¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Apreciado Melviton

Apreciado Melviton

Respuesta a Mensaje # 1060:

Aunque la Biblia tampoco habla de respetar la vida o la sangre -a nadie se le había ocurrido irrespetarlas-, es un concepto que la Wachtower incorporó para el uso vernáculo en la organización y que suscita asperezas con los que no somos TJ haciéndonos sentir irrespetuosos.

El escueto “no matarás” del Decálogo junto a lo estipulado a Noé y los suyos en cuanto a los animales de los que podrían alimentarse (Gn 9:3,4) parece tan claro como suficiente.

Con la única excepción de un solo episodio (1Sa 14:33) parece que Israel nunca tuvo problema con la observación a lo dispuesto en Lv 17:14, y si algún israelita fue eliminado del pueblo por esta transgresión, no quedó registrado, lo que lo hace improbable.

En realidad, nunca podía ser este un mandamiento difícil de guardar. Sí, comparativamente, lo era el de guardar el sábado, pues al menos consta una lapidación (Nm 15:32), y frecuentemente los profetas denunciaron al pueblo de Israel por profanarlo. Digo esto, nada más, porque vuestro énfasis se asemeja a como los adventistas maximizaron el mandamiento del sábado por sobre los otros nueve del decálogo. Extraña, igualmente, que la grasa asociada en la prohibición de la Ley a la sangre (Lv 3:17) no recibiera igual consideración.

No veo yo en las Escrituras lo que tú dices de la enseñanza de los textos que establecen de manera clara y contundente el alejar la sangre, previniendo así que se pudiera pecar al comerla. Más bien veo que lo normal era que el hombre conviviera con la sangre propia que bullía por sus venas, y la de su prójimo que debía evitar derramarla. En cuanto a la de los animales, tanto la derramada en sacrificio en el altar, como la de los animales limpios muertos para alimentarse -debidamente cubierta por el polvo de la tierra-, no conlleva ninguna idea de “alejamiento”. No tenía el israelita cómo alejarse de ninguna sangre, ya que por el contrario, sea por los sacrificios en el tabernáculo o el Templo o la faena en el campo de aquellos que servían a su alimentación, había un necesario acercamiento a la sangre, aunque no fuera hasta su boca. Dices:

“Aquí se ha demostrado que no ha sido de ninguna manera “fantasioso” el establecer que la acción de “comer” equivale a “meter en el cuerpo” algo que se ha prohibido de manera tan clara y repetitiva en las Escrituras”.

Respondo: Reconozco que se ha “mostrado” pero no “demostrado”, pues si así hubiera sido yo mismo quedara convencido. Recuerda que soy enteramente libre para cambiar mi opinión -caso que algo efectivamente se me demuestre-, sin aparejarme molestas consecuencias; privilegio del que disfrutan unos cuantos foristas aunque no todos.

El portillo abierto que el Eterno dejó al promulgar la Ley a Israel, es que Él usó el verbo “comer” (bien entendido en el hebreo, griego, latín, castellano y guaraní) y no la versión de Alfageme: “No introducirás sangre en el cuerpo” que también hubiera sido igualmente bien entendida en aquellos idiomas y todos los demás.

No es criterio personal mío sino universal el distinguir que si bien todo lo que se come se introduce al cuerpo, no todo lo que se introduce al cuerpo se come.

Reza el dicho: “El que se fue a Sevilla perdió su silla”, pero no quien pierde su silla necesariamente ha ido a Sevilla.

Te pones de filólogo con la semántica del “abstenerse” como si de tanto ordeñarlo pudieras sacar otra cosa que no sea la leche que la ubre da. Pero no somos terneros mamones. Ciertamente que el “comer” de Lv 17:14 es específico por lo que sigue (sangre) y el “abstenerse” (apartarse, guardarse, privarse) de Hch 15:20, 29 ya no lo es tanto, lo que le da carácter de recomendación y no de mandato absoluto y autoritario como los del Levítico. De cualquier modo, ese “abstenerse” en la decisión de la asamblea de la iglesia en Jerusalem estaba asociado a la ley de Lv 17:14, pues el término no es plástico como para hacerlo extensible a cuanto se te ocurra, como cuando dices:

“En realidad, el significado de “abstenerse” se asemeja más a “no introducir” sangre al cuerpo”.

No le veo semejanza alguna. Te lo han hecho creer así y de igual manera lo trasmites ¡pero tal fantasía no va conmigo!

Seguidamente te refieres a “el “espíritu” detrás de aquella prohibición hacia lo sagrado de la vida”. Eso me hace acordar a que cuando los parlamentarios de mi país arguyen en Cámara sobre “el espíritu subyacente de la Ley que plasmó el constituyente o legislador”, siempre es para achicar o estirar su alcance. Así, al pobre jurisconsulto que hace un siglo redactó un artículo de la ley, se le atribuyen cosas que lo espantarían de tener que escucharlas.

La amplitud del “abstenerse” a la que te refieres no aplica a multitud de cosas ni a una extensión de lo ya sabido sino a una más suave modalidad; no como lo que se impone con todo el rigor y severidad de la antigua Ley, sino a lo que se recomienda como bueno de hacerlo así.

O sea, el “abstenerse de sangre” de Hch 15:20, 29 no es ampliado a más formas del comer sangre que no fuese por la boca ¡porque ni modo que lo fuera por otro lado!

La única diferencia está en que ese “abstenerse de sangre” no suena tan rotundo como el “no comerás” de la Ley.

No estaba en aquellos cristianos el mandarse la parte como que ellos pudieran ser todavía más escrupulosos que los escribas y fariseos.

El inquirir el motivo divino tras la promulgación de un decreto suyo va en contra de aquellas cosas secretas que al Eterno pertenecen, y que al no haber sido reveladas (Dt 29:29), exponen al pesquisante a cualquier cosa.

Fíjate cuán osado sería preguntarse el por qué Dios iluminó de tal forma a Pasteur en el siglo XIX para que recién descubriera la vacuna contra la rabia, y poco después a otros biólogos con las vacunas contra la viruela y difteria que ocasionaban millones de muertes al año.

Nadie es tan ingrato para reprocharle a Dios por qué esperó hasta ahora lo que habría evitado antaño tantas muertes con los demás logros contemporáneos de la medicina.

Tu gran paradoja sigue sin respuesta simplemente porque no existe tal paradoja más que en ti mismo. Dios legisló sin consultar con nadie.

Si al mejor estilo aristotélico compones un diseño escolástico que te conduce a las conclusiones deseadas, podrá resultar muy impresionante y será todo un éxito si al menos alcanza a convencerte a ti mismo. Pero mi mente, sin funcionar mejor, no funciona así.

Yo jamás argüí con que Jesús en Jn 15:13 se estuviera refiriendo a que se podía comer sangre. Podré soltar un disparate pero no de tamaña envergadura.

Así que no está bien que ante la ausencia de dislates míos me los inventes para luego refutarlos fácilmente.

Yo sólo digo lo que escribo y no es justo que lo disfraces hasta pintar mi punto de vista como si “Jesucristo tenía en mente justificando la ingesta de sangre “salvavidas” al cuerpo del hombre”.

Si te pones tú mismo a deducir o a interpretar por mí, hasta dar la que llamas mi propia versión de que el Señor estaba entonces pensando en transfusiones de sangre, ¡qué fácil te resulta considerar insensata y patética esa deducción! Lo gracioso es que esa ESPECULACIÓN nunca fue mía. Ni lleva mi marca.

Es cierto que ustedes tienen siempre en su repertorio Mr 8:34,35:

“Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. Todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará”.

Como frecuentemente les acontece, erran en la aplicación: el discípulo fiel de Jesucristo comienza por negarse a sí mismo, por lo que su vida no cuenta si es menester ofrendarla por su causa y la del evangelio. Tanto los mártires como los misioneros en regiones inhóspitas y entre pueblos salvajes, tuvieron por honor y alto galardón dar su vida por el Señor y la salvación de los perdidos.

Esto por supuesto no se aplica al negarse a ser transfundido, porque el discípulo fiel que comenzó por negarse a sí mismo no busca rédito alguno con una muerte que estaba en su potestad evitarla. Hay una motivación egoísta al agarrarse de la esperanza de un reino terrenal tras la resurrección, cuando mejor fuera aprovechar el tiempo que el Eterno acá nos da para servirle a Él y al prójimo.

No quiero ser adivino, pero intuyo que al concluir tu mensaje seguramente dijiste para tus adentros:

-Bueno, esto no hará mella en Ricardo, pero al menos servirá para dejar satisfechos a mis hermanos en el Foro, que por demasiados días mantuvieron su expectativa en cómo le contestaría a su breve ponencia.


Recibe mis amables saludos.
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Estimado hermano Melviton, te envio un cordial saludo y mis sinceros deseos de paz y bendicion a tu vida.

Me permito hacerte una pregunta, en el contexto en el que aqui se discute la aplicacion del Texto Sagrado en cuanto a "abstenerse de sangre";, segun el siguinte Texto, como lo tomais vosotros en vuestro circulo religioso?


... El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna,
y yo lo resucitaré en el día final. ... (Jn. 6:54)

La respuesta es muy obvia, pero, en los casos que aqui se han debatido, por que tendria que ser "literal" la interpretacion...?

Que interpretacion dais a ete pasaje:

TNM:<dir>Eze 39:17
"Y en cuanto a ti, oh hijo del hombre, esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová: ‘Di a los pájaros de toda suerte de ala y a todas las bestias salvajes del campo: "Júntense y vengan. Reúnanse todo en derredor a mi sacrificio, que voy a sacrificar para ustedes, un gran sacrificio en las montañas de Israel. Y ciertamente comerán carne y beberán sangre.
Eze 39:18
La carne de poderosos comerán, y la sangre de principales de la tierra beberán, carneros, corderos, y machos cabríos, toros jóvenes, los [animales] cebados de Basán todos ellos.
Eze 39:19
Y ciertamente comerán grasa a satisfacción y beberán sangre hasta emborracharse, de mi sacrificio que ciertamente sacrificaré para ustedes"’.

Cordialmente.
</dir>

<tbody>
</tbody>
 
Amado hermano Armando

Amado hermano Armando

Mi estimado y amigo Ricardo, te mando un abrazo con mucha alegria y el gozo de volver a estar con vosotros.

Habemus Armadum para ratum!!

¡Amén! Una alegría saberte reintegrado a nosotros aunque tu total recuperación todavía siga un proceso de mucha paciencia en el tiempo.

Recuerda que siempre son bienvenidos tus enjundiosos y chispeantes comentarios.

Recibe desde tu primavera boreal mi fraterno abrazo otoñal en el lejano sur.
 
Amado hermano Armando

Amado hermano Armando

Aparte de lo que Melviton se digne contestarte, quería decirte que para nosotros –los cristianos evangélicos-, esa porción de Juan 6:54 (y contexto inmediato) no es eucarística como los católicos creen, sino que significa apropiarse por fe de la redención obtenida por el sacrificio del cuerpo de nuestro Señor en la cruz y el derramamiento de su sangre; todo por nuestra redención y salvación.

En cuanto al pasaje de Ezequiel 39:17-20 mira que tiene su paralelo neotestamentario en Apocalipsis 19:17, 18:

“Y vi a un ángel que estaba en pie en el sol, y clamó a gran voz, diciendo a todas las aves que vuelan en medio del cielo: Venid, y congregaos a la gran cena de Dios, para que comáis carnes de reyes y de capitanes, y carnes de fuertes, carnes de caballos y de sus jinetes, y carnes de todos, libres y esclavos, pequeños y grandes”.

Entiendo que ambos pasajes son alegóricos sin ingesta alguna de carnes, sangres y grasas y que se refiere a un mismo acontecimiento al final de los tiempos.



