Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Un consejo cuando leas el libro de Mormón es que ores antes y pidas la guía del Espíritu.
Y así lo hice cuando lo leí. Pero también recuerda que las Sagradas Escrituras recomiendan probar todo y desechar lo malo y tomar lo bueno y verdadero, y eso hice al leer el Libro de Mormón,
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Esta doctrina novedosa tiene un cierto soporte bíblico.
Juan 5:19 Respondió entonces Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, esto también lo hace el Hijo de igual manera.
Ese es tu sustento a la la creencia de que Dios antes fue hombre? Que tal otras pruebas, de las Sagradas Escrituras? Porque hasta donde yo se, la Biblia siempre ha enseñado que Dios siempre ha sido el mismo y siempre lo será, y no se ve ni rastro de la creencia de que Dios alguna vez fue hombre y que se "convirtió" en Dios.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Ese es tu sustento a la la creencia de que Dios antes fue hombre? Que tal otras pruebas, de las Sagradas Escrituras? Porque hasta donde yo se, la Biblia siempre ha enseñado que Dios siempre ha sido el mismo y siempre lo será, y no se ve ni rastro de la creencia de que Dios alguna vez fue hombre y que se "convirtió" en Dios.

¿Que quiere decir que Dios ha sido siempre el mismo?

Fíjate lo que dice Hebreos 13:8 "Jesucristo es el mismo ayer, y hoy y por los siglos.".
Sin embargo sabemos que Jescucristo crecía sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres (Lucas 2:52) y también sabemos que primero fue un espíritu y después se convirtió en un hombre.

También sabemos que una vez glorificado exclamó: "Toda potestad me es dada en el cielo y en la Tierra (Mateo 28:18). Esto quiere decir que hubo un momento en que no poseía todo el poder en el cielo y en la tierra, y que lo tuvo al resucitar.

En Filipenses 2:8 leemos "y hallándose en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, y se hizo obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. 9 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre;"

En Juan 17:5 “Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antesque el mundo fuese” ¿En su condición
mortal perdió su gloria o parte de ella?


Entonces. ¿Que quiere decir las Escrituras cuando dice que Dios siempre ha sido el mismo?
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

¿Que quiere decir que Dios ha sido siempre el mismo?

Fíjate lo que dice Hebreos 13:8 "Jesucristo es el mismo ayer, y hoy y por los siglos.".
Sin embargo sabemos que Jescucristo crecía sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres (Lucas 2:52) y también sabemos que primero fue un espíritu y después se convirtió en un hombre.

También sabemos que una vez glorificado exclamó: "Toda potestad me es dada en el cielo y en la Tierra (Mateo 28:18). Esto quiere decir que hubo un momento en que no poseía todo el poder en el cielo y en la tierra, y que lo tuvo al resucitar.

En Filipenses 2:8 leemos "y hallándose en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, y se hizo obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. 9 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre;"

En Juan 17:5 “Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antesque el mundo fuese” ¿En su condición
mortal perdió su gloria o parte de ella?


Entonces. ¿Que quiere decir las Escrituras cuando dice que Dios siempre ha sido el mismo?
Jesucristo, al ser hombre, se sometió a la naturaleza del hombre, y si, crecía y aumentaba en sabiduría, pero ahora hablamos de Dios Padre, no de Jesucristo.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Jesucristo, al ser hombre, se sometió a la naturaleza del hombre, y si, crecía y aumentaba en sabiduría, pero ahora hablamos de Dios Padre, no de Jesucristo.
Pero razona un poco hombre. Si te ofuscas no te vas a enterar de nada.
Lo que te estoy diciendo es que de Jesucristo se dice lo mismo que se dice del Padre.
Hebreos 13:8 "Jesucristo es el mismo ayer, y hoy y por los siglos.".
Pero sabemos que el fue espíritu y después hombre y que progresó y recibió todo poder después de resucitado.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Si se dice que Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre y paso por una experiencia terrenal. ¿No pudo haber pasado lo mismo con el Padre?
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Si se dice que Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre y paso por una experiencia terrenal. ¿No pudo haber pasado lo mismo con el Padre?
Podría, pero, hay pruebas de ello fuera de las enseñanzas de José Smith?
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Podría, pero, hay pruebas de ello fuera de las enseñanzas de José Smith?

Cuando las Escrituras dicen que Dios es el mismo ayer, hoy y siempre se refieren a que su forma de actuar es siempre la misma.

En 1 Nefi 10:18-19 leemos "Porque él es siempre el mismo ayer, hoy y para siempre; y la vía ha sido preparada para todos los hombres desde la fundación del mundo, si es que se arrepienten y vienen a él. Porque el que con diligencia busca, hallará; y los misterios de Dios le serán descubiertos por el poder del Espíritu Santo, lo mismo en estos días como en tiempos pasados, y lo mismo en tiempos pasados como en los venideros; por tanto, la vía del Señor es un giro eterno. ".

Como te decía antes lo que tienes que entender es que Dios no se tuerce a derecha ni a izquierda sino que siempre actúa de la misma manera y su vía es un giro eterno, por eso decimos que es un Dios inmutable.

En Mormón 9:9-10 dice: " Pues, ¿no leemos que Dios es el mismo ayer, hoy y para siempre, y que en él no hay variación ni sombra de cambio?
10 Ahora bien, si os habéis imaginado a un dios que varía, y en quien hay sombra de cambio, entonces os habéis imaginado a un dios que no es un Dios de milagros."

DyC 35:1 " Escuchad la voz del Señor vuestro Dios, el Alfa y la Omega, el principio y el fin, cuya vía es un giro eterno, el mismo hoy que ayer y para siempre."
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Podría, pero, hay pruebas de ello fuera de las enseñanzas de José Smith?

El discurso en los funerales de King Fóllett, una de las obras clásicas de la literatura de la Iglesia, fue pronunciado por el profeta José Smith, en la conferencia de la Iglesia efectuada en Nauvoo, Illinois, el 7 de abril de 1844, ante una congregación de aproximadamente veinte mil personas. La relación del discurso hace la observación de que era el discurso de los funerales del élder King Follett, amigo íntimo del Profeta, que había fallecido en un accidente el 9 de marzo. Las notas del discurso fueron tomadas por Willard Richards, Wilford Woodruff, Thomas Bullock y William Clayton. Esta reimpresión fue tomada de Documentary History of the Church, vol. 6, págs, 302-17. Dicho volumen aclara: “Este no era un informe estenográfico, sino que estaba preparado cuidadosa y hábilmente por estos hombres entrenados en informar y tomar notas. Evidentemente, existen algunas imperfecciones en el informe y algunos pensamientos expresados por el Profeta que no fueron pulidos y completados . . . ” Cabe mencionar que este discurso fue pronunciado dos meses antes de la muerte de José Smith. Durante este tiempo los enemigos de la Iglesia estaban sumamente activos, e indudablemente el Profeta anticipaba los inminentes acontecimientos. Amados hermanos, quisiera que esta asamblea me prestara su atención mientras os hablo sobre el tema de los muertos. El fallecimiento de nuestro querido hermano, King Follett, quien murió triturado en un pozo, al venírsele encima una tina llena de piedras, es lo que más me ha motivado a tratar este tema. Sus amigos y parientes me han rogado que tome la palabra, pero en vista de que muchos de los de esta congregación, que viven en esta ciudad y en otras partes, también han perdido algún amigo o pariente, desearía hablar sobre el tema en general y presentaros mis ideas, hasta donde pueda, y hasta donde me inspire el Espíritu Santo para tratar este asunto.

Necesito vuestras oraciones y fe a fin de poder recibir la instrucción de Dios Todopoderoso y el don del Espíritu Santo, para que pueda declarar cosas que son verdaderas y que fácilmente podáis comprender; y que el testimonio lleve a vuestro corazón y mente la convicción de la verdad de lo que diga. Rogad por que el Señor me fortalezca los pulmones y haga cesar el viento; y asciendan las oraciones de los santos a los oídos del Señor de los Ejércitos, porque las oraciones eficaces de los justos logran mucho. Hay poder en ellas, y verdaderamente creo que vuestras oraciones serán atendidas.

Antes de entrar de lleno en la investigación del tema que tengo por delante, deseo preparar el camino y presentar el asunto desde el principio, a fin de que podáis entenderlo. Expondré algunas cosas preliminares para que podáis entender el tema cuando llegue a él. No es mi intención halagar vuestros oídos con superfluidad de palabras, ni oratoria, ni con mucha sabiduría, sino que deseo edificaros con las verdades sencillas del cielo.

La naturaleza de Dios

En primer lugar, deseo retroceder hasta el principio, hasta la mañana de la creación. Allí está el punto de partida que debemos examinar, a fin de entender y conocer bien la mente, propósitos y decretos del Gran Elohim, que se sienta allá en los cielos, como lo hizo cuando fue creado este mundo. Se precisa que tengamos un entendimiento de Dios mismo en el principio. Si empezamos bien, es fácil seguir marchando bien; pero si empezamos mal, podemos desviarnos y será difícil volver a orientarnos.

