¡¡¡ES INCREÍBLE QUE PUEDA HABER CRISTIANOS EVANGÉLICOS QUE CREAN QUE JESÚS VINO EN UNA CARNE CORROMPIDA!!!

Miguel, Héctor y Pericles... muy bien. Entre los tres estáis extrayendo poco a poco la esencia de Romanos 7 y 8.

Hay un versículo en esos dos capítulos que si los cristianos tuvieran delante de su corazón todos los días cambiaría su mundo... les liberaría de tantas cargas pesadas que la religión impone. Hay un secreto enorme a descubrir en un versículo concreto en todo el discurso de Romanos 7 y 8. Es un versículo que resume todo el discurso, y que, por un detalle concreto, lo hace muy especial. Es un versículo que, cuando lo entiendes, entiendes todo el discurso. Es lo que el lector ávido de ungüento va buscando desde que empieza el discurso en Romanos 7 y el dolor de las heridas empieza a supurar.

En ese versículo se mece el misterioso discurso, donde se plantea la solución a todos los dilemas de la "carne corrompida" que Salmo tiene en la cabeza y al dolor del fracaso que debe enfrentar cada día el cristiano honesto. Es un versículo que, cuando lo entiendes y lo crees, incluso es capaz de explicar con sencillez muchas otras enseñanzas de la Biblia. ¡El versículo es una llave en sí mismo! Practicando ese versículo, lo tienes todo. Pero, cosas curiosas de la fe, estoy seguro de que si os señalara el versículo, la gran mayoría de vosotros seguiría sin ver el mensaje liberador. Casi estoy por apostar que la mayoría de vosotros, aunque lo leyerais, no lo entenderíais.

Y es curioso porque no es un versículo "de difícil interpretación" (los hay de muy difícil o imposible interpretación sin revelación). Pero este no. Es curioso que el versículo que explica el discurso entero de Romanos 7 y 8 SÓLO REQUIERE LEER LO QUE DICE. Creerlo y practicarlo es otra cosa, pero entenderlo es fácil. Este es uno de esos "versículos mágicos" que tiene la Biblia, y que sólo puede descubrirlo el que de verdad está viviendo las Escrituras en su interior.

El que lea este discurso de Romanos 7 y 8 con honestidad desde el principio, identificándose en su espíritu con la enorme honestidad de Pablo, y no dejando de buscar la solución y la respuesta prometida al terrible dilema del "hombre carnal", lo hallará tarde o temprano.

Amor,
Ibero
 
Última edición:
Y por supuesto, es un versículo que confirma por su propia lógica interna que Romanos 7 no es para los "perdidos", sino para los "hallados" (como habéis visto muchos de vosotros).

Amor,
Ibero
 
A ver chicos...

Es obvio que la epístola a los Romanos está escrita para la iglesia pero también para el griego (gentil) y el judío.

Pablo se siente deudor de todos, de griegos y no griegos, de sabios y no sabios.

Hasta la revelación de la fe y del evangelio de la gracia, las personas se dividían en dos grupos a saber, los gentiles y los judíos, pero venida la fe, se agregaron a este escenario los nacidos de nuevo, otrora judíos o gentiles.

Y aún hoy persisten estos tres grupos.

Tenemos por un lado (1) los gentiles, que no son ni judíos ni creyentes, (2) los judíos que no son gentiles ni creyentes, y (3) los creyentes que aunque alguna vez fueron gentiles o judíos, hoy ya no son ni lo uno ni lo otro, sino nuevas criaturas nacidas por medio de la fe y del evangelio de nuestro Señor Jesucristo.

No existen los creyentes judíos ni los creyentes gentiles aunque todo creyente procede de los gentiles o de los judíos. Pero el creyente a muerto a su gentilidad o judaísmo, según corresponda, para nacer de nuevo de este evangelio poderoso.

De manera NATURAL el hombre puede ser gentil o judío pero nada más.

Para ser un hombre espiritual se necesita recibir el Espíritu que proviene de Dios, para entonces saber y entender todo aquello que Dios nos ha querido conceder.

Porque el hombre NATURAL, ya sea gentil o judío, no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.

Pero la división que antes existía entre gentiles y judíos, hoy existe entre carnales y espirituales, donde los carnales, ya sean estos gentiles o judíos, viven conforme a la carne, y los espirituales, lo que hayan sido antes no importa, viven conforme al Espíritu.

