perdona pero debo ser muy burro jeje pero sigo viendo una sentencia, un dogma. Puedo aceptar un dogma pero nunca arbitrario; o sea, sin noble y divina facultad de razonamiento.
Dicho lo cual, brevemente y por puro sentido común, la resurrección ha dependido de la complacencia de Dios. Y ésta, entiendo, ha consistido en honrar y obedecer sus mandatos por puro amor o espíritu de Fe. En consecuencia, aquellos de sus enviados que han trasladado su voluntad al mundo humano han establecido la resurrección en cada ocasión, lugar y época. En conclusión, Jesús, como portavoz de Dios, otorga resurrección pero no es el único ya que no es el único que ha hablado en nombre de Dios.
Y la resurrección física de Jesús plantea discrepancias estimables en los escritos. Ademas, rebajan a Jesús a las alturas de la deidades paganas. Éstas últimas superiores o más dadas a fenómenos sobrenaturales mas abundantes y espectaculares. Perdiendo de vista las recto sendero y enseñanzas espirituales y purificadoras de Cristo, el verdadero venero de trascendencia y salvación.
Un saludo