No son sino pocos los seres en el mundo que entienden correctamente la naturaleza de Dios. La gran mayoría del género humano no comprende nada, ni lo que corresponde a lo futuro, en lo que respecta a su relación con Dios. No saben ni entienden la naturaleza de esa relación; y consiguientemente, no saben sino poco más que el animal, o poco más que comer, beber y dormir. Esto es todo lo que el hombre sabe acerca de Dios y su existencia, a menos que se dé el conocimiento por la inspiración del Omnipotente.
Si un hombre no aprende más que a comer, beber y dormir, y no entiende ninguno de los propósitos de Dios, el animal hace las mismas cosas: come, bebe, duerme y no sabe más acerca de Dios; sin embargo, sabe tanto como nosotros, a menos que podamos comprender la naturaleza divina mediante la inspiración del Dios Todopoderoso. Si los hombres no entienden el carácter de Dios, no se entienden a sí mismos. Quiero volver hasta el principio, y así elevar vuestras mentes a una esfera más elevada y un entendimiento más avanzado de lo que la mente humana generalmente anhela.
Deseo pedir a esta congregación, a todo hombre, mujer y niño, que cada cual conteste en su corazón: ¿Qué clase de ser es Dios? Preguntaos; escudriñad vuestros corazones y decid si alguno de vosotros lo ha visto, oído o se ha comunicado con El. Es una pregunta que podéis meditar mucho tiempo. Vuelvo a repetir la pregunta: ¿Qué clase de ser es Dios? ¿Lo sabe algún hombre o mujer? ¿Lo ha visto : alguno de vosotros, o lo ha oído, o se ha comunicado con El? He aquí la pregunta que quizás de hoy en adelante recibirá vuestra atención. Las Escrituras nos informan: “Esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.” (Juan 17:3).
Si un hombre no conoce a Dios, y tiene que preguntar qué clase de ser El es, si busca diligentemente en su propio corazón para saber si la declaración de Jesús y los apóstoles es cierta, comprenderá que no tiene la vida eterna; porque no puede haber vida eterna sino de acuerdo con este principio.
Mi primer objeto es conocer el carácter del unico Dios sabio y verdadero, y qué clase de ser El es; y si soy tan afortunado que llego a comprender a Dios, y explico o hago llegar los principios a vuestros corazones, de tal manera que el Espíritu los sella sobre vosotros, entonces de aquí en adelante todo hombre y mujer debe guardar silencio, taparse la boca con la mano y nunca jamás volver a levantar la mano o la voz y decir algo contra el varón de Dios o los siervos de Dios. Mas si no lo hago, tengo la obligación de renunciar a toda pretensión de recibir revelaciones e inspiraciones o de ser profeta; y sería un falso maestro como el resto del mundo, entonces me recibirían como su amigo y nadie atentaría contra mi vida. Pero si todos los maestros religiosos tuviesen la sinceridad suficiente para renunciar a sus pretensiones de santidad, cuando se pone de manifiesto su ignorancia del conocimiento de Dios, se hallarían en tan mala situación como yo, por lo menos; y bien pueden matar a otros maestros falsos, junto conmigo, si yo soy falso. Si alguien cree y dice que soy un maestro falso, entonces, de acuerdo con el mismo principio, tenemos razón para quitar la vida a todo maestro falso, ¿y dónde pararía el derrame de sangre? ¿Y quién no sufriría?
El privilegio de la libertad religiosa
Pero no hay que altercar con ningún hombre a causa de su religión; y todos los gobiernos deberían permitir que cada hombre ejerciera su religión sin ser molestado. Ningún hombre está autorizado para quitarle la vida a otro, por motivo de diferencias en cuanto a la religión, la cual todas las leyes y gobiernos deberían de tolerar o proteger, ya fuere verdadera o falsa. Todo hombre tiene el derecho natural, y en nuestro país, el derecho constitucional, de ser un profeta falso así como uno verdadero. Si yo verdaderamente muestro que tengo la verdad de Dios, y puedo probar que noventa y nueve de cada cien de los que profesan ser ministros religiosos son maestros falsos sin autoridad, que pretenden tener las llaves del reino de Dios sobre la tierra, y me pongo a matarlos porque son maestros falsos, bañaría el mundo entero en sangre.
Demostraré que el mundo está en error, declarando lo que Dios es. Voy a preguntar acerca de Dios, porque quiero que todos vosotros lo conozcáis y que os familiaricéis con El; y si os doy el conocimiento de El, toda persecución contra mí debería de cesar. Así sabréis que yo soy su siervo; porque hablo como uno que tiene autoridad.
Dios es un hombre glorificado
Volveré al principio, antes que el mundo fuese, para mostrar la clase de ser que Dios es. ¿Cómo era Dios en el principio? ¡Sean abiertos vuestros oídos y escuchad, oh confines de la tierra, porque os lo mostraré por medio de la Biblia, y os declararé los propósitos de Dios respecto de la raza humana, y porqué interviene en los asuntos de los hombres!
¡Dios una vez fue como nosotros ahora; es un hombre glorificado, y está sentado sobre su trono allá en los cielos! Ese es el gran secreto. Si el velo se partiera hoy, y el Gran Dios que conserva este mundo en su órbita y sostiene todos los mundos y todas las cosas con su poder, se manifestase a sí mismo, digo que si fueseis a verlo hoy, lo veríais en la forma de un hombre, así como vosotros os halláis en toda la persona, imagen y forma misma de un hombre; porque Adán fue creado a la misma imagen y semejanza de Dios, y de El recibió instrucciones, y anduvo y conversó con El, como un hombre habla y se comunica con otro.
A fin de entender el tema de los muertos, para consuelo de aquellos que lloran la pérdida de sus amigos, se precisa que entendamos la naturaleza y carácter de Dios y cómo llegó a serlo; porque os voy a decir cómo llegó a ser Dios. Hemos imaginado y supuesto que Dios fue Dios por todas las eternidades. Voy a refutar esa idea, y haré a un lado el velo para que podáis ver.
Para algunos éstas son ideas incomprensibles, pero son sencillas. El primer principio del evangelio es saber con certeza la naturaleza de Dios, y saber que podemos conversar con El como un hombre conversa con otro, y que en un tiempo fue hombre como nosotros; sí, que Dios mismo, el Padre de todos nosotros, habitó sobre una tierra, como Jesucristo mismo lo hizo; y voy a probarlo por medio de la Biblia.
La vida eterna es conocer a Dios y Jesucristo
¡Oh, si me hallase en un lugar adecuado para declararlo, y tuviese la trompeta de un arcángel a fin de comunicarlo de tal manera que la persecución cesara para siempre! ¿Qué dijo Jesús? Las Escrituras nos hacen saber que Jesús dijo: “asi como el Padre tiene el poder en sí mismo, así también tiene al Hijo el poder”—¿para hacer qué? Pues lo que el Padre hizo. La respuesta es obvia: poner su cuerpo y volverlo a levantar. Jesús, ¿qué vas a hacer? Poner mi vida como la puso mi Padre, y volverla a tomar. ¿Lo creéis? Si no lo creéis, no creéis la Biblia. Las Escrituras lo dicen, y yo desafío a toda la sabiduría y la ciencia, y a todas las fuerzas combinadas de la tierra y del infierno juntos, a que lo impugnen. Esta pues es la vida eterna: conocer al unico Dios sabio y verdadero; y vosotros mismos tenéis que aprender a ser dioses, y a ser reyes y sacerdotes de Dios, como lo han hecho todos los dioses antes de vosotros, a saber, el avanzar de un grado pequeño a otro, y de una capacidad pequeña a una mayor, yendo de gracia en gracia, de exaltación en exaltación, hasta que logréis la resurrección de los muertos y podáis morar en fulgor eterno y sentaros en gloria, como aquellos que se sientan sobre tronos de poder infinito. Y quiero que sepáis que en los últimos días, Dios no está jugando ni con vosotros ni conmigo, aunque ciertos individuos anden proclamando su nombre.
Los justos han de morar en fuegos eternos
Estos son los primeros principios de la consolación. Es un gran consuelo para los que lloran, cuando tienen que separarse de un esposo, esposa, padre, madre, hijo o pariente amado, saber que aunque el cuerpo terrenal es sepultado y se deshace, nuevamente se levantarán para morar en fuegos eternos en una gloria inmortal, para nunca más volver a afligirse, sufrir o morir, sino que serán herederos de Dios y coherederos con Jesucristo. ¿Qué significa esto? Heredar el mismo poder, la misma gloria y la misma exaltación hasta llegar al estado de un dios y ascender al trono de poder eterno, así como los que han ido antes. ¿Qué hiciste tú, Jesús? Hice aquellas cosas que vi hacer a mi Padre cuando venían a su existencia los mundos. Mi Padre labró su reino con temor y temblor, y yo debo hacer lo mismo; y cuando gane mi reino, lo presentaré a mi Padre, a fin de que El pueda tener reino sobre reino y así aumentar en gloria. Entonces tendrá una exaltación mayor, y yo tomaré su lugar y así también lograré la exaltación. De modo que Jesús sigue los pasos de su Padre y hereda lo que Dios hizo antes; y así Dios es glorificado y ensalzado mediante la salvación y exaltación de todos sus hijos. Es tan claro que no se puede disputar; y así habéis aprendido algunos de los primeros principios del evangelio, acerca de los cuales tanto se ha dicho.
Cuando subís por una escalera, tenéis que empezar desde abajo y ascender paso por paso hasta que llegáis a la cima; y así es con los principios del evangelio: tenéis que empezar por el primero, y seguir adelante hasta aprender todos los principios que atañen a la exaltación. Pero no los aprenderéis sino hasta mucho después que hayáis pasado por el velo. No todo se va a entender en este mundo; la obra de aprender nuestra salvación y exaltación aun más allá de la tumba será grande. Supongo que no se me permitirá entrar en un estudio de lo que no se encuentra en la Biblia. Si lo hiciera, hay aquí tantos hombres “sabios” que creo que gritarían “traición” y me matarían. De modo que me referiré a la antigua Biblia, y por hoy seré un comentador.
El significado de las escrituras hebreas
Voy a comentar la primera palabra hebrea que se halla en la Biblia; voy a hacer comentarios sobre la primera frase de la historia de la creación en la Biblia— “Berosheit”. Deseo analizar la palabra: “Baith”: en, por, mediante, y todo lo demás; “Rosh”: la cabeza; “Sheit”: terminación gramática. Cuando el hombre inspirado lo escribió, no le puso la palabra baith. Un anciano judío sin autoridad se la añadió; le pareció de mal gusto que empezara a hablar acerca de la cabeza. Al principio decía: “La cabeza, el principal de los Dioses hizo aparecer a los Dioses.” (nota traductor: a mi en ingles me parece que dice “”La cabeza de los dioses trajo sucesivamente a los dioses.”) ese es el significado verdadero de la frase. “Baurau” significa hacer aparecer, manifestar. Si no lo creéis, tampoco creéis al varón instruido de Dios. Los sabios no pueden enseñaros más de lo que yo os he dicho. Así que el Dios principal hizo aparecer a los Dioses en el gran concilio.
Ahora voy a adaptar y simplificar la frase. ¡Oh abogados, doctores y sacerdotes que me habéis perseguido, quiero que sepáis que, el Espíritu Santo sabe algunas cosas tan bien como vosotros! El Dios a la cabeza convocó a los dioses y se reunieron en concilio para crear el mundo. Estos grandes Consejeros se sentaron a la cabeza, allá en los cielos y presenciaron la creación de los mundos que fueron creados en esa época. Cuando digo doctores y abogados, me refiero a los doctores y abogados de las Escrituras. Hasta aquí lo he hecho sin explicación, para que se incomoden los abogados, y todos se rían de ellos. A algunos sabios doctores se les ocurrirá decir que las Escrituras declaran tal y tal cosa; que debemos aceptarlas precisamente como están y que no deben ser alteradas. Pero os voy a mostrar un error que contienen.
Tengo una versión antigua del Nuevo Testamento en latín, hebreo, alemán y griego. He estado leyendo el alemán, y veo que es la traducción (casi) más correcta, y la que mejor concuerda con las revelaciones que Dios me ha dado durante los últimos catorce años. Se refiere a Jacobo, hijo de Zebedeo. En inglés sería Jacob. En el Nuevo Testamento (en inglés) se ha traducido por James (Santiago). Pero si se dieron las llaves a Jacobo, bien podríamos hablar acerca de Santiago por toda la eternidad y jamás obtener las llaves. En el versículo 21 del cuarto capítulo de Mateo, la antigua traducción alemana da el nombre de Jacob (Jacobo) en lugar de James (Santiago).
Los doctores (me refiero a los doctores de la ley, no a los médicos) dicen: “Si predicas algo que no concuerde con la Biblia, te acusaremos de traición.” ¿Cómo podemos escapar a la condenación del infierno, a menos que Dios esté con nosotros y nos dé revelaciones? Los hombres nos sujetan con cadenas. El latín dice Jacobo, que significa Jacob; el hebreo dice Jacobo, el griego dice Jacobo y el alemán dice Jacobo. Aquí pues tenemos el testimonio de cuatro contra uno. Doy gracias a Dios que tengo este libro viejo; pero más le doy las gracias por el don del Espíritu Santo. Ciertamente podré tener el libro más antiguo del mundo, pero (también) tengo en mi corazón el libro más antiguo, es decir, el don del Espíritu Santo. Tengo los cuatro testamentos. Venid, hombres sabios, y leed si podéis. No habría presentado este testimonio, si no hubiese sido para comprobar el significado de la palabra rosh, el cabeza, el padre de los Dioses. No habría hablado de ello, sino para mostrar que tengo razón.
El concilio de los Dioses
En el principio, la cabeza (el lider o el principal) de los Dioses convocó un concilio de los dioses; y se reunieron y proyectaron un plan para crear el mundo y poblarlo. Cuando empezamos a aprender de este modo, empezamos a conocer al unico Dios verdadero, y qué clase de ser tenemos que adorar. Si tenemos conocimiento de Dios, comenzamos a entender cómo allegarnos a El, y cómo hemos de pedir a fin de recibir una respuesta.
Cuando entendemos la naturaleza de Dios, y aprendemos cómo allegarnos a El, entonces El empieza a manifestarnos los cielos y a explicar todas las cosas. Cuando estemos dispuestos a venir a El, también El estará dispuesto a venir a nosotros.
Ahora quisiera preguntar a todos los que me escuchan, ¿por qué es que los hombres doctos que predican la salvación, dicen que Dios creó los cielos y la tierra de la nada? Es porque carecen de instrucción en cuanto a las cosas de Dios, y no tienen el don del Espíritu Santo; acusan de blasfemia al que contradice sus ideas. Si les decís que Dios hizo el mundo de algo, os llaman necios. Pero yo he recibido instrucción, y sé más que todo el mundo; por lo menos, el Espíritu Santo sabe, y El está dentro de mí, y El sabe más que todo el mundo; y yo me asociaré con El.
El significado de la palabra crear
Si preguntamos a los sabios doctores por qué dicen que el mundo fue hecho de la nada, ellos nos contestan: ¿No dice la Biblia que Dios creó el mundo? Y concluyen, por la palabra crear, que debe haber sido hecho de la nada. Pero la palabra crear vino del término hebreo “baurau”, que no significa crear de la nada, sino manifestar, dar forma, organizar, así como un hombre organiza los materiales y construye un barco. De manera que podemos deducir que Dios tenía a su disposición los materiales para organizar el mundo de todo aquel caos, es decir materia caótica, que es elemento, y en el cual mora toda gloria. Los elementos han existido desde que nosotros tuvimos existencia. Los principios puros de los elementos son principios que jamás pueden ser destruidos; pueden ser organizados, y reorganizados, mas no destruidos. No tuvieron principio. Y no pueden tener fin.
El Espíritu inmortal
Tengo otro asunto que tratar, que tiene por objeto exaltar al hombre; pero me es imposible hablar mucho sobre él. Por consiguiente, lo mencionaré brevemente, porque el tiempo no me permitirá decir todo. Se relaciona con el tema de la resurrección de los muertos, a saber, el alma, la mente del hombre, el espíritu inmortal. ¿De dónde vino? Todos los sabios y los doctores de teología dicen que Dios lo creó en el principio; pero no es así. Según mi concepto, esta idea rebaja al hombre. No creo en esa doctrina; tengo mejor criterio. Oídlo, todos los confines del mundo, porque Dios me lo ha dicho; y si no me creéis, no por eso invalidáis el efecto de la verdad. Voy a poner en ridículo al hombre que no lo crea, antes de terminar. Voy a hablar de cosas más nobles.
Decimos que Dios mismo es un Ser que existe por sí mismo. ¿Quién os lo dijo? Es correcto, pero ¿cómo entró en nuestra cabeza? ¿Quién os dijo que el hombre no existió en igual manera, de acuerdo con los mismos principios? El hombre efectivamente existe de acuerdo con los mismos principios. Dios preparó un tabernáculo o cuerpo y puso un espíritu dentro de él, y se tornó alma viviente. (Refiriéndose a la Biblia vieja) ¿Cómo dice en hebreo? En el hebreo no dice que Dios creó el espíritu del hombre. Dice así: “Dios hizo al hombre de la tierra, y puso en él el espíritu de Adán, y así fue cuerpo viviente.”
La mente o inteligencia que el hombre posee es coigual con Dios. Yo sé que mi testimonio es verdadero; por tanto, al referirme a éstos que hoy lloran, ¿qué han perdido? Sus parientes y amigos solamente quedan separados de sus cuerpos por un corto tiempo: sus espíritus que existieron con Dios han salido del tabernáculo de barro tan sólo por un momento, por decirlo así; y ahora existen en un lugar donde pueden conversar juntos, tal como lo hacemos nosotros en la tierra. Estoy hablando de la inmortalidad del espíritu del hombre. ¿Sería lógico decir que la inteligencia de los espíritus es inmortal, y sin embargo, que tuvo un principio? La inteligencia de los espíritus no tuvo principio, ni tendrá fin, Esto es buen razonamiento. Lo que tiene principio puede tener fin. Nunca hubo tiempo en que no hubo espíritus, porque ellos y nuestro Padre Celestial son coiguales [es decir, coeternos].
Deseo razonar un poco más sobre el espíritu del hombre, porque me estoy refiriendo al cuerpo y el espíritu del hombre, con respecto al tema de los muertos. Me quito el anillo del dedo y lo comparo a la mente del hombre: a la parte inmortal, porque no tiene principio. Supongamos que lo partimos en dos; ahora tiene un principio y un fin, pero si lo volvemos a unir sigue siendo un círculo eterno. Así es con el espíritu del hombre. Vive el Señor, que si tuvo un principio, tendrá un fin. Todos los necios, y todos los hombres instruidos y sabios que han existido desde el principio de la creación, que dicen que el espíritu del hombre tuvo un principio, afirman que debe tener un fin; y si esa doctrina es verdadera, entonces la doctrina de la aniquilación es verdadera. Pero si tengo razón, puedo proclamar sin temor, desde los tejados de las casas, que Dios nunca tuvo el poder para crear el espíritu del hombre. Dios no pudo haberse creado a sí mismo.
La inteligencia es eterna y existe sobre un principio que es existente por sí mismo. Es un espíritu, de eternidad en eternidad, y nada tiene de creado. Todas las mentes y espíritus que Dios ha enviado al mundo están capacitados para progresar.

