Re: Hablar en Lenguas ¿es un don de Dios?
Si me va a juzgar por enseñarle a la gente lo que dice la Biblia voy a estar contento.
Pero no me gustaría estar en la posición de burlarse de lo que dice. Pero bueno, como él es bueno seguro no lo va a tomar ni en cuenta.
Lo que sí pasa con esas personas es que se pierden de aprender lo que dice la Palabra y con eso se pieden los beneficios de creerlo y vivirlo. Pero allá ellos. Uno hace lo que puede para que la gente se beneficie con las cosas que Dios hizo disponibles pero no a todo el mundo les interesan.
Yo respeto, si alguien no quiere hablar en lenguas ni aprender sobre ello, que no hable.
Pero burlarse de las cosas de Dios... está muy mal el que hace eso.
Es que no se burlan sino que sinceramente no creen.
Siempre partimos de la premisa de que el otro está motivado por la maldad y no es así.
Dios sabe que nos cerramos y somos escépticos.
Yo fuí siempre de aquellos que querían meter los dedos en los agujeros de las manos de Jesús para poder aceptar algo.
Y aunque he cambiado, el juzgar lo llevo a flor de labios.
Estuve años sin orar en lenguas y un día exploté y no lo podía creer.
Pero así como vino se fue. Fue tal la guerra que libré que no volví a hablar en lenguas por años.
Hasta que me olvidé del asunto para siempre.
El volverse como un niño es la mejor manera de fluir.
He estado en las carpas de un pastor Argentino llamado Annacondia y he visto cosas que mi corazón atesora.
Aunque nunca me reí de la gente que se caía en las reuniones, siempre pensé que se tiraban o se dejaban caer hasta el día que me caí yo. Nunca mas me volví a caer y tampoco supe lo que pasó. Jamás perdí la consciencia. Simplemente no me podía levantar.
No juzgo al que no cree ni juzgo al que cree y no busco manifestaciones de ningún tipo.
Tampoco busco el orar en lenguas sino que oro con el entendimiento porque me gusta orar y hablarle a Dios, porque descuento que el me escucha y le cuento de todo pero si viene las lenguas no me resisto y fluyo e libertad y en el Espíritu.
Y estoy sumamente agradecido a Dios.
