¿Es o no Pablo el autor de la epístola a los Hebreos?

“¡¡¡Qué difícil es el arte de razonar!!!”

“¡¡¡Qué difícil es el arte de razonar!!!”


Cuánta razón tiene el hermano que lo dijo!
Por ello, estemos advertidos que cuanto más nos resignemos a copiar y repetir sin razonar por nosotros mismos, la dificultad en poder hacerlo irá en aumento.
Mientras que, cuanto más nos ejercitemos en este difícil arte de razonar, comprobaremos que con la ayuda de Dios, razonaremos cada vez más y mejor.
No temamos activar esta capacidad de raciocinio con que Dios nos facultó; temamos sí, por pereza, comodidad e indolencia, no hacerlo.
La feligresía cristiana suele delegar este ejercicio en sus pastores, confiando que estos fueron entrenados en esta facultad del pensar amplio, profundo y con acierto.
¡Si supieran cuantos pastores se mueren de viejos pero todavía vírgenes a este respecto!
Soy consciente que Tobi ha aportado algunos argumentos a los que todavía no me he referido. Por supuesto que he podido encarar su consideración y estudio; pero si no lo he hecho ha sido porque no quise pecar de entrometido en un diálogo personal entre dos pastores. Ignoro si Julio estuvo a la altura de las circunstancias y respondió a plena satisfacción de Tobi, pero dado que yo soy de los que carecen de estudios teológicos formales, jamás egresé de Seminario alguno ni fui ordenado oficialmente al ministerio, carezco de las credenciales necesarias para el diálogo con quienes sí calzan tales puntos.
Además, recuérdese que ya al principio Tobi lanzó la feliz ocurrencia de que:
“creo que Ricardo y Joa aunque viniera el mismo Pablo y les dijese que él no la escribió, seguirían en sus trece.” Claro, fue un chiste, pues lo mismo le dijo luego a Julio, por lo que hemos de tomarlo como un hábito para bromear con cuantos disientan de su opinión.
Pero si algún forista cree necesario que responda a cuestiones que entiende no fueron cabalmente explicadas, con sólo hacérmelo notar estaré aceptando la invitación.
Si mal no recuerdo, los argumentos planteados a Julio fueron:
- La evidencia interna de la epístola
- El testimonio de los Padres de la Iglesia
- La decisión de omitir el nombre de Pablo en la RVR1960.
Aunque si alguno quisiera conversar sobre cada punto, quizás sea más conveniente hacerlo por turno y no los tres - o más que hubiera -, a la vez.
Reciban todos mi fraternal saludo.
Ricardo.
 
Re: ¿Es o no Pablo el autor de la epístola a los Hebreos?

Saludos Ricardo.
Aunque no lo haya hecho tan abundantemente como tu, ya di mis razones por que creo que Pablo omitio su nombre de la epistola, aunque algunos no esten de acuerdo,no obstante para mi es suficiente razon para la omision del nombre.
hacerca de la evidencia interna tambien ya di la razon porque creo basado en aspectos como la omicion del escritor biblico de la destruccion del templo y sacerdocio Judio, fue porque tales ritos seguian vigentes,portanto no podia comentar algo que todabia estava en pie, hebreos 8:13 dice al decir nuevo a pacto a dado por viejo al primero, y lo que se da por viejo esta Pronto a desapareser, es evidente pues que el templo y los rituales de la ley para el tiempo que se escribe la carta estan vigentes ,de lo contrario el escritor biblico se estaria contradiciendo.
ademas de otras cosas que ya aporte, cuando una estudiante biblico estudia el libro de hebreos puede entender que el libro esta siendo enviada a Judios, que todavia practican los rituales de la ley.
\la evidencia externa es tan amplia que se puede escribir un libro sobre este tema.
muy bendecidos.
 
Re: ¿Es o no Pablo el autor de la epístola a los Hebreos?

¿Hasta donde merece la pena seguir?
Ante tanta sabiduría uno se queda pasmado. :terco:
 
Apreciado Julio:

Apreciado Julio:


Como ves, Norberto me ha avergonzado confesándose admirado de mi exposición (exceso que ya he procurado corregir), pero tú me ganas ahora pues has dejado a Tobi nada menos que pasmado, lo que supera a la mera admiración.
Pero tras esta nota de humor, consideraré lo que me has escrito, y con gusto más tarde te responderé.
Todos podemos aprender de todos, pues sólo el Señor Jesús es la misma sabiduría en persona, y si a nosotros nos falta mucha, pedimos a Dios y Él nos da.
Por lo demás, este tema está en pañales todavía. La pena es que quienes no aceptan la paternidad literia de Pablo no defiendan mejor su posición. Pues los que sí seguimos convencidos de que Hebreos es paulina, todavía tenemos bastante para decir.
Dios bendiga a todos.
Ricardo.
 