Porque los que en otro tiempo estaban alejados de la ciudadanía de Israel y eran ajenos a los pactos de la promesa, vinieron a ser cercanos por medio de Cristo y EN Cristo.

Haciendo Dios de estos dos pueblos, gentiles y judíos, uno solo, y creando en sí mismo, de estos dos hombres también UNO SOLO HOMBRE.

UN NUEVO HOMBRE pero también y mediante la cruz, un solo cuerpo, LA IGLESIA.

Porque ahora, tanto los que estaban LEJOS como los que estaban CERCA; tienen una COMÚN entrada al Padre que antes no tenían y por medio de un mismo Espíritu.

Pero edificados TODOS, como miembros de UNA SOLA GRAN FAMILIA DE DIOS, sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo Jesucristo mismo, la piedra angular sobre la cual todo el edificio, va creciendo para ser un templo santo en el Señor.
 
Aunque el destinatario de estas palabras sea el creyente, Pablo en el capítulo 7 de Romanos, hace una descripción perfecta del estado del hombre natural, mas allá de que este hombre natural sea judío o gentil.
Es obvio que en un creyente coexisten dos hombres, el natural, que todavía no llegó al fin de sus días, y el espiritual nacido de Dios por medio de la fe y de su palabra santa.


Pero no nos dejemos confundir...

Tenemos por un lado al hombre natural vendido al pecado y miserable, también formado por dos hombres, el exterior y el interior y donde el hombre interior está preso del hombre exterior...

Y tenemos por el otro al nacido de Dios, que no es ningún miserable, y que no anda conforme a la carne sino conforme al Espíritu, y en quien no hay condenación alguna.

Esta nueva criatura nacida de Dios no es el hombre interior del hombre natural.

El hombre interior miserable del hombre natural es el destinatario del evangelio y de las buenas noticias y es el llamado a creer para nacer de nuevo.
 
Aparte las buenas noticias no son para los nacidos de nuevo sino para los pecadores.
Para que creyendo el evangelio de Dios dejen de ser perdidos para volverse salvados.
Jesús no vino a dar libertad a los creyentes sino a los perdidos y vino a dar vida a los muertos.


Por eso es importante entender bien todo esto.

El calvinista ve al hombre natural como uno solo y lo ve muerto e incapaz de creer sin recibir vida primero.
De lo que no se dan cuenta es de que en el hombre natural subyace un hombre interior que puede amar o no a Dios.
Un hombre que bien puede ser religioso o incrédulo.
Un hombre que aunque es libre de creer cualquier cosa, debe lidiar con su naturaleza rebelde de la cual es esclavo y de la que no se puede librar.


Por su puesto que hay hombres naturales cuyo hombre interior está tan muerto como el exterior, pero también están aquellos que en su hombre interior
buscan agradar a Dios mas allá de que no puedan lograrlo.
Estos son los miserables.
Los que enfrentan está dicotomía.
Porque el que se entregó al pecado de lleno está podrido por dentro y por fuera y no sufre sino que disfruta su pecado y que todos los demás pequen con él, pero hay otros que resisten y sufren en si mismos está dualidad.
Estos son los que lloran y van a ser consolados.
Los miserables que van a ser liberados.


A este hombre interior libre, aunque preso en su proceder, es al que invocan, sin saber, los arminianos.

Porque ellos también ven, como los calvinistas, a un solo hombre natural, y lo ven, NO MUERTO y capaz de creer.

En realidad el muerto es el hombre exterior y el hombre interior puede ser un esclavo del exterior o volverse uno con él.

El hombre exterior jamás va a creer porque es rebelde y está muerto a Dios, pero puede ser que el hombre interior escuche la palabra de vida y tome cartas en el asunto y se empodere.

Es el hombre interior el que pasa a ser el creyente que muere a su hombre exterior rebelde para ser de otro.
 
Aparte las buenas noticias no son para los nacidos de nuevo sino para los pecadores.
Para que creyendo el evangelio de Dios dejen de ser perdidos para volverse salvados.
Jesús no vino a dar libertad a los creyentes sino a los perdidos y vino a dar vida a los muertos.


Por eso es importante entender bien todo esto.

