¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Re: Apreciado Alfageme

Re: Apreciado Alfageme

Cordiales saludos mi estimado Ricardo.

Le reclamas a Alfageme que no te respondió este aporte, pero, con gusto, qué tal si te lo contesto yo. Espero no te incomodes o te resientas conmigo.


Aquí voy.

quote_icon.png
Originalmente enviado por Ricardo

1/2 – Es cierto, Gn 9:3 te permite la idea de “sangre de cualquier clase”, pero no te permite escribir “les prohibió comer sangre de cualquier clase” como has hecho, pues no equivale a lo que realmente les prohibió: “carne con su vida, que es su sangre”. Si yo te presento a una tía como si fuese mi suegra, el parentesco se mantiene, pero no es lo mismo. Lo único que puedo inferir del v.3 es que no debían de comer animales que encontraran ya muertos.

Si Génesis 9:3 te dice –claramente– que la disponibilidad culinaria del menú se amplió a “toda clase de carne” excepto aquellas que se quieran “comer” sin desangrar, a todas luces, el sujeto principal que decidirá si se come o no la carne, es la “sangre” que se encuentra en ella y la que hay que derramar, no la misma carne. La orden fue girada en torno a que la sangre fue considerada por Dios como símbolo de la vida animal y humana. La lógica nos lleva a deducir apropiadamente que la “vida” del animal, representada por la “sangre” de este, no era propiamente lo que debía respetarse en el acto porque, de hecho, se estaba otorgando el permiso para prescindir de ella matando al animal para que sirviera de alimento al hombre, satisfaciendo así el poder “comer” libremente su carne pero sin su sangre.

Si lo que quería Dios transmitirnos era que debíamos respetar el hecho de no comerlos mientras tuvieran vida (o sea, su sangre corriendo por sus venas), se nos hubiera indicado de otra forma como, de hecho, Dios se refirió en los capítulos de Génesis precedentes al 9 en donde se indicaba, claramente, que lo que iba a eliminar con el Diluvio, era la “vida” que disfrutaban los seres vivos (hombres y animales) y no simplemente lo que la representaba (su sangre), y no la carne que todavía tuviera sangre. Es decir y para copiarte tu argumentación con citas “textuales” de cómo se deberían decir a veces las cosas, Dios hubiera dicho: “Mira Noé, no deseo que de ahora en adelante el hombre coma animales mientras estén vivos; antes bien, tendrán primero que matarlos y luego, con todos los derechos que les estoy dando, pueden comer su carne y su sangre libremente”. Esto sí hubiera sido clarito, pero no lo dijo así y ni siquiera lo dio a entender. Lo que Jehová estableció fue que la “sangre” (el motivo) era la “vida” en los seres vivientes, pero no refiriéndose específicamente a la “vida como la acción de vivir”, sino a que dicho fluido iba a ser, desde ese momento en adelante, considerado por su Autoridad, como de respeto por “representar” la vida de todas las criaturas como don maravilloso de Dios.

De allí que le indicó claramente a Noé que no la “comiera” (su sangre) al decirle que no podía “comer carne” si todavía tenía sangre en ella. Ahora bien, cómo se puede interpretar el hecho contundente, lógico y deductivo si a mí me dicen que no debo comer, por ejemplo, “cocos” que tengan su “agua” todavía dentro de ellos. ¡Pues no me están diciendo que derrame su agua antes de comerlos, que la drene, que la envase, que la guarde en el refrigerador, etc., etc., pero lo que sí me están diciendo de manera clara es que no DEBO COMER COCO mientras el agua está dentro de él, lo que es lo mismo que “sacársela” o “botarla” o lo que sea. Ahora bien, ese “lo que sea” es discutible. Porque si me están prohibiendo comer el “agua de coco” porque va a ser utilizada como símbolo de otra cosa, tampoco se me ocurriría “beberlo”, tan literalmente, en un vaso cuando ya lo hubiese extraído por un orificio del coco que lo contenía, sin antes preguntar o deducir exactamente, qué está detrás de esa advertencia. La claridad llegó siglos después cuando Dios especificó, de manera más detallada, el respeto a la sangre y lo que ella representaba y, directamente advirtió, ahora sí de forma textual (podemos imaginarnos que quizás lo dicho a Noé no fue tan explícito) para evitar que lo dicho al otrora patriarca capitán del Arca, se hubiera interpretado a lo largo de siglos por sus descendientes, exactamente como tú y muchos como tú lo interpretan ahora: ¡De manera incorrecta!

Tu ejemplo de la “tía” que haces pasar por tu “suegra” no es apropiado ya que estás falseando la realidad y se está cayendo en una mentira comprobable de que en efecto, no es tu suegra, sino tu tía. En el caso que nos ocupa, la “sangre” sí es el “alma” o “vida” por designio del Altísimo, muy diferente a tu ejemplo. Ahora bien, aplicando correctamente lo que expones, lo que está estipulado en Génesis 9:4 se entendería plenamente y, aplicándolo al ejemplo de tu “tía”, sería así: “Si tú me pidieras que aceptara a tu tía en mi casa y yo accedo pero con una condición clara y enfática: “Acepto únicamente a tu tía pero a ella sola, sin nadie más”. Pero si tú me traes a tu tía con tres de sus hijos, ¿Debería yo aceptarla de acuerdo a mis condiciones claramente expuestas? NO. ¡Sólo a tu tía! Ese era el trato y lo que yo únicamente establecí. Ahora bien, en este ejemplo ¿Cuál sería el motivo que originaría mi oposición a que venga tu tía? ¡Los hijos de ella! Eso es lo que estoy prohibiendo, no que venga tu “tía”, (la carne) sino sus “hijos” (la sangre). Ahora bien, Yo no te he dicho en ningún momento que es “prohibida” la presencia de alguien más que no sea tu tía, pero se deduce fácilmente sin ningún problema y eso es lo que ustedes no captan de la enseñanza que Jehová le transmitió a Noé.

A ver si con este otro me comprendes mejor. Mi hermano Alfageme lo que está empleando son palabras y deducciones que se extraen de la enseñanza Divina sin que, necesariamente, se hubiesen dicho de manera tan “textual” como le recriminas. Si a mí alguien me dice en alguna oportunidad: “Mira, aquél sujeto violó y asesinó a la joven que era tu vecina”; yo pudiera luego contar la versión que me dieron de esta manera: “Juan, te acuerdas de aquella vecina mía, la mujer joven que tenía una niña de 2 años, pues fíjate que la “mataron” pero antes la “ultrajaron” y encima le mutilaron algunas partes de su cuerpo”. ¿Comprendes? Es obvio que así no me lo contaron pero mi versión es perfectamente aceptable porque yo añadí otros detalles que fueron reales y no excedí los límites aceptables. No utilicé por ejemplo la palabra que originalmente me transmitieron: “un sujeto la violó”, sino que utilicé: “la ultrajaron” que viene siendo lo mismo. Así sucede con lo que aquí estás discutiendo sin lógica mi estimado Ricardo.

Jehová no se estaba refiriendo a la “vida” o “alma” que disfrutaban como seres vivos. Lo que estaba enseñando no era que no se podían comer “mientras estuvieran vivos”, sino más bien, que el desangrarlos adecuadamente era lo que determinaba el poder comerlos. Y si hablo de “desangrar” (aunque se me hace muy difícil imaginarme otra cosa que no fuera esto) es porque el “desangrar” al animal antes de “comerlo” era lógico que el animal iba a estar muerto y solo entonces, se procedería a comer su carne.

3 – El texto que pegas bien lo conozco pero no dice lo que dices que dice. Tú puedes deducir o inferir de un texto lo que te venga en gana, pero no decir que el Eterno dijo lo que tú dices pero que Él no dijo. La cláusula completa la redactaste así:

“Jehová dijo a los israelitas que la sangre debía derramarse en el suelo y nadie debía usarla para ningún propósito personal, Deuteronomio 12:15,16.”

Pues eso que deduce Alfageme no es a como a él “le ha dado la gana” interpretarlo. Es lo que Génesis 9 arroja sobre la verdadera enseñanza dirigida a Noé y a su posteridad y que más adelante es ratificado en la Ley Mosaica cuando, de manera clara y contundente, se indica que se debía derramar al suelo y cubrirla con polvo, lo que a cualquier mente con muy poco estudio sería suficiente para deducir, apropiadamente, que no había más usos para la sangre que los estipulados en dicha Ley. Más bien, podríamos decir que eres tú el que infieres que ese “como te ha dado la gana a ti interpretarlo” es lo que nos transmites y deseas que lo aceptemos como la única opción aceptable.

Ricardo, en la mayoría de los casos hay que aplicar el “discernimiento” para poder captar a veces lo que ciertos textos nos quieren transmitir y para eso existen los contextos. Pero que yo sepa, nadie en este planeta –que sea normal, claro– aceptaría la Biblia de manera literal de “cabo a rabo”. Eso sería un contrasentido porque entonces sí que estaría fregado y terminaría más “loco” que los locos de un asilo. Y cuando fallan los “textos y los contextos” porque no son demasiado explícitos ¿Qué otro recurso nos queda? Solicitarle entonces a Dios espíritu santo para que por este medio, nos “abra” el entendimiento para poder captar la enseñanza detrás de alguna específica ley. Creo que de ejemplos de este tipo de ayuda está llena la Biblia.

4 - Que en las iglesias hubiera ancianos que también enseñaban como maestros no hacía vano el ministerio epistolar de Pablo.