Dios y los primeros principios, en lo que al hombre atañen, existen por sí mismos. Dios, hallándose en medio de espíritus y gloria, porque era más inteligente, consideró propio instituir leyes por medio de las cuales los demás podrían tener el privilegio de avanzar como El lo había hecho. La relación que entre Dios y nosotros existe nos coloca en situación tal, que podemos ampliar nuestro conocimiento. El tiene el poder de instituir leyes para instruir a las inteligencias más débiles, a fin de que puedan ser exaltadas como El, y recibir una gloria tras otra, así como todo conocimiento, poder, gloria e inteligencia que se requiere para salvarlos en el mundo de los espíritus.
Esta es una buena doctrina. Tiene buen gusto. Puedo saborear los principios de vida eterna, y vosotros también. Me vienen a mí por las revelaciones de Jesucristo; y sé que cuando os declaro estas palabras de vida eterna, así como me son comunicadas, vosotros gustáis de ellas, y sé que las creéis. Decís que la miel es dulce; también yo. En igual manera, puedo probar el espíritu de la vida eterna. Sé que es bueno; y cuando os hablo de estas cosas que me fueron dadas por la inspiración del Espíritu Santo, ciertamente las tendréis que recibir por ser dulces, y más y más os regocijaréis.
La relación entre el hombre y Dios
Deseo hablar más de la relación entre el hombre y Dios. Os abriré los ojos en lo que respecta a vuestros muertos. Todas las cosas que Dios en su infinita sabiduría ha considerado digno y propio revelarnos mientras nos hallamos en el estado mortal, en lo que concierne a nuestros cuerpos mortales, nos son reveladas en lo abstracto, e independientes de afinidad con este tabernáculo mortal, pero son reveladas a nuestros espíritus precisamente como si no tuviésemos cuerpos; y las revelaciones que salvarán nuestros espíritus salvarán nuestros cuerpos. Dios nos las revela en vista de que no hay disolución eterna del cuerpo o tabernáculo. De ahí, la responsabilidad, la terrible responsabilidad que descansa sobre nosotros en cuanto a nuestros muertos; porque todos los espíritus que no han obedecido el evangelio en la carne, deben obedecerlo en el espíritu o ser condenados. ¡Qué pensamiento tan solemne, tan terrible! ¿No se puede hacer nada? ¿No hay preparación, ninguna salvación para nuestros padres y amigos que han muerto sin tener la oportunidad de obedecer los decretos del Hijo del Hombre? ¡Ruegese a Dios que yo tuviera cuarenta días y noches para poder deciros todo! Yo os haría saber que no soy “profeta caído”.
Nuestra responsabilidad mayor
¿Qué se ha prometido respecto del tema de la salvación de los muertos? ¿y qué clase de personas son las que pueden ser salvas, aunque sus cuerpos se estén deshaciendo y descomponiendo en la sepultura? Cuando El nos da sus mandamientos para instruirnos, está teniendo en cuenta la eternidad; porque Dios nos considera como si estuviésemos en la eternidad. Dios mora en la eternidad, y no ve las cosas como nosotros.
La responsabilidad mayor que Dios ha puesto sobre nosotros en este mundo es procurar por nuestros muertos. El apóstol dice que ellos sin nosotros no pueden ser perfeccionados (Hebreos 11: 40); porque es necesario que el poder de ligar esté en nuestras manos a fin de ligar a nuestros hijos y nuestros muertos para la dispensación en la que se han de cumplir las promesas que Jesucristo hizo antes de la fundación del mundo para la salvación del hombre.
Ahora voy a referirme a ellos. Voy a ponerme de acuerdo con Pablo. Te digo, Pablo, que vosotros no podéis perfeccionaros sin nosotros. Se precisa que aquellos que han muerto antes, así como los que vendrán después, reciban la salvación junto con nosotros; y ésta es la obligación que Dios ha puesto sobre el hombre. Por tanto, dijo Dios: “Yo os envío a Elias el profeta, antes que venga el día de Jehová grande y terrible. El convertirá el corazón de los padres a los hijos, y el corazón de los hijos a los padres: no sea que yo venga, y con destrucción hiera la tierra.” (Malaquías 4:5, 6).
Una salvación para los hombres
Tengo algo que decir en cuanto a lo que Dios tiene dispuesto de conformidad con la condición del hombre, disposiciones que se hicieron desde antes de la fundación del mundo. ¿Qué ha dicho Jesús? Todo pecado, toda blasfemia y toda transgresión, salvo una, que el hombre pudiere cometer, serán perdonados; y habrá una salvación, sea en este mundo o en el mundo venidero, para todos los hombres que no hayan cometido el pecado imperdonable, ya que así se ha providenciado en este mundo, o en el mundo de los espíritus. De modo que según lo que Dios ha dispuesto, se puede buscar y salvar a todo espíritu en el mundo eterno, a menos que haya cometido ese pecado imperdonable que no le puede ser remitido ni en este mundo ni en el mundo de los espíritus. Dios ha efectuado una salvación para todos los hombres, a menos que hayan cometido un cierto pecado; y todo hombre que tenga un amigo en el mundo eterno puede salvarlo, a menos que éste haya cometido el pecado imperdonable. Y así podéis ver hasta qué punto vais a ser salvadores.
El pecado imperdonable
El hombre no puede cometer el pecado imperdonable después de deshecho su cuerpo, y hay una manera en que puede librarse. El conocimiento salva al hombre; y en el mundo de los espíritus ningún hombre alcanzará la exaltación sino por el conocimiento. Mientras un hombre no haga caso de los mandamientos, tendrá que permanecer sin salvación. Si un hombre tiene conocimiento, se puede salvar; no obstante, si ha cometido pecados graves, tendrá que ser castigado por ellos. Pero cuando consiente en obedecer el evangelio, ya sea aquí o en el mundo de los espíritus, entonces puede ser salvo.
El hombre es su propio verdugo y su propio juez. Por eso se dice que irá al lago ardiente de fuego y azufre. El tormento de una mente frustrada es para el hombre tan intenso como un lago ardiente de fuego y azufre. Digo que así es el tormento del hombre.
Conozco las Escrituras y las entiendo. Digo que ningún hombre puede cometer el pecado imperdonable después de deshecho su cuerpo, ni tampoco puede hacerlo en esta vida sino hasta que haya recibido el Espíritu Santo; pero tiene que ser en este mundo. Por consiguiente, se llevó a cabo la salvación de Jesucristo para todos los hombres, a fin de lograr el triunfo sobre el diablo; de modo que sí esta salvación no le llega en un lugar, podrá llegarle en otro, porque El se dio por Salvador. Todos sufrirán hasta que obedezcan a Cristo mismo.
La contienda en los cielos fue provocada porque Jesús dijo que ciertas almas no podrían ser salvas; y el diablo dijo que salvaría a todos; y presentó sus planes ante el gran concilio, el cual votó a favor de Jesucristo. El diablo entonces se rebeló contra Dios, y fue expulsado con todos aquellos que lo apoyaron. (Perla de Gran Precio, Moisés 4:1-4; Abraham 3: 23-38). < strong> El perdón de los pecados
Todos los pecados serán perdonados con excepción del pecado contra el Espíritu Santo; porque Jesús salvará a todos menos a los hijos de perdición. ¿Qué debe hacer el hombre para cometer el pecado imperdonable? Debe haber recibido el Espíritu Santo, deben habérsele manifestado los cielos, y después de haber conocido a Dios, pecar contra El. Después que un hombre ha pecado contra el Espíritu Santo, no hay arrepentimiento para él. Tiene que decir que el sol no brilla, cuando lo está mirando; negar a Jesucristo, cuando se le han manifestado los cielos, y renegar del plan de salvación mientras sus ojos están viendo su verdad; y desde ese momento empieza a convertirse en enemigo. Así sucede con muchos apóstatas de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Cuando un hombre empieza a hacerse enemigo de esta obra, me persigue, trata de matarme y nunca cesa de querer verter mi sangre. Entra en él el espíritu del diablo, el mismo espíritu que tuvieron los que crucificaron al Autor de la Vida, el mismo espíritu que peca contra el Espíritu Santo. Uno no puede salvar a tales personas, no se les puede llevar al arrepentimiento; están en guerra contra uno, como el diablo, y terribles son las consecuencias. Os recomiendo a todos que tengáis cuidado de lo que hacéis, o algún día hallaréis que habéis sido engañados. Refrenaos; no os dejéis llevar; no obréis precipitadamente, quizá podréis salvaros. Si se halla en vosotros un espíritu de rencor, no obréis sin reflexionar. Podréis decir que tal o cual hombre es pecador; pero sí se arrepiente, será perdonado. Sed cautelosos; esperad. Si encontráis un espíritu que busca el derrame de sangre, el asesinato, ese espíritu no es de Dios, sino del diablo. De la abundancia del corazón del hombre habla la boca.
Los mejores hombres producen las mejores obras. El hombre que os declara las palabras de vida es el que puede salvaros. Os amonesto a que os cuidéis de toda persona inicua que peca contra el Espíritu Santo, porque no hay redención para ellos ni en este mundo ni en el mundo venidero.
Podría empezar desde el principio y repasar todos los temas de interés concernientes a la relación que tiene el hombre con Dios, si tuviera tiempo. Yo puedo penetrar los misterios, puedo entrar libremente en los mundos eternos, porque Jesús dijo: “En la casa de mi Padre muchas moradas hay: de otra manera os lo hubiera dicho: voy, pues, a preparar lugar para vosotros.” (Juan 14:2) Pablo dice: “Otra es la gloria del sol, y otra la gloria de la luna, y otra la gloria de las estrellas: porque una estrella es diferente de otra en gloria. Así también es la resurrección de los muertos.” (1 Corintios 15:41) ¿Qué tenemos para consolarnos, con relación a los muertos?
Tenemos motivo para abrigar mayor esperanza y consuelo respecto de nuestros muertos, que cualquier otro pueblo sobre la tierra, porque los hemos visto conducirse rectamente entre nosotros, y los hemos visto quedarse dormidos en los brazos de Jesús; y los que han muerto en la fe se hallan ahora en el reino celestial de Dios; y allí es como la gloria del sol.
Vosotros que lamentáis, tenéis ocasión para regocijar, hablando de la muerte del hermano King Follett, porque vuestro esposo y padre ha ido a esperar hasta el tiempo de la resurrección de los muertos, hasta la perfección de los demás; porque al llegar la resurrección, vuestro amigo se levantará con felicidad perfecta e irá a una gloria celestial, mientras que muchos tendrán que esperar miles de años antes que puedan recibir bendiciones semejantes; y vuestras expectaciones y esperanzas sobrepujan grandemente lo que el hombre puede concebir; pues ¿por qué nos lo ha revelado Dios?
Me siento facultado para declarar, por la autoridad del Espíritu Santo, que no tenéis razón para temer; porque él ha ido a la morada de los justos. No lamentéis, no lloréis. Lo sé por el testimonio del Espíritu Santo que hay dentro de mí; y vosotros podréis esperar que vuestros amigos salgan para encontraros en la mañana del mundo celestial.
¡Regocijate, oh Israel! Todos tus amigos que han sido asesinados por la causa de la verdad en las persecuciones, triunfarán gloriosamente en el mundo celestial, mientras que sus asesinos se hallarán en tormento por siglos, aun hasta que hayan pagado el último cuadrante. Digo esto para el beneficio de los extranjeros.
Tengo un padre, hermanos, hijos y amigos que han pasado al mundo de los espíritus. Se han ausentado tan sólo por un momento. Se hallan en el espíritu, y dentro de poco nos volveremos a ver. Pronto llegará el tiempo en que sonará la trompeta. Cuando salgamos de aquí, saludaremos a nuestras madres, padres, amigos y todos aquellos a quienes amamos, que han dormido en Jesús. No habrá temor de chusmas, ni persecuciones, ni litigios perversos, ni arrestos, sino que todo será una eternidad de dicha.
Dejaré de tratar este tema para hablar un poco sobre el asunto del bautismo. El bautismo de agua, si no lo acompaña el bautismo de fuego y del Espíritu Santo, no tiene ningún valor: están unidos necesaria e inseparablemente. El individuo debe nacer del agua y del Espíritu para poder entrar en el reino de Dios. En la versión alemana, el texto me apoya en igual manera que en las revelaciones que he presentado y enseñado sobre este punto durante los últimos catorce años. Tengo el testimonio para hacerlos callar. Mi testimonio ha sido verdadero todo el tiempo. Se puede hallar en la declaración de Juan el Bautista. (Lee del alemán.) Juan dice: “Yo os bautizo con agua, mas cuando venga Jesús, que tiene el poder (o llaves), él administrará el bautismo de fuego y del Espíritu Santo.” ¿Y ahora qué dice todo el mundo sectario? Si este testimonio es verdadero, todos están condenados tan terminantemente como lo expresa cualquier anatema. Yo sé que el texto es verdadero. Pido a todos los alemanes que saben que es cierto, lo afirmen, diciendo, “Sí”. (Fuertes gritos de “Sí”.)
Alejandro Campbell (un pastor protestante de la epoca), ¿Cómo vas a salvar al pueblo sólo con agua? Pues Juan dijo que su bautismo no tendría valor sin el bautismo de Jesucristo. “Por tanto, a dejando el comienzo de la doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección, no echando otra vez el fundamento del arrepentimiento de obras muertas, y de la fe en Dios, de la a doctrina de bautismos, y de la imposición de manos, y de la resurrección de los muertos y del juicio eterno. Y esto haremos, si Dios en verdad lo permite.” (Hebreos 6:1-3)
Hay un Dios, un Padre, un Jesús, una esperanza de nuestra vocación, un bautismo . . . Muchos dicen que el bautismo no es esencial a la salvación; pero esta clase de enseñanza pone los cimientos de su condenación. Yo tengo la verdad, y desafío a todo el mundo a impugnarme, si puede.
Ahora he predicado un poco de latín, un poco de hebreo, griego y alemán, y he cumplido todo. No soy tan ignorante como muchos me han considerado. Los alemanes saben que leí el alemán correctamente.
El llamado al arrepentimiento
¡Escuchad, vosotros, los confines de la tierra: todos los que sois sacerdotes, todos los que sois pecadores y todos los hombres! ¡Arrepentios, arrepentios y obedeced el evangelio! ¡Volveos a Dios, porque vuestra religión no os salvará, y seréis condenados! No digo por cuánto tiempo. Se ha dicho algo concerniente a que todos los hombres serán redimidos del infierno; pero yo digo que aquellos que pecan contra el Espíritu Santo no pueden ser perdonados ni en este mundo ni en el venidero: tendrán que sufrir la segunda muerte. Los que cometen el pecado imperdonable son condenados a Gnolom, para morar en el infierno por los siglos de los siglos. Por haber provocado el derrame de sangre en este mundo, se levantarán en esa resurrección que es semejante al lago de fuego y azufre. Algunos se levantarán para entrar en el fulgor infinito de Dios, porque Dios mora en fuegos eternos, mientras que otros resucitarán a la condenación de su propia inmundicia, que es un tormento tan intenso como el lago de fuego y azufre.
He dirigido mis palabras a todos, al rico y al pobre, al esclavo y al libre, al grande y al pequeño. No siento enemistad contra ningún hombre. Os amo a todos, pero aborrezco algunos de vuestros hechos. Soy vuestro mejor amigo, y si las personas fracasan, es por su propia culpa. Si yo reprendo a un hombre y éste me odia, es un necio; porque yo amo a todos los hombres, especialmente éstos que son mis hermanos y hermanas.
Me da gusto oír el testimonio de mis amigos ya entrados en años. Vosotros no me conocéis, jamás conocisteis mi corazón. Nadie conoce mi historia. Yo no puedo relatarla: jamás lo he intentado. No voy a culpar a nadie por no creer mi historia. De no haber pasado por las experiencias que he conocido, también a mí mismo me sería difícil creer. Jamás he perjudicado a hombre alguno desde que nací en el mundo. Siempre he alzado mi voz a favor de la paz.
No puedo morir sino hasta cuando quede terminada toda mi obra. Nunca pienso mal ni hago nada que vaya a perjudicar a mis semejantes. Cuando sea llamado por la trompeta del arcángel y sea pesado en la balanza, entonces todos vosotros me conoceréis. No digo más. Dios os bendiga a todos.
Amén.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

