PARA EDIFICACIÓN Y GOZO DEL ALMA DE SUS REDIMIDOS
La palabra muerte, aparece por primera vez como advertencia contra la desobediencia a Dios, leemos:
Gén_2:17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.
Por muerte, el Señor no está queriendo significar, allí en Edén, el cese de la vida física, sino la separación del hombre en contra de su Creador.
Porque es el hombre el que se separa de Dios al desobedecerlo.
Adán y Eva siguieron viviendo después de su muerte espiritual, hasta que murieron físicamente.
En la revelación progresiva sobre la muerte, más adelante encontramos esta afirmación:
1Co 15:21 Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos.
1Co 15:22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.
De manera que la muerte surge como consecuencia del pecado, porque la paga del pecado, muerte es.
Y hasta el día de hoy, la muerte es un testigo de que somos pecadores.
¿Y entonces por qué Cristo murió?
¿Era pecador él también?
El carácter de la muerte del Señor es substitutiva.
Él Señor es sin pecado porque es Dios. Y es imposible que Dios peque.
El que debiese estar crucificado allí, éramos nosotros.
Veamos algunas escrituras que hablan del propósito de la muerte voluntaria del Señor en su relación con Israel y con nosotros los gentiles.
En relación con Israel encontramos esta promesa:
Isa 49:24 ¿Será quitado el botín al valiente? ¿Será rescatado el cautivo de un tirano?
Isa 49:25 Pero así dice Jehová: Ciertamente el cautivo será rescatado del valiente, y el botín será arrebatado al tirano; y tu pleito yo lo defenderé, y yo salvaré a tus hijos.
Es instructivo entender que el botín del valiente son los cautivos del Tirano, que en sentido espiritual es el diablo, el cual es llamado el "emperador de la muerte", leemos:
Heb_2:14 Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo,
Igualmente instructivo es comprender el pleito que tenía Israel con la sangre de sus sacrificios para la expiación del pecado.
Heb 10:3 Pero en estos sacrificios cada año se hace memoria de los pecados;
Heb 10:4 porque la sangre de los toros y de los machos cabríos no puede quitar los pecados.
TU PLEITO YO LO DEFENDERÉ
Todos los santos del AT, sus almas llegaron al Hades, con todos sus pecados intactos, bajo el poder del emperador de la muerte.
El diablo tenía el control de estas almas, a excepción de Enoc, figura de la Iglesia, que fue trasladado para no ver muerte en el Diluvio, al mismo cielo, leemos:
Heb 11:5 Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios.
Los ojos se vuelven como ríos, contemplando estos grandes hombres como Abraham, Isaac, Jacob, Job, y todos los demás, presos, ESPERANDO EL DÍA DE SU LIBERACION.
Jua_8:36 Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
Habían dedicado toda su vida al Servicio al Señor y ahora, después de abandonar el cuerpo (2Pe 1:14) estaban presos, pero con una esperanza que le había sido transmitida a Abraham, el amigo de Dios:
Jua_8:56 Abraham vuestro padre se gozó de que había de ver mi día; y lo vio, y se gozó.
Abraham allí, en el Hades, fue como el bálsamo de Galaad, para curar la incertidumbre de sus compañeros de reclusión.
El tenia bien claro lo que le fue mostrado, la ciudad de Dios, la Jerusalén celestial:
Heb 11:10 porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios.
Esto debió fortalecer en grado sumo la fe de sus compañeros de reclusión.
Llegaría el momento que serían rescatados y trasladados a esta ciudad.
Y el momento llegó.
"HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO"
Son palabras del mismo Dios del cielo y de la tierra, anunciadas al último salvo del AT quién arrepentido había suplicado, a pocos minutos de abandonar el cuerpo:
Luc_23:42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino.
Esta expresión que hallamos en el misterio de la Piedad:
1Ti_3:16 E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad:
Dios fue manifestado en carne,
Justificado en el Espíritu,
Para mí tiene suma atracción, porque contemplo en ella, el fin de su Kenosis.
Aquella súplica profética, en debilidad, como hombre mortal:
Hch_2:27 Porque no dejarás mi alma en el Hades,
Ni permitirás que tu Santo vea corrupción.
El Señor asume toda potestad que gozaba antes de su encarnación y desciende al Hades no en debilidad, sino con todo el poder y gloria de su fuerza infinita.
Va a rescatar lo que le pertenece. El precio ha sido pagado en el Altar de la Cruz.
El poder de su sangre ha limpiado de todo pecado, a todos los cautivos por el diablo, lo que la sangre de los sacrificios de animales, jamás pudo hacer.
Ciertamente el cautivo será rescatado del valiente, y el botín será arrebatado al tirano; y tu pleito yo lo defenderé, y yo salvaré a tus hijos.
Abraham se gozó de ver este día, y la muchedumbre de santos que le acompañaban, también se gozaron...
HOY ESTARÁN CONMIGO EN EL PARAÍSO
Van para la Casa de su Padre, más allá de las estrellas, el que se arrepintió a último momento en cruz, también va con ellos:
Efe_4:8 Por lo cual dice:
Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad,
Y dio dones a los hombres.
En relación con la Iglesia encontramos esta promesa INDIVIDUAL:
"PARTIR Y ESTAR CON CRISTO"
Flp 1:21 Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.
Flp 1:22 Mas si el vivir en la carne resulta para mí en beneficio de la obra, no sé entonces qué escoger.
Flp 1:23 Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor;
2Pe 1:13 Pues tengo por justo, en tanto que estoy en este cuerpo, el despertaros con amonestación;
2Pe 1:14 sabiendo que en breve debo abandonar el cuerpo, como nuestro Señor Jesucristo me ha declarado.
Y LA ESPERANZA DE UN ARREBATAMIENTO MASIVO, DONDE NINGÚN GENUINO ADORADOR DE CRISTO, Y REDIMIDO POR SU SANGRE, SE QUEDARÁ AQUÍ EN LA TIERRA PARA LA IRA VENIDERA (1Ts.1:10), leemos:
1Ts 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
1Ts 4:17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.
NOTEMOS LA MUERTE VENCIDA POR CRISTO, ES APLICADA A NOSOTROS EN LA EXPRESIÓN:
1Ts 4:17 Luego nosotros los que vivimos,
Algunos de nosotros seremos trasladado a la Casa de su Padre, sin conocer la tumba, tal como aconteció con Enoc, que fue arrebatado para no ver muerte en el Juicio de Dios en el diluvio, en el caso de la Iglesia, ocurre esto:
1Ts 1:10 y esperar de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos libra de la ira venidera.
La expresión "librados de la ira venidera" está relacionada con la semana 70 de la profecía de Daniel, donde a la mitad de la semana se desata la Gran Tribulación y al final de ella contemplamos la ira del Cordero, leemos:
Apo_6:16 y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero;
Que el Señor prospere este mensaje para su Honra y Gloria.