El calvinista ve al hombre natural como uno solo y lo ve muerto e incapaz de creer sin recibir vida primero.
De lo que no se dan cuenta es de que en el hombre natural subyace un hombre interior que puede amar o no a Dios.
Un hombre que bien puede ser religioso o incrédulo.
Un hombre que aunque es libre de creer cualquier cosa, debe lidiar con su naturaleza rebelde de la cual es esclavo y de la que no se puede librar.


Por su puesto que hay hombres naturales cuyo hombre interior está tan muerto como el exterior, pero también están aquellos que en su hombre interior
buscan agradar a Dios mas allá de que no puedan lograrlo.
Estos son los miserables.
Los que enfrentan está dicotomía.
Porque el que se entregó al pecado de lleno está podrido por dentro y por fuera y no sufre sino que disfruta su pecado y que todos los demás pequen con él, pero hay otros que resisten y sufren en si mismos está dualidad.
Estos son los que lloran y van a ser consolados.
Los miserables que van a ser liberados.


A este hombre interior libre, aunque preso en su proceder, es al que invocan, sin saber, los arminianos.

Porque ellos también ven, como los calvinistas, a un solo hombre natural, y lo ven, NO MUERTO y capaz de creer.

En realidad el muerto es el hombre exterior y el hombre interior puede ser un esclavo del exterior o volverse uno con él.

El hombre exterior jamás va a creer porque es rebelde y está muerto a Dios, pero puede ser que el hombre interior escuche la palabra de vida y tome cartas en el asunto y se empodere.

Es el hombre interior el que pasa a ser el creyente que muere a su hombre exterior rebelde para ser de otro.
el grito paulino se convierte en el grito de todo creyente




quien me librara de este cuerpo de muerte????


y la razon es que el hecho de que "no vivo yo si no que cristo vive en mi" no me exime de ser tentado por los deseos carnales . mas bien elpoder del espiritu de vida en Cristo me hace estar victorioso sobre las tentaciones .



por tanto si la ley del pecado y de la muerte es la que reina sobre nuestro cuerpo mortal como me escapo???


y la respuesta es obvia ,,


nadie puede librarte de ese cuerpo de muerte porque es el cuerpo en que vives ,y esa carne nunca se combierte ,,,,

pero con el Espiritu de Cristo en ti y como el mismo Cristo hiso en los dias de su carne ,

puedes vivir en el Espiritu poniendo tu mente en las cosas del Espiritu haciendo que tu carne permanesca crucificada como si estuviera muerta .


no obstante esa carne maligna nunca estara totalmente aniquilada sino que estara algo dormida o neutralisada , de ves en ves veremos los vestigios de que esa carne sigue siendo tan venenosa como siempre .

solo el creyente la mantiene a raya viviendo en el Espiritu sometiendo su carne con la ayuda del Espiritu santo el cual da espiritu de poder amor y dominio propio .
 
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Reacciones: Eraclio
1Co 2:14 Mas el hombre animal no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque le son locura: y no las puede entender, porque se han de examinar espiritualmente.


exegesis :
no esta hablando de incomversos ,,

pablo esta diciendo que la parte animal que existe en todos los seres humanos incluyendo a los creyentes no entiende las cosas del espiritu


cuando los cristianos ponen su mente en la carne no entenderan ,,, cuando esos mismos cristianos ponen su mente en el espiritu entonses entenderan .


bien lo explica en el cap 3 que no les habla a incombersos si no a cristianos carnales porque se ocupan y ponen su mente en las cosas de la carne .

veamos:

1Co 3:1 DE manera que yo, hermanos, no pude hablaros como á espirituales, sino como á carnales, como á niños en Cristo.
1Co 3:2 Os dí á beber leche, y no vianda: porque aun no podíais, ni aun podéis ahora;
1Co 3:3 Porque todavía sois carnales:
 
el grito paulino se convierte en el grito de todo creyente

quién me librará de este cuerpo de muerte????

y la razón es que el hecho de que "no vivo yo si no que cristo vive en mí" no me exime de ser tentado por los deseos carnales . más bien el poder del espíritu de vida en Cristo me hace estar victorioso sobre las tentaciones .

por tanto si la ley del pecado y de la muerte es la que reina sobre nuestro cuerpo mortal como me escapo???

y la respuesta es obvia ,,

nadie puede librarte de ese cuerpo de muerte porque es el cuerpo en que vives ,y esa carne nunca se convierte ,,,,

pero con el Espíritu de Cristo en ti y como el mismo Cristo hizo en los días de su carne ,

puedes vivir en el Espíritu poniendo tu mente en las cosas del Espíritu haciendo que tu carne permanezca crucificada como si estuviera muerta .

no obstante esa carne maligna nunca estará totalmente aniquilada sino que estara algo dormida o neutralizada , de vez en vez veremos los vestigios de que esa carne sigue siendo tan venenosa como siempre.

solo el creyente la mantiene a raya viviendo en el Espíritu sometiendo su carne con la ayuda del Espíritu santo el cual da espíritu de poder amor y dominio propio.