Estimado Julio:

Estimado Julio:


Por supuesto que a ti te asiste el mismo derecho que a todos, de pensar, creer y decir como mejor nos parezca.
Con todo, cuando nos manifestamos públicamente, como sucede en el Foro, donde los visitantes al epígrafe pueden leernos, releernos y comparar lo que ahora decimos con lo que anteriormente expresamos, arriesgamos ser vistos como caprichosos incorregibles, si persistimos con los mismos argumentos, aunque estos pudieran haber quedado desvirtuados.
Cuando hermanos como Leal y Norberto conceden algo o admiten la probabilidad resultante de una exposición, ni dan el brazo a torcer ni se muestran débiles frente a una posición distinta a la que anteriormente sustentaban, sino todo lo contrario, una fuerza e integridad de carácter que promete avances y progresos en sus estudios.
Aunque es antiguo, conocido y trillado el argumento que repites de que Pablo ocultó deliberadamente su nombre para precaverse de cierta animadversión de los cristianos judíos (y escribía bajo inspiración del Espíritu Santo), creo que expliqué ampliamente la imposibilidad de tal pretendida contingencia. Quizás sea conveniente resumirla aquí ahora:
1 – Actualmente - como hace dos mil años – no es ético escribir anónimos, pues denota una actitud tan cobarde como irresponsable pretender encubrirse en el anonimato. Si tú o yo recibiéramos una carta anónima, quizás la leyéramos por mera curiosidad, para enseguida tirarla al cesto y olvidarnos de ella. Solamente los terroristas o quienes quieren intimidar a otros con amenazas recurren a ese vil expediente.
2 – El Espíritu Santo jamás se haría cómplice y mucho menos promotor de tal bajeza. Pero para agregar una nota positiva a esta cuestión, te invito a que busques en una Concordancia Bíblica la palabra “apóstol”. Hallarás entonces una explicación adicional a la omisión de “Pablo, apóstol” como suele presentarse en las demás epístolas. Es únicamente en Hebreos (3:1) donde tenemos esta declaración: “considerad al apóstol y sumo sacerdote de nuestra profesión, Cristo Jesús”. En ningún otro lugar del NT Jesucristo es mencionado como apóstol, solamente allí. Así que el nombre y apostolado de Pablo constituye en Hebreos todo un vacío y silencio solemne para que sea llenado con el nombre y apostolado único de Cristo Jesús. Hay tres clases de apóstoles (enviados):
Enviado por el Padre: 1 solo, Jesucristo (He.3:1; Jn.3:17; 6:29).
Enviados por el Hijo: 12 (Lc.6:13; Hch.1:26).
Enviados por el Espíritu Santo: muchos,desde Bernabé y Pablo (Hch.13:2,4).
Nuestro Señor es apóstol del primer orden, Pablo del tercero. Pequeño era el apostolado a los gentiles de Pablo, en comparación de Aquel que es el Pastor y Obispo de nuestras almas (1Pe.2:25), enviado para ser el Salvador de todos los que le creen.
Estimado Julio, es un privilegio y placer dialogar contigo, pues tus comentarios me exigen estudiar de modo que aprendo lo que antes no sabía. Aspiro que algún bien también tú saques de nuestro diálogo.
Ricardo.
 
Apreciado Quimi:

Apreciado Quimi:


Por supuesto que se trata de la misma persona, pero normalmente cuando nos referimos a Saulo hablamos del judío fariseo perseguidor de la iglesia, y luego de su conversión se acostumbra usar el nombre de Pablo.
Así es con muchos personajes bíblicos, como también Simón que es Cefas y que es Pedro.
Dada la falta de confrontación con quienes impugnan la paternidad literaria de Pablo como autor de Hebreos, estoy pensando en agarrar al toro por los cuernos, y entrar a revisar los argumentos de los eruditos para negarla, así como la legitimidad de sus otros candidatos propuestos.
Acercándonos ya al millar de visitas, creo que los compañeros foristas merecen escuchar mejores argumentos en contra. Si luego el Señor nos concede luz para desactivarlos, entonces puede ser que prospere la iniciativa de pedir a las Sociedades Bíblicas Unidas que reconsideren su decisión de quitar el nombre de Pablo en el título en la RVR1960.
Saludos a todos.
Ricardo.
 
