Jesucristo es la luz verdadera y es el Verbo, y ni como Luz ni como Verbo tiene otra naturaleza que no sea santa. Suya es la santidad.
Si claro.
Sabemos como es Dios y tambíen sabemos que el Verbo es Dios.
Pero entendemos que siendo en forma de Dios, se despojó de su condición para venir al mundo en carne a nacer de mujer y bajo la ley.
¿Y para que hizo esto?
Porque la ley, teniendo la sombra de los bienes venideros, no la imagen misma de las cosas, nunca puede, por los mismos sacrificios que se ofrecen continuamente cada año, hacer perfectos a los que se acercan.
De otra manera cesarían de ofrecerse, pues los que tributan este culto, limpios una vez, no tendrían ya más conciencia de pecado.
Pero en estos sacrificios cada año se hace memoria de los pecados; porque la sangre de los toros y de los machos cabríos no puede quitar los pecados.
Por lo cual, entrando en el mundo dice: Sacrificio y ofrenda no quisiste; Mas me preparaste cuerpo.
Holocaustos y expiaciones por el pecado no te agradaron.
Entonces dije: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, Como en el rollo del libro está escrito de mí.
Diciendo primero: Sacrificio y ofrenda y holocaustos y expiaciones por el pecado no quisiste, ni te agradaron (las cuales cosas se ofrecen según la ley), y diciendo luego: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad; quita lo primero, para establecer esto último.
En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre.
No es un hombre que cual don de continencia se contuvo de no pecar, pero claro que bien podía. Claro que no.
Entiendo tu punto pero estás romantizando y pisoteando su humillación voluntaria.
Estás sistematizando su pasión.
Estás reduciendo su obra al resultado de las frías matemáticas.
Al fin no puso nada de si porque "su naturaleza" no le permitía hacer otra cosa.
Estás menospreciando su obra y su sacrificio y ofrenda.
Así como no se le pueden pedir peras al olmo porque simplemente no está en la naturaleza del olmo dar peras, siquiera imaginar tenerlas, así es la naturaleza de cada quien.
Y ahí vas de nuevo.
Dios vino al mundo como hombre y te salvó por su fría naturaleza.
Porque es olmo y no pera.
No podía obrar de otra manera.
Y terminas sentenciando:
"Asi es la naturaleza de cada quien".
Te faltó rasgarte los vestidos como caifás.
En el caso de Dios y Su eterno Hijo, su naturaleza es tres veces santa.
Y otra vez.
Su amor es un "accidente" de su naturaleza.
No puede hacer otra cosa.
Es esclavo de lo que es.
Tu entendimiento de Dios es religioso.
No cabe ni por asomo el pecado, ni su concepción, ni hay consentimiento, ni hay concupiscencia, ni consumación, no existe absolutamente nada de eso en Dios y Jesucristo es Dios, es el Verbo de Dios y jamás lo ha dejado no dejó de serlo, jamás.
¿Es una máquina no?
Todo en Dios es luz, Él es luz, la Escritura es clara:
"ni aun las tinieblas son oscuras para ti, y la noche brilla como el día. Las tinieblas y la luz son iguales {para ti.} Sal 139: 12
Pero esto es alabanza.
Nada que ver con lo que vos estás diciendo.
No puedes decir esto de absolutamente nadie más. Dios es luz y su Hijo es la luz verdadera, no hay mudanza en ello. No hay ningún romanticismo en ello" sino es la Verdad.
Muchas cosas más, y como pan y tantas cosas, pero eso no significa que dejó de ser el Verbo de Dios y el Verbo de Dios, es Dios y por tanto es luz y si es luz no hay tinieblas, ni una motita vaya.
Cristo no fue un hombre que pudiendo pecar salió victorioso porque resistió el pecado como tratamos cada día los cristianos, no. Simplemente su naturaleza es la santidad, la luz, la Verdad.
Y otra vez...
Estás despreciando su vida y sacrificio.
Su ofrenda de amor.
Estás sujetando todo lo que hizo a su forma o naturaleza.
Dios tenga misericordia de ti.
No eres diferente a un testigo de Jehová aunque con razones diferentes.