ay!! Dios mio,se llevo la pagina completa!!
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

ay!! Dios mio,se llevo la pagina completa!!

le quedo casi casi igual que el manual para entender a las mujeres.

desmotivaciones.mx_Manual-para-entender-a-las-mujeres-edicion-llaverocapitulo-1_133540569138.jpg
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Cuando las Escrituras dicen que Dios es el mismo ayer, hoy y siempre se refieren a que su forma de actuar es siempre la misma.

En 1 Nefi 10:18-19 leemos "Porque él es siempre el mismo ayer, hoy y para siempre; y la vía ha sido preparada para todos los hombres desde la fundación del mundo, si es que se arrepienten y vienen a él. Porque el que con diligencia busca, hallará; y los misterios de Dios le serán descubiertos por el poder del Espíritu Santo, lo mismo en estos días como en tiempos pasados, y lo mismo en tiempos pasados como en los venideros; por tanto, la vía del Señor es un giro eterno. ".

Como te decía antes lo que tienes que entender es que Dios no se tuerce a derecha ni a izquierda sino que siempre actúa de la misma manera y su vía es un giro eterno, por eso decimos que es un Dios inmutable.

En Mormón 9:9-10 dice: " Pues, ¿no leemos que Dios es el mismo ayer, hoy y para siempre, y que en él no hay variación ni sombra de cambio?
10 Ahora bien, si os habéis imaginado a un dios que varía, y en quien hay sombra de cambio, entonces os habéis imaginado a un dios que no es un Dios de milagros."