Cordiales saludos
 
Re: Amado hermano Armando

Re: Amado hermano Armando

Aparte de lo que Melviton se digne contestarte, quería decirte que para nosotros –los cristianos evangélicos-, esa porción de Juan 6:54 (y contexto inmediato) no es eucarística como los católicos creen, sino que significa apropiarse por fe de la redención obtenida por el sacrificio del cuerpo de nuestro Señor en la cruz y el derramamiento de su sangre; todo por nuestra redención y salvación.

En cuanto al pasaje de Ezequiel 39:17-20 mira que tiene su paralelo neotestamentario en Apocalipsis 19:17, 18:

“Y vi a un ángel que estaba en pie en el sol, y clamó a gran voz, diciendo a todas las aves que vuelan en medio del cielo: Venid, y congregaos a la gran cena de Dios, para que comáis carnes de reyes y de capitanes, y carnes de fuertes, carnes de caballos y de sus jinetes, y carnes de todos, libres y esclavos, pequeños y grandes”.

Entiendo que ambos pasajes son alegóricos sin ingesta alguna de carnes, sangres y grasas y que se refiere a un mismo acontecimiento al final de los tiempos.



Cordiales saludos

Pero por supuesto que ese es el mensaje que queria resaltar! Yo contaba con tu asnucia!
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Estimado hermano Melviton, te envio un cordial saludo y mis sinceros deseos de paz y bendicion a tu vida.

Me permito hacerte una pregunta, en el contexto en el que aqui se discute la aplicacion del Texto Sagrado en cuanto a "abstenerse de sangre";, segun el siguinte Texto, como lo tomais vosotros en vuestro circulo religioso?

... El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna,
y yo lo resucitaré en el día final. ... (Jn. 6:54)

La respuesta es muy obvia, pero, en los casos que aqui se han debatido, por que tendria que ser "literal" la interpretacion...?

Que interpretacion dais a ete pasaje:

TNM:<dir>Eze 39:17
"Y en cuanto a ti, oh hijo del hombre, esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová: ‘Di a los pájaros de toda suerte de ala y a todas las bestias salvajes del campo: "Júntense y vengan. Reúnanse todo en derredor a mi sacrificio, que voy a sacrificar para ustedes, un gran sacrificio en las montañas de Israel. Y ciertamente comerán carne y beberán sangre.
Eze 39:18
La carne de poderosos comerán, y la sangre de principales de la tierra beberán, carneros, corderos, y machos cabríos, toros jóvenes, los [animales] cebados de Basán todos ellos.
Eze 39:19
Y ciertamente comerán grasa a satisfacción y beberán sangre hasta emborracharse, de mi sacrificio que ciertamente sacrificaré para ustedes"’.

Cordialmente.
</dir>

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Saludos mi estimado Armando. Celebro contigo tu total recuperación de tu accidente.

Que Jehová guíe tus pasos.

En primer lugar respeto tu forma de exponer lo que me consultas y aunque yo sé que tú ya tienes tu propia orientación sobre el texto que citas, con todo gusto y con el mayor de los respetos, te informaré acerca de lo que creemos, enseña la Biblia.

En primer lugar, me da la impresión que tú crees que nosotros interpretamos las palabras del Señor en Juan 6:54 de manera literal y creo que estás en un error. Nunca se nos ha enseñado que dicha alegoría tenga algo que ver con la literalidad de interpretar que el cristiano tiene que "beber y comer" la sangre y carne del Señor Jesús para heredar la vida eterna. En todo caso, "muy pocos" hubieran tenido esa oportunidad, de haberse entendido literal, de permitirse aprovecharse de lo ofrecido por Jesús.

Dicha afirmación obedece muy bien a la "forma" en que debemos "aceptar" esa "carne y sangre" en nuestras vidas llevándonos al reconocimiento total del sacrificio de nuestro Señor cuando dio su cuerpo perfecto y derramó su sangre (aquí sí fue literal) como sacrificio por los pecados de la humanidad.

La analogía va encaminada a enseñarnos, decididamente, que si aceptamos el valor de dicho sacrificio en lo que respecta al cuerpo del Señor ofrecido y su sangre derramada como parte del "ritual" llevado a cabo como la "realidad" de las otroras sombras de la Ley dada a Israel, entonces habremos comprendido a cabalidad la magnitud de lo que Jesucristo estuvo presto a entregar como parte del "trato" al dar su alma en rescate "en cambio por muchos": su "cuerpo", su "sangre" = vida.

Espero haber despejado tus dudas.

Atentos y respetuosos saludos.
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Saludos mi estimado Armando. Celebro contigo tu total recuperación de tu accidente.

Que Jehová guíe tus pasos.

En primer lugar respeto tu forma de exponer lo que me consultas y aunque yo sé que tú ya tienes tu propia orientación sobre el texto que citas, con todo gusto y con el mayor de los respetos, te informaré acerca de lo que creemos, enseña la Biblia.

En primer lugar, me da la impresión que tú crees que nosotros interpretamos las palabras del Señor en Juan 6:54 de manera literal y creo que estás en un error. Nunca se nos ha enseñado que dicha alegoría tenga algo que ver con la literalidad de interpretar que el cristiano tiene que "beber y comer" la sangre y carne del Señor Jesús para heredar la vida eterna. En todo caso, "muy pocos" hubieran tenido esa oportunidad, de haberse entendido literal, de permitirse aprovecharse de lo ofrecido por Jesús.

Dicha afirmación obedece muy bien a la "forma" en que debemos "aceptar" esa "carne y sangre" en nuestras vidas llevándonos al reconocimiento total del sacrificio de nuestro Señor cuando dio su cuerpo perfecto y derramó su sangre (aquí sí fue literal) como sacrificio por los pecados de la humanidad.





Hola hermano: En ningun momento hubiera pretendido creer la ingenuidad de que vosotros tomareis de manera literal el Texto sugerido, sino que mi ponencia aludia precisamente a la alegoria, manera en la que (a mi modesto modo de ver Dios ha hablado en la gran mayoria de las veces a travez de toda La Escritura) sugeria yo que se debiera mirar el "abstenerse de sangre" tratado aqui y de referencia a lo dicho por los Apostoles reunidos en Hch. cap. 15. O sea, si en estos Textos que cito, la alegoria esta presente, cuanto a la ingesta de sangre se refiere, por que no, tambien mirarlo de esta manera (alegoricamente) en cuanto a "abstenerse" de?

En el cap. 7 de Lev. Dios impone una serie de "abstenciones" a Su pueblo, destacando entre ellas el consumo de la grasa animal de la sangre de animales terrestres y av
es. En la "nueva dispensacion de las cosas", el Nuevo Pacto de Dios, a travez de sus Apostoles dice: "
que os abstengáis[SUP]de lo sacrificado a ídolos, de sangre, de ahogado y de fornicación; si os guardáis de estas cosas, bien haréis"

Por que tener que tomar esta "abstencion" en sentido literal?

Veamos algunos ejemplos en los que tambien Dios se refiere a la sangre en sentido alegorico:

[/SUP]Isa 59:3


Porque vuestras manos están sucias de sangre[SUP][c][/SUP]
y vuestros dedos de iniquidad;
vuestros labios pronuncian mentira
y habla maldad vuestra lengua.

Aqui podemos apreciar que las manos "sucias de sangre" tan solo aluden al pecado que hay en el hombre y no precisamente en sus manos ni que sea sangre lo que le mancha estas, sino que la MANCHA es el pecado.

En este otro caso son los pies...

<dir></dir><dir>Pro 1:16
porque sus pies corren hacia el mal,
se apresuran a derramar sangre.
[SUP][ñ][/SUP]

los pies no se apresuran a derramar sangre! Es el corazon del hombre, su alma, la que se apresura a hacer el mal, a pecar contra Jehova!

 
</dir>Es en este sentido en el que debemos tener en cuenta muchas veces las Escrituras, y no tomarlo todo literalmente porque sabemos que cuando los Apostoles ordenaron "no inquietar a los gentiles con estas cosas", tambien objetaron: "Porque ni nosotros ni nuestros padres pudieron soportar ese yugo"!!! Asi que, menester es que hagamos tal y como nos ha sido ordenado!


La analogía va encaminada a enseñarnos, decididamente, que si aceptamos el valor de dicho sacrificio en lo que respecta al cuerpo del Señor ofrecido y su sangre derramada como parte del "ritual" llevado a cabo como la "realidad" de las otroras sombras de la Ley dada a Israel, entonces habremos comprendido a cabalidad la magnitud de lo que Jesucristo estuvo presto a entregar como parte del "trato" al dar su alma en rescate "en cambio por muchos": su "cuerpo", su "sangre" = vida.

Espero haber despejado tus dudas.
Claro, asi como observais esta analogia, tendrias que aplicaros mas para comprenderlo de tal manera en los otros casos, o al menos en el que aqui se va llevando, solo una observacion.


Atentos y respetuosos saludos.

Lo propio, un cordial saludo.
 
Apreciado Armando

Apreciado Armando

No sé cómo te responderá Melviton aunque pienso que puedo intuirlo.

Es muy cierto que la Biblia está llena de alegorías, y de advertirlas e interpretarlas bien el estudio se pone cada vez más interesante.

En el caso específico de la carta que se envía a las iglesias desde aquella asamblea en Jerusalem, yo percibo que todo es literal y nada simbólico o figurado.

No te asustes si Melviton con mucho más detalle se explaya en esta misma línea.

¡Que no panda el cúnico!

Un abrazo.
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?


Hola hermano: En ningun momento hubiera pretendido creer la ingenuidad de que vosotros tomareis de manera literal el Texto sugerido, sino que mi ponencia aludia precisamente a la alegoria, manera en la que (a mi modesto modo de ver Dios ha hablado en la gran mayoria de las veces a travez de toda La Escritura) sugeria yo que se debiera mirar el "abstenerse de sangre" tratado aqui y de referencia a lo dicho por los Apostoles reunidos en Hch. cap. 15. O sea, si en estos Textos que cito, la alegoria esta presente, cuanto a la ingesta de sangre se refiere, por que no, tambien mirarlo de esta manera (alegoricamente) en cuanto a "abstenerse" de?

En el cap. 7 de Lev. Dios impone una serie de "abstenciones" a Su pueblo, destacando entre ellas el consumo de la grasa animal de la sangre de animales terrestres y av
es. En la "nueva dispensacion de las cosas", el Nuevo Pacto de Dios, a travez de sus Apostoles dice: "
[/SIZE]que os abstengáis[SUP]de lo sacrificado a ídolos, de sangre, de ahogado y de fornicación; si os guardáis de estas cosas, bien haréis"

Por que tener que tomar esta "abstencion" en sentido literal?

Veamos algunos ejemplos en los que tambien Dios se refiere a la sangre en sentido alegorico:

[/SUP]Isa 59:3


Porque vuestras manos están sucias de sangre[SUP][c][/SUP]
y vuestros dedos de iniquidad;
vuestros labios pronuncian mentira
y habla maldad vuestra lengua.

Aqui podemos apreciar que las manos "sucias de sangre" tan solo aluden al pecado que hay en el hombre y no precisamente en sus manos ni que sea sangre lo que le mancha estas, sino que la MANCHA es el pecado.

En este otro caso son los pies...

<dir></dir><dir>Pro 1:16
porque sus pies corren hacia el mal,
se apresuran a derramar sangre.
[SUP][ñ][/SUP]

los pies no se apresuran a derramar sangre! Es el corazon del hombre, su alma, la que se apresura a hacer el mal, a pecar contra Jehova!