Re: ¿Es o no Pablo el autor de la epístola a los Hebreos?

1 – Actualmente - como hace dos mil años – no es ético escribir anónimos, pues denota una actitud tan cobarde como irresponsable pretender encubrirse en el anonimato. Si tú o yo recibiéramos una carta anónima, quizás la leyéramos por mera curiosidad, para enseguida tirarla al cesto y olvidarnos de ella. Solamente los terroristas o quienes quieren intimidar a otros con amenazas recurren a ese vil expediente.
No siempre y cuando el fin sea bueno.de todos modos en ese caso los apostoles serian tambien unos cobardes al no dar el consejo total del mensaje de la gracia,
Pues jacobo dice que una fe sin obras esta muerta.
O Pedro por ejemplo que obligaba a los gentiles a Judaisar.
Creo que tu punto de vista aqui no esta del todo entonado con intencion que pablo escribe la carta y el motivo de ocultar su nombre ,no es cobardia sino sabiduria, recuerda que el a veces actuava, como si estuviera bajo la ley,Para sacar de la ignorancia de la ley a sus conciudadanos.
Asi que mi comentario se apega a la logica y el momento que se vive en ese entonces y la realidad de que los cristianos Judios en su mayoria no querian saber nada de Pablo.
Pero si tu quieres creer otra cosa tienes el mismo derecho.
 
Estimado Julio:

Estimado Julio:

Me sorprendes con tus declaraciones y no me es fàcil elaborar una respuesta.
Luego de meditar en lo que has escrito, con mucho gusto te responderè.
Ricardo.
 
Re: ¿Es o no Pablo el autor de la epístola a los Hebreos?

Ricardo, perdona que te haga un par de preguntas sobre una cuestión que no tiene nada que ver con el asunto del epígrafe, pero es que no quiero abrir un nuevo tema con ellas: ¿has vuelto a escribir algún libro después del de "Una verdad que asusta"? ¿has profundizado más en algunas de las cosas que planteabas en el mismo?
 
Estimado Julio:

Estimado Julio:


Si tú puedes brindarme un solo ejemplo de cuando un mensaje pueda mostrar mejor su bondad de ser anónimo que con autor manifiesto, te lo agradeceré; porque lo que es yo, no sólo no conozco ninguno sino que ni siquiera puedo imaginar que el anonimato haga más efectivo un recado que llevando el nombre del remitente. Lo mismo digo en cuanto a excepciones, si conoces alguna, ¡por favor háznosla saber!
De ninguna manera puedes juzgar a los escritores neotestamentarios como si ellos hubieran escamoteado algo de lo que tenían que haber escrito, pues en tal caso estarías haciendo recaer la falta sobre el Espíritu Santo que los inspiró, lo cual es imposible.
El caso de Pedro fue diferente, pues no se trató de algo que él escribiera sino de una actitud equivocada, la que reprendida por Pablo, no fue replicada sino asumida.
Me causas la impresión que no acabas por entender la epístola de Santiago (o Jacobo).
Si te crees tan seguro de lo que dices, abre un nuevo epígrafe sobre el particular y yo me comprometo a demostrar que no hay contradicción alguna entre esa epístola y las de Pablo. Pero eso sí, sé responsable y no te esfumes del debate cuando no tengas más respuesta que dar que la mera repetición de argumentos desactivados. Quizás podamos todavía aprender algo uno del otro y los foristas que se dignen visitar el epígrafe.
Pablo no era un falluto y jamás actuó hipócritamente. La porción de 1Co.9:19-23 de ninguna manera da derecho a pensar que el apóstol tenía dos caras: una para congraciarse con los judíos, y otra para caerle en gracia a los gentiles. Simplemente él aprovechaba de ser un judío fariseo, de la tribu de Benjamín y celoso de la Ley, paradesde ese mismo plano común evangelizar a los de su propio pueblo hebreo. Pero como natural de Tarso, también era ciudadano romano y su vasta cultura helénica le permitía establecer puentes con sus interlocutores gentiles. Él no escondía lo que era.
Me temo que te apresuras demasiado a concluir que tu comentario se apega a la lógica, pues por más que la busque no la encuentro.
Quisiera saber de dónde sacas aquello de “que los cristianos Judíos en su mayoría no querían saber nada de Pablo” pues en la Biblia que llevo grabada en el disco duro de mi cerebro tal versículo me falta. Claro que nada querían saber de Pablo los judaizantes, los falsos hermanos y los falsos apóstoles, pero los tales no están en nuestra conversación, ya que no es a ellos que la epístola a los Hebreos fue escrita. El Jacobo que presidía en Jerusalem no era un “judaizante”, como tampoco lo fueron Pedro y Bernabé, aunque el primero adoptara una actitud equivocada y el segundo fuera arrastrado por la hipocresía de los que todavía discriminaban entre circuncisos e incircuncisos. Recuerda que se estaba todavía en un período de transición, y Pablo debía sostener dura lucha con quienes no se despegaban del ayo (pedagogo) que les había llevado a Cristo.
Estoy convencido – al revés de lo que tú dices -, que los cristianos judíos unánimemente amaban, oían y leían a Pablo.
Te agradezco que me concedas recíproco derecho a creer diferente; sin embargo, yo no me quedaría tranquilo sabiendo que crees distinto, pues eso estaría indicando que tengo al menos el 50% de posibilidades de estar equivocado; y no quisiera estarlo, si tengo la oportunidad de ser corregido y mejor instruido. Lo que yo procuro contigo, lo puedes tú también intentar conmigo, pues te aseguro que no me pondré porfiado y tozudo.
Te saludo cordialmente, y quedo a la espera de si te animas a aceptar mi invitación a conversar sobre la fe y las obras en las epístolas de Pablo y Santiago.
Ricardo.
 