DyC 35:1 " Escuchad la voz del Señor vuestro Dios, el Alfa y la Omega, el principio y el fin, cuya vía es un giro eterno, el mismo hoy que ayer y para siempre."

Ten en cuenta que yo no considero el LdM ni Doctrina y Convenios como Escritura inspirada, sino como invención de hombres, así que no tienen autoridad para demostrarme nada. Mejor usa citas de las Escrituras Cristianas o del Antiguo Testamento.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

El discurso en los funerales de King Fóllett, una de las obras clásicas de la literatura de la Iglesia, fue pronunciado por el profeta José Smith, en la conferencia de la Iglesia efectuada en Nauvoo, Illinois, el 7 de abril de 1844, ante una congregación de aproximadamente veinte mil personas. La relación del discurso hace la observación de que era el discurso de los funerales del élder King Follett, amigo íntimo del Profeta, que había fallecido en un accidente el 9 de marzo. Las notas del discurso fueron tomadas por Willard Richards, Wilford Woodruff, Thomas Bullock y William Clayton. Esta reimpresión fue tomada de Documentary History of the Church, vol. 6, págs, 302-17. Dicho volumen aclara: “Este no era un informe estenográfico, sino que estaba preparado cuidadosa y hábilmente por estos hombres entrenados en informar y tomar notas. Evidentemente, existen algunas imperfecciones en el informe y algunos pensamientos expresados por el Profeta que no fueron pulidos y completados . . . ” Cabe mencionar que este discurso fue pronunciado dos meses antes de la muerte de José Smith. Durante este tiempo los enemigos de la Iglesia estaban sumamente activos, e indudablemente el Profeta anticipaba los inminentes acontecimientos. Amados hermanos, quisiera que esta asamblea me prestara su atención mientras os hablo sobre el tema de los muertos. El fallecimiento de nuestro querido hermano, King Follett, quien murió triturado en un pozo, al venírsele encima una tina llena de piedras, es lo que más me ha motivado a tratar este tema. Sus amigos y parientes me han rogado que tome la palabra, pero en vista de que muchos de los de esta congregación, que viven en esta ciudad y en otras partes, también han perdido algún amigo o pariente, desearía hablar sobre el tema en general y presentaros mis ideas, hasta donde pueda, y hasta donde me inspire el Espíritu Santo para tratar este asunto.

Necesito vuestras oraciones y fe a fin de poder recibir la instrucción de Dios Todopoderoso y el don del Espíritu Santo, para que pueda declarar cosas que son verdaderas y que fácilmente podáis comprender; y que el testimonio lleve a vuestro corazón y mente la convicción de la verdad de lo que diga. Rogad por que el Señor me fortalezca los pulmones y haga cesar el viento; y asciendan las oraciones de los santos a los oídos del Señor de los Ejércitos, porque las oraciones eficaces de los justos logran mucho. Hay poder en ellas, y verdaderamente creo que vuestras oraciones serán atendidas.

Antes de entrar de lleno en la investigación del tema que tengo por delante, deseo preparar el camino y presentar el asunto desde el principio, a fin de que podáis entenderlo. Expondré algunas cosas preliminares para que podáis entender el tema cuando llegue a él. No es mi intención halagar vuestros oídos con superfluidad de palabras, ni oratoria, ni con mucha sabiduría, sino que deseo edificaros con las verdades sencillas del cielo.

La naturaleza de Dios

En primer lugar, deseo retroceder hasta el principio, hasta la mañana de la creación. Allí está el punto de partida que debemos examinar, a fin de entender y conocer bien la mente, propósitos y decretos del Gran Elohim, que se sienta allá en los cielos, como lo hizo cuando fue creado este mundo. Se precisa que tengamos un entendimiento de Dios mismo en el principio. Si empezamos bien, es fácil seguir marchando bien; pero si empezamos mal, podemos desviarnos y será difícil volver a orientarnos.