 
</dir>Es en este sentido en el que debemos tener en cuenta muchas veces las Escrituras, y no tomarlo todo literalmente porque sabemos que cuando los Apostoles ordenaron "no inquietar a los gentiles con estas cosas", tambien objetaron: "Porque ni nosotros ni nuestros padres pudieron soportar ese yugo"!!! Asi que, menester es que hagamos tal y como nos ha sido ordenado!


Claro, asi como observais esta analogia, tendrias que aplicaros mas para comprenderlo de tal manera en los otros casos, o al menos en el que aqui se va llevando, solo una observacion.



Lo propio, un cordial saludo.

En primer lugar congenio contigo en que en repetidas ocasiones la Biblia emplea metáforas o analogías propias dentro de un contexto para señalar, ya sea una adecuada comparación entre dos cosas reales o bien, una simple relación entre dos conceptos diferentes, uno puede ser literal y el otro simbólico. Ejemplo: El texto que citas de Isaías 59:3. Allí nos habla de “manos sucias de sangre”, “dedos de iniquidad” en donde evidentemente se emplean metáforas o analogías propias para transmitir una enseñanza. Ahora bien, eso es un ejemplo. Existen infinidad de otros ejemplos que son literales y que su interpretación, de acuerdo a su contexto, exigen una literalidad en donde se evidencia su apropiada aplicación. Pero en el caso específico del texto de marras de Hechos 15:28,29 hay que tener mucho cuidado. El mismo contexto y la lista de otros conceptos que allí se enumeran, es determinante para establecer la literalidad de lo que se pretende transmitir. Analicémoslo paso a paso:

1. Porque al espíritu santo y a nosotros mismos nos ha parecido bien no añadirles ninguna otra carga”. (Interviene el espíritu santo, la opinión de los apóstoles del Señor y el hecho de no “añadirles otra carga” aparte de las que se indican, claro). Muchos elementos reales para una simple analogía.

2. “Salvo estas cosas necesarias: que sigan absteniéndose de cosas sacrificadas a ídolos, y de sangre, y de cosas estranguladas, y de fornicación”. (tres claras indicaciones para “abstenerse”: “cosas sacrificadas”, “sangre”, “cosas estranguladas” y “fornicación”). De nuevo, demasiados elementos reales prohibidos y que para nada son indicaciones “simbólicas” porque, de lo contrario, tendríamos que aceptar que el abstenerse también de fornicación es una simple analogía pero… ¿De qué y para qué? ¡No tiene sentido!

3. Si se guardan cuidadosamente de estas cosas, prosperarán. ¡Buena salud a ustedes!”. ¿Nos cuidaremos de simples analogías? No lo creo, al menos en este caso. Respondiendo a tu pregunta, no se debe interpretar semejante consejo como algo simplemente alegórico. No es correcto. La fornicación existe y es literal, la sangre existe y es literal, lo estrangulado existe y es literal y los ídolos existen y son “literales”, lo que se sacrifica a ellos sí es literal y también existen muchos “ídolos” (sobre todo los de este mundo) también literales. ¡Y la “buena salud” también es literal sea espiritual o física!

Ahora bien, lo que señalas del capítulo 7 de Levítico todo fue literal, no analógico. Recuerda que Cristo fue el “fin de la Ley”. Sin embargo, los principios justos de la Ley no se abolieron; por el contrario, se les dio su mejor aplicación en Cristo y el “espíritu” de dicha Ley es lo que hoy honramos y tratamos de aplicarlo en todo momento en unión con Jesucristo.

El que no se cumpliera con toda la Ley dada a Israel no significa que ahora, al estar desligados de sus estatutos, en su mayoría rituales, tengamos libertad para hacer lo que nos plazca. Esto no es razonable. Por ejemplo, ninguno de los 10 mandamientos dados a Moisés cuando subió al monte Horeb quedaron abolidos. Lo que se abolió fue el “grueso de los más de 600 mandamientos de corte ritual y de procedimientos propios para una aplicación detallada de todo lo que en Cristo quedó resumido. De allí que se indicó que el que “ama” cumple con toda la Ley.


De manera que lo que aquí se está discutiendo, como dices, no es el que exista polémica de si es “analógico” o “literal” el abstenerse de sangre o no. De hecho es literal. Lo que está en el “tapete” es si el “abstenerse” (literalmente) de la sangre abarca a las transfusiones. En realidad, hasta ahora escucho (de tu parte) la posibilidad de que Hechos 15:28,29 pueda en alguna medida, interpretarse de manera analógica.

Además, y a manera de ejemplo adicional, la multiplicación de los pescados y los panes en la montaña por parte de Jesús fue literal, no fue una alegoría o metáfora. ¿Por qué? Pues porque el contexto es determinante y la retórica empleada nos guía para comprender la finalidad de lo que leemos. Por otra parte, cuando Jesús dijo claramente que él era “el pan vivo que había bajado del Cielo”, aquí sí se estaba empleando una retórica propia cuya analogía empleada para nada podríamos deducir que Jesucristo era, literalmente, un “bollo de pan” que había bajado del Cielo. El pan es “alimento” y Cristo es ese alimento que, como el pan físico, lo necesitamos mucho más para vivir esta vida y en la verdadera (la que realmente es “vida”).

Por lo tanto, congenio contigo en que hay que “discernir” apropiadamente cuándo se debe interpretar la analogía y cuándo su deducción literal y, en cada caso, habría que emplear el verdadero “discernimiento” que, muchas veces, explican de manera maravillosa, los alcances de los mandatos expresos de Jehová.

Mis respetos y consideración como siempre.
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Respuesta a Mensaje # 1034:
1 - ¿Por qué dices que yo digo que me has faltado el respeto? Nunca escribí yo tal cosa. El único TJ que lo hizo ha dejado de participar.

Tus palabras me hicieron entender otra cosa “¿Soy yo el de la verborrea? ¿No te estarás confundiendo? Los TJ no suelen faltarme el respeto salvo uno con quien suspendí mi diálogo”
Al hablar en plural, pensé que me incluías. si no fue el caso te pido perdón


2 – Ya me tengo bien leídos los versículos que citas, pero las perlas que enhebras en el collar están caprichosamente dispuestas y eso no luce bien.

(Revelación 6:11) (Romanos 11:25)
En los dos dice que hay que completar un numero,sin embargo todas las personas tienen la oportunidad de servir a Dios ¿no crees? Entonces ¿el porqué de ese número?


3 – Yo sí creo que el Eterno ha ya escogido desde antes de la fundación del mundo a los que se han de salvar, por lo cual nacemos predestinados para salvación. Si tú crees otra cosa, lo lamento pero no es mi culpa.

Que malvado pone tú a Dios entonces ¿no? Entonces ¿Piensas que Dios creo a Adán y Eva para que pecaran? ¿Piensas que un bebé muere al nacer porque Jehová ya tenía destinado que iba a morir?
¿Piensas que una persona tiene una enfermedad incurable porque a Dios se le ha antojado? Así que hagamos lo que hagamos en nuestra vida, ya Jehová tiene a sus escogidos. ¿Dónde queda el libre albedrío si ya estamos predestinados? Imagino que me citaras de la Biblia para explicarme eso


4 – No es que en cada iglesia pensemos distinto; pero teniendo una misma mente en las verdades esenciales de nuestra fe, hay cosas que vamos aprendiendo y corrigiendo de día en día y eso hace que mantengamos una tolerable diferencia de opiniones en aspectos no fundamentales.

¿Cuáles son para ti las verdades esenciales y los aspectos no fundamentales? ¿Es normal que un pastor evangélico te diga algo contrario a lo que diga otro pastor evangélico de otra iglesia que está a un kilómetro?

La uniformidad de pensamiento entre los TJ no lo veo como algo deseable sino detestable, pues eso va acorde con la doctrina de los nicolaítas.

¿Qué sabes tú de la secta de Nicolás? Que yo sepa solo se menciona en Apocalipsis, pero pocos datos hay acerca de esa secta. Ni siquiera en apocalipsis se dice que era lo que pensaban.
Por otro lado, me estás diciendo que detesta a los apóstoles ¿no?
(Filipenses 2:2) hagan pleno mi gozo por ser ustedes de la misma mente y tener el mismo amor, estando unidos en alma, teniendo presente el mismo pensamiento,
Los discípulos de Jesús tenían el mismo pensamiento y para Pablo eso era un gozo. Lástima que para ti no lo sea.
Yo creo que sabes que todos tenemos que ser imitadores de Cristo y eso implica su misma forma de pensar
(Romanos 15:5) Ahora, que el Dios que suministra aguante y consuelo les conceda tener entre sí la misma actitud mental que tuvo Cristo Jesús,
¿Cómo te explica tú que haya una iglesia en la que no hubiese uniformidad de pensamientos? ¿Cómo tantos millones de personas pueden imitar a Jesús si no piensan como él?
Así es normal que en cada iglesia evangélica piensen cada uno como le da la gana y no a la manera de Cristo


5 - Cualquiera que haya debatido el tema de los diezmos sabe que he sido el más tenaz opositor de los mismos. Un pastor, también contrario, me pidió permiso para usar mis comentarios para editar un libro. ¿Por qué me sigues achacando cosas que no van conmigo?

Entonces explícame ¿por qué siendo de la misma iglesia, los de mi ciudad si pagan el diezmo? ¿Se quieren hacer ricos los pastores de aquí?. Por si estaba equivocado he mirado en el Google y efectivamente aunque hay iglesias evangélicas que no cobran el diezmo (puede que la tuya) si hay otras que lo hacen.
¿Eso entra dentro de las verdades esenciales y los aspectos no fundamentales que me citabas más arriba?


6 – Pablo sí comería la carne de un animal ahogado o no desangrado, por lo menos si lo ignorase; comprando en la carnicería sin preguntar nada.

¿Y de verdad crees que Pablo haría eso? Una cosa es que lo engañaran y otra cosa que no preguntara. Primero estaba la conciencia de Pablo de no querer hacer nada que perjudicara su relación con Jehova y después cuando su conciencia le permitiese hacer algo,entonces miraba si ese algo podría perjudicar a otros

7 – No creo que sea una rareza de mi país dejar el vocablo “desafuero” en el uso vulgar para cuando se le quitan los fueros a un gobernante. Pero si otro hispanoamericano quisiera ilustrarnos con otros usos que se le da en su país, le agradeceremos que nos ilustre. Además, nuestras biblias castellanas están traducidas del hebreo y del griego, no de inglés.

Que lo utilicéis para una forma de hablar no quiere decir que se pueda utilizar para otra incluso en los países latinos. Mira este ejemplo de esta página chilena y léete los reglones dos y tres y veras cual como dice la página es su definición original
http://etimologias.dechile.net/?desaforado
Otra cosa. La palabra desaforado existiría de otra forma de decirlo en hebreo y griego pero significaría lo mismo. Si tú leyeses una traducción hebrea al español tal como se dijere no te enteraría de nada ¿o sí?
Sin ir más lejos, ¿has sido capaz de leer y entender una Biblia en español de la época medieval? Hasta escrita en español es difícil de entender. Las Biblias por lo menos las nuestras están traducidas para que todo el mundo entienda lo que lee y si alguna palabra como desaforado no se entiende, hay diccionarios.
A veces la forma de hablar que tenéis por esos lares son totalmente distintos a los que tenemos por aquí, hablando el mismo idioma. Te explico. Hace un tiempo tuve invitado a unos compañeros mexicanos y nos dimos cuenta que al hablar había que tener cuidado con según que palabras que para nosotros eran normales. Por ejemplo, no se podía mencionar las palabras culo y coger porque en México por lo visto son palabrotas, sin embargo en España son palabras normales y corrientes


8 – Los israelitas modernos hacen igual que los antiguos respecto a las carnes, pero yo soy gentil.