No, claro que no, pero tampoco lo que Pablo enseñaba y transmitía en sus cartas era lo único que era valioso (de manera exclusiva) para la edificación y entrenamiento espiritual de las congregaciones. Ni tampoco creo que “todas las cosas adicionales que el Señor dijo e hizo con sus discípulos que no se escribieron en el rollo del evangelio de Juan”, por ejemplo, no tenían ninguna validez solo por el hecho que no se registraron en la Biblia. No creo que creas entonces que si Pablo se refirió o no de manera explícita sobre la prohibición que todavía tenía la sangre, no lo hubieran hecho muchos otros “obispos” y algunos de sus compañeros apóstoles con alguna periodicidad pero que no se registró dentro del canon de la Biblia y sea, porque así lo presumes, la razón del por qué no se habló más del tema simplemente por ser un decreto temporal. Creo que la evidencia histórica de registros no bíblicos es prueba de ello. Los cristianos primitivos, todavía “calientitos espiritualmente” (antes de que se enfriaran) respetaban todavía el decreto apostólico de manera contundente y sin dudas.

5 - ¡Otra vez más reincides en repetir las palabras del padre de mentira pese a haber sido advertido en numerosas ocasiones! Ya se te mostró que eso que dijo el diablo es falso. ¿Por qué porfías en reproducir su dicho?

Lo curioso con ustedes es que se “espantan” cuando se cita, no las palabras del “padre de la mentira”, sino la Biblia que las contiene, porque si de alguna manera ni siquiera hay que pronunciarlas, tampoco hay que leerlas y, si Jehová dispuso que se escribieran y registraran, fue para que al menos las leyéramos. Además, no todo lo que dice satán es mentira. El que sea el padre de la mentira no significa que “todo” lo que diga sea una mentira, como no fue una mentira cuando le dijo al mismísimo JEHOVA cuando le interrogó acerca de dónde venía y a lo que respondió: “De discurrir por la tierra y de andar por ella”. Jehová no lo contradijo, estaba diciendo la verdad y fue dicha verdad por la que entonces JEHOVA le dijo de nuevo: “¿Has fijado tu corazón en mi siervo Job, que no hay ninguno como él en la tierra, un hombre sin culpa y recto, temeroso de Dios y apartado del mal?”. A lo que el enemigo replicó: “¿Ha temido Job a Dios por nada? (aquí comienza la intriga y el ataque rastrero de este ángel del mal) “¿No has puesto tú mismo un seto [protector] alrededor de él y alrededor de su casa y alrededor de todo lo que tiene en todo el derredor? La obra de sus manos has bendecido, y su ganado mismo se ha extendido en la tierra.” (aquí si te fijas bien, de nuevo habla la verdad, porque esto que dice no es mentira). Y tan es así, que Jehová no lo reprendió ni creo que el cinismo de satán llegara a tanto que hasta trató de “engañar” a Dios diciéndole una mentira a ver si se la “creía” el Todopoderoso. Esto sí sería increíble ¿No te parece? Ahora bien, el desenlace del diálogo lo tuvo Jehová cuando le advirtió: “¡Mira! Todo lo que tiene está en tu mano. ¡Solo que contra él mismo no alargues la mano!”. De manera que Satanás salió de ante la persona de Jehová”.

Otra verdad de este ángel enemigo de todo lo bueno ¿Qué le dijo a Jesús en una de las tentaciones cuando le ofreció todos los “reinos del mundo”: “Si caes y me rindes culto todo esto y su gloria te los daré porque a mí han sido entregados y a quien yo quiera se los daré”. ¡Interesantes palabras y además, ¡Verdaderas! Jesús no lo contradijo. Simplemente se limitó a enseñarle que la adoración que pretendía era única y exclusiva a su Padre Jehová y a nadie más. ¡Y no creo que satán le estuviera ofreciendo, precisamente a “DIOS” algo que, por un lado no necesitaba para nada y, por otro, que realmente no fueran de él (claro, de manera temporal).

De manera que no hace falta dejar de citar las palabras del enemigo como recurso para “enseñar”, así como Dios lo permitió cuando hizo que se registraran ciertos pasajes en las Escrituras con este personaje. El no podía dejar de lado este aviso para alertarnos, precisamente, quién es el que verdaderamente “no duerme” nunca para tratar de alejarnos del Altísimo al caer de su gracia y consuelo. Jesús mismo, siguiendo el ejemplo de su Padre también lo menciona en varias oportunidades y hasta se registró la famosa “tentación” de la que fue objeto.

Así que no nos “rasguemos” las vestiduras en señal de protesta, tratando de ser más “papistas que el papa” cuando, de hecho, con nuestras propias deducciones y manera de enseñar, le estamos siguiendo el “jueguito” al inicuo, y sin necesidad de siquiera de nombrarlo. Y ten por seguro que este “jueguito” de la “sangre” es el “plato predilecto” del que este perverso personaje se ha valido para embaucar a millones de “defensores de la vida” convirtiéndolos en “ministros de justicia” sin discernir las maquiavélicas tretas de este “Angel de Luz” que encandila con su resplandor, el falsamente llamado conocimiento de los hombres.

Los versículos bíblicos no están en guerra como si pudieras anular la fuerza de uno enfrentándolo a otro.

¿O es acaso poca cosa añadir a las palabras de Dios, haciendo pasar las tuyas como si fueran suyas?

Ricardo, no es “añadir” como tú lo interpretas; es “deducir” que es otra cosa muy diferente. “Añadir” es “agregar” algo que de forma ilegal insertamos alterando el entendimiento de lo que se escribió y tú, como yo y como la mayoría de los entusiastas religiosos del foro, sabemos que a la Biblia Católica, por ejemplo, le “añadieron”, no simples textos solapados que transmitían otras enseñanzas diferentes a la ya expuestas, sino “libros” de más que engrosaron así el canon de la Biblia.

Otro ejemplo es el de los “signos de puntuación” y, para muestra, la simple “coma” del “Verdaderamente te digo(coma) que hoy estarás conmigo en el paraíso”, cuando en griego no existen signos de puntuación y quedaba al escriba decidir (observa la responsabilidad tan inmensa que tenía para no alterar la enseñanza) dónde insertar dicha coma, decidiéndose por insertarla, como lo atestiguan la mayoría de las versiones de la Biblia, en el lugar equivocado, dando lugar a un contrasentido que se enfrenta de plano, con toda una sana enseñanza cristiana fundamental.

Creo que por ahora es suficiente.

Recibe como siempre mi más profundo respeto y consideración.
 
Estimado Alfageme

Estimado Alfageme

Tiene mucho que ver apreciable Ricardo,pues tu creés ( si no me equivoco ) que estás adorando a Dios correctamente y...por eso te he puesto el ejemplo de los fariseos y saduceos lo confundidos que estaban a pesar de que "su postura no peligraba" según tu mismo argumento.
Tu dices:"Los que están convencidos de estar en la verdad debaten tranquilos ya que su posición no peligra".
En el tema expuesto por tí mismo de la sangre,ya se te ha explicado por qué la vida es sagrada porque está representada por la sangre según el Creador de ella.
Se te ha explicado que si Dios no permite meterla en el cuerpo por la boca,¿qué diferencia existe entre meter sangre por la boca que por las venas,si sigue siendo vida igualmente?.¿Qué más claro se pueden poner las cosas para que entiendas que la vida está representada en la sangre si de una forma o de otra va a parar al cuerpo?.
Cordialmente para Ricardo

Es cierto que una y otra vez has expuesto la doctrina de los TJ sobre el asunto que nos ocupa.

Pero lo que se dice "explicar" no has explicado nada, pues para ello te fuera menester contestar puntualmente a cada observación que se te hace.

Como no tienes explicación alguna que dar, entonces te olvidas que existo y te dedicas a otros foristas y otras cosas.



Saludos cordiales
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Otro entremés para mejor proveer.

Ricardo, si consideras que Alfageme no ha sido lo suficientemente explícito en sus argumentos, tampoco los míos que creo que hasta han aburrido a más de uno por lo explícitos y largos que los hago. Contigo no se quedará bien nunca. Si es largo, porque es muy largo, y si es corto, porque no se tiene más argumentos que presentar. Es decir ¡No hay por donde! Aquí, la mayoría de los foristas escriben apenas lo necesario. Yo al menos me dedico a responder "punto por punto" lo que nos cuestionan y tampoco. En realidad, el asunto no anda en lo "largo o corto" de nuestros aportes, sino por ser quienes somos. ¡Eso sí es el motivo!

Respetuosos saludos.
 
Apreciado Melviton

Apreciado Melviton

Ni me incomoda ni me resiento contigo porque contestes mensajes de Alfageme ¡como si fuese la primera vez que lo haces!

Lo que sí es insólito es que asumas tal iniciativa para responder mensajes ajenos cuando mantienes pendientes de respuestas los míos # 727 y 744 de varias páginas atrás. Quizás le puedas sugerir a Alfageme que para estar a la recíproca los conteste por ti.

Ha llegado la hora de mi siesta, y para atender como bien mereces este último tuyo, lo responderé luego de soñar y platicar un poco con los angelitos, ya que con Morfeo no me llevo bien.


Regreso en breve.
 
Re: Estimado Melviton

Re: Estimado Melviton

B''H
Elusivo, como siempre que tienes que tratar conmigo.
Te quedan pendientes muchas cosas conmigo Melviton y a continuación pasaré a citarlas para que las tengas presente:





Afirmaste que
Cuando te pregunté por la cita en la que el Eterno le ordena a Noé no comer sangre juntamente con su carne me dijiste:


He demostrado que el texto de Génesis 9:4 se refiere a la sangre de animales y no a la sangre de seres humanos. Pues está hablando de lo que será para el consumo de los descendientes de Noé.
De manera que mi proceder no es FALSO ni CALUMNIOSO al decir que tú afirmaste que en Génesis 9:1-7 se prohibía el comer "sangre juntamente con su carne".

