Es posible, hermano
@Ricardo, que los obispos nicenos hayan tenido las cosas claras, pero les falló la forma de expresarlas.
Sin embargo, pienso que si los grandes maestros, después de larguísimos debates, no pueden formular con palabras claras una doctrina, lo más probable es que
- ellos mismos no tienen, en su mente, claridad respecto a la doctrina y/o
- la doctrina no es importante para la salvación, porque entonces nadie se salvaría.
Si un grupo de destacadísimos químicos se enredan al enseñarnos cómo los átomos de hidrógeno y oxígeno están unidos en la fórmula H2O del agua, lo más probable es que...
- esos químicos no lo tienen claro en su mente y/o
- saber cómo se combinan tales atómos no tiene importancia para fines de beber agua y no morir de sed.