Pero debes seguir el mandamiento no transitorio ni temporal de abstenerte de sangre. Recuerda, la carta que escribieron los ancianos y apóstoles de Jerusalén aun está circulando por las congregaciones o iglesias.

Originalmente enviado por Norberto7
Yo estoy persuadido que todo lo referente a la ley ritual: circuncisión, sábados, ahogado, sangre y grasa; no son necesarias guardar o abstenerse; por tener todas ya hace 1942 años el cumplimiento de aquello a que señalaban: nuestro Ungido Salvador y sus logros.
Pero lo que contamina al hombre sigue plenamente vigente, y practicado desde mi punto de vista en este foro en casi todos los temas que se abren. De hecho es muy difícil para mí no escribir de un modo contencioso y separatista. Por eso he propuesto si hay interés, claro, abrir un epígrafe, no para recalcar nuestros puntos de vista “modernos”, sino considerar la percepción de los antiguos sabios cristianos que trabajaron profundamente en estos asuntos de la ascesis espiritual.

Esto responde juaniyo:

"Jesucristo murió hace 1980 años, es más antiguo que lo del capítulo de Hechos. Por esa regla de tres ya no tenemos que tener fe en ese sacrificio porque ya está muy anticuado. Así que comamos y bebamos que mañana hay que morir"

¿Cómo dialogar en este plano?, en el cual me responden sin sentido a lo que resalté, supongo; cosa que además no era lo principal del párrafo recortado.

Siento pena por que los hermanos se enfrasquen en pura discusión entre si, cuando deberíamos ver la manera de unirnos realmente, en un plano real y no meramente mental y conceptual.
Realmente no somos adversarios, somos hermanos; pero si seguimos en este plano, terminaremos siendo realmente adversarios, si es que en parte ya no lo somos; pues Dios concede nuestros deseos hasta que aprendamos a desear.........

Si me vais a decir que una cosa es transitoria como lo que dice en Hechos pero no me ponéis base bíblica alguna, solo me lo puedo tomar como fantasía. Porque para mí es fantasía que me digan que eso tiene que ver con si se casan parientes consanguíneos, etc,etc. si no me ponen un texto que me demuestre que armoniza con lo que me queréis decir. Por eso mismo yo pudiera decir que el sacrificio de Jesús solo valía para el primer siglo y no para nosotros, Total tal como dice Ricardo mas arriba ya están escogidos por Dios los que se van a salvar. Entonces ¿de qué provecho es ese sacrificio? Por decir podemos decir todas las tonterías del mundo, lo que vale es la Palabra de Dios y con ella hay que demostrar lo que se dice

Por otro lado te encargo la respuesta a ésta pregunta: ¿Porqué los miembros de tu institución religiosa creen que deben obedecer los mandamientos encargados por D'os de manera exclusiva a los hijos de Israel, quienes somos además Su heredad, Sus testigos.?

Primero me gustaría hacerte una pregunta. Si sois la heredad de Jehová ¿Por qué no mencionáis su nombre?
Éxo. 3:15: “Dios le dijo [...] a Moisés: ‘Esto es lo que habrás de decir a los hijos de Israel: “Jehová el Dios de sus antepasados [...] me ha enviado a ustedes.” Este es mi nombre hasta tiempo indefinido, y éste es el memorial de mí a generación tras generación.’”
¿Que nombre le dijo que tendria que decirle? ¿Tu crees logico que por un supersticion judia no mencioneis su fantastico nombre,algo que el quiere que se haga?
Isa. 12:4: “¡Den gracias a Jehová! Invoquen su nombre. Den a conocer entre los pueblos sus tratos. Hagan mención de que su nombre está puesto en alto.”
Eze. 38:17, 23: “Esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová: ‘[...] Y ciertamente me engrandeceré y me santificaré y me daré a conocer delante de los ojos de muchas naciones; y tendrán que saber que yo soy Jehová.’”
Mal. 3:16: “Los que estaban en temor de Jehová hablaron unos con otros, cada uno con su compañero, y Jehová siguió prestando atención y escuchando. Y un libro de recuerdo empezó a ser escrito delante de él para los que estaban en temor de Jehová y para los que pensaban en su nombre.”
El quiere que se conozca pero ustedes estáis invalidando ese nombre. Jesús si lo dio a conocer
Segundo, ¿dices que sois la heredad?
(Mateo 21:43) Por eso les digo: El reino de Dios les será quitado a ustedes y será dado a una nación que produzca sus frutos.
En conformidad con esas palabras Jehova dejo de tener a Israel como heredad porque este rompió el pacto que tenían con El.
(Zacarías 11:7-14) Y procedí a pastorear al rebaño [destinado] a la matanza, a favor de ustedes, oh afligidos del rebaño. Así que tomé para mí dos cayados. Al uno llamé Agradabilidad, y al otro llamé Unión, y me puse a pastorear el rebaño. Y finalmente raí a tres pastores en un solo mes lunar, pues mi alma gradualmente se impacientó con ellos, y también su propia alma sintió asco para conmigo.Al fin dije: “No seguiré pastoreándolas. La que está muriendo, que muera. Y la que está siendo raída, que sea raída. Y en cuanto a las que queden, que devoren, cada una la carne de su compañera”. De modo que tomé mi cayado Agradabilidad y lo corté en pedazos, para romper mi pacto que yo había celebrado con todos los pueblos. Y vino a quedar roto en aquel día, y los afligidos del rebaño que estaban vigilándome llegaron a saber así que era la palabra de Jehová. Entonces les dije: “Si es bueno a sus ojos, den[me] mi salario, pero si no, absténganse”. Y procedieron a pagar mi salario, treinta piezas de plata. Ante aquello, Jehová me dijo: “Tíralo al tesoro... el valor majestuoso con el cual he sido evaluado desde su punto de vista”. De consiguiente, tomé las treinta piezas de plata y tiré aquello en el tesoro en la casa de Jehová. Entonces corté en pedazos mi segundo cayado, el Unión, para quebrar la hermandad entre Judá e Israel.


¿No es esto más bíblico y menos rebuscado que estirar el “no comer sangre” al “no introducirla en el cuerpo”?

Pues no, si volvemos a lo que dice de evitar la sangre. Para ti eso era transitorio, palabra que no viene para nada en el contexto. Para ti la idolatría tenía que ver con lo incestuoso, palabra que no viene para nada en el contexto. Para ti Pablo si podía comer sangre si no preguntaba, algo inconcebible para un apóstol, encima judío y versado en la ley farisaica.
Si a ti te dicen, oye evita ponerte delante de ese toro que es muy bravo. Hoy no te pones pero como ese mandato para ti es transitorio, mañana vas y te pones delante.
Lo mismo es. La sangre no la evitas porque es transitoria, pero la fornicación sí, porque tenía que ver con no sé qué de los parientes de los gentiles que se casaban entre ellos
¿Y dices que lo nuestro es rebuscado?
 
Re: Apreciado Armando

Re: Apreciado Armando

No sé cómo te responderá Melviton aunque pienso que puedo intuirlo.

Es muy cierto que la Biblia está llena de alegorías, y de advertirlas e interpretarlas bien el estudio se pone cada vez más interesante.

En el caso específico de la carta que se envía a las iglesias desde aquella asamblea en Jerusalem, yo percibo que todo es literal y nada simbólico o figurado.

No te asustes si Melviton con mucho más detalle se explaya en esta misma línea.

¡Que no panda el cúnico!

Un abrazo.

Es que no me tienen pasicia! Si amigo, ya sabia yo que no piensas que en el caso especifico de Hch. 15 "la cosa" sea alegorica porque ya habia hecho yo esta observacion en alguna ocacion y tu me dijiste lo mismo. Como vez no hemos cambiado de parecer y no pienso convencerte, pero quien quita que logre convencer a nuestro antagonista? jajaja, es solo broma, no estoy yo aqui para convencer ni tratarlo, pues convencido estoy que es el Espiritu quien se encarga de tal tarea. Hoy estare solamente entre vosotros como espectador, pase la noche entera vomitando y sentado en el toilet, me siento tan mal que no tengo animo de nada. Tan pronto mejore estare aportando un poco mas acerca de mi perspectiva sobre Hch. 15 y tambien contestare a Melviton y a un tal "Doctor" que no me tiene pasiencia jejeje.

Un buen abrazo.
 
Re: Apreciado Armando

Re: Apreciado Armando

Es que no me tienen pasicia! Si amigo, ya sabia yo que no piensas que en el caso especifico de Hch. 15 "la cosa" sea alegorica porque ya habia hecho yo esta observacion en alguna ocacion y tu me dijiste lo mismo. Como vez no hemos cambiado de parecer y no pienso convencerte, pero quien quita que logre convencer a nuestro antagonista? jajaja, es solo broma, no estoy yo aqui para convencer ni tratarlo, pues convencido estoy que es el Espiritu quien se encarga de tal tarea. Hoy estare solamente entre vosotros como espectador, pase la noche entera vomitando y sentado en el toilet, me siento tan mal que no tengo animo de nada. Tan pronto mejore estare aportando un poco mas acerca de mi perspectiva sobre Hch. 15 y tambien contestare a Melviton y a un tal "Doctor" que no me tiene pasiencia jejeje.

Un buen abrazo.

Un saludo desde Costa Rica Armando.

En verdad lamento lo de tu enfermedad. No te preocupes y tómate tu tiempo. Primero recupérate bien mi estimado y luego seguimos intercambiando nuestros criterios. Respeto tu decencia y consideraciones.

Un fuerte abrazo.

¡Síganme los buenos!!!!!
 
Re: Apreciado Melviton

Re: Apreciado Melviton

Respuesta a Mensaje # 1060:

Aunque la Biblia tampoco habla de respetar la vida o la sangre -a nadie se le había ocurrido irrespetarlas-, es un concepto que la Wachtower incorporó para el uso vernáculo en la organización y que suscita asperezas con los que no somos TJ haciéndonos sentir irrespetuosos.

El escueto “no matarás” del Decálogo junto a lo estipulado a Noé y los suyos en cuanto a los animales de los que podrían alimentarse (Gn 9:3,4) parece tan claro como suficiente.

Con la única excepción de un solo episodio (1Sa 14:33) parece que Israel nunca tuvo problema con la observación a lo dispuesto en Lv 17:14, y si algún israelita fue eliminado del pueblo por esta transgresión, no quedó registrado, lo que lo hace improbable.

En realidad, nunca podía ser este un mandamiento difícil de guardar. Sí, comparativamente, lo era el de guardar el sábado, pues al menos consta una lapidación (Nm 15:32), y frecuentemente los profetas denunciaron al pueblo de Israel por profanarlo. Digo esto, nada más, porque vuestro énfasis se asemeja a como los adventistas maximizaron el mandamiento del sábado por sobre los otros nueve del decálogo. Extraña, igualmente, que la grasa asociada en la prohibición de la Ley a la sangre (Lv 3:17) no recibiera igual consideración.

No veo yo en las Escrituras lo que tú dices de la enseñanza de los textos que establecen de manera clara y contundente el alejar la sangre, previniendo así que se pudiera pecar al comerla. Más bien veo que lo normal era que el hombre conviviera con la sangre propia que bullía por sus venas, y la de su prójimo que debía evitar derramarla. En cuanto a la de los animales, tanto la derramada en sacrificio en el altar, como la de los animales limpios muertos para alimentarse -debidamente cubierta por el polvo de la tierra-, no conlleva ninguna idea de “alejamiento”. No tenía el israelita cómo alejarse de ninguna sangre, ya que por el contrario, sea por los sacrificios en el tabernáculo o el Templo o la faena en el campo de aquellos que servían a su alimentación, había un necesario acercamiento a la sangre, aunque no fuera hasta su boca. Dices:

“Aquí se ha demostrado que no ha sido de ninguna manera “fantasioso” el establecer que la acción de “comer” equivale a “meter en el cuerpo” algo que se ha prohibido de manera tan clara y repetitiva en las Escrituras”.

