Re: Dios no acepta bautismos de niños
Si de testimonios se trata, pues enforma breve doy el mío:
Soy un hombre que para el próximo día 11 de este mes de octubre, cumplo 69 años de vagar por este mundo (jaja) ¿qué no habré visto y vivido?
Pero no toda mi vida a sido apegada a mi fe, a mi Iglesia; ¡no!, he sido de lo peorcito que el Señor ha recogido, pero el tuvo compasión de mi y me hizo llegar su Palabra a través de las Sagradas Escrituras, uno de mis primeros intentos fue a través de una comunidad evangélica, hasta que me encontré un Colegio Bíblico en la Ciudad de México D.F. "Colegio Bíblico Apostólico de la Cruz y Santa María de Guadalupe", ahí empece a encontrar respuesta a las miles de preguntas que bullían en mi mente, ahí ví la realidad de la Iglesia a que me glorío de pertenecer.
Toda mi familia actualmente somos católicos, pero cuando conocí a mi esposa, ella era "publicadora" de los testigos de jehová, mi suegra (+) era pentecostal, pero despues, mi esposa regresó a la Iglesia Católica y nos casamos y mi suegra murió asistida por la Iglesia Católica.
Pruebas?, mi esposa se alivió de Cancer, es diabética, hipertensa, tiene cirrósis, fibrósis pulmonar, padece de las tiroides, etc., pero se encuentra activa dentro del equipo de litúrgia de nuestra parroquia.
Uno de mis hijos fue atacado por una enfermedad viral que por un poco mas se lo hubiera llevado, pero lo pusimos en manos de Dios a través de María Santísima de Guadalupe y aquí anda en este mundo.
Mi persona, padezco EPOC, enfermedad que contraje por mi necedad, fumé por muchos años, padezco hernia hiatal por mi mal comer, y he padecido dos infartos de miocardio y aquí me tiene todavía el Señor ¿hasta cuándo? solamente El sabrá, no voy a echar a volar la imaginación como los testigos de jehová y ponerme a hacer cálculos infinitesimales para "saber la fecha".
¿Qué nos tiene en píe? nuestra fe en Dios, en nuestra Madre Santísima y en nuestra amada Iglesia, y el saber con toda certeza que estamos en la Verdad.
Que Dios les bendiga.
No se trataba de nuestros testimonios,... sino... el de nuestros hijos bautizados cuando pequeños... Pero si quiere mi testimonio... ahí va.
Fui católico con apellidos (apostólico, romano); estudié en un colegio de monjas francesas, pero... a la edad de 24 años, conocí verdaderamente a Dios, y él me sacó de la religión católica... gracias a su misericordia... (¡no sabré yo lo que es adorar ídolos!)
El Señor me llevó paulatinamente (después de algunos meses de haberle conocido) a una iglesia evangélica de corte pentecostal... en la que persevero hasta hoy, que tengo 62 años.
A la edad de 30 años fui enviado a una ciudad a 2.000 kms. de mi ciudad natal (Santiago de Chile)... sin conocer a nadie, absolutamente a nadie;... a predicar el evangelio... Era yo, mi esposa y cuatro hijos pequeños (allí nacieron dos más) Tuvimos que pasar por momentos muy difíciles, (tengo cientos de testimonios) y aún cuando tuvimos que experimentar pobrezas, grandes necesidades, enfermedades, seguimos predicando junto a nuestros seis hijos ( de 1 a 10 años); predicábamos en la calle: en plazas, parques, ferias libres, valles, en el campo, por las casas etc.;... comencé a construir un pequeño local donde pudiéramos reunirnos; de material ligero, y allí seguíamos solos (la familia) mientras seguíamos predicando el evangelio. A causa de mi enfermedad, ayunaba constantemente, por meses, por varios días, día por medio... y en las muchas ocasiones en que estuve hospitalizado, (por reincidentes hemorragias internas, de todo lo cual Dios me sanó).. mi esposa y mis hijos, oraban por mí y ayunaban, a pesar de su corta edad;...
Orábamos mucho, (aún hasta hoy, tenemos en toda la iglesia, oración de 7 a 9 a.m. todos los días del año)... pero cuando comenzamos, orábamos 4 a 5 horas diarias, en ocasiones más... nos levantábamos con mi esposa a orar a las tres, cuatro, cinco de la mañana hasta las nueve... quedé sin trabajo, y vinieron las pobrezas y necesidades, pero ahí estábamos... ... seguíamos predicando... y paulatinamente comenzaron a llegar algunas personas... Solo Dios nos sustentaba,... por amor a nuestros hijos, nos sometíamos a la oración, para salud espiritual de ellos, como para suplir las necesidades físicas y materiales...
A pesar de nuestras pobrezas (estuvimos más de dos años sin luz, y muchos meses sin agua; a causa de mi cesantía)... nunca pedimos nada a nadie... solo a Dios, nos humillábamos delante de su presencia para dar de comer a nuestros hijos, cuando necesitaban leche o pan para comer... de muchas maneras Dios nos sustentaba, aunque igualmente teníamos necesidades... vivíamos precariamente en una casita de material ligero que arrendábamos y que como podía pagábamos, ... En cierta ocasión, en que nada teníamos para comer (uno de muchos testimonios), les dije a mis hijos pequeños (todos habían aprendido a orar a nuestro lado) "vamos a ir a orar para pedirle al Señor que nos de pan para comer"... nos pusimos a orar, clamar, gemir con muchas lágrimas... yo, mi esposa y nuestros hijos en aquel pequeño local...... necesitábamos que nuestros hijos, vieran que Dios respondía... habremos orado unas dos horas... cuando sentí que golpeaban a nuestra puerta... mientras mi esposa e hijos quedaron orando, fui a atender... Había una señora que yo no conocía... y me dijo: ¿usted es el pastor?... Sí, le respondí, ... y me dijo: "el Señor me mandó y me dijo: llévale esto a mi hijo...-" ... y me pasó un gran paquete... luego conversamos algunas pequeñas palabras.. y se fue...
Llamé a mis hijos y esposa y comenzamos a abrir el paquete... era un pan amasado, uno solo, pero de una dimensión sorprendente, era del tamaño de lo que daba un tambor de lata, de los que se hacen hornos caseros... era un pan para varios días... nuestros hijos sorprendidos, nosotros llorábamos...
Después de cinco años enfermo el Señor me sanó; nunca más volvió la enfermedad. Muchas veces a causa de mi enfermedad, predicaba con hemorragias, blanco como papel, (por días de hemorragias), famélico... En una oportunidad, después de haber sido operado, andaba predicando aún con la sonda de drenaje de la operación (cuatro operaciones en una)... pero seguíamos predicando el evangelio...
Muchísimo más podría contar en todos estos años que servimos a Dios... pero... me limitaré a decir que hoy, hay mucha hermandad, salvados por Cristo;... tenemos un templo, varios locales, y nos hemos extendido a otras ciudades (400 kms. de la nuestra) donde también tenemos varios locales y ya, tres pastores más, nacidos en nuestro campo... Nuestra situación económica, aunque diferente a cuando comenzamos, es apenas un poco mejor.... porque no concibo, que un ministro se enriquezca o tenga mejor situación o privilegios que los que cada miembro de la iglesia debe tener...
Mis hijos ya todos mayores, casados, y aún trabajando en la obra a nuestro lado... ...hasta cuando Dios disponga de nuestra vida...
Todo, para la gloria de nuestro buen Dios, quien, conforme a su promesa, nunca nos ha abandonado ni desamparado...
Dios bendiga