No son sino pocos los seres en el mundo que entienden correctamente la naturaleza de Dios. La gran mayoría del género humano no comprende nada, ni lo que corresponde a lo futuro, en lo que respecta a su relación con Dios. No saben ni entienden la naturaleza de esa relación; y consiguientemente, no saben sino poco más que el animal, o poco más que comer, beber y dormir. Esto es todo lo que el hombre sabe acerca de Dios y su existencia, a menos que se dé el conocimiento por la inspiración del Omnipotente.
Si un hombre no aprende más que a comer, beber y dormir, y no entiende ninguno de los propósitos de Dios, el animal hace las mismas cosas: come, bebe, duerme y no sabe más acerca de Dios; sin embargo, sabe tanto como nosotros, a menos que podamos comprender la naturaleza divina mediante la inspiración del Dios Todopoderoso. Si los hombres no entienden el carácter de Dios, no se entienden a sí mismos. Quiero volver hasta el principio, y así elevar vuestras mentes a una esfera más elevada y un entendimiento más avanzado de lo que la mente humana generalmente anhela.
Deseo pedir a esta congregación, a todo hombre, mujer y niño, que cada cual conteste en su corazón: ¿Qué clase de ser es Dios? Preguntaos; escudriñad vuestros corazones y decid si alguno de vosotros lo ha visto, oído o se ha comunicado con El. Es una pregunta que podéis meditar mucho tiempo. Vuelvo a repetir la pregunta: ¿Qué clase de ser es Dios? ¿Lo sabe algún hombre o mujer? ¿Lo ha visto : alguno de vosotros, o lo ha oído, o se ha comunicado con El? He aquí la pregunta que quizás de hoy en adelante recibirá vuestra atención. Las Escrituras nos informan: “Esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.” (Juan 17:3).
Si un hombre no conoce a Dios, y tiene que preguntar qué clase de ser El es, si busca diligentemente en su propio corazón para saber si la declaración de Jesús y los apóstoles es cierta, comprenderá que no tiene la vida eterna; porque no puede haber vida eterna sino de acuerdo con este principio.
Mi primer objeto es conocer el carácter del unico Dios sabio y verdadero, y qué clase de ser El es; y si soy tan afortunado que llego a comprender a Dios, y explico o hago llegar los principios a vuestros corazones, de tal manera que el Espíritu los sella sobre vosotros, entonces de aquí en adelante todo hombre y mujer debe guardar silencio, taparse la boca con la mano y nunca jamás volver a levantar la mano o la voz y decir algo contra el varón de Dios o los siervos de Dios. Mas si no lo hago, tengo la obligación de renunciar a toda pretensión de recibir revelaciones e inspiraciones o de ser profeta; y sería un falso maestro como el resto del mundo, entonces me recibirían como su amigo y nadie atentaría contra mi vida. Pero si todos los maestros religiosos tuviesen la sinceridad suficiente para renunciar a sus pretensiones de santidad, cuando se pone de manifiesto su ignorancia del conocimiento de Dios, se hallarían en tan mala situación como yo, por lo menos; y bien pueden matar a otros maestros falsos, junto conmigo, si yo soy falso. Si alguien cree y dice que soy un maestro falso, entonces, de acuerdo con el mismo principio, tenemos razón para quitar la vida a todo maestro falso, ¿y dónde pararía el derrame de sangre? ¿Y quién no sufriría?
El privilegio de la libertad religiosa
Pero no hay que altercar con ningún hombre a causa de su religión; y todos los gobiernos deberían permitir que cada hombre ejerciera su religión sin ser molestado. Ningún hombre está autorizado para quitarle la vida a otro, por motivo de diferencias en cuanto a la religión, la cual todas las leyes y gobiernos deberían de tolerar o proteger, ya fuere verdadera o falsa. Todo hombre tiene el derecho natural, y en nuestro país, el derecho constitucional, de ser un profeta falso así como uno verdadero. Si yo verdaderamente muestro que tengo la verdad de Dios, y puedo probar que noventa y nueve de cada cien de los que profesan ser ministros religiosos son maestros falsos sin autoridad, que pretenden tener las llaves del reino de Dios sobre la tierra, y me pongo a matarlos porque son maestros falsos, bañaría el mundo entero en sangre.
Demostraré que el mundo está en error, declarando lo que Dios es. Voy a preguntar acerca de Dios, porque quiero que todos vosotros lo conozcáis y que os familiaricéis con El; y si os doy el conocimiento de El, toda persecución contra mí debería de cesar. Así sabréis que yo soy su siervo; porque hablo como uno que tiene autoridad.
Dios es un hombre glorificado
Volveré al principio, antes que el mundo fuese, para mostrar la clase de ser que Dios es. ¿Cómo era Dios en el principio? ¡Sean abiertos vuestros oídos y escuchad, oh confines de la tierra, porque os lo mostraré por medio de la Biblia, y os declararé los propósitos de Dios respecto de la raza humana, y porqué interviene en los asuntos de los hombres!
¡Dios una vez fue como nosotros ahora; es un hombre glorificado, y está sentado sobre su trono allá en los cielos! Ese es el gran secreto. Si el velo se partiera hoy, y el Gran Dios que conserva este mundo en su órbita y sostiene todos los mundos y todas las cosas con su poder, se manifestase a sí mismo, digo que si fueseis a verlo hoy, lo veríais en la forma de un hombre, así como vosotros os halláis en toda la persona, imagen y forma misma de un hombre; porque Adán fue creado a la misma imagen y semejanza de Dios, y de El recibió instrucciones, y anduvo y conversó con El, como un hombre habla y se comunica con otro.
A fin de entender el tema de los muertos, para consuelo de aquellos que lloran la pérdida de sus amigos, se precisa que entendamos la naturaleza y carácter de Dios y cómo llegó a serlo; porque os voy a decir cómo llegó a ser Dios. Hemos imaginado y supuesto que Dios fue Dios por todas las eternidades. Voy a refutar esa idea, y haré a un lado el velo para que podáis ver.
Para algunos éstas son ideas incomprensibles, pero son sencillas. El primer principio del evangelio es saber con certeza la naturaleza de Dios, y saber que podemos conversar con El como un hombre conversa con otro, y que en un tiempo fue hombre como nosotros; sí, que Dios mismo, el Padre de todos nosotros, habitó sobre una tierra, como Jesucristo mismo lo hizo; y voy a probarlo por medio de la Biblia.
La vida eterna es conocer a Dios y Jesucristo
¡Oh, si me hallase en un lugar adecuado para declararlo, y tuviese la trompeta de un arcángel a fin de comunicarlo de tal manera que la persecución cesara para siempre! ¿Qué dijo Jesús? Las Escrituras nos hacen saber que Jesús dijo: “asi como el Padre tiene el poder en sí mismo, así también tiene al Hijo el poder”—¿para hacer qué? Pues lo que el Padre hizo. La respuesta es obvia: poner su cuerpo y volverlo a levantar. Jesús, ¿qué vas a hacer? Poner mi vida como la puso mi Padre, y volverla a tomar. ¿Lo creéis? Si no lo creéis, no creéis la Biblia. Las Escrituras lo dicen, y yo desafío a toda la sabiduría y la ciencia, y a todas las fuerzas combinadas de la tierra y del infierno juntos, a que lo impugnen. Esta pues es la vida eterna: conocer al unico Dios sabio y verdadero; y vosotros mismos tenéis que aprender a ser dioses, y a ser reyes y sacerdotes de Dios, como lo han hecho todos los dioses antes de vosotros, a saber, el avanzar de un grado pequeño a otro, y de una capacidad pequeña a una mayor, yendo de gracia en gracia, de exaltación en exaltación, hasta que logréis la resurrección de los muertos y podáis morar en fulgor eterno y sentaros en gloria, como aquellos que se sientan sobre tronos de poder infinito. Y quiero que sepáis que en los últimos días, Dios no está jugando ni con vosotros ni conmigo, aunque ciertos individuos anden proclamando su nombre.
Los justos han de morar en fuegos eternos
Estos son los primeros principios de la consolación. Es un gran consuelo para los que lloran, cuando tienen que separarse de un esposo, esposa, padre, madre, hijo o pariente amado, saber que aunque el cuerpo terrenal es sepultado y se deshace, nuevamente se levantarán para morar en fuegos eternos en una gloria inmortal, para nunca más volver a afligirse, sufrir o morir, sino que serán herederos de Dios y coherederos con Jesucristo. ¿Qué significa esto? Heredar el mismo poder, la misma gloria y la misma exaltación hasta llegar al estado de un dios y ascender al trono de poder eterno, así como los que han ido antes. ¿Qué hiciste tú, Jesús? Hice aquellas cosas que vi hacer a mi Padre cuando venían a su existencia los mundos. Mi Padre labró su reino con temor y temblor, y yo debo hacer lo mismo; y cuando gane mi reino, lo presentaré a mi Padre, a fin de que El pueda tener reino sobre reino y así aumentar en gloria. Entonces tendrá una exaltación mayor, y yo tomaré su lugar y así también lograré la exaltación. De modo que Jesús sigue los pasos de su Padre y hereda lo que Dios hizo antes; y así Dios es glorificado y ensalzado mediante la salvación y exaltación de todos sus hijos. Es tan claro que no se puede disputar; y así habéis aprendido algunos de los primeros principios del evangelio, acerca de los cuales tanto se ha dicho.
Cuando subís por una escalera, tenéis que empezar desde abajo y ascender paso por paso hasta que llegáis a la cima; y así es con los principios del evangelio: tenéis que empezar por el primero, y seguir adelante hasta aprender todos los principios que atañen a la exaltación. Pero no los aprenderéis sino hasta mucho después que hayáis pasado por el velo. No todo se va a entender en este mundo; la obra de aprender nuestra salvación y exaltación aun más allá de la tumba será grande. Supongo que no se me permitirá entrar en un estudio de lo que no se encuentra en la Biblia. Si lo hiciera, hay aquí tantos hombres “sabios” que creo que gritarían “traición” y me matarían. De modo que me referiré a la antigua Biblia, y por hoy seré un comentador.
El significado de las escrituras hebreas
Voy a comentar la primera palabra hebrea que se halla en la Biblia; voy a hacer comentarios sobre la primera frase de la historia de la creación en la Biblia— “Berosheit”. Deseo analizar la palabra: “Baith”: en, por, mediante, y todo lo demás; “Rosh”: la cabeza; “Sheit”: terminación gramática. Cuando el hombre inspirado lo escribió, no le puso la palabra baith. Un anciano judío sin autoridad se la añadió; le pareció de mal gusto que empezara a hablar acerca de la cabeza. Al principio decía: “La cabeza, el principal de los Dioses hizo aparecer a los Dioses.” (nota traductor: a mi en ingles me parece que dice “”La cabeza de los dioses trajo sucesivamente a los dioses.”) ese es el significado verdadero de la frase. “Baurau” significa hacer aparecer, manifestar. Si no lo creéis, tampoco creéis al varón instruido de Dios. Los sabios no pueden enseñaros más de lo que yo os he dicho. Así que el Dios principal hizo aparecer a los Dioses en el gran concilio.
Ahora voy a adaptar y simplificar la frase. ¡Oh abogados, doctores y sacerdotes que me habéis perseguido, quiero que sepáis que, el Espíritu Santo sabe algunas cosas tan bien como vosotros! El Dios a la cabeza convocó a los dioses y se reunieron en concilio para crear el mundo. Estos grandes Consejeros se sentaron a la cabeza, allá en los cielos y presenciaron la creación de los mundos que fueron creados en esa época. Cuando digo doctores y abogados, me refiero a los doctores y abogados de las Escrituras. Hasta aquí lo he hecho sin explicación, para que se incomoden los abogados, y todos se rían de ellos. A algunos sabios doctores se les ocurrirá decir que las Escrituras declaran tal y tal cosa; que debemos aceptarlas precisamente como están y que no deben ser alteradas. Pero os voy a mostrar un error que contienen.
Tengo una versión antigua del Nuevo Testamento en latín, hebreo, alemán y griego. He estado leyendo el alemán, y veo que es la traducción (casi) más correcta, y la que mejor concuerda con las revelaciones que Dios me ha dado durante los últimos catorce años. Se refiere a Jacobo, hijo de Zebedeo. En inglés sería Jacob. En el Nuevo Testamento (en inglés) se ha traducido por James (Santiago). Pero si se dieron las llaves a Jacobo, bien podríamos hablar acerca de Santiago por toda la eternidad y jamás obtener las llaves. En el versículo 21 del cuarto capítulo de Mateo, la antigua traducción alemana da el nombre de Jacob (Jacobo) en lugar de James (Santiago).
Los doctores (me refiero a los doctores de la ley, no a los médicos) dicen: “Si predicas algo que no concuerde con la Biblia, te acusaremos de traición.” ¿Cómo podemos escapar a la condenación del infierno, a menos que Dios esté con nosotros y nos dé revelaciones? Los hombres nos sujetan con cadenas. El latín dice Jacobo, que significa Jacob; el hebreo dice Jacobo, el griego dice Jacobo y el alemán dice Jacobo. Aquí pues tenemos el testimonio de cuatro contra uno. Doy gracias a Dios que tengo este libro viejo; pero más le doy las gracias por el don del Espíritu Santo. Ciertamente podré tener el libro más antiguo del mundo, pero (también) tengo en mi corazón el libro más antiguo, es decir, el don del Espíritu Santo. Tengo los cuatro testamentos. Venid, hombres sabios, y leed si podéis. No habría presentado este testimonio, si no hubiese sido para comprobar el significado de la palabra rosh, el cabeza, el padre de los Dioses. No habría hablado de ello, sino para mostrar que tengo razón.
El concilio de los Dioses
En el principio, la cabeza (el lider o el principal) de los Dioses convocó un concilio de los dioses; y se reunieron y proyectaron un plan para crear el mundo y poblarlo. Cuando empezamos a aprender de este modo, empezamos a conocer al unico Dios verdadero, y qué clase de ser tenemos que adorar. Si tenemos conocimiento de Dios, comenzamos a entender cómo allegarnos a El, y cómo hemos de pedir a fin de recibir una respuesta.
Cuando entendemos la naturaleza de Dios, y aprendemos cómo allegarnos a El, entonces El empieza a manifestarnos los cielos y a explicar todas las cosas. Cuando estemos dispuestos a venir a El, también El estará dispuesto a venir a nosotros.
Ahora quisiera preguntar a todos los que me escuchan, ¿por qué es que los hombres doctos que predican la salvación, dicen que Dios creó los cielos y la tierra de la nada? Es porque carecen de instrucción en cuanto a las cosas de Dios, y no tienen el don del Espíritu Santo; acusan de blasfemia al que contradice sus ideas. Si les decís que Dios hizo el mundo de algo, os llaman necios. Pero yo he recibido instrucción, y sé más que todo el mundo; por lo menos, el Espíritu Santo sabe, y El está dentro de mí, y El sabe más que todo el mundo; y yo me asociaré con El.
El significado de la palabra crear
Si preguntamos a los sabios doctores por qué dicen que el mundo fue hecho de la nada, ellos nos contestan: ¿No dice la Biblia que Dios creó el mundo? Y concluyen, por la palabra crear, que debe haber sido hecho de la nada. Pero la palabra crear vino del término hebreo “baurau”, que no significa crear de la nada, sino manifestar, dar forma, organizar, así como un hombre organiza los materiales y construye un barco. De manera que podemos deducir que Dios tenía a su disposición los materiales para organizar el mundo de todo aquel caos, es decir materia caótica, que es elemento, y en el cual mora toda gloria. Los elementos han existido desde que nosotros tuvimos existencia. Los principios puros de los elementos son principios que jamás pueden ser destruidos; pueden ser organizados, y reorganizados, mas no destruidos. No tuvieron principio. Y no pueden tener fin.
El Espíritu inmortal
Tengo otro asunto que tratar, que tiene por objeto exaltar al hombre; pero me es imposible hablar mucho sobre él. Por consiguiente, lo mencionaré brevemente, porque el tiempo no me permitirá decir todo. Se relaciona con el tema de la resurrección de los muertos, a saber, el alma, la mente del hombre, el espíritu inmortal. ¿De dónde vino? Todos los sabios y los doctores de teología dicen que Dios lo creó en el principio; pero no es así. Según mi concepto, esta idea rebaja al hombre. No creo en esa doctrina; tengo mejor criterio. Oídlo, todos los confines del mundo, porque Dios me lo ha dicho; y si no me creéis, no por eso invalidáis el efecto de la verdad. Voy a poner en ridículo al hombre que no lo crea, antes de terminar. Voy a hablar de cosas más nobles.
Decimos que Dios mismo es un Ser que existe por sí mismo. ¿Quién os lo dijo? Es correcto, pero ¿cómo entró en nuestra cabeza? ¿Quién os dijo que el hombre no existió en igual manera, de acuerdo con los mismos principios? El hombre efectivamente existe de acuerdo con los mismos principios. Dios preparó un tabernáculo o cuerpo y puso un espíritu dentro de él, y se tornó alma viviente. (Refiriéndose a la Biblia vieja) ¿Cómo dice en hebreo? En el hebreo no dice que Dios creó el espíritu del hombre. Dice así: “Dios hizo al hombre de la tierra, y puso en él el espíritu de Adán, y así fue cuerpo viviente.”
La mente o inteligencia que el hombre posee es coigual con Dios. Yo sé que mi testimonio es verdadero; por tanto, al referirme a éstos que hoy lloran, ¿qué han perdido? Sus parientes y amigos solamente quedan separados de sus cuerpos por un corto tiempo: sus espíritus que existieron con Dios han salido del tabernáculo de barro tan sólo por un momento, por decirlo así; y ahora existen en un lugar donde pueden conversar juntos, tal como lo hacemos nosotros en la tierra. Estoy hablando de la inmortalidad del espíritu del hombre. ¿Sería lógico decir que la inteligencia de los espíritus es inmortal, y sin embargo, que tuvo un principio? La inteligencia de los espíritus no tuvo principio, ni tendrá fin, Esto es buen razonamiento. Lo que tiene principio puede tener fin. Nunca hubo tiempo en que no hubo espíritus, porque ellos y nuestro Padre Celestial son coiguales [es decir, coeternos].
Deseo razonar un poco más sobre el espíritu del hombre, porque me estoy refiriendo al cuerpo y el espíritu del hombre, con respecto al tema de los muertos. Me quito el anillo del dedo y lo comparo a la mente del hombre: a la parte inmortal, porque no tiene principio. Supongamos que lo partimos en dos; ahora tiene un principio y un fin, pero si lo volvemos a unir sigue siendo un círculo eterno. Así es con el espíritu del hombre. Vive el Señor, que si tuvo un principio, tendrá un fin. Todos los necios, y todos los hombres instruidos y sabios que han existido desde el principio de la creación, que dicen que el espíritu del hombre tuvo un principio, afirman que debe tener un fin; y si esa doctrina es verdadera, entonces la doctrina de la aniquilación es verdadera. Pero si tengo razón, puedo proclamar sin temor, desde los tejados de las casas, que Dios nunca tuvo el poder para crear el espíritu del hombre. Dios no pudo haberse creado a sí mismo.
La inteligencia es eterna y existe sobre un principio que es existente por sí mismo. Es un espíritu, de eternidad en eternidad, y nada tiene de creado. Todas las mentes y espíritus que Dios ha enviado al mundo están capacitados para progresar.

