Creo que no leyó con cuidado mi post, amigo Raül.Por lo que hicieron, ninguno de los dos. Las obras no salvan a nadie. Y hasta que esto no se entiende, es imposible entender el evangelio. Ambos, por mucho bien que hiciesen, ese bien no les da ningún mérito para ser salvos, absolutamente ninguno. No somos salvos por obras, sino por gracia, por medio de la fe. Y no hay otro modo u forma.
Digo en mi post "asumiendo que lo que hicieron no fue producto ni de la hipocresía ni de un intento de comprar el cielo por méritos propios"
Estamos haciendo el ejercicio de examinar al árbol por sus frutos, como nos recomendó Jesús.
Repito: los frutos del Dr Youngberg y de Oskar Schindler nos permiten suponer que ya eran salvos por gracia: que Cristo ya habitaba su corazón. No que fueron salvos por sus obras.
Y tal suposición es una suposición de utilidad práctica... de otra forma, Jesús no nos hubiera aconsejado seguir tal método.