Los trinitaros nos presentan una deformación de la realidad; como si a cada persona de su trinidad se le llamase "Dios" por separado.
Y lo que es peor: aún en el mismo cielo, entonces resulta que la 2da persona de "la trinidad", se postra y le rinde obediencia (aunque sea Dios) a.... Dios.
Es decir: que para los creyentes de esta doctrina disparatada: el "Dios Hijo" resulta que sigue siendo un "Dios menor"... ya que le rinde obediencia y sujección al "Dios más grande que él (el Padre)" que continúa siendo Dios menor (el Hijo)... y en medio de todo este maremágnum y cacao indigerible, el "Dios Espíritu Santo" (la alegada 3era persona) nunca aparece en ningún acontecimiento celestial de cuantos están enumerados en las Escrituras. Esto último es algo remarcable que siempre les juega en su contra a los adoradores de la trinidad.
Al final son como politeístas encubiertos. Pero politeístas que reniegan de que lo sean.
A-
Y lo que es peor: aún en el mismo cielo, entonces resulta que la 2da persona de "la trinidad", se postra y le rinde obediencia (aunque sea Dios) a.... Dios.
Es decir: que para los creyentes de esta doctrina disparatada: el "Dios Hijo" resulta que sigue siendo un "Dios menor"... ya que le rinde obediencia y sujección al "Dios más grande que él (el Padre)" que continúa siendo Dios menor (el Hijo)... y en medio de todo este maremágnum y cacao indigerible, el "Dios Espíritu Santo" (la alegada 3era persona) nunca aparece en ningún acontecimiento celestial de cuantos están enumerados en las Escrituras. Esto último es algo remarcable que siempre les juega en su contra a los adoradores de la trinidad.
Al final son como politeístas encubiertos. Pero politeístas que reniegan de que lo sean.
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