Mi querido hermano Luis Fernando:

Mi querido hermano Luis Fernando:

Lo que es escribir, sigo escribiendo mucho; sin embargo despuès que CLIE publicò mi libro, mis contradictores se silenciaron.
Aunque invitaba al diàlogo, tal parece que no quisieron exponerse.
He estudiado las varias posiciones preteristas, pero por ahora sigo afirmado en los resultados de mis estudios que ya conoces y que me consta no compartes.
Ha sido un gusto este intercambio fuera del tema.
Nos seguimos leyendo.
El Señor te bendiga.
Ricardo.
 
Re: Mi querido hermano Luis Fernando:

Re: Mi querido hermano Luis Fernando:

Lo que es escribir, sigo escribiendo mucho; sin embargo despuès que CLIE publicò mi libro, mis contradictores se silenciaron.
Aunque invitaba al diàlogo, tal parece que no quisieron exponerse.
He estudiado las varias posiciones preteristas, pero por ahora sigo afirmado en los resultados de mis estudios que ya conoces y que me consta no compartes.
Ha sido un gusto este intercambio fuera del tema.
Nos seguimos leyendo.
El Señor te bendiga.
Ricardo.

Umm, no creas. Hay cosas de ese libro que comparto y que entiendo que pongan muy nerviosos al resto de evangélicos. Pero lo dejamos para otra ocasión u otro epígrafe.
 
Re: ¿Es o no Pablo el autor de la epístola a los Hebreos?

Si tú puedes brindarme un solo ejemplo de cuando un mensaje pueda mostrar mejor su bondad de ser anónimo que con autor manifiesto, te lo agradeceré; porque lo que es yo, no sólo no conozco ninguno sino que ni siquiera puedo imaginar que el anonimato haga más efectivo un recado que llevando el nombre del remitente. Lo mismo digo en cuanto a excepciones, si conoces alguna, ¡por favor háznosla saber

Dios en el A.T. y Cristo en en el N.T.Recuerda que otros escribieron por ellos.

De ninguna manera puedes juzgar a los escritores neotestamentarios como si ellos hubieran escamoteado algo de lo que tenían que haber escrito, pues en tal caso estarías haciendo recaer la falta sobre el Espíritu Santo que los inspiró, lo cual es imposible.

Entonces crees que todo lo que esta escrito en la biblia es infalible al error Humano?

El caso de Pedro fue diferente, pues no se trató de algo que él escribiera sino de una actitud equivocada, la que reprendida por Pablo, no fue replicada sino asumida.