El cuerpo de muerte es uno solo y es el que tiene el hombre natural.
El hombre espiritual oficialmente no tiene cuerpo aún, y el cuerpo de muerte del hombre natural, por fe, debería estar crucificado y con él también el pecado.

Lo cierto y lo que vos estás intentando decir es que el hombre espiritual y el hombre natural coexisten en la misma mente física.
Porque de alguna manera el que se arrepiente, muere y resucita viene a ser el hombre interior del hombre natural.
Porque el que ejerce fe es el mismo que puede no ejercerla.

¿De qué hombre se enseñorea la ley mientras este vive?
Del hombre natural y no de los creyentes.
Por eso nos deshacemos de esa ley deshaciendonos de ese hombre.
Y nos deshacemos de ese hombre, crucificándole juntamente con Cristo.
Entonces la ley que se enseñorea del hombre mientras este vive, debe quedarse a los pies de la cruz y ya no puede ir más allá.
Porque solo puede enseñorearse de él mientras vive pero ya no vive más.
El que es carnal vendido al pecado es el hombre natural no el espiritual.
El que hace lo que no quiere hacer, es el hombre natural porque es carnal y su carne se enseñorea de él.
El que hace el mal que no quiere hacer es el carnal que anda según la carne.
El espiritual está en Cristo y anda según el Espíritu.
 
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1Co 2:14 Mas el hombre animal no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque le son locura: y no las puede entender, porque se han de examinar espiritualmente.

exégesis :
no está hablando de inconversos ,,

pablo está diciendo que la parte animal que existe en todos los seres humanos incluyendo a los creyentes no entiende las cosas del espíritu

cuando los cristianos ponen su mente en la carne no entenderán ,,, cuando esos mismos cristianos ponen su mente en el espíritu entonces entenderán .

bien lo explica en el cap 3 que no les habla a inconversos si no a cristianos carnales porque se ocupan y ponen su mente en las cosas de la carne .

veamos:

1Co 3:1 DE manera que yo, hermanos, no pude hablaros como á espirituales, sino como a carnales, como á niños en Cristo.
1Co 3:2 Os dí á beber leche, y no vianda: porque aun no podíais, ni aun podéis ahora;
1Co 3:3 Porque todavía sois carnales:
Y bueno...
Allí están claramente los dos hombres, el carnal y el espiritual.
Los no creyentes son solo carnales y los creyentes pueden ser carnales o espirituales.
Ahora el carnal solo vive por vista mientras que el espiritual puede vivir por fe o usar aún los ojos de su carne.
De todas maneras el que peca siempre es el carnal y el que no peca siempre es el espiritual.
Porque ninguna persona puede ser guiado por el Espíritu a pecar contra Dios, ni puede pecar estando en Cristo o teniendo su mente.
Por eso dice que ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús que no andan según la carne.
 
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El cuerpo de muerte es uno solo y es el que tiene el hombre natural.
El hombre espiritual oficialmente no tiene cuerpo aún, y el cuerpo de muerte del hombre natural, por fe, debería estar crucificado y con él también el pecado.


Lo cierto y lo que vos estás intentando decir es que el hombre espiritual y el hombre natural coexisten en la misma mente física.
Porque de alguna manera el que se arrepiente, muere y resucita viene a ser el hombre interior del hombre natural.
Porque el que ejerce fe es el mismo que puede no ejercerla.