Respondo: Reconozco que se ha “mostrado” pero no “demostrado”, pues si así hubiera sido yo mismo quedara convencido. Recuerda que soy enteramente libre para cambiar mi opinión -caso que algo efectivamente se me demuestre-, sin aparejarme molestas consecuencias; privilegio del que disfrutan unos cuantos foristas aunque no todos.

El portillo abierto que el Eterno dejó al promulgar la Ley a Israel, es que Él usó el verbo “comer” (bien entendido en el hebreo, griego, latín, castellano y guaraní) y no la versión de Alfageme: “No introducirás sangre en el cuerpo” que también hubiera sido igualmente bien entendida en aquellos idiomas y todos los demás.

No es criterio personal mío sino universal el distinguir que si bien todo lo que se come se introduce al cuerpo, no todo lo que se introduce al cuerpo se come.

Reza el dicho: “El que se fue a Sevilla perdió su silla”, pero no quien pierde su silla necesariamente ha ido a Sevilla.

Te pones de filólogo con la semántica del “abstenerse” como si de tanto ordeñarlo pudieras sacar otra cosa que no sea la leche que la ubre da. Pero no somos terneros mamones. Ciertamente que el “comer” de Lv 17:14 es específico por lo que sigue (sangre) y el “abstenerse” (apartarse, guardarse, privarse) de Hch 15:20, 29 ya no lo es tanto, lo que le da carácter de recomendación y no de mandato absoluto y autoritario como los del Levítico. De cualquier modo, ese “abstenerse” en la decisión de la asamblea de la iglesia en Jerusalem estaba asociado a la ley de Lv 17:14, pues el término no es plástico como para hacerlo extensible a cuanto se te ocurra, como cuando dices:

“En realidad, el significado de “abstenerse” se asemeja más a “no introducir” sangre al cuerpo”.

No le veo semejanza alguna. Te lo han hecho creer así y de igual manera lo trasmites ¡pero tal fantasía no va conmigo!

Seguidamente te refieres a “el “espíritu” detrás de aquella prohibición hacia lo sagrado de la vida”. Eso me hace acordar a que cuando los parlamentarios de mi país arguyen en Cámara sobre “el espíritu subyacente de la Ley que plasmó el constituyente o legislador”, siempre es para achicar o estirar su alcance. Así, al pobre jurisconsulto que hace un siglo redactó un artículo de la ley, se le atribuyen cosas que lo espantarían de tener que escucharlas.

La amplitud del “abstenerse” a la que te refieres no aplica a multitud de cosas ni a una extensión de lo ya sabido sino a una más suave modalidad; no como lo que se impone con todo el rigor y severidad de la antigua Ley, sino a lo que se recomienda como bueno de hacerlo así.

O sea, el “abstenerse de sangre” de Hch 15:20, 29 no es ampliado a más formas del comer sangre que no fuese por la boca ¡porque ni modo que lo fuera por otro lado!

La única diferencia está en que ese “abstenerse de sangre” no suena tan rotundo como el “no comerás” de la Ley.

No estaba en aquellos cristianos el mandarse la parte como que ellos pudieran ser todavía más escrupulosos que los escribas y fariseos.

El inquirir el motivo divino tras la promulgación de un decreto suyo va en contra de aquellas cosas secretas que al Eterno pertenecen, y que al no haber sido reveladas (Dt 29:29), exponen al pesquisante a cualquier cosa.

Fíjate cuán osado sería preguntarse el por qué Dios iluminó de tal forma a Pasteur en el siglo XIX para que recién descubriera la vacuna contra la rabia, y poco después a otros biólogos con las vacunas contra la viruela y difteria que ocasionaban millones de muertes al año.

Nadie es tan ingrato para reprocharle a Dios por qué esperó hasta ahora lo que habría evitado antaño tantas muertes con los demás logros contemporáneos de la medicina.

Tu gran paradoja sigue sin respuesta simplemente porque no existe tal paradoja más que en ti mismo. Dios legisló sin consultar con nadie.

Si al mejor estilo aristotélico compones un diseño escolástico que te conduce a las conclusiones deseadas, podrá resultar muy impresionante y será todo un éxito si al menos alcanza a convencerte a ti mismo. Pero mi mente, sin funcionar mejor, no funciona así.

Yo jamás argüí con que Jesús en Jn 15:13 se estuviera refiriendo a que se podía comer sangre. Podré soltar un disparate pero no de tamaña envergadura.

Así que no está bien que ante la ausencia de dislates míos me los inventes para luego refutarlos fácilmente.

Yo sólo digo lo que escribo y no es justo que lo disfraces hasta pintar mi punto de vista como si “Jesucristo tenía en mente justificando la ingesta de sangre “salvavidas” al cuerpo del hombre”.

Si te pones tú mismo a deducir o a interpretar por mí, hasta dar la que llamas mi propia versión de que el Señor estaba entonces pensando en transfusiones de sangre, ¡qué fácil te resulta considerar insensata y patética esa deducción! Lo gracioso es que esa ESPECULACIÓN nunca fue mía. Ni lleva mi marca.

Es cierto que ustedes tienen siempre en su repertorio Mr 8:34,35:

“Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. Todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará”.

Como frecuentemente les acontece, erran en la aplicación: el discípulo fiel de Jesucristo comienza por negarse a sí mismo, por lo que su vida no cuenta si es menester ofrendarla por su causa y la del evangelio. Tanto los mártires como los misioneros en regiones inhóspitas y entre pueblos salvajes, tuvieron por honor y alto galardón dar su vida por el Señor y la salvación de los perdidos.

Esto por supuesto no se aplica al negarse a ser transfundido, porque el discípulo fiel que comenzó por negarse a sí mismo no busca rédito alguno con una muerte que estaba en su potestad evitarla. Hay una motivación egoísta al agarrarse de la esperanza de un reino terrenal tras la resurrección, cuando mejor fuera aprovechar el tiempo que el Eterno acá nos da para servirle a Él y al prójimo.

No quiero ser adivino, pero intuyo que al concluir tu mensaje seguramente dijiste para tus adentros:

-Bueno, esto no hará mella en Ricardo, pero al menos servirá para dejar satisfechos a mis hermanos en el Foro, que por demasiados días mantuvieron su expectativa en cómo le contestaría a su breve ponencia.


Recibe mis amables saludos.


Pero de qué cosas más extrañas todavía te complace discutir cuando la concepción de lo que insistes hablar ni siquiera se acerca a lo que tú crees es la incorporación del uso “vernáculo” en el habla periódica del peculiar “argot” de la WT que, según tú, “suscita asperezas” con las que al parecer tienes la costumbre contradecir y tergiversar lo que en buena lid se plantea para un mejor “aterrizaje” del tema que nos ocupa.

Tú también has manejado el término “respetar” sin que nadie en su sano juicio pueda interpelar argucia alguna que desestime lo que por simple sentido común a veces se colige de los textos Sagrados. ¿Por qué extraño motivo persistes en tratar de derribar lo que con curiosa contradicción te esmeras en descalificar y en lo que ni siquiera merece la pena gastar tiempo en contradecir? Te vuelvo a repetir el ejemplo que te interpuse entonces para demostrarte que la concepción de “respeto” se deduce claramente cuando indicamos normas o disposiciones disciplinarias que aplicamos en, por ejemplo, nuestro hogar. Si tú das una orden en casa para que no se “toque” un suculento “queque” guardado en el refrigerador y te vas tranquilo por haber advertido a los golosos el no hacerlo, dime, si alguien no hace caso y arranca un pedazo del queque que prohibiste “tocar” y llegas por la noche y ves que se hizo caso omiso de la advertencia ¿Se podría considerar una falta de “respeto” a tu clara orden para no hacerlo, independientemente si cuando hiciste la advertencia indicaras o no la palabra “irrespeto”?

En todo caso creo que aquí le estás “faltando al respeto” al buen criterio y sana deducción que al parecer te empeñas en ignorar y no creo que sea por ignorancia. Lo que me temo es que tu actuación sea volitiva; a propósito, por ese extraño placer que te produce el solo hecho de llevar la contraria a los TJ.

Creo que te deleitas en retroceder y echar marcha atrás a tus propias conclusiones de lo que ya se tenía por definido sobre la prohibición que revestía de una tremenda seriedad por parte del Altísimo, respecto al consumo inapropiado de la sangre animal por el significado representativo de la vida en todos los sentidos posibles. El que no quedara registrada ninguna ejecución por este motivo no significa que es prueba contundente para creer que nunca ocurrieron, ni es importante en lo absoluto tampoco que si en verdad nunca ocurrieron, entonces la prohibición era una simple analogía. El evangelista Juan nos da alguna luz cuando indicó: “Por supuesto, Jesús también ejecutó muchas otras señales delante de los discípulos, que no están escritas en este rollo.” Eres tan “literalista” que si Juan no nos hubiera explicado la realidad de lo que habló Jesús “fuera de cámaras”, jamás hubieras tampoco aceptado que lo hubiese hecho. Obviamente no todo lo que se hizo se registró, ni todo lo que se registró se llevó a cabo. A ti lo que te gusta es contradecir y discutir, no deducir e interpretar –al menos cuando no te conviene hacerlo– claro está. Al parecer estás más interesado en contradecir todo lo nuestro, que caes en un viciado círculo que para ti es como el aire que respiras. Si nosotros hablamos de que la bola realmente “cayó al suelo”, tú te empeñarás en indicar que al “rebotar” la bola en el suelo subió de nuevo de donde vino; y si replicamos que “todo lo que sube puede bajar”, tú replicarás que también todo lo que “baja” puede “subir”. Y eso es precisamente lo que haces ¡El ciclo sin fin!

El que haya mandamientos más fáciles de cumplir que otros eso ha sido así desde siempre. El hecho que unos se cumplan con mayor facilidad que otros, no significa que los que sean más difíciles de cumplir anulan la importancia de los más fáciles. Tampoco sucede al revés. La importancia dada a la observación estricta de la prohibición sobre la ingesta de sangre al cuerpo humano no era estimulada por la cantidad de personas que se ejecutaban por desobedecer e “irrespetar” la orden Divina. El acato a la prohibición de “no comerás sangre” no dependía de la cantidad de “ejecuciones” cumplidas que se llevaran a cabo y en esto creo que te burlas, no ya de los preceptos del “Eterno” que pretendes respetar, sino del más elemental concepto de la lógica y el sentido común con que fuimos dotados.

Si tú has señalado de manera tan “obvia” la “falta de respeto” en que “incurrimos” por estarle “cuestionando” todo lo que al “Eterno” compete por derecho propio decidir, no estarías aquí exigiendo pruebas de “ejecuciones” como si por la falta expresa de lo que solicitas para “mejor proveer”, dejara sin efecto la Orden Divina de la sentencia prometida como “premio” a la desobediencia.

Criticas como irrespetuosa nuestra postura de tratar de inquirir de Dios –sin base alguna claro– el por qué de sus motivos para tal o cual disposición, pero te aplaudes con gran júbilo cuando pretendes debilitar esa misma Ley que estableció el Altísimo, pero utilizando tu “inspirada” apreciación de lo que bien se te acomoda, según tu oportuna intromisión. Entonces es cuando tú sí puedes darte el lujo de dudar de la efectividad de todo lo que por Dios fue prohibido al no dar con la “evidencia” escritural de los que pudieran brindar esas pruebas que necesitas, para poder creer entonces en la efectividad de esa particular y Divina disposición.

