Eso de que Dios para perdonar al judío necesitaba derramamiento de sangre se basa en tomar fuera de contexto el versículo que narra el ritual judío en Hebreos.
LA SANGRE DEL CORDERO DESTINADO ANTES DE LA FUNDACIÓN DEL MUNDO
La sangre ha sido escogida por Dios mismo para la expiación del pecado de la raza humana.
Y esto ha sido hecho desde antes de la Creación del mundo como lo testifica el sacrificio de Jesús, como el Cordero de Dios (1Pe.1:18-20) donde entendemos que fue destinado antes de la fundación del mundo.
El primer sacrificio que hizo Dios mismo, se puede contemplar en Génesis 3:21 donde unas víctimas inocentes fueron sacrificadas para con sus pieles cubrir la desnudez de Adán y Eva, leemos:
Gén 3:21 Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió.
Hubo derramamiento de sangre en el jardín del Edén.
Es el primer indicio del desarrollo de la Doctrina de la Expiación, leemos:
Heb_9:22
Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.
Posteriormente observamos la aceptación del sacrificio ofrecido por Abel, de lo más gordo de su ganado.
La ofrenda de Caín fue desechada por cuanto era el fruto de una tierra maldita por el pecado (Gén_3:17) y el fruto de los árboles o de las plantas, no tienen sangre para expiar el pecado.
Luego del Juicio de Dios sobre la tierra, donde solo 8 personas se salvaron, y de este puñado de personas emerge una nueva civilización, contemplamos de nuevo los sacrificios, leemos:
Gén_8:20 Y edificó Noé un altar a Jehová, y tomó de todo animal limpio y de toda ave limpia, y ofreció holocausto en el altar.
Luego vienen los patriarcas como Job ofreciendo sacrificios hasta por sus hijos, por si quizás habían pecado
Job_1:5 Y acontecía que habiendo pasado en turno los días del convite, Job enviaba y los santificaba, y se levantaba de mañana y ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos. Porque decía Job:
Quizá habrán pecado mis hijos, y habrán blasfemado contra Dios en sus corazones. De esta manera hacía todos los días.
Contemplamos a Dios haciendo pactos con Abraham, mediante sacrificios de animales y aves
Gén 15:9 Y le dijo: Tráeme una becerra de tres años, y una cabra de tres años, y un carnero de tres años, una tórtola también, y un palomino.
Gén 15:10 Y tomó él todo esto, y los partió por la mitad, y puso cada mitad una enfrente de la otra; mas no partió las aves.
Y una vez que su pueblo fue sacado de la esclavitud de Egipto, lo fue, como consecuencia de la sangre de un cordero puesta sobre el dintel y los postes de las casas de los hebreos en Egipto.
A Moisés se le dieron órdenes precisas en la construcción del tabernáculo de reunión en el desierto... y el altar fue construido con un metal llamado bronce, que significa juicio, entonces la Doctrina de la Expiación por medio de la sangre de una víctima inocente fue establecida por Dios mismo, aquí está la base de la doctrina a su pueblo:
Lev 17:11 Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona.
¿YO OS LA HE DADO?
Efectivamente, y esto ocurre antes de la Creación y está unida a la Gracia de Dios en Cristo Jesús, leemos:
ANTES DE LA CREACIÓN
1Pe 1:18 sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata,
1Pe 1:19
sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación,
1Pe 1:20 ya destinado desde
antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros,
LA SANGRE DEL SACRIFICIO POR EL PECADO ESTÁ UNIDA A LA GRACIA DE DIOS ANTES DE LA CREACIÓN
2Ti 1:9 quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo
y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos,
2Ti 1:10 pero que ahora ha sido manifestada por la aparición de nuestro Salvador Jesucristo, el cual quitó la muerte y sacó a luz la vida y la inmortalidad por el evangelio,
Forista Alissa, corrige tu pensamiento acerca del perdón de los pecados.
Porque sin derramamiento de sangre no se hace remisión-.
Y todos estos sacrificios habidos en la historia de Israel, eran simbólicos, apuntaban a Jesús, por cuanto la sangre de los sacrificios de animales no tiene ningún poder para perdonar ningún pecado, solamente lo cubrían, como hace el gato con sus heces, ya sea con tierra o con arena.
Aquí está el texto:
Heb 10:4 porque la sangre de los toros y de los machos cabríos no puede quitar los pecados.
Esto significa que todos los santos del AT llegaron al Hades con todos sus pecados encima, y fueron presa fácil del emperador de la muerte, esto es, el diablo, los tenía confinados allí,
cautivos, donde vemos a Abraham, el amigo de Dios, quién se gozó de que había de ver el día de su liberación por Jesús, cuando su sangre fue derramada en el altar de la cruz y descendió esa misma tarde, acompañado con el último salvo del AT al Hades, y rescató, lo que era suyo, su propiedad, por lo que había pagado diciendo:
"CONSUMADO ES"
Efe_4:8 Por lo cual dice:
Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad,
Y dio dones a los hombres.
El diablo como el emperador de la muerte:
Heb_2:14 Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte
al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo,
Es presentado a la nación de Israel como el cruel Tirano que a los presos nunca abrió la cárcel, y esta promese se cumple con el rescate que hizo Cristo trasladando los cautivos del Hades al tercer cielo, que visitó Pablo, es decir, el Paraíso que antes quedaba en las entrañas de la tierra, fue cambiado de lugar, leemos:
Isa 49:24 ¿Será quitado el botín al valiente? ¿Será rescatado el cautivo de un tirano?
Isa 49:25 Pero así dice Jehová: Ciertamente el cautivo será rescatado del valiente, y el botín será arrebatado al tirano; y tu pleito yo lo defenderé, y yo salvaré a tus hijos.
Me imagino la tremenda alegría de todos esos presos del AT esperando su liberación, cuando ven al Señor glorificado, haciendo Presencia en el Hades, no en debilidad como es el ruego del profeta:
Hch_2:27 Porque no dejarás mi alma en el Hades,
Ni permitirás que tu Santo vea corrupción.
Sino JUSTIFICADO EN ESPÍRITU, es decir, con toda la potestad de su Padre Dios, de la cual se había despojado para cumplir su misión en la tierra, y ahora, rodeado del resplandor refulgente de su gloria, le vemos llegando al Hades y rescatando lo suyo, sin pedirle permiso a nadie, su amor es eterno y su gracia es soberana.
Llevo cautiva la cautividad, subiendo a lo alto, y ahí, en esa compañía de santos del AT podemos contemplar a aquel a quien el Señor le dijo:
"HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO"
Sea bendito mi Señor Jesucristo por los siglos de los siglos.
