Sin salirme del tema en alguna intervención que compartí con ustedes hablé de que el hombre como ser existencial no solo es algo material y me referí también a la creación en génesis que habla de cosas que no son visibles como el árbol de la vida y el árbol de la ciencia del bien y del mal y de los ríos que menciona en génesis que no existen en la tierra porque son los que nutren los dos árboles que me refería anteriormente. Lo que quiero mostrarles es que en génesis describe entre líneas un reino que no es visible y se encuentra incluso dentro de nosotros, que en la mayoría de las veces que Dios y Jesús hablan es en referencia a ese reino y no al que nosotros damos como existente solo porque lo podemos ver. Si vuelven a leer las escrituras entendiendo esto van a poder darse cuenta de que todo es muy simple y lógico y con un sentido muy literal. Por ejemplo cuando dice que Eva murió por comer de un fruto de un árbol, no es exactamente así. Nuestro hálito de vida o espíritu se alimenta de sentimientos, estos sentimientos son voluntades y son el alma de nuestro espíritu, si los sentimientos en nuestro corazón son de bien, lo que haga nuestro cuerpo será para bien y si fuese lo contrario entonces nuestro cuerpo hará lo malo, El cuerpo de Eva antes de tomar del fruto, alimentó su espíritu con codicia procedente de la serpiente y fue ahí exactamente cuando Eva espíritu muere tal y como lo dijo Dios. Lo que ven nuestros ojos es solo el producto de lo que sucede a nuestro espíritu, si a nuestro espíritu lo gobierna la maldad nuestro cuerpo no va a hacer nada bueno porque en ese momento estaremos muertos. Creo que con eso van a poder darle un sentido más literal a lo que dijo Jesús cuando se refiere a que los muertos entierren a sus muertos, en primera instancia se refiere a personas que caminan pero sus espíritus ya perdieron propósito a causa de la maldad y en segunda instancia se refiere a los cadáveres que iban a enterrar.