Pedro era una pieza muy importante en el inicio de la iglesia ,y cometer los graves errores que cometia son inperdonables.Como Obligar a los gentiles a Judaisar.Recuerda que en hechos 21 el dio su consentimiento para que pablo cumpliera ritos de la ley, para que todos los miles de judios que habian creido supieran que lo que pablo ensemaba en la gentilidad era mentira.Como le llamas a eso?

Me causas la impresión que no acabas por entender la epístola de Santiago (o Jacobo).
Si te crees tan seguro de lo que dices, abre un nuevo epígrafe sobre el particular y yo me comprometo a demostrar que no hay contradicción alguna entre esa epístola y las de Pablo. Pero eso sí, sé responsable y no te esfumes del debate cuando no tengas más respuesta que dar que la mera repetición de argumentos desactivados. Quizás podamos todavía aprender algo uno del otro y los foristas que se dignen visitar el epígrafe.

El que todavia no entiende Santiago me parese que eres tu Ricardo.
Yano traten de ayudar al despistado Santigo,quien por la influencia de el ,Pedro sucumbio para no predicar la verdad del evangelio.

Mira te dejo con esta escritura para que la medites.

11 Pero cuando Pedro vino a Antioquía, le resistí cara a cara, porque era de condenar.
12 Pues antes que viniesen algunos de parte de Jacobo, comía con los gentiles; pero después que vinieron, se retraía y se apartaba, porque tenía miedo de los de la circuncisión.

13 Y en su simulación participaban también los otros judíos, de tal manera que aun Bernabé fue también arrastrado por la hipocresía de ellos.

14 Pero cuando vi que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos: Si tú, siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar?

Dime si la actitud de pedro y santiago eran inspiradas por el Espiritu santo?.
O eran errores humanos.
te dejo con esto para que medites despues respondo el resto.
 
Apreciado Julio:

Apreciado Julio:

Mucho te agradezco por el orden y prolijidad de tus respuestas.
Fiel a mi costumbre, bajo y copio tu mensaje y luego lo considero atentamente.
Yo sè demasiado poco como para andar improvisando respuestas, por ello aprovecho la ocasiòn para estudiar y aprender.
Hasta luego.
Ricardo.
 
Estimado Julio:

Estimado Julio:

