alma+cuerpo) Jesucristo no hay forma alguna de que Jesús hubiese podido o pueda pecar y a la vez de que hubiese nacido con pecado al formarse en el vientre de María y compartir su material genético siendo un auténtico descendiente de Adán. La carne de Jesús es impenetrable en cuanto al pecado.
Es cierto que el Verbo como tal no puede pecar, pero si lo pudo hacer como hombre.
Fue un mérito humano suyo el que no lo hiciera.
Abrazos