No vamos a terminar nunca porque no eres capaz de reconocer el acierto ajeno, como sí loablemente lo hace Ricardo. A quien inclusive recomiendas:



Desde luego que no logras tu cometido, estoy seguro que esta clase de "recomendaciones" no le mueven el piso a Ricardo.
Pero observa y aprende de un verdadero Testigo del Eterno:

12 Moshé habló a Aarón y a Elazar e Itamar, los hijos que le quedaron: Tomen la ofrenda vegetal que quedó de las ofrendas de fuego de El Eterno y cómanla sin levadura junto al Altar; pues es santísima. 13 La comerán en un lugar sagrado, pues es su porción y la porción de sus hijos de las ofrendas de fuego de El Eterno, pues así se me ha ordenado. 14 Y el pecho de la agitación y el muslo de la elevación los comerán en un lugar puro, tú y tus hijos y tus hijas que están contigo; pues les han sido dados de las ofrendas festivas de paz de los Hijos de Israel como porción suya y la porción de sus hijos. 15 Ellos traerán el muslo de la elevación y el pecho de la agitación sobre las grasas de la ofrenda de fuego para agitarlos como un servicio de agitación ante El Eterno; y será para ustedes y para sus hijos por decreto eterno, tal como ha ordenado El Eterno». 16 Moshé preguntó con insistencia por el macho cabrío del sacrificio expiatorio, pues... ¡se había quemado!, y se encolerizó con Elazar e Itamar, los hijos que le quedaban a Aharón, y les dijo: 17 ¿Por qué no comieron el sacrificio expiatorio en un lugar sagrado, siendo santísimo; y Él se los dio para obtener perdón por el pecado de la asamblea y para expiar por ellos ante El Eterno? 18 su sangre no fue llevada adentro, al Santuario; ¡deberían haberla comido en un lugar santo, tal como se los ordené!». 19 Aharón le habló a Moshé: ¿Fueron ellos que en este día ofrendaron su sacrificio expiatorio y su ofrenda ígnea ante El Eterno? Ahora que me acontecieron tales cosas, ¿debo yo comer el sacrificio expiatorio de este día; El Eterno lo aprobaría?. 20 Moshé oyó y lo consideró bueno.

El eminente Moshé reconoció el acierto de Aharón. A eso se le llama humildad.

Volviendo al punto.
Aún si tú quieres ver en Génesis 9:1-7 una prohibición de comer sangre juntamente con su carne (cosa bastante retorcida en cuanto a "hermenéutica"). La Torá está hablando de los ANIMALES y no de la carne ni de la sangre humana.

De manera que prohibir las transfusiones de
sangre humana por considerarlo una falta a D'os, no tiene FUNDAMENTO BÍBLICO.
Me despido, por ahora.
Recibe el saludo de un verdadero Testigo del Eterno (Isaías 43:10 dice a los hijos de Israel: "ustedes son mis testigos").



Disculpas por no haber visto este aporte hasta ahora. Por eso no lo había respondido.

Sin embargo, quiero dejar claro algo antes de dar respuesta a lo que me indicas aquí. Tú fuiste el que "disparaste" primero empleando apelativos nada corteses y yo, al responderte, utilicé la defensa argumental de estar hablando con alguien que, de hecho, no respeta la postura "TG" como la indicas, y no es de sabios enroscarse en estériles discusiones con alguien, como te lo indiqué desde el principio, que ni siquiera cree en el Jesús que nosotros creemos. ¿Adónde iría a parar nuestra discusión? ¡Al cesto de la basura!

Si lo que deseas es "separar" la dispensación "hebrea aramea" de la "cristiana" pues podríamos considerar un diálogo amistoso. Pero si lo por lo que te inclinas y pretendes es hablar únicamente del "Pentateuco" como la única "Torá" verdadera del "Eterno", difícilmente Rav podríamos llegar a un entendimiento y eso lo sabes. Estarías mucho más que descalificado para fundamentarte en solo lo que a ti te han enseñado como la "torá" verdadera del "Eterno Dios" y preferirías "morir con las botas puestas" antes que aceptar siquiera, algún debate en donde se trate, al menos, demostrar la legitimidad de Jesucristo como el Hijo del "Eterno" Dios al que supuestamente le rindes culto.

No es agradable estar compartiendo criterios con alguien que, en cuanto se le ocurra, sale con fuertes apelativos como los que te has dejado decir, indicados en un aporte anterior al que te di respuesta más que directa, clara y contundente.

Por lo demás, tengo en mi haber suficiente material informativo y evidencias hasta de tu propio pueblo "desobediente y respondón" (y perdona que lo diga de nuevo) pero eso es lo que el "Eterno" manifestó en la Biblia, no así el EFD de la WT; palabras significativas que evidencian la verdad de la que llevó a Israel a rechazar al "Ungido de Jehová", Cristo Jesús, nuestro Señor.

Si prometes no utilizar palabras soeces sin ninguna necesidad, pues seguiremos debatiendo, pero haciéndolo dentro de un marco de respeto y consideración.

Atentos saludos.
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Apreciado Ricardo:

Con respecto a los aportes 727 y 744 que me reclamas por no respondidos disculpa sinceramente.

No es que los haya omito adrede sino más bien porque consideré que ya estaban cubiertos por otros en los que intervine aunque no hubiesen sido dirigidos a mi persona. Sin embargo, trataré de responderlos lo más resumidos que pueda para no entenderme de nuevo en los mismos argumentos vez tras vez y que al parecer, como es lógico, no son considerados en lo más mínimo, pero ni siquiera en la anotación de la "honra", porque hasta han debatido la lógica que se extrae de muchas de las deducciones que apropiadamente extraemos de las Escrituras.

Lo que me pides es que al menos "cumpla" con la deferencia de la respuesta, aunque en el fondo no te interese "conocer", lo que de seguro"ya intuyes" voy a responderte.

Saludos cordiales de nuevo.
 
Re: Estimado Melviton

Re: Estimado Melviton

FE DE ERRATAS:

En el aporte anterior, en primera línea puse "omito" en vez de "omitido".
 
Re: Estimado Alfageme

Re: Estimado Alfageme

Es cierto que una y otra vez has expuesto la doctrina de los TJ sobre el asunto que nos ocupa.Pero lo que se dice "explicar" no has explicado nada, pues para ello te fuera menester contestar puntualmente a cada observación que se te hace.Como no tienes explicación alguna que dar, entonces te olvidas que existo y te dedicas a otros foristas y otras cosas.Saludos cordiales
Apreciado Ricardo.A mi querido hermano Melviton sin duda que le admiro por tan buena defensa que está haciendo de este tema,(con calma y serenidad y educación exquisita) rebatiendo todas las objecciones que se nos han puesto.Yo este punto ( como Melviton se daría cuenta) lo he enfocado distintamente, pues he ido al grano del por qué la sangre los humanos (ninguno) debe de comerla o transfundirla metiéndola por las venas en su cuerpo.
"Sangre,vida",la vida es sagrada para el Creador de ella,nos ha prohibido meterla en el cuerpo por la boca (en aquellos tiempos creo que no se hacían transfusiones),si no el Creador de la sangre a lo mejor se lo especificaría también a la familia humana. ¿Necesitamos que Dios desde el cielo nos diga no hagáis mal uso de la planta del tabaco?.¿Necesitamos que Dios desde el cielo nos diga no hagáis mal uso de la sangre,pues no debéis de meterla en el cuerpo por ningún medio?.Parece ser que para "muchísimos cristianos" esto sería lo ideal, pero sin embargo casi apostaría que otros muchos lo dudarían de que fué Dios quién dió la voz, porque hay muchos intereses puestos en la transfusiones de sangre y el primero es el Diablo,quien le va de perillas el que una gran cantidad de personas estén de su parte.
Jehová Dios nos dice,"sé sabio hijo mío y regocija mi corazón para dar una respuesta al que me está desafiando conescarnio" Prov 27:11.
Ricardo ¿quién le planteó a Dios la cuestión de que todo lo que el hombre tiene lo daría en el interés de vida?.
¿No está envuelta la vida en casos extremos que se precise la sangre?. Este es uno de los casos en el que uno daría la espalda a Dios, pero sin duda que hay muchos más.

Saludos cordiales.
 
Re: Estimado Ricardo

Re: Estimado Ricardo

quote_icon.png
Originalmente enviado por Ricardo

1 – Tal como te lo decía en mi mensaje anterior, no te es fácil despegarte de esa tendencia a traducir lo que vas leyendo de modo que otra lectura te facilite la respuesta. Pues no, para nada sugiero que mientras nosotros dos no concordemos pospondré cualquier cuestionamiento a lo que Rav Lifman escriba. Me encantará disfrutar la oportunidad de entreverarme en un duelo criollo con foristas amigos como Davidben y Rav Lifman, pero yo solo te he dicho que si no lo hago aquí y ahora es por no distraernos.

Disculpa, pero creo que los motivos son otros. De hecho, como cristiano, podrías crear un nuevo epígrafe y, desde allí, entablarte en un “tú a tú” con algún tema que estás seguro Rav no lo comparte y David tampoco, pero el punto es que lo evitas al máximo (es entendible y lo acepto), porque no dejaría de ser tedioso enfrascarte en buscarle “4 patas al gato” que en ese momento no te interesa para nada, pero sí con el “gato” que te vienes “agarrando de las mechas” por los sobrados motivos de ser quienes somos, aunque lo niegues rotundamente.

2 – Te has equivocado de plano conmigo si crees que soy de los que converso con otras ideologías buscando coincidencias. Mi amigo y compatriota Norberto es más proclive a eso, pues es mucho más abierto y tolerante que yo. Los puntos en común que pueda tener con otros no me atraen en absoluto, sino que suelo ir directamente a confrontar nuestras principales diferencias. Lo que no puedo hacer es obstinarme en mantener mi vieja idea, si aparece una nueva perspectiva que nunca antes consideré. Así me ha acontecido ahora con la explicación de Rav Lifman a Gn 9:3,4.

Pues eso es lo que a simple vista se te nota. Y no es porque deseo que “pelees” contra otros así como lo haces conmigo. No se trata de eso. Es que es muy evidente hasta la forma en que los tratas, con toda consideración y cautela y te cuidas, en grado sumo, hasta de no contrariarlos en lo más mínimo y, si sabes de antemano que en mucho difieres de ellos, ¿Por qué entonces buscas un “común denominador” en que estén siempre de acuerdo? ¿Casualidad? No lo creo. Es conveniencia. Eso es algo así como el olor característico de los diferentes “perfumes” que a veces utilizamos y que nos identifica aunque estemos a distancia.

