Re: El Concilio de Constanza y el Mito de la Sucesión Apostólica.
Dejemos que don clemente siga con matices sacados de su caletre o del google y sigamos con las falsificaciones. En este caso de la historia. Y voy a copiar directamente de Dölliger.
Poco tiempo despues de Tomás de Aquino, hacia finales del siglo XIII, se sintió la necesidad de nuevas invenciones, esta vez del dominio de la Historia, para sostener e imponer el sistema romano, toda vez que saltaba a la vista las contradicciones entre las más antiguas autoridades históricas y los recientes códigos de leyes canónicas, Graciano y las Decretales, pareció conveniente "arreglar" la Historia de los papas y los emperadores de manera tal que pudiesen eludirse las esas contradicciones, dando sanción histírica a la nueva ley canónica. Esta labor fue llevada a cabo por mandato de Clemente V, por Martín de Troppau, llamado el Pole, arzobispo de Gnesen , ordenado en 1276 por Nicolás III. Era penitenciario y capellán del Papa; se ordenó a todos los juristas y canonistas que colocaran su libro al lado de Graciano y las Decretales, y a los teólogos junto a la Historia bíblica de Pedro Comentor.
(Aclaremos: Pedro Comentor. Canciller de París a finales de soglo XII escribió una historia que abarca desde la Creación hasta el nacimiento de Cristo. Esta obra, con las "Sentencias" de Pedro Lombardo y el "Decretum" de Graciano, dicese haber formado el promedio de lecturas de los teólogos medievales)
Y este libro, de entre todas las obras históricas de la Edad Media, es a la vez el más popular y el más fabuloso. Muchas de sus ficciones evidencian simplemente la falta absoluta de sentido histórico y la credulidad milagrera que tanto se ha extendido desde el apogeo de las Ordenes Mendigantes; pero muchos escritos espureos fueron tambien escritos con deliberada intención. Tenía que presentarse a los Papas, como en el "Liber Pontificalis", como los líderes de toda la Iglesia. Tenían que confirmarse las seudo Isidorianas y Graciano, y la Historia tenía que reflejar la supremacia de los Papas sobre los Emperadores. El libro representa un gran descenso en la investigación histórica; ello debe atribuirse a la influencia general de los monjes, especialmente los domínicos, con si insaciable afan de milagros, y su constante empeño en querer trazar el sistema papal desde los tiempos primitivos de manera que oscurecieron materialmente el conocimiento histórico, degradándolo a un nivel más bajo que el había alcanzado en el siglo XII.
Comentario de Tobi.
Lo malo para estos falsificadores en aras de una inxistente primacia papal queda desmentida por los siete concilios ecuménicos que no fueron convocados por ningún papa ni presididos por él ni por sus legados y si por los Emperadores. Seguidamente tenemos a los llamados Padres de la Iglesia entre los cuales no hay constancia del primado de papa romano sino todo lo contrario.
CONTINUARÁ
Dejemos que don clemente siga con matices sacados de su caletre o del google y sigamos con las falsificaciones. En este caso de la historia. Y voy a copiar directamente de Dölliger.
Poco tiempo despues de Tomás de Aquino, hacia finales del siglo XIII, se sintió la necesidad de nuevas invenciones, esta vez del dominio de la Historia, para sostener e imponer el sistema romano, toda vez que saltaba a la vista las contradicciones entre las más antiguas autoridades históricas y los recientes códigos de leyes canónicas, Graciano y las Decretales, pareció conveniente "arreglar" la Historia de los papas y los emperadores de manera tal que pudiesen eludirse las esas contradicciones, dando sanción histírica a la nueva ley canónica. Esta labor fue llevada a cabo por mandato de Clemente V, por Martín de Troppau, llamado el Pole, arzobispo de Gnesen , ordenado en 1276 por Nicolás III. Era penitenciario y capellán del Papa; se ordenó a todos los juristas y canonistas que colocaran su libro al lado de Graciano y las Decretales, y a los teólogos junto a la Historia bíblica de Pedro Comentor.
(Aclaremos: Pedro Comentor. Canciller de París a finales de soglo XII escribió una historia que abarca desde la Creación hasta el nacimiento de Cristo. Esta obra, con las "Sentencias" de Pedro Lombardo y el "Decretum" de Graciano, dicese haber formado el promedio de lecturas de los teólogos medievales)
Y este libro, de entre todas las obras históricas de la Edad Media, es a la vez el más popular y el más fabuloso. Muchas de sus ficciones evidencian simplemente la falta absoluta de sentido histórico y la credulidad milagrera que tanto se ha extendido desde el apogeo de las Ordenes Mendigantes; pero muchos escritos espureos fueron tambien escritos con deliberada intención. Tenía que presentarse a los Papas, como en el "Liber Pontificalis", como los líderes de toda la Iglesia. Tenían que confirmarse las seudo Isidorianas y Graciano, y la Historia tenía que reflejar la supremacia de los Papas sobre los Emperadores. El libro representa un gran descenso en la investigación histórica; ello debe atribuirse a la influencia general de los monjes, especialmente los domínicos, con si insaciable afan de milagros, y su constante empeño en querer trazar el sistema papal desde los tiempos primitivos de manera que oscurecieron materialmente el conocimiento histórico, degradándolo a un nivel más bajo que el había alcanzado en el siglo XII.
Comentario de Tobi.
Lo malo para estos falsificadores en aras de una inxistente primacia papal queda desmentida por los siete concilios ecuménicos que no fueron convocados por ningún papa ni presididos por él ni por sus legados y si por los Emperadores. Seguidamente tenemos a los llamados Padres de la Iglesia entre los cuales no hay constancia del primado de papa romano sino todo lo contrario.
CONTINUARÁ