Cita extraída del libro: "Historietas de Natasnael" Tomo II.
Juan 1:1 ratifica la condición divina del Hijo, así como la de Dios. Juan nos presenta a dos entidades divinas.
A-
Para el forista Antisistema y Olga Linares, ambos, acérrimos enemigos de la ETERNIDAD DEL HIJO.
BASE BÍBLICA
Jua 1:1
El Verbo hecho carne
En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
¿QUÉ NOS ENSEÑA EL ESPÍRITU SANTO AQUÍ?
Tristemente, esta pregunta carece de sentido para ambos, pues no se trata de Dios Espíritu, capaz de redargüir de pecado, de justicia y de juicio, como enseñó nuestro amado Salvador aquí:
Jua 16:8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.
Jua 16:9 De pecado, por cuanto no creen en mí;
Jua 16:10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;
Jua 16:11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.
¿ENTONCES DE QUÉ SE TRATA PARA ELLOS?
De una "fuerza activa", como la electricidad o el viento, que no se ve, pero se siente, de este modo, ellos mismos se impermeabilizan contra la Sabiduría de Dios.
Pero para nosotros, que somos "clase aparte" porque no pertenecemos a este mundo, pertenecemos a Cristo, como lo expliqué en el mensaje anterior:
Tomando como figura a Booz y la Moabita.
El Espíritu Santo nos presenta delante de nuestros ojos espirituales al Verbo de Dios, el Verbo eterno, y el escenario es cuando el estaba con Dios y era Dios, porque tal es el significado de esta expresión:
En el principio era el Verbo,
y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
Por lo tanto, la expresión "principio" necesariamente tiene que darnos el sentido de ETERNIDAD por cuanto Dios no tiene principio, sino que se usa aquí, para expresar la igualdad de ETERNIDAD entre el Verbo y Dios.
El Espíritu Santo, en consecuencia, rastrea al Verbo antes del comienzo de los siglos, antes de la Creación, cuando no existía sino ellos, el Padre y el Hijo.
El Verbo, o sea el Hijo Eterno, porque este Verbo se hizo carne en la Persona de Jesús, nos revela a Dios Padre.
Esto significa que Dios, como tal, no se revela así mismo, sino que lo hace por medio del Hijo.
Dios nos da a conocer su naturaleza, su Esencia, por medio del Verbo, el Logos, la Palabra encarnada, Jesús.
Y en este contexto de Juan 1:1, que nos habla de la Eternidad, que nos habla de antes del comienzo de los siglos, el Verbo se menciona aquí antes de que existiese alguien por medio del cual Dios pudiese revelarse.
Es, por lo tanto, y en el sentido más estricto, Eterno, igual que su Padre Dios.
"En el principio era el Verbo", cuando no había cómputo del tiempo, por cuanto aún el mecanismo de la Creación, no había sido puesto en marcha por la Palabra de Dios, el Verbo de Dios, su Hijo, Dios habló y se hizo, tal como nos revela Hebreos aquí:
Heb 11:3 Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios; de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.
¿De modo que lo que se ve, fue hecho de lo que no se veía?
Gén 1:3 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz.
Forista Antisistema y Olga Linares:
¿QUIÉN ES EL QUE HABLA AQUÍ?
1. Si responden que fue el Verbo Eterno de Dios, es correcto.
2. Si responden que fue el Hijo antes de su encarnación, también es correcto.
Y aquí está el sustento bíblico:
Jua 1:3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
Jua 1:4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
Jua 1:5 La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.
FIJÉMONOS EN EL VERSÍCULO TRES
"Todas las cosas", se dice, "fueron hechas por Él".
¿QUIÉN ES ÉL? Obviamente el Verbo, el Hijo, Su Logos, Su Palabra, antes de su encarnación en Jesús.
De manera que el Espíritu Santo nos introduce en el v.3 en el escenario de la creación, donde contemplamos claramente el origen de toda criatura, física y espiritual, donde quiera que se halle, en la tierra o en el cielo
Hubo seres celestiales antes de los terrenales; pero ya sea ángeles u hombres, ya sea el cielo o la tierra, todas las cosas fueron hechas por Él, y Él es antes de todas las cosas, porque es Dios, como claramente se enseña aquí:
En el principio era el Verbo,
y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
Dios no tiene principio, sino que se usa aquí, para expresar la igualdad de ETERNIDAD entre el Verbo y Dios.
Más claro no se puede.