Ahora bien, no creo que ignoraras lo que sobre Génesis 9 se ha escrito en la internet sobre este “descubrimiento” que hallaste en lo escrito por Lifman. Eso es desde hace años una creencia popular, no solamente en la comunidad judía, sino en muchas de las iglesias protestantes alrededor del mundo. Eso no era nada nuevo y sin embargo, ¿Cambiaste de criterio con la revelación que te hizo Rav? ¡Vaya coincidencia y puntería la de mi apreciado forista judío!

3 – Los dos capítulos del Apocalipsis (7 y 14) que hablan de los 144.000 no dan a pensar en que alguno de ellos pueda ser reemplazado, ya que ni tiempo tendrán para fracasar, pues recién serán sellados por el Señor para el tiempo de su manifestación con ellos (Ap 7:3) y no en el transcurso de la historia. Por otro lado, desde nuestra conversión Dios ya nos ha ungido y sellado (1Co 1:21,22) con el Espíritu Santo de la promesa (Ef 1:13; 4:30) y aunque no seamos de aquellos 144.000 israelitas vírgenes seremos parte de aquella gran multitud en el cielo alabando por siempre a Dios y al Cordero ante su trono.

Como grupo (EL NUMERO ESPECIFICO DE 144.000) no. Eso es como levantar una fábrica inmensa para alojar a 2000 empleados como “plazas” que se ocuparán. El número total de plazas ya fue estipulado. Quiénes las llenarán es lo que estará por verse. Es en este respecto que lo enfocaba, no en el que lo planteas.

En cuanto a que Dios “ya desde que somos ungidos y seleccionados” para ser parte de los 144.000, no podemos dejar de serlo, será tu opinión, pero bíblica, no lo es. Es un contrasentido. El sellado se logra cuando hayamos “corrido con aguante la carrera por la vida”. Antes no. Grave error de interpretación; de hecho, uno más en la lista.

4 – La Torá o Pentateuco es parte de la Biblia y los versículos que Rav Lifman explicó son los de Gn 9:3,4. No veo que eso requiera mayor estudio; la abundancia de versiones bíblicas tampoco sirve de mucho ya que se percibe cómo algunos traductores se apartan del texto hebreo para sintonizar esos versículos con la Ley de Lv 17. Rav se limita a decir lo que esos versículos dicen mientras que tú extiendes su alcance a lo que la Watchtower dice.

¿Y cómo sabes que “algunos traductores se apartan del texto hebreo para sintonizar esos versículos” si no cotejas y te basas en el “espíritu” con que se escribieron? Para que afirmes algo así tienes que tener fundamento e indicar en qué escritos te basas para llegar a tu conclusión y, además, probarlo. Todas las versiones bíblicas aportan un poquito, pero de todas ellas se extrae siempre un común denominador que nos lleva directo a la deducción apropiada que armonice lo que se dice en “x” texto, con el resto de las Escrituras. ¿Y por qué me criticas que yo “extiendo” mi alcance limitado a las evidencias que la WT me indica si las he cotejado y las he analizado y me parecen que son las más verosímiles y creíbles como opción a escoger? ¿Por qué debería inclinarme a escoger “tu versión” por ejemplo, (cuando ni siquiera tienes iglesia nominal que te respalde) o bien la “versión” de Lifman (que todavía vive en la obscuridad espiritual de un velo que no ha sido removido)? Aquí te recitaré lo que le dijeron los discípulos a Jesús: “Maestro, adónde iremos, tú tienes dichos de vida eterna”. Y hasta ahora, los únicos dichos de vida eterna que he tenido el privilegio de “probar” y “reflexionar” y “estudiar hasta el cansancio” es lo que los “enfatuados de Brooklin” me presentaron como la revelada verdad de las Escrituras.

Si se lee con un ojo en Gn 9:4 y otro en Lv 17:14 se entenderá como tú dices. Si lo dicho a Noé se lee en su propio contexto, no es ya lo mismo. Si no sólo Rav Lifman sino los judíos lo han entendido así, respeto su entendimiento en ese punto, pues es coherente.

Génesis 9 y Levítico 17 hay que interpretarlos como “uno solo”, tal y como los sueños del Faraón en los días de José. Que en uno se ampliaran detalles y se registraron con un predeterminado propósito, no desestima al otro del Génesis aplicado únicamente a 8 personas y a toda su descendencia aún no nacida, pero ya habría tiempo para prepararlos en los detalles del verdadero “espíritu” de lo que le transfirió a Noé.

6 – Es insólito que porque reconozca la razón que pueda asistirle a mi ocasional interlocutor puedas ridiculizar mi actitud como el rendirme a sus pies. No es la primera vez que hago esto en el Foro y con ello no fui menospreciado por los foristas, sino que por el contrario me he ganado su respeto. Puedo ser duro y hasta parecer inflexible, pero no al grado de no reconocer mi error si el otro me sorprende con un destello de la verdad. El rendirme ante la evidencia ajena no lo considero derrota sino victoria. Ya alguna vez te he dado la razón y probablemente no será la única.

¿Pero a cuál “evidencia” te rendiste? ¿A la que presentó Rav? ¿Pero cuál? Si lo único que dijo fue “externar su opinión, como muchas otras del foro, pero sin analizar con lógica ni discernimiento lo que a todas luces se extrae de lo que con tanta ansiedad catalogó como “la verdad de la única “torá” que él acepta. Lo que creo es que como a ti te viene como “anillo al dedo” toda argumentación que justifique la aceptación de la sangre dentro de nuestro organismo (transfusiones), ni siquiera hiciste ningún esfuerzo por analizar con menor celeridad y lógica, lo que Rav determinó como “revelación” de Dios; una verdad interpretada por un pueblo que ni siquiera aceptó al Mesías prometido: Jesús. ¡Vaya revelación! ¡Vaya evidencia! ¡Vaya iluminación te reveló Rav!

El darle la razón a otro no es más que eso; no implica sometimiento.

En esto tienes toda la razón. Eso sí, cuando ese “otro” realmente la tiene.

7 – Finalmente, dices que para ti sí eludo lo que realmente tiene interés, pero si no me dices qué es ¿cómo podré atenderlo?

Me refería cuando en tu primera respuesta a Lifman te referiste a que era a Israel a quien, en principio, iban dirigidas las palabras de la Ley dada por medio de Moisés, como si fuera todo ello una revelación de último minuto y como una “revelación” digna para enfatizarla como algo realmente “revelador”. ¿No era acaso una “Pedrogrullada” más de las que a veces nos dejamos decir? Me refería también cuando el forista Rav, en respuesta a mi persona me deja bien claro que, además de otras cosas, él ciertamente no era “Mesiánico”. Aquí preferiste quedarte callado para no contrariar al forista y entablar con él una discusión sin fronteras. ¿No fue acaso así? ¿Por qué eludiste referirte a esto que sí lo ameritaba y preferiste no eludir lo que no era ni siquiera algo digno para considerar?

Atentos y cordiales saludos.
Respuesta cumplida.
 
Apreciado Melviton

Apreciado Melviton

Respuesta a Mensajes # 843 y 841:

Que yo haya notado que generalmente me doblas en la extensión de los mensajes no era una queja ya que decía disfrutar al leerte pues muy bien escribes. No es el caso que sean cortos o largos sino que por lo menos sean; es decir, que me contestes y que no te queden mis mensajes relegados páginas atrás, pues si no ¿a qué el esfuerzo de contestarte? En cuanto a lo que somos, nos manifestamos tal cual cuando hablamos o escribimos.

1/2 – Los hombres en estado más primitivo y salvaje siempre mataron para comer y/o vestirse con sus pieles, y únicamente los más modernos se especializaron en el arte de la caza por pura satisfacción de acertar al blanco abatiendo a su presa; adornar con sus cabezas una sala o negociar con sus colmillos. Hasta el rey de España se ha creído con derecho a hacer su propio aporte al exterminio de elefantes.

Continuamente de nuestra lectura hacemos deducciones e inferimos esto o aquello, pero lo que no podemos hacer es atribuirle a Dios el haberlo dicho sino cargar nosotros mismos con la responsabilidad de pensar lo que pensamos.

En el epígrafe sobre el abstenerse me he explayado sobre mi propia idea del carácter transitorio de las recomendaciones adoptadas por la asamblea en Jerusalem, pero hubiese sido una osadía de mi parte que yo escribiera:

“Los apóstoles, los ancianos y los hermanos se pusieron de acuerdo en redactar una carta que resolviera de momento los inconvenientes planteados en las iglesias de Antioquía, Siria y Cilicia…” pues aunque yo deduzca e infiera que bien puede así haber ocurrido, Lucas no confiere a la carta ese carácter transitorio que yo le otorgo.

Dios nos trasmite su voluntad como Él quiere sin que deba ajustarse a nuestros propios términos, pues nos ha dicho que así como los cielos son más altos que la tierra, así sus pensamientos que los nuestros.

Lo que no podemos hacer es usar esos espacios aparentemente vacíos para llenarlos con nuestras propias ideas, si el artilugio distorsiona el sentido recto del pasaje.

Así, la carne con su vida que es su sangre no podía ser devorada mientras todavía retuviese en sus narices “aliento de espíritu de vida” (Gn 7:22).

Si actualmente hay fieras y aves de rapiña que así lo hacen, no es de extrañar que en una situación extrema por hambre desesperante hubiera llevado a la soldadesca del rey Saúl a proceder de tal manera (1Sa 14:32). Saúl perdió su mejor oportunidad de aplicar aquella pena capital, y usó de comprensión y tolerancia ¡por conveniencia propia, además!

