Dios te bendiga OSO.
Al inicio quiero volver a señalar que me llena de alegría el corazón leerte.
Quisiera hacer énfasis en que estoy de acuerdo contigo en que la razón de nuestra salvación es Jesús y su Obra en la Cruz. Que el manantial de bendición, gracia, justicia y salvación es Él y que de la única manera que tenemos acceso a este manantial es a través de la Fe. El vínculo entre la Gracia de la cruz y nosotros es la Fe y no hay otro. Quiero hacer énfasis en que no vale de nada que el hombre cuente sus méritos y sus obras, ni siquiera las que ha hecho el Espíritu Santo a través de él, si retira sus ojos de lo que ha hecho Cristo en la cruz y de la apropiación de este hecho que es por la fe. Enfatizo también que esta misma fe es un impulso del Espíritu con tal de restarle toda posibilidad de "mérito" al hombre.
Bien, antes de tratar nuestras diferencias quisiera darle un espacio al Maestro para que hable: "Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden." (Juan 15, 5-6). La única razón que nos puede dar garantía de salvación es la permanencia en Jesús. Si algún creyente se aparta del camino su única seguridad de salvación se la dará el volver a él. Dios no salvará al que está lejos de Él, Él mismó dijo que no lo hará "porque yo no justificaré al impío" (Éxodo 23, 7). Tenemos la certeza de que aunque cometamos las atrocidades más grandes si volvemos y pedimos perdón Dios nos perdonará siempre, siempre! Sin volver no hay garantía de perdón. Jesús sale a nuestro encuentro siempre como el Buen Pastor, Él toca a la puerta, pero siempre dependerá de nuestra voluntad el volver o no: "Volveos a mí, dice Jehová de los ejércitos, y yo me volveré a vosotros" (Zacarías 1, 3).
Jesús ha logrado para nosotros de una manera perfecta y eterna nuestra redención. Esa redención sólo se aplica al hombre individual si este vive permanentemente en comunión con Dios: "Yo deshice como una nube tus rebeliones, y como niebla tus pecados; vuélvete a mí, porque yo te redimí". (Isaías 44, 22) Nadie puede tener seguridad de su salvación aún cuando ha sido redimido, la seguridad sólo se la dará su permanencia en Cristo. Ahora, ¿cómo se permanece en Cristo? su discípulo más amado se aprendió bien la lección: "El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo" (1 Juan 2, 6). La conclusión es sencilla: se salvará el que (permanezca) viva como vivió (en) Jesús. Y esto sólo lo logra la gracia que mora en nosotros y nos impulsa, no hay espacio para gloriarse humanamente.
1. Pasado - "aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia habéis sido salvados)" (Efesios 2, 5)
2. Presente - "obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas" (1 Pedro 1, 9)
3. Futuro - "Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con modestia" ( 1 Timoteo 2, 15)
Mientras permanezcamos en Cristo todo está garantizado y ya sabemos qué es permanecer en Cristo. Creo que es obvio que alguno podrá olvidarse de la verdad y perderse, pero prefiero dejar unos versos de Santiago que hablan bien claro: "Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha extraviado de la verdad, y alguno le hace volver, sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados" (Santiago 5, 19-20)
Notar el tiempo futuro de la frase subrayada, esto recalca que no hay garantía de salvación más que el volver; recalca el caracter de futuro que tiene la salvación y claramente señala que ciertamente los creyentes se pueden apartar de la verdad y que al hacerlo heredarán condenación además de que su única seguridad para contar con su salvación será el regresar. También señalan estos versos que nuestros pecados nuevos son nueva vez perdonados, que debemos mantener la actitud de conversión y arrepentimiento cada vez que caemos y de igual manera volveremos a recibir perdón.
En el Amor de Jesús.
Gabaon.
Al inicio quiero volver a señalar que me llena de alegría el corazón leerte.
Quisiera hacer énfasis en que estoy de acuerdo contigo en que la razón de nuestra salvación es Jesús y su Obra en la Cruz. Que el manantial de bendición, gracia, justicia y salvación es Él y que de la única manera que tenemos acceso a este manantial es a través de la Fe. El vínculo entre la Gracia de la cruz y nosotros es la Fe y no hay otro. Quiero hacer énfasis en que no vale de nada que el hombre cuente sus méritos y sus obras, ni siquiera las que ha hecho el Espíritu Santo a través de él, si retira sus ojos de lo que ha hecho Cristo en la cruz y de la apropiación de este hecho que es por la fe. Enfatizo también que esta misma fe es un impulso del Espíritu con tal de restarle toda posibilidad de "mérito" al hombre.