Tú nunca ves nada de nada. Para ti vivimos en el paraíso terrenal; toda la humanidad es adoradora de Jesucristo y todo lo malo que existe en el mundo no es obra de satán y, encima, Dios ilumina a los “sabios” del mundo para que apliquen sus conocimientos para provecho de una humanidad que no está haciendo nada para ganarse el favor del Altísimo ¡Claro, eso ya lo sé! No hace falta que lo indiques. Creo que aquí un “malversador de fondos públicos” tendría mejores motivos para justificar su ilícito, que tu impresionante salida argumental desvirtuando lo que tan claro expuse con respecto a la enseñanza que se extrae de todos los textos en donde la prohibición al consumo de sangre, se estipulaba tan claro y entendible, pero en una sola dirección.

Mantener la sangre tan “alejada” del hombre como fuera posible es de fácil deducción del sentido transmitido, para que vengas ahora con tu acostumbrado “domingo siete” a estropear la hermosa melodía capaz de ser escuchada hasta por un simple “sordo”, incapaz de poder siquiera disfrutar de tan obvia y clara relación al significado “mantener alejado” pero con respecto a “introducir” al cuerpo la sangre prohibida por la Divinidad.

Lo que indiqué con mantener “alejada” de nosotros la sangre bien lo entendiste y el significado de mi exposición también. Que tuerzas y retuerzas con tal de tener algo que decir a tan cristalina exposición, denota no más tu extrema y galopante crisis que llena tu alma preparándola contra la “inútil” defensa que cualquier TJ pudiera intentar presentar que sea contrario a lo que tú crees.

Lo que quedó ampliamente demostrado es que lo que te gusta al parecer es contradecir por defecto, de manera automática, a todo lo que ya aceptaste con la lógica aplastante que nadie pudo contra-argumentar cuando quedó en franca evidencia que cualquier cosa que se “coma” es exactamente “introducir o meter” alimento al cuerpo. Ahora bien, que no hayas aceptado que ese “introducir” al cuerpo de la sangre transfundida haya sido un mandato “literal” del Altísimo tal y como ustedes lo exigen de forma escritural, es en lo único que siempre te dimos la razón por la veracidad de lo afirmado, pero no desestima la veracidad de la analogía indiscutible que se estableció cuando hablamos de comer como la acción de “meter al cuerpo” todo aquello que, indiscutiblemente, se haga así exactamente como al parecer aun lo desapruebas.

Persistes en hacer menoscabo a la ya “mil veces explicada” manera en que Alfageme se refirió con el término que al parecer te trae todavía de cabeza, no porque haya estado equivocada la comparación de mi hermano, sino más bien por tu obsesión de llevar la contraria. Se ha explicado hasta el cansancio que lo que se pretendió fue explicar la indiscutible forma en que se lleva a cabo la ingesta de la sangre al cuerpo humano. Aquí al parecer juegas con las palabras y te diviertes en dar cuerda hasta reventarla, a una evidente y aplastante lógica que luego terminas por unirte a ella por lo que no veo la necesidad del tiempo que has invertido en oponerte por medio de una demagogia innecesaria, analizando a tus anchas lo que sobre el mismo tema te refieres, vez tras vez, como estocadas mortales con las que pretendes demoler nuestra razonada posición, pero que al final siempre terminas aceptando, entre negativas y afirmaciones de manera repetitiva, la analogía propia de una equilibrada deducción. Todo para terminar aceptando lo que bien expusimos en su oportunidad: “No es criterio personal mío sino universal el distinguir que si bien todo lo que se come se introduce al cuerpo, no todo lo que se introduce al cuerpo se come”.

Nadie ha dicho jamás lo contrario de lo que aquí bien afirmas. Sin embargo, “lo cortés no quita lo valiente”; si bien es cierto que “no todo lo que se introduce al cuerpo se come”, también es cierto que todo lo que se come se introduce al cuerpo. Nosotros nunca hemos negado lo primero, pero al parecer tú persistes en negar y pervertir lo segundo. ¡Esa es la diferencia abismal que existe entre el significado de la razón que nos distingue, en amplio contraste con la razón que al parecer no te asiste! Luego acotas: “Reza el dicho: “El que se fue a Sevilla perdió su silla”, pero no quien pierde su silla necesariamente ha ido a Sevilla”.

Aunque nada tenga que ver esta “entretenida y rítmica frase” con lo que intentas aquí rebatir porque nunca nos hemos opuesto a la segunda “opción de los que “pierden su silla”, yo tengo una versión más actualizada que la tuya. Esta: “El que se fue a Sevilla perdió su silla”, pero no quien pierde su silla necesariamente ha dejado de ir a Sevilla”. ¿Qué te parece, interesante no? Moraleja: Que no importa por donde lo mires –cuando lo haces– porque siempre habrá otra alternativa para decidir de conformidad, aunque te opongas y no lo mires.

Y aunque no me reconozcas lo que tengo de “filólogo” no por ello dejo de darle a “abstenerse” el significado apropiado que al parecer tú le niegas encasillándolo de forma exclusiva a tu poco imaginativo y restringido criterio. No le permites la libertad que su rica semántica demanda para poder “discernir” lo que un desprejuiciado análisis etimológico pudiera informarnos para alejarnos de manera emergente, del recalcitrante fanatismo que nos obliga a portarnos como necios en no ver lo que está enfrente de nuestros ojos. Que tú no creas que “abstenerse” pueda abarcar las “transfusiones” ¡Pues vale! Esto en sí mismo no es lo irracional y nadie lo discute; es tu interpretación y se respeta. Pero que tú indiques que abarque a cualquier cosa “menos a las transfusiones”, allí está la diferencia y el “toque” personal de tu parcial enfoque dominado por un radicalismo sin fronteras. Por lo tanto, aunque ridiculices mi perspectiva sobre el estudio etimológico del vocablo “abstenerse”, nadie me podrá contradecir que su significado es muchísimo más amplio que lo obvio de un “simple comer” por la boca.

No es mi culpa que tú no disciernas el espíritu de lo que Dios oculta en cada una de sus leyes que crea para guía del hombre. No es mi culpa que persistas en oponerte y te mofes de su efectividad solo porque quien lo utilice sea un TJ. No es razón suficiente para que te denigres tú mismo negando el “espíritu” detrás de toda ley y de toda manifestación del espíritu que con gran sabiduría, el Altísimo ha dejado para nuestra instrucción, aparte de la “letra” de la Ley que al parecer es lo que a ti te inspira, prefiriendo las sombras que la envuelven y que te mantienen atado al mismo prejuicio que domina al Israel de hoy, en total esclavitud y empecinada servidumbre por la obstinada pretensión en no querer ver la luz de ese espíritu vital para una apropiada comprensión de todo aquello por lo que Cristo murió.

Tu criterio es demasiado extenso y lo respeto, aunque no sea tu costumbre respetar el ajeno. Que tú prefieras imponer lo que te dicta tu personal deducción, no es otra cosa que imponer lo que consideras como “suave modalidad” que se adapta como anillo al dedo, cuando pretendes justificar una soberana aberración del espíritu de dicha Ley.

Que tú relaciones el “comer sangre” de Levítico con el supuestamente “comer sangre” del “abstenerse” de Hechos 15, será tu enfoque teológico y tu verdad, y aunque en repetidas ocasiones has criticado nuestra postura de creernos el pueblo de Jehová Dios por presumir de tener la verdad asida con fuerza, aquí te olvidas de la crítica y la reclamas para ti sin permiso y presumes, tú, de la verdad que ahora ostentas tratando de derrumbar los muros de la razón.

Creo que tu concepción sobre el término “escrupuloso” no rima con la “virtud” que caracterizaba a los enemigos del Cristo. Los fariseos nunca se distinguieron por eso que ahora les confieres con honor; no por ser virtuosos precisamente, sino por presumir de todo lo contrario. ¡Vaya escrúpulos que tenían cuando asesinaron al Ungido de Jehová! Si así razonas comprendo muy bien el por qué siempre le llevas la contra a la razón.

Y no se trata de estar “refunfuñando” de forma constante por cuanto motivo legal establezca Jehová según su beneplácito y oponérsele, como insistentemente pretendes endosarnos, sino el “discernir” la sabiduría detrás del espíritu que manifiesta en cada una de sus disposiciones reglamentarias, no siempre explicadas, no siempre detalladas. Esto, en sí mismo, no es una falta de respeto sino más bien una obligación que se nos ha impuesto: “Pues es a nosotros a quienes Dios las ha revelado mediante su espíritu, porque el espíritu escudriña todas las cosas, hasta las cosas profundas de Dios.” (1 Corintios 2:10).

Y ya que deduces a tu antojo y sin restricción alguna lo que a tu parecer Dios ha estado haciendo con la distribución del “espíritu santo”, se te olvida fácilmente su propósito en salvar a su pueblo, no a un mundo que le odia y repudia su Nombre y que ya tiene “dueño”, amo y señor; el mundo al que pertenecen todos esos personajes que con tanto empeño defiendes como si fueran paladines y respetuosos siervos de la Omnipotencia del Universo. Jehová no ilumina ni protege a ningún hombre ajeno a él. Jehová tiene mejores motivos de edificación y protección pero a quienes solícitamente lo buscan. No hay necesidad de reprocharle nada por cuanto él mismo no es el responsable de los desatinos humanos. El no se entiende con la ciencia ni con la medicina. Eso es cuestión de los hombres; del mundo; de la canalla humana que prefiere y lucha sin saberlo por la muerte, no por la vida.

No se cita el texto de Juan 15:13 a no ser que se haga para justificar lo que ahora sorpresivamente niegas. Vez tras vez lo has utilizado para justificar la transfusión sanguínea y ahora me sales con que eso sería como “soltar un disparate de gran envergadura”. Pues ni modo ¡Lo soltaste y nadie te obligó!

No podría decirse precisamente que esa ausencia de “dislates” tuyos te los inventé por cuanto fuiste tú el que siempre citabas a Juan como respaldo “sagrado” de la transfusión sanguínea para “salvar la vida” con otra “vida”. Y si me resulta fácil refutarte no es por mi apresurado criterio de mal interpretarte, sino por tu decidida y locuaz intervención dialéctica a fin de justificar lo injustificable. Dijiste: “Yo sólo digo lo que escribo y no es justo que lo disfraces hasta pintar mi punto de vista como si “Jesucristo tenía en mente justificando la ingesta de sangre “salvavidas” al cuerpo del hombre… Si te pones tú mismo a deducir o a interpretar por mí, hasta dar la que llamas mi propia versión de que el Señor estaba entonces pensando en transfusiones de sangre, ¡qué fácil te resulta considerar insensata y patética esa deducción! Lo gracioso es que esa ESPECULACIÓN nunca fue mía. Ni lleva mi marca.”

Lo que mal señalas de mi parte endilgándote “tu marca” identificadora que te delata de cuerpo entero, no es producto de mi imaginación sino de la tuya. Así que esa “gracia” que te causa el haberte hecho autor de la ESPECULACION “que nunca fue tuya”, después de todo, sí lleva tu marca: En un aporte anterior, decidido dijiste: “Por el contrario, previendo Dios que veinte siglos después del advenimiento del Mesías muchas vidas serían salvadas con las transfusiones de sangre, dejó abierta la puerta para tan benéfica práctica con su “no comerás” desestimando la versión de Alfageme y asociados.” Y eso que somos nosotros los que constantemente estamos interpretándole a Dios revelaciones que nunca dijo. ¡Cosas no!