3 – Si aquella frase que cuestiono a Alfageme él la hubiera redactado separando el inicio hasta la palabra “suelo”, nada tendría yo que objetar pues suya sería la inferencia o deducción “nadie debía usarla para ningún propósito personal”. Pero a más de escribirla de corrido, al concluir la frase con la cita de Dt 12:15,16 más todavía afirma que todo lo que antecede es lo que el Eterno dijo a los israelitas.

Por supuesto que todos al leer la Biblia advertimos en una reciente lectura detalles que en otras anteriores del mismo pasaje no habíamos visto, y por asociación de ideas y guía del Espíritu Santo atamos cabos y deducimos acertadamente una y otra cosa.

Para una cita textual usamos las comillas, y tras las de cierre podemos agregar nuestro propio comentario. Lo que no podemos hacer es como al descuido tras las palabras de Dios seguir con las nuestras como si fuesen suyas.

Comprendo tu solidaridad para con tu hermano, pero pienso que esta sería más efectiva si lo hubieras exhortado a ser más cuidadoso y no caer en tales reprobables simplezas.

4 – Que cristianos antiguos se siguieran absteniendo de sangre igual que lo hacían los judíos no indica necesariamente el general conocimiento de ellos de la recomendación de la asamblea en Jerusalem (no decreto apostólico meramente).

5 – Todas las palabras de la Biblia por supuesto que pueden leerse, decirse y escribirse, pero no citar como argumento válido las mentiras del diablo, los dichos de los falsos profetas o las blasfemias de hombres impíos. Que consten allí para nuestra enseñanza y amonestación es una cosa (Ro 15:4, 1Co 10:11); pero valerse de un dicho del diablo para afirmar una idea es un pecado grave. Aquí también tu solidaridad con Alfageme con la debida corrección hubiera logrado mejores frutos que con esta apología que haces de Satanás nada más porque sus pocas mentiras se entremezclan entre las muchas verdades que dice. Las mentiras más malignas y peligrosas son las que se presentan vestidas con verdades.

Enseñando, yo no tendría problema alguno en citar esas palabras del diablo para seguidamente mostrarles a mis alumnos lo mentirosas que eran, pues el final de la vida y actitud de Job fue un total desmentido al falso pronóstico del diablo.

Pero el uso que les dio Alfageme fue distinto, porque como reincidente, volvió a usarlas para demostrar a todo lo que el hombre estaría dispuesto cuando la ocasión le aprieta. El diablo, sabiendo más por viejo que por sabio, conocía muy bien la condición humana, pero no sabía lo de esa íntima relación entre Job y el Eterno.

Lo que ocurre con Alfageme, es que él no puede dejar de citar Job 2:4 pues fue programado para usar ese versículo a tal propósito.

Y lo que ocurre contigo, no es que no te des cuenta, sino que toda la literatura de la Watchtower está impregnada de la misma idea y tú no tienes la libertad de cuestionar ni siquiera un tilde de la misma aunque tu conciencia te grite: “¡De veras que aquí la pifiaron!”.

Lo que dices en tu párrafo a partir del “Así que no nos “rasguemos” las vestiduras” no es un sayo que me calce pero que a la Watchtower le cae de maravillas.

6 – Finalmente, el “deducir”, “colegir”, “inferir” son vocablos afines que describen un libre ejercicio de nuestro intelecto totalmente lícito como tal, pero siempre ilícito cuando a una conclusión resultante se la ingresa de contrabando como si fuera parte auténtica de un dicho nada menos que del Eterno.

¿Cómo puedes hablar todavía de “una enseñanza cristiana fundamental”?

¡A menos que te refieras a la nuestra!

P. D. En cuanto a mis mensajes que se te pasaron los # 727 y 744 preferiría que no te distrajeras ahora con ellos. Si te parece bien, yo los reeleré y si hallo algún argumento importante que hasta ahora no hayas atendido, entonces te lo pondré en un nuevo aporte. De no ser así, los dejamos.


Saludos cordiales
 
Re: Apreciado Ricardo

Re: Apreciado Ricardo

quote_icon.png
Originalmente enviado por Ricardo

1 – No, no aplica esto a todos por igual, sino que esta táctica les es exclusiva, aunque nada quita que algunos religiosos incompetentes la copien de ustedes. Tampoco acuso a los TJ de “duros de cerviz” pues creo exactamente lo contrario: han sido demasiado blandos.

¿Entonces son todos los que nos “copien” “incompetentes” y no porque también lo hayan extraído de las Escrituras? Lo de “duros de cerviz” puede aplicarse a todos por igual, no así a quienes razonan y deducen con lógica y sentido común, muchos pasajes que sería imposible interpretarlos si estas virtudes no están presentes en el momento apropiado. Yo sí he leído lo de “duros de cerviz”. Fue Jehová quien lo dijo y no fue exactamente a la WT ni a tu Iglesia, fue a Israel ¿Por qué sería?

Yo creo que ustedes como personas –hablo por los muchos que conozco- más tienen para que se les admire que para que se les critique, pero como organización religiosa son como una torre de Babel, más baja pero más extendida.

Pues permíteme devolverte esas palabras pero desde una perspectiva más clara y mejor aplicada. Ustedes como organización son como “hijos ilegítimos” (sin tener culpa claro) de una gran “ramera institucionalizada” que, en su constante y galopante “fornicación espiritual”, –me refiero a “Babilonia, la madre de las rameras y de las cosas repugnantes de la Tierra”– ha claudicado y bajado los brazos ante la impresionante corrupción que aqueja al mundo actual cuando se dio a la infame faena de tener “coito ilícito” con los “reyes de la Tierra” y cuyos “comerciantes viajeros” se enriquecieron debido al poder de su lujo desvergonzado de ella”. (Palabra de Dios, no de la WT). Esto sí debería preocuparte. Tú, como persona y muchos que conozco tampoco pongo en duda su sinceridad y buenos oficios; son excelentes y dignos de admirar en muchos aspectos también, pero mientras no “escuchen” la voz de Jehová de “salir de ella” para no recibir “parte de sus plagas” no habrá remedio ni esperanza que puedan satisfacer alejados del único Dios que puede brindarles salvación, en el Día de su “Fuerza Militar”, cuando desencadene su furia contra un mundo totalmente desolado y desespiritualizado.

2 - Las muertes por transfusiones mal hechas o por sangre infectada son ínfimas comparadas con la multitud de vidas salvadas. El adjetivo “tantas” debías aplicarlo mejor a las vidas salvadas que a las perdidas.

Dato equivocado tienes en tu haber. Las “malas transfusiones” no son “ínfimas” como dices. Si buscaras más información te darías cuenta de tu error. Pero, para el caso es lo mismo, si fuera así, “ínfimas” como dices, por más pocas que sean, han ocasionado la muerte, y muerte de la persona que pensó podía darle vida porque ustedes le hicieron creer que era “vida” lo que estaba aceptando y, en vez de eso, irónicamente recibieron a cambio “muerte”. ¡Suficiente razón para pensarlo la próxima vez!

No niego que quizás tú estés libre de todo prejuicio y que yo esté aquejado de unos cuantos, pero si dudo de ello es por los catorce años que llevo debatiendo en el Foro sin que se me observara o amonestara, y que discutiera con ateos, agnósticos, escépticos, católicos, ortodoxos, TJ, adventistas, mormones, moonies, bahai´s y herejes de toda laya, sin que la sangre llegara al río. Mira esta sorprendente realidad: ¿sabes de qué procedencia era el forista que peor me trató? ¡Pues de la misma que yo!

De hecho estoy libre de todo prejuicio. Todos los TJ no tenemos prejuicios de religión. Por eso vamos a buscar a las personas no importando si tienen o no religión o si son ricos o pobres, si tienen “sangre azul” o “roja” o incluso “negra”. ¿Acaso no es eso una muestra de que nos hemos desprendido de todo prejuicio infundado? Y en cuanto al trato que recibiste de tu propio “hermano” en la fe, ¿No has escuchado el refrán que reza: “No hay peor cuña que la del mismo palo”. A veces pasa eso. También está en la Biblia, específicamente en los Evangelios.

Tampoco asumas el papel de víctima como si todos fallaran en vuestra contra. ¿Acaso yo recibo adhesiones? Estoy seguro que hay evangélicos fundamentalistas que no me perdonan por las morcillas y otros que no aceptan que justifique la sobrevivencia de mis compatriotas en los Andes alimentándose de los cadáveres congelados de sus compañeros de vuelo.

Mira, no es hacerse “la víctima” como dices. ¡Es la cruda realidad! Observa nada más (y no en este tema solamente), en todos los que se han expuesto. Cuando interviene un TJ le caen como “moscas” a la miel. Y allí se unen “amigos y enemigos”, “blancos y negros”, “católicos y protestantes”, ateos y dudosos”; todos, a una, se abalanzan contra el atrevido TJ que se le ocurrió “meter sus narices” en donde no lo habían llamado, como se abalanzaron sobre Esteban los perturbados fariseos del Sanedrín, allá por el primer siglo.

¡Menos mal que últimamente Rav Lifman ha dado su visto bueno a la antropofagia (sin muerte provocada) en una situación extrema de sobrevivencia!

Me sorprende que no hayas dicho “¡Gracias a Dios”! que Rav Lifman ha dado su “absolución” como “fiel judío que es” a la “torá” de su “Eterno” ¿Quién sabe cuál? Dios al que dice creer. ¿Prefieres creerle a Lifman que a Jehová Dios? ¿Hasta ese grado llega su contubernio religioso con un “enemigo” del Cristo Jesús, tu Señor? ¡Me desconciertas por completo!

Cumplida respuesta en deuda 744 a mi estimado Ricardo.

Si consideras que otra la he dejado de lado, por favor me lo indicas.

Con toda mi consideración de siempre.
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Disculpa, leí tarde tu permiso para no responder a los dos rezagados. Ya los tenía listos cuando leí tu sugerencia.

Saludos cordiales.
 