Bien, antes de tratar nuestras diferencias quisiera darle un espacio al Maestro para que hable: "Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden." (Juan 15, 5-6). La única razón que nos puede dar garantía de salvación es la permanencia en Jesús. Si algún creyente se aparta del camino su única seguridad de salvación se la dará el volver a él. Dios no salvará al que está lejos de Él, Él mismó dijo que no lo hará "porque yo no justificaré al impío" (Éxodo 23, 7). Tenemos la certeza de que aunque cometamos las atrocidades más grandes si volvemos y pedimos perdón Dios nos perdonará siempre, siempre! Sin volver no hay garantía de perdón. Jesús sale a nuestro encuentro siempre como el Buen Pastor, Él toca a la puerta, pero siempre dependerá de nuestra voluntad el volver o no: "Volveos a mí, dice Jehová de los ejércitos, y yo me volveré a vosotros" (Zacarías 1, 3).
Jesús ha logrado para nosotros de una manera perfecta y eterna nuestra redención. Esa redención sólo se aplica al hombre individual si este vive permanentemente en comunión con Dios: "Yo deshice como una nube tus rebeliones, y como niebla tus pecados; vuélvete a mí, porque yo te redimí". (Isaías 44, 22) Nadie puede tener seguridad de su salvación aún cuando ha sido redimido, la seguridad sólo se la dará su permanencia en Cristo. Ahora, ¿cómo se permanece en Cristo? su discípulo más amado se aprendió bien la lección: "El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo" (1 Juan 2, 6). La conclusión es sencilla: se salvará el que (permanezca) viva como vivió (en) Jesús. Y esto sólo lo logra la gracia que mora en nosotros y nos impulsa, no hay espacio para gloriarse humanamente.
Aunque estoy de acuerdo contigo en el aspecto atemporal de nuestra salvación, y me parece la respuesta correcta a las preguntas que haces sobre las frases de Pablo, con lo que no estoy de acuerdo es con tus conclusiones. Es precisamente este caracter atemporal OSO, lo que nos obliga a "trabajar con temor y temblor por nuestra salvación" porque nadie sabe cuál será el veredicto final sobre su vida particular. La Biblia nos habla de nuestra salvación en pasado, en presente y en futuro:la salvación es atemporal, es parte de un deseo de la voluntad de Dios de hacer Su tabernáculo con el hombre, hombres que el santificó desde antes de la fundación del mundo, el cumplimiento de que el pecador salvado es judicialmente declarado salvo “tu fe te ha salvado” tiene verificativo cuando la victima santa, preciosa, hermosa, perfecta y voluntaria satisface la justicia divina en el momento mismo en que Cristo Jesús muere siendo inocente El y todo esta consumado en El. Su causa y su misión, a saber salvar al hombre es entonces ya una hecho. Esta persona (pecador) no puede ser juzgado dos veces por el mismo crimen de ser pecador, no puede ser crucificado nuevamente el Señor, no viene a juicio condenatorio si bien su obra será juzgada no para salvación vs condenación, sino para recompensa o pérdida. (1 Cor 3:13-15).
1. Pasado - "aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia habéis sido salvados)" (Efesios 2, 5)
2. Presente - "obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas" (1 Pedro 1, 9)
3. Futuro - "Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con modestia" ( 1 Timoteo 2, 15)
Mientras permanezcamos en Cristo todo está garantizado y ya sabemos qué es permanecer en Cristo. Creo que es obvio que alguno podrá olvidarse de la verdad y perderse, pero prefiero dejar unos versos de Santiago que hablan bien claro: "Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha extraviado de la verdad, y alguno le hace volver, sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados" (Santiago 5, 19-20)
Notar el tiempo futuro de la frase subrayada, esto recalca que no hay garantía de salvación más que el volver; recalca el caracter de futuro que tiene la salvación y claramente señala que ciertamente los creyentes se pueden apartar de la verdad y que al hacerlo heredarán condenación además de que su única seguridad para contar con su salvación será el regresar. También señalan estos versos que nuestros pecados nuevos son nueva vez perdonados, que debemos mantener la actitud de conversión y arrepentimiento cada vez que caemos y de igual manera volveremos a recibir perdón.
En el Amor de Jesús.
Gabaon.