Dios y los primeros principios, en lo que al hombre atañen, existen por sí mismos. Dios, hallándose en medio de espíritus y gloria, porque era más inteligente, consideró propio instituir leyes por medio de las cuales los demás podrían tener el privilegio de avanzar como El lo había hecho. La relación que entre Dios y nosotros existe nos coloca en situación tal, que podemos ampliar nuestro conocimiento. El tiene el poder de instituir leyes para instruir a las inteligencias más débiles, a fin de que puedan ser exaltadas como El, y recibir una gloria tras otra, así como todo conocimiento, poder, gloria e inteligencia que se requiere para salvarlos en el mundo de los espíritus.
Esta es una buena doctrina. Tiene buen gusto. Puedo saborear los principios de vida eterna, y vosotros también. Me vienen a mí por las revelaciones de Jesucristo; y sé que cuando os declaro estas palabras de vida eterna, así como me son comunicadas, vosotros gustáis de ellas, y sé que las creéis. Decís que la miel es dulce; también yo. En igual manera, puedo probar el espíritu de la vida eterna. Sé que es bueno; y cuando os hablo de estas cosas que me fueron dadas por la inspiración del Espíritu Santo, ciertamente las tendréis que recibir por ser dulces, y más y más os regocijaréis.
La relación entre el hombre y Dios
Deseo hablar más de la relación entre el hombre y Dios. Os abriré los ojos en lo que respecta a vuestros muertos. Todas las cosas que Dios en su infinita sabiduría ha considerado digno y propio revelarnos mientras nos hallamos en el estado mortal, en lo que concierne a nuestros cuerpos mortales, nos son reveladas en lo abstracto, e independientes de afinidad con este tabernáculo mortal, pero son reveladas a nuestros espíritus precisamente como si no tuviésemos cuerpos; y las revelaciones que salvarán nuestros espíritus salvarán nuestros cuerpos. Dios nos las revela en vista de que no hay disolución eterna del cuerpo o tabernáculo. De ahí, la responsabilidad, la terrible responsabilidad que descansa sobre nosotros en cuanto a nuestros muertos; porque todos los espíritus que no han obedecido el evangelio en la carne, deben obedecerlo en el espíritu o ser condenados. ¡Qué pensamiento tan solemne, tan terrible! ¿No se puede hacer nada? ¿No hay preparación, ninguna salvación para nuestros padres y amigos que han muerto sin tener la oportunidad de obedecer los decretos del Hijo del Hombre? ¡Ruegese a Dios que yo tuviera cuarenta días y noches para poder deciros todo! Yo os haría saber que no soy “profeta caído”.
Nuestra responsabilidad mayor
¿Qué se ha prometido respecto del tema de la salvación de los muertos? ¿y qué clase de personas son las que pueden ser salvas, aunque sus cuerpos se estén deshaciendo y descomponiendo en la sepultura? Cuando El nos da sus mandamientos para instruirnos, está teniendo en cuenta la eternidad; porque Dios nos considera como si estuviésemos en la eternidad. Dios mora en la eternidad, y no ve las cosas como nosotros.
La responsabilidad mayor que Dios ha puesto sobre nosotros en este mundo es procurar por nuestros muertos. El apóstol dice que ellos sin nosotros no pueden ser perfeccionados (Hebreos 11: 40); porque es necesario que el poder de ligar esté en nuestras manos a fin de ligar a nuestros hijos y nuestros muertos para la dispensación en la que se han de cumplir las promesas que Jesucristo hizo antes de la fundación del mundo para la salvación del hombre.
Ahora voy a referirme a ellos. Voy a ponerme de acuerdo con Pablo. Te digo, Pablo, que vosotros no podéis perfeccionaros sin nosotros. Se precisa que aquellos que han muerto antes, así como los que vendrán después, reciban la salvación junto con nosotros; y ésta es la obligación que Dios ha puesto sobre el hombre. Por tanto, dijo Dios: “Yo os envío a Elias el profeta, antes que venga el día de Jehová grande y terrible. El convertirá el corazón de los padres a los hijos, y el corazón de los hijos a los padres: no sea que yo venga, y con destrucción hiera la tierra.” (Malaquías 4:5, 6).
Una salvación para los hombres
Tengo algo que decir en cuanto a lo que Dios tiene dispuesto de conformidad con la condición del hombre, disposiciones que se hicieron desde antes de la fundación del mundo. ¿Qué ha dicho Jesús? Todo pecado, toda blasfemia y toda transgresión, salvo una, que el hombre pudiere cometer, serán perdonados; y habrá una salvación, sea en este mundo o en el mundo venidero, para todos los hombres que no hayan cometido el pecado imperdonable, ya que así se ha providenciado en este mundo, o en el mundo de los espíritus. De modo que según lo que Dios ha dispuesto, se puede buscar y salvar a todo espíritu en el mundo eterno, a menos que haya cometido ese pecado imperdonable que no le puede ser remitido ni en este mundo ni en el mundo de los espíritus. Dios ha efectuado una salvación para todos los hombres, a menos que hayan cometido un cierto pecado; y todo hombre que tenga un amigo en el mundo eterno puede salvarlo, a menos que éste haya cometido el pecado imperdonable. Y así podéis ver hasta qué punto vais a ser salvadores.
El pecado imperdonable
El hombre no puede cometer el pecado imperdonable después de deshecho su cuerpo, y hay una manera en que puede librarse. El conocimiento salva al hombre; y en el mundo de los espíritus ningún hombre alcanzará la exaltación sino por el conocimiento. Mientras un hombre no haga caso de los mandamientos, tendrá que permanecer sin salvación. Si un hombre tiene conocimiento, se puede salvar; no obstante, si ha cometido pecados graves, tendrá que ser castigado por ellos. Pero cuando consiente en obedecer el evangelio, ya sea aquí o en el mundo de los espíritus, entonces puede ser salvo.
El hombre es su propio verdugo y su propio juez. Por eso se dice que irá al lago ardiente de fuego y azufre. El tormento de una mente frustrada es para el hombre tan intenso como un lago ardiente de fuego y azufre. Digo que así es el tormento del hombre.
Conozco las Escrituras y las entiendo. Digo que ningún hombre puede cometer el pecado imperdonable después de deshecho su cuerpo, ni tampoco puede hacerlo en esta vida sino hasta que haya recibido el Espíritu Santo; pero tiene que ser en este mundo. Por consiguiente, se llevó a cabo la salvación de Jesucristo para todos los hombres, a fin de lograr el triunfo sobre el diablo; de modo que sí esta salvación no le llega en un lugar, podrá llegarle en otro, porque El se dio por Salvador. Todos sufrirán hasta que obedezcan a Cristo mismo.
La contienda en los cielos fue provocada porque Jesús dijo que ciertas almas no podrían ser salvas; y el diablo dijo que salvaría a todos; y presentó sus planes ante el gran concilio, el cual votó a favor de Jesucristo. El diablo entonces se rebeló contra Dios, y fue expulsado con todos aquellos que lo apoyaron. (Perla de Gran Precio, Moisés 4:1-4; Abraham 3: 23-38). < strong> El perdón de los pecados
Todos los pecados serán perdonados con excepción del pecado contra el Espíritu Santo; porque Jesús salvará a todos menos a los hijos de perdición. ¿Qué debe hacer el hombre para cometer el pecado imperdonable? Debe haber recibido el Espíritu Santo, deben habérsele manifestado los cielos, y después de haber conocido a Dios, pecar contra El. Después que un hombre ha pecado contra el Espíritu Santo, no hay arrepentimiento para él. Tiene que decir que el sol no brilla, cuando lo está mirando; negar a Jesucristo, cuando se le han manifestado los cielos, y renegar del plan de salvación mientras sus ojos están viendo su verdad; y desde ese momento empieza a convertirse en enemigo. Así sucede con muchos apóstatas de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Cuando un hombre empieza a hacerse enemigo de esta obra, me persigue, trata de matarme y nunca cesa de querer verter mi sangre. Entra en él el espíritu del diablo, el mismo espíritu que tuvieron los que crucificaron al Autor de la Vida, el mismo espíritu que peca contra el Espíritu Santo. Uno no puede salvar a tales personas, no se les puede llevar al arrepentimiento; están en guerra contra uno, como el diablo, y terribles son las consecuencias. Os recomiendo a todos que tengáis cuidado de lo que hacéis, o algún día hallaréis que habéis sido engañados. Refrenaos; no os dejéis llevar; no obréis precipitadamente, quizá podréis salvaros. Si se halla en vosotros un espíritu de rencor, no obréis sin reflexionar. Podréis decir que tal o cual hombre es pecador; pero sí se arrepiente, será perdonado. Sed cautelosos; esperad. Si encontráis un espíritu que busca el derrame de sangre, el asesinato, ese espíritu no es de Dios, sino del diablo. De la abundancia del corazón del hombre habla la boca.
Los mejores hombres producen las mejores obras. El hombre que os declara las palabras de vida es el que puede salvaros. Os amonesto a que os cuidéis de toda persona inicua que peca contra el Espíritu Santo, porque no hay redención para ellos ni en este mundo ni en el mundo venidero.
Podría empezar desde el principio y repasar todos los temas de interés concernientes a la relación que tiene el hombre con Dios, si tuviera tiempo. Yo puedo penetrar los misterios, puedo entrar libremente en los mundos eternos, porque Jesús dijo: “En la casa de mi Padre muchas moradas hay: de otra manera os lo hubiera dicho: voy, pues, a preparar lugar para vosotros.” (Juan 14:2) Pablo dice: “Otra es la gloria del sol, y otra la gloria de la luna, y otra la gloria de las estrellas: porque una estrella es diferente de otra en gloria. Así también es la resurrección de los muertos.” (1 Corintios 15:41) ¿Qué tenemos para consolarnos, con relación a los muertos?
Tenemos motivo para abrigar mayor esperanza y consuelo respecto de nuestros muertos, que cualquier otro pueblo sobre la tierra, porque los hemos visto conducirse rectamente entre nosotros, y los hemos visto quedarse dormidos en los brazos de Jesús; y los que han muerto en la fe se hallan ahora en el reino celestial de Dios; y allí es como la gloria del sol.
Vosotros que lamentáis, tenéis ocasión para regocijar, hablando de la muerte del hermano King Follett, porque vuestro esposo y padre ha ido a esperar hasta el tiempo de la resurrección de los muertos, hasta la perfección de los demás; porque al llegar la resurrección, vuestro amigo se levantará con felicidad perfecta e irá a una gloria celestial, mientras que muchos tendrán que esperar miles de años antes que puedan recibir bendiciones semejantes; y vuestras expectaciones y esperanzas sobrepujan grandemente lo que el hombre puede concebir; pues ¿por qué nos lo ha revelado Dios?
Me siento facultado para declarar, por la autoridad del Espíritu Santo, que no tenéis razón para temer; porque él ha ido a la morada de los justos. No lamentéis, no lloréis. Lo sé por el testimonio del Espíritu Santo que hay dentro de mí; y vosotros podréis esperar que vuestros amigos salgan para encontraros en la mañana del mundo celestial.
¡Regocijate, oh Israel! Todos tus amigos que han sido asesinados por la causa de la verdad en las persecuciones, triunfarán gloriosamente en el mundo celestial, mientras que sus asesinos se hallarán en tormento por siglos, aun hasta que hayan pagado el último cuadrante. Digo esto para el beneficio de los extranjeros.
Tengo un padre, hermanos, hijos y amigos que han pasado al mundo de los espíritus. Se han ausentado tan sólo por un momento. Se hallan en el espíritu, y dentro de poco nos volveremos a ver. Pronto llegará el tiempo en que sonará la trompeta. Cuando salgamos de aquí, saludaremos a nuestras madres, padres, amigos y todos aquellos a quienes amamos, que han dormido en Jesús. No habrá temor de chusmas, ni persecuciones, ni litigios perversos, ni arrestos, sino que todo será una eternidad de dicha.
Dejaré de tratar este tema para hablar un poco sobre el asunto del bautismo. El bautismo de agua, si no lo acompaña el bautismo de fuego y del Espíritu Santo, no tiene ningún valor: están unidos necesaria e inseparablemente. El individuo debe nacer del agua y del Espíritu para poder entrar en el reino de Dios. En la versión alemana, el texto me apoya en igual manera que en las revelaciones que he presentado y enseñado sobre este punto durante los últimos catorce años. Tengo el testimonio para hacerlos callar. Mi testimonio ha sido verdadero todo el tiempo. Se puede hallar en la declaración de Juan el Bautista. (Lee del alemán.) Juan dice: “Yo os bautizo con agua, mas cuando venga Jesús, que tiene el poder (o llaves), él administrará el bautismo de fuego y del Espíritu Santo.” ¿Y ahora qué dice todo el mundo sectario? Si este testimonio es verdadero, todos están condenados tan terminantemente como lo expresa cualquier anatema. Yo sé que el texto es verdadero. Pido a todos los alemanes que saben que es cierto, lo afirmen, diciendo, “Sí”. (Fuertes gritos de “Sí”.)
Alejandro Campbell (un pastor protestante de la epoca), ¿Cómo vas a salvar al pueblo sólo con agua? Pues Juan dijo que su bautismo no tendría valor sin el bautismo de Jesucristo. “Por tanto, a dejando el comienzo de la doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección, no echando otra vez el fundamento del arrepentimiento de obras muertas, y de la fe en Dios, de la a doctrina de bautismos, y de la imposición de manos, y de la resurrección de los muertos y del juicio eterno. Y esto haremos, si Dios en verdad lo permite.” (Hebreos 6:1-3)
Hay un Dios, un Padre, un Jesús, una esperanza de nuestra vocación, un bautismo . . . Muchos dicen que el bautismo no es esencial a la salvación; pero esta clase de enseñanza pone los cimientos de su condenación. Yo tengo la verdad, y desafío a todo el mundo a impugnarme, si puede.
Ahora he predicado un poco de latín, un poco de hebreo, griego y alemán, y he cumplido todo. No soy tan ignorante como muchos me han considerado. Los alemanes saben que leí el alemán correctamente.
El llamado al arrepentimiento
¡Escuchad, vosotros, los confines de la tierra: todos los que sois sacerdotes, todos los que sois pecadores y todos los hombres! ¡Arrepentios, arrepentios y obedeced el evangelio! ¡Volveos a Dios, porque vuestra religión no os salvará, y seréis condenados! No digo por cuánto tiempo. Se ha dicho algo concerniente a que todos los hombres serán redimidos del infierno; pero yo digo que aquellos que pecan contra el Espíritu Santo no pueden ser perdonados ni en este mundo ni en el venidero: tendrán que sufrir la segunda muerte. Los que cometen el pecado imperdonable son condenados a Gnolom, para morar en el infierno por los siglos de los siglos. Por haber provocado el derrame de sangre en este mundo, se levantarán en esa resurrección que es semejante al lago de fuego y azufre. Algunos se levantarán para entrar en el fulgor infinito de Dios, porque Dios mora en fuegos eternos, mientras que otros resucitarán a la condenación de su propia inmundicia, que es un tormento tan intenso como el lago de fuego y azufre.
He dirigido mis palabras a todos, al rico y al pobre, al esclavo y al libre, al grande y al pequeño. No siento enemistad contra ningún hombre. Os amo a todos, pero aborrezco algunos de vuestros hechos. Soy vuestro mejor amigo, y si las personas fracasan, es por su propia culpa. Si yo reprendo a un hombre y éste me odia, es un necio; porque yo amo a todos los hombres, especialmente éstos que son mis hermanos y hermanas.
Me da gusto oír el testimonio de mis amigos ya entrados en años. Vosotros no me conocéis, jamás conocisteis mi corazón. Nadie conoce mi historia. Yo no puedo relatarla: jamás lo he intentado. No voy a culpar a nadie por no creer mi historia. De no haber pasado por las experiencias que he conocido, también a mí mismo me sería difícil creer. Jamás he perjudicado a hombre alguno desde que nací en el mundo. Siempre he alzado mi voz a favor de la paz.
No puedo morir sino hasta cuando quede terminada toda mi obra. Nunca pienso mal ni hago nada que vaya a perjudicar a mis semejantes. Cuando sea llamado por la trompeta del arcángel y sea pesado en la balanza, entonces todos vosotros me conoceréis. No digo más. Dios os bendiga a todos.
Amén.