Re: Apreciado Melviton

Re: Apreciado Melviton

Apreciado Ricardo. Si me lo permites responderé a lo que observo debo aclarar, en cuanto a lo que deje por fuera será por dos razones fundamentales: porque estoy de acuerdo de tus generalidades o bien, porque no le veo la relevancia al tema que nos ocupa. Sin embargo, si crees que deba responderte algún párrafo omitido, pues me lo haces saber y le "hincamos el diente".

quote_icon.png
Originalmente enviado por Ricardo

Que yo haya notado que generalmente me doblas en la extensión de los mensajes no era una queja ya que decía disfrutar al leerte pues muy bien escribes. No es el caso que sean cortos o largos sino que por lo menos sean; es decir, que me contestes y que no te queden mis mensajes relegados páginas atrás, pues si no ¿a qué el esfuerzo de contestarte? En cuanto a lo que somos, nos manifestamos tal cual cuando hablamos o escribimos.

A eso no me referí con el aporte que me respondes aquí, pero, para el caso, dejémoslo así, es igual. Gracias por la aclaración.

Dios nos trasmite su voluntad como Él quiere sin que deba ajustarse a nuestros propios términos, pues nos ha dicho que así como los cielos son más altos que la tierra, así sus pensamientos que los nuestros.

Estoy de acuerdo con esto pero a "medias". Por esto. Dios no se debe "ajustar" a nuestros términos, eso lo tengo claro ni en ningún momento así lo he manifestado. Que sus pensamientos y criterios estén muy por encima de los nuestros, creo que tú deberías saberlo de sobra que los TJ pensamos lo mismo. Pero el que no apliquemos la apropiada deducción de sus Palabras por no "agregar" conceptos que creemos no dijo, no significa que nos abstengamos de "discurrir" cuando, mediante un exhaustivo estudio de las Escrituras, podríamos interpretar, en nuestros propios términos, cual es la "buena, la acepta y la perfecta voluntad de Dios".

Lo que no podemos hacer es usar esos espacios aparentemente vacíos para llenarlos con nuestras propias ideas, si el artilugio distorsiona el sentido recto del pasaje.

Ninguno de los aquí TJ hemos incurrido en semejante agravio al Altísimo.

3 – Si aquella frase que cuestiono a Alfageme él la hubiera redactado separando el inicio hasta la palabra “suelo”, nada tendría yo que objetar pues suya sería la inferencia o deducción “nadie debía usarla para ningún propósito personal”. Pero a más de escribirla de corrido, al concluir la frase con la cita de Dt 12:15,16 más todavía afirma que todo lo que antecede es lo que el Eterno dijo a los israelitas.

Ricardo, si alguien que va por la calle se tropieza estruendosamente y pierde el equilibrio, y no hay por dónde agarrarse para evitar la caída y se cae ¿Para dónde irá irremediablemente si no es para el suelo? Si este ejemplo lo lees en un cuento pero el cuento no te "cuenta" que se "cayó al suelo. ¿No deberías tú así interpretarlo sin estar agregando nada a lo que estás leyendo? ¡Al buen entendedor, palabras sobran!

Por supuesto que todos al leer la Biblia advertimos en una reciente lectura detalles que en otras anteriores del mismo pasaje no habíamos visto, y por asociación de ideas y guía del Espíritu Santo atamos cabos y deducimos acertadamente una y otra cosa.

¡Exacto!

Para una cita textual usamos las comillas, y tras las de cierre podemos agregar nuestro propio comentario. Lo que no podemos hacer es como al descuido tras las palabras de Dios seguir con las nuestras como si fuesen suyas.

Eso queda a discreción de quien las utilice. No a parámetros radicales o reglas arbitrarias. Claro que existen pero para el ejemplo sobran. Yo, al menos las utilizo cuando, entre otras cosas, deseo destacar algo que no necesariamente sea una cita bíblica. Aunque reconozco que, aunque me cuido mucho de lo que escribo, a veces se me van ciertos errores de sintaxis que no me percato a tiempo para corregirlos. En el caso contrario se advierte quizás de este “desliz” sin ningún propósito en mira y, por criticarse severamente, se desatiende el verdadero argumento que se viene considerando.

Comprendo tu solidaridad para con tu hermano, pero pienso que esta sería más efectiva si lo hubieras exhortado a ser más cuidadoso y no caer en tales reprobables simplezas.

Es que no he visto incongruencias en eso que tú sí las ves. Yo entiendo perfectamente el lenguaje que utiliza Alfageme, porque todos los TJ lo empleamos y sabemos que, bajo ninguna circunstancia, el hermano que escribe no está tratando de “alterar” el texto Sagrado para hacerlo “calzar” –a la brava– con lo que de momento está defendiendo.

4 – Que cristianos antiguos se siguieran absteniendo de sangre igual que lo hacían los judíos no indica necesariamente el general conocimiento de ellos de la recomendación de la asamblea en Jerusalem (no decreto apostólico meramente).

Como una remota “probabilidad” te doy crédito. Pero lo que no se debe enfatizar es el radicalismo en creer que, la única opción probable, sea que fue más por su ignorancia de los hechos, más que por su conocimiento activo de un recordatorio milenario.

5 – Todas las palabras de la Biblia por supuesto que pueden leerse, decirse y escribirse, pero no citar como argumento válido las mentiras del diablo, los dichos de los falsos profetas o las blasfemias de hombres impíos. Que consten allí para nuestra enseñanza y amonestación es una cosa (Ro 15:4, 1Co 10:11); pero valerse de un dicho del diablo para afirmar una idea es un pecado grave. Aquí también tu solidaridad con Alfageme con la debida corrección hubiera logrado mejores frutos que con esta apología que haces de Satanás nada más porque sus pocas mentiras se entremezclan entre las muchas verdades que dice. Las mentiras más malignas y peligrosas son las que se presentan vestidas con verdades.

¿Y a cuáles mentiras del diablo se ha hecho eco en este foro como grandes verdades? ¿Podrías enumerarlas o citarlas? ¿Acaso no utilizó el mismo Jesús actividades y dichos del “diablo” para transmitir alguna enseñanza a sus discípulos cuando les dijo que “el gobernante del mundo venía y que no tenía dominio sobre él”? “¡Cobren ánimo, yo he vencido al mundo”! fueron sus palabras consoladoras.

Enseñando, yo no tendría problema alguno en citar esas palabras del diablo para seguidamente mostrarles a mis alumnos lo mentirosas que eran, pues el final de la vida y actitud de Job fue un total desmentido al falso pronóstico del diablo.

Pues eso es lo que nosotros también enseñamos. Que a veces hay que recordar por qué fue que el pecado entró en el mundo e irremediablemente tendremos que hablar de ese personaje que pretendes dejar en el total anonimato.

Pero el uso que les dio Alfageme fue distinto, porque como reincidente, volvió a usarlas para demostrar a todo lo que el hombre estaría dispuesto cuando la ocasión le aprieta. El diablo, sabiendo más por viejo que por sabio, conocía muy bien la condición humana, pero no sabía lo de esa íntima relación entre Job y el Eterno.

Bueno, que tú veas en esas palabras del inicuo –que están en la Biblia y no se pueden borrar– como una mentira, es tu enfoque. “Piel en el interés de piel” y que “todo lo que el hombre tiene lo dará en el interés de su alma”, aparte de no ser ninguna mentira, es el fiel reflejo del comportamiento de la gran mayoría de la humanidad a través de los milenios. Algo parecido manifestó Jehová cuando dijo: “Me pesa haber hecho hombres sobre la Tierra” ¿Y por qué lo dijo? Pues porque vio que toda “inclinación del hombre era mala todo el tiempo, desde su nacimiento prácticamente ¿O no? ¿Acaso no dice la Biblia y el mismo Jesús que la gran mayoría de la humanidad va a ser destruida? ¿Acaso no es la “puerta ancha” por la que va a pasar el “grueso” de la humanidad para destrucción y condenación eternas?

Lo que ocurre con Alfageme, es que él no puede dejar de citar Job 2:4 pues fue programado para usar ese versículo a tal propósito.

Es que ese es el problema contigo, que todo lo relacionas a la “programación” que de antemano somos objeto por parte del Cuerpo Gobernante director de toda la operación a nivel mundial. Si así es como lo ves, pues ese es el motivo fundamental que te tiene vendada la vista para que no aceptes nada que venga de nosotros. ¿Es que no lo ves?

Y lo que ocurre contigo, no es que no te des cuenta, sino que toda la literatura de la Watchtower está impregnada de la misma idea y tú no tienes la libertad de cuestionar ni siquiera un tilde de la misma aunque tu conciencia te grite: “¡De veras que aquí la pifiaron!”.

Mira, con respecto a esto te diré solamente lo que creo es importante para darte respuesta inmediata. Lo demás que pueda agregar, será para otro epígrafe. Todo lo que quieras decir acerca de la Watchtower es válido, siempre y cuando se ajuste a la realidad, pero de lo que no me puedes convencer es sobre lo que yo mismo he investigado. Si la WT adolece de serias imperfecciones, mucho más serias imperfecciones tienen todas las demás que, de todas, no se logra siquiera extraer una que por lo menos valga la pena dar la cara por el Señor Jesús. Si Israel, que tanto defiendes como el pueblo del “Eterno”, hacía las “chanchadas” que hacía y a pesar de ello seguía siendo el pueblo de Dios, ¿2000 años después vamos a juzgar al pueblo de Jehová porque no se ajusta a ciertas normas que en la mayoría de los casos son falsas calumnias de sus prestos opositores?

Lo que dices en tu párrafo a partir del “Así que no nos “rasguemos” las vestiduras” no es un sayo que me calce pero que a la Watchtower le cae de maravillas.

Yo lo decía por la reacción que asumen cuando se menciona el mismo “protagonista” que –desde nuestro punto de vista, claro– los trae de cabeza a ustedes y ni cuenta se dan.

¿Cómo puedes hablar todavía de “una enseñanza cristiana fundamental”?

¡A menos que te refieras a la nuestra!

Pues fíjate que no, para nada me estaba refiriendo a la de ustedes. Siento decepcionarte.