¿De qué hombre se enseñorea la ley mientras este vive?
Del hombre natural y no de los creyentes.
Por eso nos deshacemos de esa ley deshaciendonos de ese hombre.
Y nos deshacemos de ese hombre, crucificándole juntamente con Cristo.
Entonces la ley que se enseñorea del hombre mientras este vive, debe quedarse a los pies de la cruz y ya no puede ir más allá.
Porque solo puede enseñorearse de él mientras vive pero ya no vive más.
El que es carnal vendido al pecado es el hombre natural no el espiritual.
El que hace lo que no quiere hacer, es el hombre natural porque es carnal y su carne se enseñorea de él.
El que hace el mal que no quiere hacer es el carnal que anda según la carne.
El espiritual está en Cristo y anda según el Espíritu.
Asi es
 
Y bueno...
Allí están claramente los dos hombres, el carnal y el espiritual.
Los no creyentes son solo carnales y los creyentes pueden ser carnales o espirituales.
Ahora el carnal solo vive por vista mientras que el espiritual puede vivir por fe o usar aún los ojos de su carne.
De todas maneras el que peca siempre es el carnal y el que no peca siempre es el espiritual.
Porque ninguna persona puede ser guiado por el Espíritu a pecar contra Dios, ni puede pecar estando en Cristo o teniendo su mente.
Por eso dice que ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús que no andan según la carne.
asi es
 
Miguel, Héctor y Pericles... muy bien. Entre los tres estáis extrayendo poco a poco la esencia de Romanos 7 y 8.

Hay un versículo en esos dos capítulos que si los cristianos tuvieran delante de su corazón todos los días cambiaría su mundo... les liberaría de tantas cargas pesadas que la religión impone. Hay un secreto enorme a descubrir en un versículo concreto en todo el discurso de Romanos 7 y 8. Es un versículo que resume todo el discurso, y que, por un detalle concreto, lo hace muy especial. Es un versículo que, cuando lo entiendes, entiendes todo el discurso. Es lo que el lector ávido de ungüento va buscando desde que empieza el discurso en Romanos 7 y el dolor de las heridas empieza a supurar.

En ese versículo se mece el misterioso discurso, donde se plantea la solución a todos los dilemas de la "carne corrompida" que Salmo tiene en la cabeza y al dolor del fracaso que debe enfrentar cada día el cristiano honesto. Es un versículo que, cuando lo entiendes y lo crees, incluso es capaz de explicar con sencillez muchas otras enseñanzas de la Biblia. ¡El versículo es una llave en sí mismo! Practicando ese versículo, lo tienes todo. Pero, cosas curiosas de la fe, estoy seguro de que si os señalara el versículo, la gran mayoría de vosotros seguiría sin ver el mensaje liberador. Casi estoy por apostar que la mayoría de vosotros, aunque lo leyerais, no lo entenderíais.

Y es curioso porque no es un versículo "de difícil interpretación" (los hay de muy difícil o imposible interpretación sin revelación). Pero este no. Es curioso que el versículo que explica el discurso entero de Romanos 7 y 8 SÓLO REQUIERE LEER LO QUE DICE. Creerlo y practicarlo es otra cosa, pero entenderlo es fácil. Este es uno de esos "versículos mágicos" que tiene la Biblia, y que sólo puede descubrirlo el que de verdad está viviendo las Escrituras en su interior.

El que lea este discurso de Romanos 7 y 8 con honestidad desde el principio, identificándose en su espíritu con la enorme honestidad de Pablo, y no dejando de buscar la solución y la respuesta prometida al terrible dilema del "hombre carnal", lo hallará tarde o temprano.

Amor,
Ibero

¿Pero no nos vas a dar esa revelación entonces? ¿O vamos a tener que ayunar, orar, y velar para vislumbrar lo que tú con una sola palabra nos descifrarías?
Tienes tu parte en el Cuerpo de Cristo y cada uno en su sitio, todos somos miembros unos de otros, y todos unidos por las coyunturas Caminamos hacia la meta. ¿Entonces? ¿Cuál es el motivo por el cual no quieres compartir para que crezcamos tus Hermanos, mi Hermano?
¿O esto viene después del primer Acto?
 
¿Pero no nos vas a dar esa revelación entonces? ¿O vamos a tener que ayunar, orar, y velar para vislumbrar lo que tú con una sola palabra nos descifrarías?
Tienes tu parte en el Cuerpo de Cristo y cada uno en su sitio, todos somos miembros unos de otros, y todos unidos por las coyunturas Caminamos hacia la meta. ¿Entonces? ¿Cuál es el motivo por el cual no quieres compartir para que crezcamos tus Hermanos, mi Hermano?
¿O esto viene después del primer Acto?
asi es ,todos estamos entusiasmo dos en Aprender de nuestro hermano ibero ,,amen ,
 
asi es ,todos estamos entusiasmo dos en Aprender de nuestro hermano ibero ,,amen ,
Igual que los indios con los colonizadores.
Yo no creo que Ibero pueda aportar nada realmente interesante.
 