Hablas del discípulo fiel que no busca “rédito alguno con una muerte que estaba en su potestad evitarla”, como si con semejante criterio invalidaras que existen acciones que comprometen la fe, aunque no sea ante la amenaza de muerte de algún desesperado radical que no acepta que se le cuestione, dando por hecho que sólo en el caso específico de tu ejemplo, se puede ser fiel a Dios y se cumple con la responsabilidad de hacer patente nuestra fe. Dices: “el discípulo fiel de Jesucristo comienza por negarse a sí mismo, por lo que su vida no cuenta si es menester ofrendarla por su causa y la del evangelio.” ¡Claro que congenio contigo en esta apreciación de los fieles que se sacrifican por no negar al Señor lo que él exige de nosotros, pero no como tú lo enfocas como única alternativa posible, sino como la Biblia lo establece: “ofrendar la vida por causa del evangelio” negándonos a transigir por salvar el “pellejo” y escudarnos en la cobardía humana y ceder ante la presión de todos los que alrededor nuestro nos acusan, gritándonos en la cara para que no muramos. ¡Vaya presión se ha inventado el mundo sin espíritu para avasallar a los siervos de Dios!

No tengo habilidades de “pitonisa” como para haber siquiera pensado en que no te haría “cosquillas” mi mensaje. Un TJ siempre guarda confiada esperanza en que sea Dios el que conceda el entendimiento al que anda por otros senderos. Nosotros somos los “sembradores”; Dios es el que hace germinar la semilla.

Recibe como siempre mis mayores deseos para que la luz de Jehová ilumine tu vida y te haga comprender la verdadera esperanza en Cristo Jesús.
 
Estimado Juaniyo

Estimado Juaniyo

Respuesta a Mensaje # 1074:

1 – Si eres español debías de entender mi castellano: Si digo: “los TJ no suelen” eso es plural; si a continuación escribo: “salvo uno con quien suspendí mi diálogo”, eso es en singular y por supuesto que no te incluye ya que sigo hablando contigo. No necesitas disculparte sino estar atento a lo que lees, pues de otra manera no podrás acertar con tu respuesta.

2 – En Romanos 11:25 se refiere a los israelitas que serán salvos cuando el Señor venga y nada dice el texto de un número a completarse.
Ap 6:11 sí se refiere a completar un número, pero es el de los mártires durante la gran tribulación:

“Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos”.

Los 144.000 de Ap 7 y 14 nada tienen que ver con los unos ni con los otros. Cuando se habla de completar un número no tiene por qué la mente correr hacia los 144.000 a menos que la idea fija ya haya sido implantada.

3 – La doctrina de la soberanía divina en la predestinación de sus escogidos está demasiado bien asentada en la Biblia como para que yo ahora te la explique. El libre albedrío es un esclavo que inclina al hombre a escoger el mal y el error. Por supuesto que tampoco esto crees, y de veras lo lamento.

4 – Precisamente, la unidad de nuestra fe exige que al menos coincidamos en lo que consideremos verdades esenciales, las que no podemos fijar en un catálogo pues están impresas en nuestra mente, corazón y conciencia. Las discrepancias entre pastores cercanos o lejanos es problema de ellos y no de la iglesia de Jesucristo como cuerpo del Señor, del que todos los salvos somos miembros en parte.

De mis estudios alcancé a entender que probablemente (no seguramente) estos “nicolaítas” son descriptos por el significado del término griego (dominador del pueblo), o sea, imbuidos del mismo espíritu de Diótrefes (3Jn 9,10) que pretendía ser el primero entre sus iguales. Así, esto estaría indicando al clero, casta sacerdotal o elenco pastoral que a lo largo de la historia han dominado por sobre las congregaciones, sin la humildad de los ancianos o sobreveedores puestos por el Espíritu Santo en la iglesia para guiar la congregación (Hch 20:28).

5 – No me salgas ahora con otra cosa. Tú me censuraste por los diezmos equivocándote muy feo conmigo. Antes de enrostrar algo a otro primero debes cerciorarte que el sayo es de su medida.

6 – Si no creyese de verdad que Pablo haría lo que dije ¿no te parece que tampoco diría lo que dije?

7 – Una vez que se aprende media docena de detalles del español antiguo ya es posible leer de corrido la Biblia de Casiodoro de Reina del 1569. Esta Biblia fue tomada en cuenta por el Comando de Su Majestad King James para la versión inglesa de 1611. No siempre los hispanos dependemos del inglés.

Algunas de las diferencias en el habla que tenemos los americanos no son autóctonas sino que ya proviene de las distintas regiones españolas.

8 – Por las congregaciones e iglesias sigue circulando la Biblia con una carta como la que David escribió a Joab para provocar la muerte de Urías, la que no creo sirva para inspirar la muerte de ningún hermano (2Sa 11:14,15). También seguimos leyendo en las iglesias las cartas que escribió Jezabel calumniando a Nabot para que fuese muerto (1Re 21:9,10). No creo que hoy día pueda autorizarse la calumnia para apoderarse de lo ajeno. Muchas cartas hay en la Biblia que no podemos hoy leer como si fuésemos sus destinatarios.

9 – Que en la Biblia no vengan palabras como “transitorio” o “incestuoso” no quiere decir que ambas cosas no integren la realidad de aquella carta redactada por la asamblea en Jerusalem.

Con el ejemplo de tu toro, de ser avisado de su bravura no iré a ponerme ante él mañana. Pero pasadas dos o tres décadas (el tiempo que asigno a aquellas disposiciones de la carta), el toro ya estará viejo y lento como para infundirme miedo.

No dije yo que únicamente una de las abstenciones fuese transitoria sino las cuatro, pues “fornicación” no se limitaba a lo que hoy entendemos, como ya expliqué en demasiados mensajes.

Y sí, yo creo que toda vuestra doctrina es muy rebuscada.



Saludos cordiales.
 
Estimado Melviton

Estimado Melviton

Respuesta a Mensaje # 1077:

Como felizmente ya me tienes acostumbrado, escribes de tal manera que siempre me haces disfrutable la lectura, invitándome a una segunda, tercera y cuarta. Tengo la impresión que ni siquiera los bien elaborados y revisados artículos de La Atalaya rayan al nivel de tus respuestas.

Infelizmente, sin embargo, los lectores que siguen nuestra conversación fácilmente advertirán una notoria diferencia en el tono de nuestros mensajes.

Párrafo a párrafo me he dedicado a desactivar tus argumentos con las razones que expongo.

Y párrafo a párrafo me vas persiguiendo de uno a otro, reeditándote en la razón que te asiste y lo errado de mi exposición. Esta autopromoción que no discute nada pero que aprovecha a señalar el adefesio que soy como polemista, gratifica a mis contradictores de toda la vida pero no convencerá de la razón que te asiste si no vas conversando a la par conmigo sino que simplemente vas soltando descalificativos, moderados –es cierto- y nunca groseros ni ofensivos, con lo que dejándome mal parado pudiera desmoronarse la posición que defiendo.

No es que yo haya contraído el vicio de contradecir a los TJ en todo, pero es un hecho histórico que desde su aparición ellos cobraron fama oponiéndose a las verdades fundamentales de la fe cristiana. Su notoriedad se debió a la audacia con la que negaban esto y aquello a la vez que proponían nuevas e insólitas interpretaciones y revivían antiguas herejías condenadas ya desde los primeros siglos del cristianismo.

No es entonces que yo me oponga a los TJ ¡pues ni modo que los apoye!

Si yo hubiese invadido un Foro de la Watchtower para acometerlos del modo que suele hacerlo Horizonte, tendrías razón en censurar mi belicosa intromisión, pero sucede que yo soy tan cristiano y evangélico como lo es este Foro, y sintiéndome en casa, es natural que resista a cuanto creo que sólo aprovecha para publicitar doctrinas que en mi conceptos son erradas y prácticas que considero malas como la no transfusión de sangre.

Hay muchas cosas que tú dices que yo hago y que sin embargo no hago, pero que se haría tedioso desmentirlas y que luego tú ratificarías y yo volvería a cuestionar. Sería distinto un debate público con un moderador que nos diera el mismo tiempo para responder. Así sería fácil ver quien es quien tergiversa o incurre en un tratamiento indebido o deficitario.

Proyectas luces que clarifican lo que dices como si fuesen soles, mientras arrojas nubes y sombras sobre lo que yo digo para mostrar mi confusión y ceguera. Seguramente nuestros lectores requieren algo más que el solo decirlo así para realmente vean que demuestras lo que ahora muestras.

La simplicidad de mis propuestas contrasta con tus sendos mensajes que mejor que afearme a mí hubiese sido mejor dedicarlos a desvirtuarlas, sin necesidad de usar muchas palabras más, caso que tu razón se vea evidente.

Yo te ruego que te atengas de mi última propuesta (# 1053) a cuestionar lo que te parezca más vulnerable. Verás que te insumirá poco esfuerzo, tiempo y espacio, si me dejas a mí de lado y te concretas al punto o aspecto en cuestión. Podría estar resultando tedioso a los foristas (no a mí) que estés duplicando, triplicando o cuadruplicando en tus respuestas el escueto espacio que asigné a mi propuesta.


Con todo mi reconocimiento por tu consideración y paciencia
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

En primer lugar congenio contigo en que en repetidas ocasiones la Biblia emplea metáforas o analogías propias dentro de un contexto para señalar, ya sea una adecuada comparación entre dos cosas reales o bien, una simple relación entre dos conceptos diferentes, uno puede ser literal y el otro simbólico. Ejemplo: El texto que citas de Isaías 59:3. Allí nos habla de “manos sucias de sangre”, “dedos de iniquidad” en donde evidentemente se emplean metáforas o analogías propias para transmitir una enseñanza. Ahora bien, eso es un ejemplo. Existen infinidad de otros ejemplos que son literales y que su interpretación, de acuerdo a su contexto, exigen una literalidad en donde se evidencia su apropiada aplicación.

HOLA HERMANO MELVITON. PERDONA QUE TE ESCRIBO EN MAYUSCULAS, NO ES MI INTENCION "GRITAR" SINO QUE SE ME HACE FACIL ESCRIBIR ASI ESTA VEZ PARA GANAR TIEMPO, ESCRIBO CON UN DEDO AUN!!! JEJEJE

ESTOY TOTALMENTE DE ACUERDO EN QUE EN MUCHAS OCACIONES LA LITERALIDAD HAY QUE TOMARLA EN CUENTA POR EL CONTEXTO MEDIATO E INMEDIATO; MAS, TE PROBARE QUE AUN CUANDO ESTO SEA ASI, QUE LO QUE SE DICE ES REAL, LITERAL Y MANDATORIO, EN -PROFUNDIDAD-, MIRANDO MAS ALLA DE LA LITERALIDAD Y EL MANDAMIENTO, OCULTAMENTE SE NOS DA OTRO MENSAJE, IMPLICANDO LA ALEGORIA QUE A PRIMERA INSTANCIA NO SE VEIA O DIOS MISMO NO QUERIA QUE AUN SE VIERA…

EJ: MOISES ESCRIBE “NO PONDRAS BOSAL AL BUY CUANDO TRILLARA”

ERA ESTO UN MANDAMIENTO LITERAL PARA TODOS LOS ISRAELITAS? POR SUPUESTO QUE SI, EL MISMO CONTEXTO MEDIATO E INMEDIATO LO REAFERMA, PUES ES EVIDENTE QUE SE LE ESTAN DICTANDO UNA SERIE DE RESTRICCIONES AL PUEBLO QUE TIENEN QUE VER CON LA CONDUCTA, EL PROCEDER, LA ETICA Y LA MORAL. PIENSO QUE NI EL MISMO MOISES AL ESCRIBIR AQUEL MANDAMIENTO SABIA QUE AQUELLO NO SE ESCRIBIA TAN SOLO COMO CONDUCTA LABORAL O COMPASION AL ANIMAL, EN ESTE CASO A UN BUEY…QUE LOJOS ESTABAN TODOS AQUELLOS ISRAELITAS DEL VERDADERO SIGNIFICADO DE AQUELLA ORDENAZA!!! PABLO LO EXPLICA MUY BIEN EN SU CARTA, NO LO DIJO DIOS POR LOS BUEYES! A DIOS NO LE PREOCUPAN LOS BUEYES, DIJO PABLO, SINO QUE AQUEL MANDAMIENTO SE ESCRIBIO PARA “OTROS TIEMPOS” Y CON OTRO SIGNIFICADO. DIOS ESTABA YA PREDICIENDO MEDIANTE MOISES QUE A SUS OBREROS DE “LA VIñA” NO SE LES PODIA NEGAR COMER DEL FRUTO DE ELLA!!!