Mis reiterados respetos mi estimable forista.


 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Se esgrime el argumento que la Bibiia habla unicamente de sangre de animal y no sangre humana: Y muy apegados a lo literal.
Pregunto que problema habria por extender la norma a la humana, reptil, insecto etc?

Acaso no son los judios los primeros en extender las prohibiciones? Ej. No comen pollo con leche, que se desprende del verc: No cocinas al cabrito en la leche de su madre.
 
Estimado Alfageme

Estimado Alfageme

Ricardo ¿quién le planteó a Dios la cuestión de que todo lo que el hombre tiene lo daría en el interés de vida?.
¿No está envuelta la vida en casos extremos que se precise la sangre?. Este es uno de los casos en el que uno daría la espalda a Dios, pero sin duda que hay muchos más.
Saludos cordiales.

Paso a contestar estas dos preguntas tuyas para seguidamente dedicarme a considerar los mensajes que Melviton tuvo a bien responder:

1 - El diablo (Job 2:4). Podemos ver seguidamente que Satanás hiere a Job con una llaga que cubre toda esa piel de la que recién hablaba. Los ardores de tan molesta picazón excedían a los dolores de una muerte agónica, que de haber esta llegado, le hubiese sido un alivio. Para colmo, en vez de los consuelos de su mujer sufría sus reproches incitándolo contra Dios. Pero el v.10 concluye diciendo: "En todo esto no pecó Job con sus labios". Todavía no se habían perdido los ecos de las mentirosas palabras del diablo cuando este ya recibe su primer mentís a su vaticinio.

2 - Por supuesto que la vida está envuelta en casos extremos que se precisa sangre. Se le da la espalda a Dios al no donarla y la razón al diablo toda vez que se opta por la muerte no habiendo otras alternativas aparte de la transfusión.


Cordiales saludos
 
Estimado Melviton

Estimado Melviton

Respuesta a Mensaje # 849:

1 – He sido un predicador callejero pero nunca un pandillero pendenciero que disfrute zamarreando a quien se me cruce por el camino. Aquí en el Foro he discutido con irreligiosos y religiosos de todos los colores, en un intercambio interesante y en alguna medida, provechoso. No evito de ex profeso confrontaciones con Rav Lifman y Davidben; que no las busque no quiere decir que las rehúya. Ellos tampoco me provocan.

2 - ¡Qué mala memoria tienes! ¿Ya te olvidaste cuando no hace mucho encomié un mensaje en que respondías a Davidben de modo que ahora él ha escrito a Norberto que yo ando “frío” con él? No sobrepuse mi amistad con él a la razón que creí estaba de tu parte.

No soy de los que me paso husmeando por Internet y si ingenuamente me resultó esclarecedora la explicación de Rav Lifman sobre Gn 9:3,4 es porque no las tengo todas conmigo. Tampoco soy una enciclopedia viviente y actualizada. Desde su creación, puedo contar con los dedos de una mano las veces que visité Wikipedia.

Nunca apetecí saber mucho sino usar bien lo poco que sabía.

3 – El clamor del ángel en Ap 7:3 marca un tiempo:

“… hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios".

Eso quiere decir que hasta entonces todavía no los habían sellado. Esa es una escena futura; no está en nuestro presente ni en el pasado. Por eso dije que ni tiempo tendrán de claudicar pues estarán de pie con el Cordero en el monte de Sión (14:1).

4 – A mis años ya no requerimos de exhaustivos estudios como cuando era joven, pues ahora ya se ha desarrollado cierto “olfato” u “ojo clínico” que nos permite percibir a distancia lo que antes teníamos que buscar con lupa. Ya pasó el tiempo del mucho leer y ahora hay que aprender a sacarle el jugo a lo leído.

Ejercitar el discernimiento tiene que ver con el saber separar y distinguir las cosas por parecidas que parezcan, evitando la confusión. Esto es lo que se debe hacer con la instrucción dada a Noé y la Ley entregada a Israel.

6 – Tú estribas tu posición antagónica a Rav por el rechazo del Mesías que hizo Israel como nación, y yo me apoyo en el incontrastable hecho de la multitud de judíos, sacerdotes inclusive, que lo recibieron por tal. La misma incredulidad que tú ves en Rav es la que yo veo en ti, la que tú ves en mí y Norberto en todos nosotros juntos nada más porque diferimos en nuestra comprensión de las Escrituras. Tengámonos paciencia, pues hablando la gente se entiende.

7 – Si quieres darte el gusto de verme trenzado en alguna brega con algunos de tus antagonistas, en cualquier momento te brindaré esa satisfacción. Pero eso no será una riña de gallos sino un debate donde cada parte observará las reglas de la esgrima, comenzando por un cordial saludo antes de tocar a fondo.

Agradezco tu deferencia en haber respondido a mi mensaje, y salvo que ahora veas algún punto que requiera una obligada réplica tuya, prefiero que más bien pudiéramos contraernos a concluir cabalmente el asunto del epígrafe.

Seguidamente, sin embargo, contestaré tu mensaje # 851 con igual expectativa.


Recibe mis amables saludos
 
Re: ¿Cuán santa o sagrada es la sangre?

Ricardo
2 - Por supuesto que la vida está envuelta en casos extremos que se precisa sangre. Se le da la espalda a Dios al no donarla y la razón al diablo toda vez que se opta por la muerte no habiendo otras alternativas aparte de la transfusión.
Cordiales saludos
Saludos Racardo.
Sin embargo veo por tu respuesta que podrían ser válidas otras salidas cuando está envuelta la integridad a Dios cuando la vida está en juego.
Por ejemplo:Jehová Dios pone a la misma altura que la abstencion de la sangre la fornicación, ¿qué haría una cristiana ante el dilema de perder su vida o cometer fornicación?.¿Permitirá una cristiana dejarse que con ella cometieran relaciones sexuales de todo tipo porque así no la matarán?.
Yo estoy razonando bajo tu punto de vista de lo que tú entiendes por "salvar la vida", y la integridad a Dios. Es decir,¿de parte de quién se pone un cristiano/a,cuando por salvar su vida viola los mandamientos de Dios?.
La cosa es sencilla Ricardo,¿dónde entran las palabras de Jesús de que el quiera salvar su vida la perderá,pero el que la pierda por causa de mí la hallará?.

Saludos en día de domingo
 
Ínclito Melviton

Ínclito Melviton

Respuesta a Mensaje # 851:

1 – Hay coincidencias entre los diferentes grupos cristianos que parten de un mismo entendimiento de las Escrituras. El pragmatismo promueve las demás, pues lo que parece exitoso en otros ¿por qué no adoptarlo? Así piensan y así hacen.

2 – Cuando escribes: “Ustedes como organización” no sé a cuál te refieres, pues desde que el “ustedes” me incluye, no sé en cual me pones. Sé que integro un organismo vivo como miembro, en parte, del cuerpo de Cristo que es su iglesia; pero los cristianos evangélicos no constituimos una denominación que nos identifique como una alianza mundial; asociación internacional; conferencia regional; representación nacional; sede principal; Presidente; Director; etc. Nada de eso tenemos, aunque nuestra fe, doctrinas y prácticas estén desde antiguo extendidas por el mundo. Yo no puedo salir de Babilonia porque nunca entré, y no solamente animo a salir de ella a los que allí permanecen, sino también a los que están encerrados en la moderna Torre de Babel con sede en Brooklyn.

2 – Las “malas transfusiones” a las que te refieres fue hace mucho tiempo cuando a través de ellas se podían transmitir enfermedades infecciosas. Actualmente se toman prolijos recaudos con los donantes. De haber habido muertes en mi país, nunca supe; de vidas salvadas, siempre que se practicaron. Tengo familiares médicos que han actuado en emergencias.

3 – Bueno, para encontrar un TJ desprejuiciado creo que tendré que viajar a Costa Rica.

4 – Es que el mayor atractivo que tienen los TJ es el de haber negado las principales doctrinas del cristianismo histórico.

Ustedes se ufanan de lo que nosotros nos avergonzaríamos.

En la Pennsylvania de las últimas décadas del Siglo XIX existían muchos protestantes resentidos de que no se les hubiese prestado más atención o distinguido con cargos en las iglesias, lo que fue caldo de cultivo para lo que poco a poco fue desgranando el Pastor Russell, atrayéndose así a los descontentos y despechados, encantados ahora de proveerse de cierto conocimiento como para refutar a hermanos y pastores que no los consintieron.

.
Simpáticos saludos
 
Re: Estimado Melviton

Re: Estimado Melviton

quote_icon.png
Originalmente enviado por Ricardo

1 – He sido un predicador callejero pero nunca un pandillero pendenciero que disfrute zamarreando a quien se me cruce por el camino. Aquí en el Foro he discutido con irreligiosos y religiosos de todos los colores, en un intercambio interesante y en alguna medida, provechoso. No evito de ex profeso confrontaciones con Rav Lifman y Davidben; que no las busque no quiere decir que las rehúya. Ellos tampoco me provocan.

Mi estimado Ricardo. Me ha gustado mucho cómo has respondido en esta oportunidad y, aunque casi siempre empleas generalidades y no enfrentas directamente la argumentación por mí empleada, optas por referirte a otras peculiaridades propias de quien es todo un respetuoso caballero, revestido de sobra de notables cualidades didácticas que siempre disfruto, al igual que tú lo haces conmigo, cuando te leo y me entretengo por lo bien que siempre te expresasd. Lo que dices deque siempre has sido “un predicador callejero pero nunca un pandillero pendenciero” me ha hecho mucha gracia, pero nunca ha sido esa mi intención ni de lo que estaba oculto en mis palabras cuando te hago el reclamo de tu silencio ante lo que considero debe ser la oportunidad ideal para intervenir, sin ánimo de buscar alguna “pelea de gallos”, sino más bien como para frenar a veces ímpetus desbocados de algunos foristas que se creen árbitros y que pueden, por ese “autonombramiento” que ellos mismos se han endosado, vociferar y decir cuanto se les ocurra, sabiendo de antemano que casi nadie se atreverá a enfrentarlos de “tú a tú” porque saben de antemano, que en la comunidad cristiana mundial, se les tiene todavía como los “privilegiados” escogidos de Dios, a pesar de los pesares.