Igual que los indios con los colonizadores.
Yo no creo que Ibero pueda aportar nada realmente interesante.
Aparte el evangelio no es como la tecnología que sale una versión nueva cada año.
Solo basta leer la firma para hacerte una idea del hombre.
 
Hay dos votos a favor y uno en contra, pero el que vota en contra es el "dueño moral" del hilo y no parece demasiado contento. Así que se plantea un dilema moral... y no quiero ser un colonizador. Para no ser de tropiezo voy a abrir un hilo nuevo. Allí plantearé ante el aforado del mundo mundial nuestro terrible dilema...

:)

¡Amor!,
Ibero
 
Hay dos votos a favor y uno en contra, pero el que vota en contra es el "dueño moral" del hilo y no parece demasiado contento. Así que se plantea un dilema moral... y no quiero ser un colonizador. Para no ser de tropiezo voy a abrir un hilo nuevo. Allí plantearé ante el aforado del mundo mundial nuestro terrible dilema...

:)

¡Amor!,
Ibero
Yo no soy dueño moral de nada.
Lo que no entiendo es como reaccionas tan "racional" ante Fray para terminar postrándote ante la magia oculta de ciertas palabras.
PATÉTICO...
 
Yo no soy dueño moral de nada.
Lo que no entiendo es como reaccionas tan "racional" ante Fray para terminar postrándote ante la magia oculta de ciertas palabras.
PATÉTICO...

Te lo explico. Soy un hombre sujeto a pasiones.... como todos. :)

Me encantaría que participaras en el hilo que voy a abrir. Tú has sido el "impulsor" y casi el "autor" de ese hilo. Así que estás más que invitado. Habrá un premio para el que consiga averiguar el "versículo mágico", y creo que te gustará.

Amor,
Ibero
 
A ver chicos...

Es obvio que la epístola a los Romanos está escrita para la iglesia pero también para el griego (gentil) y el judío.

Pablo se siente deudor de todos, de griegos y no griegos, de sabios y no sabios.

Hasta la revelación de la fe y del evangelio de la gracia, las personas se dividían en dos grupos a saber, los gentiles y los judíos, pero venida la fe, se agregaron a este escenario los nacidos de nuevo, otrora judíos o gentiles.

(...)

Pero edificados TODOS, como miembros de UNA SOLA GRAN FAMILIA DE DIOS, sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo Jesucristo mismo, la piedra angular sobre la cual todo el edificio, va creciendo para ser un templo santo en el Señor.

Salmo, empiezas reconociendo que Romanos está escrito para la iglesia. Luego la categorizas. Judíos y gentiles. Has dicho una media verdad. Completala!
Judíos y gentiles creyentes en el mesías=Jesùs.
Ellos son los nacidos de nuevo, porque así se lo dejò muy claro Cristo al maestro judìo, Nicodemo. "tienes que nacer de nuevo".
No hay tres opciones como lo has dicho para tratar de encajar tu doctrina.
O se ha nacido de nuevo o no se ha nacido de nuevo. O se es salvo o no se es salvo, no importa si llevas calentando la banca de la iglesia por años. O no vas.
No importa se eres o no eres judìo.
No hay tercera opciòn. O eres o no eres de la familia de Dios. Así ha sido siempre y hasta la fecha. Somos de la familia de Dios por Jesùs.
Ha sido siempre su plan, mira lo que les dijo Dios a su pueblo en el AT
Amós 3:2
A vosotros solamente he conocido de todas las familias de la tierra; (...)
Dios no cambia, Malaquías 3:6.
Seguimos siendo su pueblo, su familia, hoy llamada su iglesia, no importando el pedigrí, griego o judìo, Salmo.

A la Iglesia, a su pueblo habla Romanos 7, y toda la Biblia.
No es el mensaje enfocado a cómo es la vida de los inconversos.
Es el amado escribiendo con amor a su amada con quièn se casarà.
Obvio, el amado no se casarà con creyentes carnales, sino con los que andan conforme al espìritu.

Si lo miras desde esa óptica, que el mensaje es a su pueblo. Vas a aprender mucho más, deja a un lado a Calvino, Arminio y et., al
 
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