UN VERSICULO TAN CORTO Y SENCILLO, CON TANTA “LITERALIDAD”APARENTEMENTE Y QUE CUALQUIERA QUE LO HUBIERA LEIDO ANTES DE PABLO ACER REFERENCIA EN SU CARTA HABRIA SEGUIDO PENSANDO QUE AQUELLO SE ESCRIBIO POR LOS BUEYES Y POR CUALQUIER OTRA RAZON MENOS QUE LA QUE PABLO DE TAN EXELENTE MANERA ILUSTRA, QUIEN LO HUBIERA CREIDO!?

ES ESE EL MOTIVO POR EL CUAL “ME AVIENTO”, ME AVENTURO A CREER QUE EN HCH. 15 HAY UNA ENSEñANZA OCULTA, MAS EN OTRO MOMENTO AMPLIARE SOBRE ELLO.

 
Pero en el caso específico del texto de marras de Hechos 15:28,29 hay que tener mucho cuidado. El mismo contexto y la lista de otros conceptos que allí se enumeran, es determinante para establecer la literalidad de lo que se pretende transmitir. Analicémoslo paso a paso:

1. “Porque al espíritu santo y a nosotros mismos nos ha parecido bien no añadirles ninguna otra carga”. (Interviene el espíritu santo, la opinión de los apóstoles del Señor y el hecho de no “añadirles otra carga” aparte de las que se indican, claro). Muchos elementos reales para una simple analogía.

2. “Salvo estas cosas necesarias: que sigan absteniéndose de cosas sacrificadas a ídolos, y de sangre, y de cosas estranguladas, y de fornicación”. (tres claras indicaciones para “abstenerse”: “cosas sacrificadas”, “sangre”, “cosas estranguladas” y “fornicación”). De nuevo, demasiados elementos reales prohibidos y que para nada son indicaciones “simbólicas” porque, de lo contrario, tendríamos que aceptar que el abstenerse también de fornicación es una simple analogía pero… ¿De qué y para qué? ¡No tiene sentido!

3. “Si se guardan cuidadosamente de estas cosas, prosperarán. ¡Buena salud a ustedes!”. ¿Nos cuidaremos de simples analogías? No lo creo, al menos en este caso. Respondiendo a tu pregunta, no se debe interpretar semejante consejo como algo simplemente alegórico. No es correcto. La fornicación existe y es literal, la sangre existe y es literal, lo estrangulado existe y es literal y los ídolos existen y son “literales”, lo que se sacrifica a ellos sí es literal y también existen muchos “ídolos” (sobre todo los de este mundo) también literales. ¡Y la “buena salud” también es literal sea espiritual o física!
.

POR LO EXPLICADO ANTERIORMENTE, SIGO CREYENDO EN LA ENSEñANZA ALEGORICA EN ESE PASAJE. LUEGO EXPONDRE UN POCO MAS SOBRE ESTO DESDE MI PROPIA PERSPECTIVA.

Ahora bien, lo que señalas del capítulo 7 de Levítico todo fue literal, no analógico. Recuerda que Cristo fue el “fin de la Ley”. Sin embargo, los principios justos de la Ley no se abolieron; por el contrario, se les dio su mejor aplicación en Cristo y el “espíritu” de dicha Ley es lo que hoy honramos y tratamos de aplicarlo en todo momento en unión con Jesucristo.

El que no se cumpliera con toda la Ley dada a Israel no significa que ahora, al estar desligados de sus estatutos, en su mayoría rituales, tengamos libertad para hacer lo que nos plazca. Esto no es razonable. Por ejemplo, ninguno de los 10 mandamientos dados a Moisés cuando subió al monte Horeb quedaron abolidos. Lo que se abolió fue el “grueso de los más de 600 mandamientos de corte ritual y de procedimientos propios para una aplicación detallada de todo lo que en Cristo quedó resumido. De allí que se indicó que el que “ama” cumple con toda la Ley

PERMITEME DIFERIR CONTIGO EN ALGO. NO PIENSO PRIMERAMENTE QUE LOS MANDAMIENTOS DE DIOS HAYAN SIDO COMO MUCHO SE “MACHACA” POR AHI “SEISSIENTOS VEITITANTOS”; LOS MANDAMIENTOS DE DIOS SON TODA SU PALABRA. SI HABLARAMOS DESDE EL PUNTO DE VISTA JUDIO, TENDRIAMOS QUE DECIR QUE LOS MANDAMIENTOS DE DIOS SON TODO AQUELLO QUE COMPRENDE “LA TORA” Y NO SOLO SEISSIENTOS Y TANTOS”. SI HABLARAMOS DESDE UN PUNTO DE VISTA POS CRIST, TENDRIAMOS QUE DECIR QUE LOS MANDAMIENTOS DE DIOS COMIENZAN EN GN. 1:1 Y TERMINAN EN AP. 22:21, TODA LA ESCRITURA CONTIENE MANDAMIENTOS DE DIOS Y EL “ENUMERARLOS” SERIA IMPROPIO, BIEN ESCRBIO EL PROFETA: EL MISMO QUE DIJO “NO MATARAS TAMBIEN DIJO…”. O SEA, QUE ES TODO LO QUE DIOS DIJO Y ESO COMPRENDE TODA SU PALABRA. POR OTRA PARTE, NO PIENSO QUE LOS SUPER MENTADOS “ DIEZ MANDAMIENTOS” TENGAN TODOS VIGENCIA, PUES DE ENTRE ESTOS DESCARTO EL “GUARDAR EL SABADO” Y CONVENGO CON LO DICHO POR LOS PROFETAS “AMARAS A TU PROJIMO COMO A TI MISMO” ENCIERRA EN SI CUALQUIER MANDAMIENTO, ASI MISMO EL MAESTRO RESALTA: “AMARAS A DIOS CON TODAS TUS FUERZAS, PRIMER MANDAMIENTO, Y EL SEGUNDO SEMEJANTE, AMARAS A TU PROJIMO COMO A TI MISMO
Mat 22:40
"DE ESTOS DOS MANDAMIENTOS DEPENDEN TODA LA LEY Y LOS PROFETAS”.


De manera que lo que aquí se está discutiendo, como dices, no es el que exista polémica de si es “analógico” o “literal” el abstenerse de sangre o no. De hecho es literal.

NO DIGO QUE AQUI SE DISCUTA LA LITERALIDAD EN EL CASO QUE CITE, SINO QUE EN EL CONTEXTO DEL DEBATE CREI OPORTUNO EXPONER ESTA POSIBILIDAD.

 
Lo que está en el “tapete” es si el “abstenerse” (literalmente) de la sangre abarca a las transfusiones. En realidad, hasta ahora escucho (de tu parte) la posibilidad de que Hechos 15:28,29 pueda en alguna medida, interpretarse de manera analógica.
LO SE, DE HECHO AL IGUAL QUE RICARDO PIENSO QUE NADA ENSENA LAS ESCRITURAS DE NO PERMITIR LAS TRANSFUCIONES DE SANGRE, INCLUSO PIENSO QUE TODO AQUEL QUE PRACTICA TAL ABSTENENCIA LE NIEGA LA POSIBILIDAD DE LA VIDA A UN SER HUMANO Y LO DEJA “A SU SUERTE”. TE PONDRE UN EJEMPLO PRACTICO EN ESTA ANECDOTA:

LLEGA UNA LLUVIA TORRENCIAL SOBRE UN PUEBLITO MUY POBRE EN EL QUE LAS CASAS ERAN DE MADERA Y TECHOS DE PALMAS, LA INUNDACION SE APODERA MUY RAPIDO DEL SITIO Y LAS CORRIENTES ARRAZA CON TODO, EXEPTO “LA IGLESIA” PARROQUIAL, LA CUAL HABIA SIDO CONSTRUIDA CON MEJORES MATERIALES. EL PARROCO AL VER QUE TODO ESTABA INUNDADO SE SUBE AL TECHO, PERO EL AUGUA SEGUIA SUBIENDO. EL DECIA, DIOS ME SALVARA! DE PRONTO VE VENIR A DOS CAMPESINOS REMANDO HASTA EL, QUIENES LE DICEN, LANZATE Y NOSOTROS TE LLEVAREMOS A LA ORILLA, PERO EL LES RESPONDIO, NO, NO SE PREOCUPEN, DIOS ME SALVARA. A LA SIGUINTE HORA LLEGA OTRO HOMBRE CON UN BOTECITO A MOTOR Y LE DICE LAS MISMAS PALABRAS Y EL PARROCO LE CONTESTA LO MISMO, Y ASI CON UN TERCERO QUE LLEGO DE LOS BOMBEROS, PERO ESTE LE CONTESTO DE IGUAL MANERA. AL FINAL SE MURIO EL PARROCO EN AQUELLA INUNDACION Y CUANDO LLEGA A LA PRESECIA DE DIOS LE REPROCHA EL NO HABERLE SALVADO LA VIDA, PERO DIOS LE CONTESTA: TE MANDE A SALVAR TRES VECES Y NO QUICISTE…
POR OTRA PARTE NO ME HE “METIDO” EN LA CONTIENDA PORQUE CREO QUE RICARDO ESTA LLEVANDO EL DEBATE DE UNA MANERA QUE (MODESTIA APARTE) NO LE AVENTAJARIA, PERDONAME ESA, JEJEJE.

Además, y a manera de ejemplo adicional, la multiplicación de los pescados y los panes en la montaña por parte de Jesús fue literal, no fue una alegoría o metáfora. ¿Por qué? Pues porque el contexto es determinante y la retórica empleada nos guía para comprender la finalidad de lo que leemos.
TAMBIEN EN ESTE CASO DIFIRO CONTIGO, Y PIENSO QUE LA ALEGORIA ESTA VIGENTE, ADEMAS DE LA LITERALIDAD QUE APUNTAS, PERO POR NO DESVIAR EL TEMA LO PODRIAMOS TRATAR EN OTRO EPIGRAFE SI TE PARECE.
Por otra parte, cuando Jesús dijo claramente que él era “el pan vivo que había bajado del Cielo”, aquí sí se estaba empleando una retórica propia cuya analogía empleada para nada podríamos deducir que Jesucristo era, literalmente, un “bollo de pan” que había bajado del Cielo. El pan es “alimento” y Cristo es ese alimento que, como el pan físico, lo necesitamos mucho más para vivir esta vida y en la verdadera (la que realmente es “vida”).

EXACTO, AQUI LA ALEGORIA ES MAS QUE OBVIA.

Por lo tanto, congenio contigo en que hay que “discernir” apropiadamente cuándo se debe interpretar la analogía y cuándo su deducción literal y, en cada caso, habría que emplear el verdadero “discernimiento” que, muchas veces, explican de manera maravillosa, los alcances de los mandatos expresos de Jehová.

TE RECUERDO EL CASO DEL BUEY QUE TRILLA, FUE LITERAL Y TAMBIEN LO FUE ESPIRITUAL!

Mis respetos y consideración como siempre.

LO PROPIO HERMANO, ES AMENA NUESTRA PLATICA, CREEME QUE LA DISFRUTO.