2 - ¡Qué mala memoria tienes! ¿Ya te olvidaste cuando no hace mucho encomié un mensaje en que respondías a Davidben de modo que ahora él ha escrito a Norberto que yo ando “frío” con él? No sobrepuse mi amistad con él a la razón que creí estaba de tu parte.

¡Claro que me acuerdo! Si hasta te agradecí el reconocimiento que me sorprendió sobremanera porque nunca lo esperaba así, de manera tan sorpresiva y, sobre todo, tan contundente.

No soy de los que me paso husmeando por Internet y si ingenuamente me resultó esclarecedora la explicación de Rav Lifman sobre Gn 9:3,4 es porque no las tengo todas conmigo. Tampoco soy una enciclopedia viviente y actualizada. Desde su creación, puedo contar con los dedos de una mano las veces que visité Wikipedia.

Entendido y anotado mi estimado Ricardo. Te externé lo que me pareció probable y debo aceptar tu aclaración.

Nunca apetecí saber mucho sino usar bien lo poco que sabía.

En esto también concuerdo contigo. Yo estoy en las mismas condiciones.

3 – El clamor del ángel en Ap 7:3 marca un tiempo:

“… hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios".

Eso quiere decir que hasta entonces todavía no los habían sellado. Esa es una escena futura; no está en nuestro presente ni en el pasado. Por eso dije que ni tiempo tendrán de claudicar pues estarán de pie con el Cordero en el monte de Sión (14:1).

Bueno, yo te di mi respuesta por lo que dijiste: “Por otro lado, desde nuestra conversión Dios ya nos ha ungido y sellado (1Co 1:21,22) con el Espíritu Santo de la promesa (Ef 1:13; 4:30)”. Aunque la aplicación del sellado comenzara desde que somos “llamados” por Dios para participar en su Reino Celestial, tal y como lo indicas, nosotros también creemos, por si no lo sabías, que el “sellado definitivo” se logra en el futuro cuando se “llenen” –por así decirlo– las “plazas vacantes” de los 144.000 israelitas espirituales que Dios compró de todo “pueblo, tribu, lengua y nación”. De allí lo que también te cité del apóstol Pablo cuando dijo: “hasta que hayamos corrido con aguante la carrera por la vida”. Entonces, en definitiva, creo que en esto sí congeniamos.

4 – A mis años ya no requerimos de exhaustivos estudios como cuando era joven, pues ahora ya se ha desarrollado cierto “olfato” u “ojo clínico” que nos permite percibir a distancia lo que antes teníamos que buscar con lupa. Ya pasó el tiempo del mucho leer y ahora hay que aprender a sacarle el jugo a lo leído.

Estoy de acuerdo contigo en esto también.

Ejercitar el discernimiento tiene que ver con el saber separar y distinguir las cosas por parecidas que parezcan, evitando la confusión. Esto es lo que se debe hacer con la instrucción dada a Noé y la Ley entregada a Israel.

También estoy de acuerdo contigo en este punto, pero como una generalidad. De manera “detallada” ya expuse la argumentación lógica y de un manifiesto sentido común que es muy difícil derribar de lo que por simple deducción, se extrae de Génesis 9:4. Sobre mi argumentación no te has referido ni tampoco me la has rebatido. Y no estoy diciendo que en Génesis 9:4 se diga lo mismo que se dijo en Levítico 17. No estoy hablando de eso, sino de lo que por simple deducción cuál debe ser la enseñanza que manifiestan ambas prohibiciones y lo que las une de manera sobresaliente.

6 – Tú estribas tu posición antagónica a Rav por el rechazo del Mesías que hizo Israel como nación, y yo me apoyo en el incontrastable hecho de la multitud de judíos, sacerdotes inclusive, que lo recibieron por tal. La misma incredulidad que tú ves en Rav es la que yo veo en ti, la que tú ves en mí y Norberto en todos nosotros juntos nada más porque diferimos en nuestra comprensión de las Escrituras. Tengámonos paciencia, pues hablando la gente se entiende.

Mi estimado amigo. Yo no estoy siendo “antagónico” con nadie, ni con Rav, menos con David a quien aprecio mucho y creo que hasta lo conozco de hace muchos años por los amenos “enfrentamientos” que hemos tenido la oportunidad de “intercambiar”. El me ha dicho lo que ha querido en el mayor de los respetos y yo también le he transmitido mi sentir hacia su posición, directo, con firme convicción, pero con profundo respeto hacia su persona a quien estimo, al igual que a ti, con especial diferencia.

En lo demás que dices estoy totalmente de acuerdo contigo en ese bonito sentimiento que manifiestas. Lo comparto en su totalidad. Y si en alguna forma no me he sabido explicar, no me juzgues mal, porque aunque haya sido directo y quizás a veces duro en expresar lo que siento, lo hago con la mejor de las intenciones y con el mayor de los respetos porque considero que la verdad que he aprendido, debo dejarla bien clara y eso, después de todo, (lo de dejar claro lo que cada uno cree como su verdad) no es exclusividad de los TJ. A quienes y en forma constante, se nos critica eso también.

7 – Si quieres darte el gusto de verme trenzado en alguna brega con algunos de tus antagonistas, en cualquier momento te brindaré esa satisfacción. Pero eso no será una riña de gallos sino un debate donde cada parte observará las reglas de la esgrima, comenzando por un cordial saludo antes de tocar a fondo.

Mi intención no es verte “trenzado” con nadie para satisfacer, ni mis ansias desaforadas por verte pelear, ni las de nadie. Lo que te quise dar a entender es que hay momentos en los que uno debe intervenir, por motivos que realmente valgan la pena, para frenar, desde un principio, una discusión que no llevará a ninguna parte. La observación que hice de Rav Lifman fue la de que nada tenía que estar haciendo (en el buen sentido) un judío no creyente en el Mesías Jesús, en un foro cristiano en donde la base que lo soporta es la creencia en el Señor Jesús. Y ve si lo que digo tiene cierto sentido que cuando él me aclaró –con cierta satisfacción y claridad– que no era “Mesiánico”, nadie, pero nadie de los supuestos “cristianos” que en ese momento estaban leyéndonos, “metió la cuchara” para decir absolutamente nada a nuestro valeroso y estimado Rav, en defensa del Cristo de sus “Amores”. ¡Sólo un “anticristiano” TJ tuvo la “osadía” de enfrentarlo en su mismo terreno y lo que recibió fue un tremendo apelativo al considerar como proveniente de una “cloaca” todo lo que consideré oportuno razonarlo de manera diferente a la suya.

Agradezco tu deferencia en haber respondido a mi mensaje, y salvo que ahora veas algún punto que requiera una obligada réplica tuya, prefiero que más bien pudiéramos contraernos a concluir cabalmente el asunto del epígrafe.

No tienes nada que agradecer. Para mí ha sido un verdadero placer. Sí te indico que esta respuesta más obedece a una consideración amena a tu respuesta, que a una provocación para que sea respondida porque la hice, lo con la finalidad de seguir con nuestro tema, sino como un reconocimiento a lo que bien explicas han sido tus intenciones.

Con toda la consideración de siempre.
 
Apreciado Melviton

Apreciado Melviton

Respuesta a Mensaje # 853:

1 – Sí, yo también considero correcto que se discurra cuánto se quiera del estudio de las Escrituras; lo que no podemos es citarlas como tales acomodándolas a nuestro propio criterio como ha hecho Alfageme con su ya famosa versión: “No meteréis sangre en el cuerpo”, por más que digas que ningún TJ aquí en el Foro haya incurrido en semejante agravio al Altísimo.

3 – Una cosa es que yo interprete más de lo que el texto expresa; otra cosa es que haga pasar como palabras de Dios lo que es mezcla de las suyas y las mías. Es cierto que “a buen entendedor pocas palabras bastan” pero tampoco es cosa de endilgárselas a Dios.

No, no queda a discreción incluir en una misma cláusula las palabras de Dios y las nuestras como si fuesen una sola frase.

A ti mismo debe resultarte espurio que la digna conclusión de Alfageme “nadie debía usarla para ningún propósito personal” se escriba como algo que el Eterno hubiera efectivamente dicho conforme a la cita dada.

Ahora, si afirmas que todos los TJ hacen como Alfageme, ya se pueden entender incongruencias tales como la particular santidad de la sangre y sagrado de la vida, así como el rechazo de las transfusiones.

5 – La mentira del diablo más citada en el Foro fue la de Job 2:4: “Piel por piel, todo lo que el hombre tiene lo dará por su vida”. Ha sido repetidamente aducida para demostrar que con tal de salvar su vida el hombre se transfunde a pesar de que se le advierta que eso es desobediencia. Con una mentira de Satanás jamás se puede afirmar una verdad. Nunca dije que no hablemos del diablo, sino que no apliquemos sus dichos como si fuesen verdaderos. No es al diablo a quien debamos dejar en el anonimato, sino a sus palabras con intención de respaldar con ellas lo que creemos ser verdad. ¿Acaso recibiremos más crédito por endosar lo que decimos con el aval de Satanás?

No dudas en darle la razón al diablo con lo que dijo, cuando él sólo opina de los hombres que él conoce, lo que no coincide con aquellos hombres a quienes el Señor conoce. Que el corazón de los hombres esté inclinado continuamente al mal, no quita que a muchos de ellos el Eterno los incline a atender su Palabra y hacer su voluntad, como el caso específico de Job.

Que religiones, confesiones, denominaciones y sectas del cristianismo estén llenas de imperfecciones no me sirve de excusa para soportar en mí mismo errores y falsedades que no tolero en otros.


Afectuosos saludos