Por Dios, este Copy-Paste es larguísimo!! No pienso leerlo completo, me llevaría demasiado tiempo. Agradecería que lo resumieras en menos párrafos, y te tomaras la molestia de explicarlo.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

le quedo casi casi igual que el manual para entender a las mujeres.

desmotivaciones.mx_Manual-para-entender-a-las-mujeres-edicion-llaverocapitulo-1_133540569138.jpg

Me has hecho sonreir, estimado LDX; impresiona; no sabía que existía tamaño manual; pero, no es necesario, con MISERICORDIA se "entiende" a tod@s.
Que DIOS te Bendiga con SU PAZ y SU AMOR, así como a TODOS. AMÉN.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Que LA PA esté con vosotros.

Nuestro SEÑOR JESUCRISTO (Bendito sea), CONCEDIÓ AUTORIDAD a los Apóstoles, para TRANSMITIR ORALMENTE (al principio), SU EVANGELIO DE SALVACIÓN, a todos los CONTEMPORÁNEOS que NO LO CONOCIERON PERSONALMENTE; y, DEJAR constancia POR ESCRITO, para que LA PALABRA NO FUESE PERVERTIDA con el paso del tiempo, y NO dependiese de la TRANSMISIÓN de hombres ERRADOS, ávidos de VANAGLORIA, elegidos por ellos mismos o por otros hombres, pero NO POR DIOS.
Los Apóstoles, CUMPLIERON SU MISIÓN, según LA VOLUNTAD DEL SEÑOR. La SANA DOCTRINA, DEL EVANGELIO de SALVACIÓN, de nuestro SEÑOR JESUCRISTO ESTÁ ESCRITA. ÉL VIVE y ESTÁ PRESENTE. ÉL ES LA AUTORIDAD, GLORIA A ÉL SIEMPRE, y que él os Bendiga a TODOS con SU PAZ y SU AMOR. AMÉN.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

con todo el respeto que los Judios se merecen... y que les tenemos (puesto que la doctrina mormona tiene un lugar muy especial para ellos)
no creemos que ellos preserven la plenitud del evangelio... pero si creemos que el señor los recogerá de los 4 extremos de la tierra
junto con las otras tribus perdidas...

La analogia que queria rescatar de esto es:

No podemos asumir que por cierta creencia o cultura ha sobrevivido, debemos necesariamente asumir
que cuenta con la plenitud del evangelio o cuenta con la autoridad necesaria...

A mi me cuesta mucho hablar de estas cosas con amigos católicos, porque cada palabra de reafirmación nuestra
directamente implica una desautorización de la suya... Y YO personalmente no creo en atacar la creencia del vecino
para imponer la mía, pero tampoco me gusta mentir o disfrazar las cosas para que se vean mas bonitas.

Ahora esto que significa? que el papa no recibe inspiración divina?
No creo que nuestra posición sea así de radical... Creemos que todo lider que tiene bajo su dirección
muchas personas, tiene la capacidad, derecho o privilegio de recibir guia para quienes dirige.

Asi tambien ocurre con los gobernantes (si es que estos se ponen en manos del señor) y lideres religiosos
y politicos en toda la tierra....

Todo esto dicho con el respeto que uds se merecen...
Finalmente no tiene por que tomar mis palabras en serio, recuerden que solo soy un sudamericano inexperto
que cree en visiones y ángeles que descienden del cielo...

El problema mi hermano, es que si el Canon esta sujeto al error entonces la Escritura del Nuevo Testamento también. Ergo, toda argumentación hecha desde la Escritura del Nuevo Testamento seria errada y falsa. Incluida las pretensiones de Jose Smith.

Pax.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Y que, aquí quedó el hilo? Sigo esperando textos bíblicos que confirmen la doctrina aberrante de que Dios Padre alguna vez fue hombre.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Y por ejemplo, también, las creencias mormonas de que existen muchos dioses, de que Dios tiene un cuerpo físico, y de que la Trinidad son 3 Dioses separados y diferentes. Citas de la Biblia, de las escrituras cristianas o hebreas, es lo que pido.
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Y por ejemplo, también, las creencias mormonas de que existen muchos dioses, de que Dios tiene un cuerpo físico, y de que la Trinidad son 3 Dioses separados y diferentes. Citas de la Biblia, de las escrituras cristianas o hebreas, es lo que pido.

ahi veras un hilo llamado:

Es jehova el unico Dios verdadero o un gran engaño es el mismo zatanas?

http://forocristiano.iglesia.net/sh...erdadero-o-un-gran-engaño-es-el-mismo-zatanas

de un usuario lidiando con las contradicciones de la multiplicidad o no de Dioses
tambien verás hilos con cientos de páginas, tratando de definir si cristo dijo que era Dios o no.....
ese es el resultado de lo que muchos llaman "la claridad de las escrituras"

Cristo explicó claramente que la union entre el padre y el hijo no es literal, pues cuando oró
tambien explicó que esta union puede ser alcanzada por los discipulos
Juan 17
Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos,
para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.
La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno.

la creencia de que el Padre y el Hijo y el Espiritu Santo son un solo individuo, es una creencia sectaria que no tiene apoyo en las sagradas escrituras.

Suerte en tu vida
 
Re: Autoridad apostólica... ¿Del vaticano o mormona? ¿SUD o ICR?

Y que, aquí quedó el hilo? Sigo esperando textos bíblicos que confirmen la doctrina aberrante de que Dios Padre alguna vez fue hombre.

esta enseñanza de que alguna vez Dios fue un hombre como alguno de nosotros, o de que el hombre alguna vez podria llegar a ser un Dios
no ha sido obtenido de la Biblia, sino de las revelaciones modernas, algunos correligionarios mios
suelen citar algunos pasajes que vagamente podrían dar a entender que el señor y otros escritores Bíblicos comprendían este principio
sin embargo como te repito no nos apoyamos en la Biblia cuando se trata de este principio.

y como veras a Novo mas arriba hablando de la perfección del canon, los mormones somos aquellos
que discrepamos en cuanto a si la Biblia es la única escritura.... el cual es un principio con el que no tendrás
conflictos pues muchas ideas católicas están basadas en la tradición.

esto fue una enseñanza de Jose Smith y es una creencia muy particular de la iglesia mormona
sin embargo nosotros mismos no comprendemops las profundidades y ni as implicancias de tales declaraciones
es decir ignoramos el cuando y donde, y probablemente cuando y donde ni siquiera sean preguntas aplicables a esto
y finalmente no tratamos de averiguarlo....