Paso a enumerar mi contestación a tus respuestas del último mensaje:
1 – Creo sì que la Palabra de Dios es infalible e inerrable. Ahora, un ejemplar fìsico de la Biblia, puede contener errores de traducción, interpolaciones de algún copista y errores de imprenta. Esta es la falible mano del hombre.
2 – Al ejemplo que te pido que des de cuando un anónimo puede ser más efectivamente bueno que de llevar el nombre del remitente, pones al propio Dios y al Señor Jesús. ¡Pues peor no podrías haber contestado! ¿Desde cuándo Dios ha hablado o escrito omitiendo su nombre? Esta era la preocupación que tenía Moisés cuando recibió de Dios la comisión de volver a Egipto y hablar con sus hermanos hebreos. Pero Dios le instruyó al respecto. Luego, al escribir el dedo de Dios el Decálogo sobre las dos tablas de piedra, comenzó presentándose: “Yo soy Jehová, tú Dios, que te saqué de la tierra de Egipto” (Ex.20:2). Y así todo el Antiguo Testamento; Jehová Dios siempre se presenta y habla a través de sus siervos los profetas. Y lo mismo decimos del Señor Jesús. Si no tenía necesidad de presentarse a menudo, era por su fama y porque hasta los mismo demonios le reconocían. Cuando sus aprehensores le dijeron que buscaban a Jesús nazareno, les dijo “Yo Soy”. Cuando Saulo le preguntó quién era, le respondió: “Yo soy Jesús, a quien tú persigues”. ¿Dónde vemos a Jesús refugiado en el anonimato? Quizás brevemente, cuando iba de camino junto a los discípulos de Emaús; pero luego se dio a conocer a ellos al partir el pan. Todo el Nuevo Testamento está lleno de que lo que se predica, los bautismos, las oraciones, los milagros y cuanto se haga es en el nombre del Señor Jesús. Sinceramente creo este despiste tuyo excede al más espectacular que recuerden las carreras de Indianápolis.
3 - Probablemente tengas razón y sea yo quien no entienda la epístola de Santiago, por lo cual todo el Foro te estará agradecido que de una buena vez me pongas en vereda, forzándome a reconocer mi equivocada posición o exponiéndome a quedar como un maníaco empedernido que por más evidentes razones que se le den, todavía porfía en no dar su brazo a torcer. Pero no puede ser en este epígrafe, pues aquí nuestro tema es otro, y fíjate que por cada uno que aportamos un mensaje, hay otros siete u ocho foristas que nos vienen leyendo, intrigados probablemente en cuanto a donde va a para el debate sobre el autor de Hebreos. Si tan seguro estás de tu acierto y mi consiguiente error, abre entonces un nuevo epígrafe proponiéndome lo que quieras respecto a Pablo y Santiago, la justificación por la sola fe o por las obras también, y demás asuntos afines que vengan al caso.
Los amanuenses, que escriben al dictado, jamás hacen de su trabajo un anònimo, porque no lo es.
4 – Ni Santiago era despistado, ni la Escritura registra lo que tú dices que por influencia suya Pedro sucumbió para no predicar la verdad del evangelio. ¿Puede ser que ni siquiera hayas leído los mensajes de Pedro en el libro de los Hechos?
5 – Como podrás imaginar, la porción de Gl. 2:11-14 la conozco desde pequeñín, lo que no quiere decir que rehuya tu invitación a que medite en ella. Pues bien, vuelto una vez más a leerla atentamente, ella misma te refuta con tal clase y elegancia como lo hacía Manolín rematando al toro de su faena. En esa escena las actitudes censurables son las de Pedro y Bernabé, pero Santiago no tenía vela en ese entierro. Él no se hallaba presente. Incluso, tampoco son culpables los hermanos llegados de parte suya a Antioquía. Lo único a lo que el relato puede en nuestra imaginación llevarnos, es a la timidez de Pedro que le llevó a negar al Señor tres veces cuando era denunciado como discípulo de Jesús. Ahora, un miedo similar le acomete, pues no quiere mostrarse como saliéndose de la costumbre de los judíos de no comer con los gentiles. Tuvo un lamentable lapsus, pues tal miedo debía haber desaparecido totalmente después de su experiencia con el Señor en la azotea de la casa en Jope, y enseguida en la casa de Cornelio (Hechos cap.10). Nosotros no somos mejores que Pedro; ¡cuántas veces reincidimos en actitudes que por experiencia habíamos muy bien aprendido que no son propias de cristianos!
6 – Sabemos que las epístolas de Pedro y Santiago (como las demás) son inspiradas del Espíritu Santo. En cuanto a las actitudes personales, fueron correctas las de ambos en el debate de Jerusalem de Hechos 15 ante el mismo problema, y al acuerdo alcanzado, se involucra al Espíritu Santo. En cuanto a las demás actitudes personales, es posible que no siempre actuaran en el Espíritu, sino que a veces podían haberlo hecho en la carne, como también nosotros lamentablemente incurrimos en lo mismo.
Si estos puntos de veras te interesan, abre entonces el epígrafe y seguimos hablando.
Ricardo.
 
Re: ¿Es o no Pablo el autor de la epístola a los Hebreos?

Decir que la Epistola de Santiago contradice a las de Pablo es hacer argumento de se propia ignorancia.

Para comprobarlo solo hay que leer y "entender" lo que en 1:19-24
 
Re: Estimado Julio:

Re: Estimado Julio:

Paso a enumerar mi contestación a tus respuestas del último mensaje:
1 – Creo sì que la Palabra de Dios es infalible e inerrable. Ahora, un ejemplar fìsico de la Biblia, puede contener errores de traducción, interpolaciones de algún copista y errores de imprenta. Esta es la falible mano del hombre.
2 – Al ejemplo que te pido que des de cuando un anónimo puede ser más efectivamente bueno que de llevar el nombre del remitente, pones al propio Dios y al Señor Jesús. ¡Pues peor no podrías haber contestado! ¿Desde cuándo Dios ha hablado o escrito omitiendo su nombre? Esta era la preocupación que tenía Moisés cuando recibió de Dios la comisión de volver a Egipto y hablar con sus hermanos hebreos. Pero Dios le instruyó al respecto. Luego, al escribir el dedo de Dios el Decálogo sobre las dos tablas de piedra, comenzó presentándose: “Yo soy Jehová, tú Dios, que te saqué de la tierra de Egipto” (Ex.20:2). Y así todo el Antiguo Testamento; Jehová Dios siempre se presenta y habla a través de sus siervos los profetas. Y lo mismo decimos del Señor Jesús. Si no tenía necesidad de presentarse a menudo, era por su fama y porque hasta los mismo demonios le reconocían. Cuando sus aprehensores le dijeron que buscaban a Jesús nazareno, les dijo “Yo Soy”. Cuando Saulo le preguntó quién era, le respondió: “Yo soy Jesús, a quien tú persigues”. ¿Dónde vemos a Jesús refugiado en el anonimato? Quizás brevemente, cuando iba de camino junto a los discípulos de Emaús; pero luego se dio a conocer a ellos al partir el pan. Todo el Nuevo Testamento está lleno de que lo que se predica, los bautismos, las oraciones, los milagros y cuanto se haga es en el nombre del Señor Jesús. Sinceramente creo este despiste tuyo excede al más espectacular que recuerden las carreras de Indianápolis.
3 - Probablemente tengas razón y sea yo quien no entienda la epístola de Santiago, por lo cual todo el Foro te estará agradecido que de una buena vez me pongas en vereda, forzándome a reconocer mi equivocada posición o exponiéndome a quedar como un maníaco empedernido que por más evidentes razones que se le den, todavía porfía en no dar su brazo a torcer. Pero no puede ser en este epígrafe, pues aquí nuestro tema es otro, y fíjate que por cada uno que aportamos un mensaje, hay otros siete u ocho foristas que nos vienen leyendo, intrigados probablemente en cuanto a donde va a para el debate sobre el autor de Hebreos. Si tan seguro estás de tu acierto y mi consiguiente error, abre entonces un nuevo epígrafe proponiéndome lo que quieras respecto a Pablo y Santiago, la justificación por la sola fe o por las obras también, y demás asuntos afines que vengan al caso.
Los amanuenses, que escriben al dictado, jamás hacen de su trabajo un anònimo, porque no lo es.
4 – Ni Santiago era despistado, ni la Escritura registra lo que tú dices que por influencia suya Pedro sucumbió para no predicar la verdad del evangelio. ¿Puede ser que ni siquiera hayas leído los mensajes de Pedro en el libro de los Hechos?
5 – Como podrás imaginar, la porción de Gl. 2:11-14 la conozco desde pequeñín, lo que no quiere decir que rehuya tu invitación a que medite en ella. Pues bien, vuelto una vez más a leerla atentamente, ella misma te refuta con tal clase y elegancia como lo hacía Manolín rematando al toro de su faena. En esa escena las actitudes censurables son las de Pedro y Bernabé, pero Santiago no tenía vela en ese entierro. Él no se hallaba presente. Incluso, tampoco son culpables los hermanos llegados de parte suya a Antioquía. Lo único a lo que el relato puede en nuestra imaginación llevarnos, es a la timidez de Pedro que le llevó a negar al Señor tres veces cuando era denunciado como discípulo de Jesús. Ahora, un miedo similar le acomete, pues no quiere mostrarse como saliéndose de la costumbre de los judíos de no comer con los gentiles. Tuvo un lamentable lapsus, pues tal miedo debía haber desaparecido totalmente después de su experiencia con el Señor en la azotea de la casa en Jope, y enseguida en la casa de Cornelio (Hechos cap.10). Nosotros no somos mejores que Pedro; ¡cuántas veces reincidimos en actitudes que por experiencia habíamos muy bien aprendido que no son propias de cristianos!
6 – Sabemos que las epístolas de Pedro y Santiago (como las demás) son inspiradas del Espíritu Santo. En cuanto a las actitudes personales, fueron correctas las de ambos en el debate de Jerusalem de Hechos 15 ante el mismo problema, y al acuerdo alcanzado, se involucra al Espíritu Santo. En cuanto a las demás actitudes personales, es posible que no siempre actuaran en el Espíritu, sino que a veces podían haberlo hecho en la carne, como también nosotros lamentablemente incurrimos en lo mismo.
Si estos puntos de veras te interesan, abre entonces el epígrafe y seguimos hablando.
Ricardo.

Como dijo Pablo,los de reputacion nada nuevo me comparten!
 
Julio:

Julio:

Es realmente un maravilloso y prodigioso milagro el como puedas hacer una extensa cita mìa para seguidamente contestarla con una brevìsima frase.
¿En tu iglesia al hablar tu sermòn dura apenas un par de segundos?
Ricardo.