TEXTOS PATRÍSTICOS
SAN IGNACIO DE ANTIOQUÍA (+107)
1-Es justo que vosotros glorifiquéis de todas las maneras a Jesucristo, que os ha glorificado a vosotros (Ephes 2, 2).
2-Sois, pues, vosotros y todos vuestros compañeros de viaje deíferos, templíferos, cristíferos, santíferos (Ephes 9, 1-3).
3-Él mismo se llama en varias ocasiones “Teóforo” [Portador de Dios]: Ephes 9, 2; Magn , Trall.
4-Hagamos, pues, todas las cosas con la fe de que Él mora en nosotros, a fin de ser nosotros templos suyos y Él Dios nuestro (Ephes 15, 3).
5-Aguarda al que está por encima del tiempo, al Intemporal, al Invisible que por nosotros se hizo visible, al Impasible que por nosotros se hizo pasible: al que por todos los modos sufrió por nosotros (Polyc 3, 2).
6-Jesucristo es nuestro solo Maestro, ¿cómo podemos nosotros vivir fuera de Él? (Magn 9, 1).
SAN JUSTINO (100-165)
1-El Verbo que procede del mismo Dios ingénito e inefable; pues Él, por amor nuestro, se hizo hombre para participar de nuestros sufrimientos y curarlos (Apol II 10,2-8).
2-Habiendo sido creados impasibles e inmortales, como Dios, con tal de guardar sus mandamientos, y habiéndoles Él concedido ser llamados hijos de Dios…Sea la interpretación del salmo [81] la que vosotros queráis; aun así queda demostrado que a los hombres se les concede llegar a ser dioses y que pueden convertirse en hijos del Altísimo (Dial con Tryph 124, 4).
SAN TEÓFILO DE ANTIOQUÍA (+181)
Y así, si el hombre se inclina a la inmortalidad, guardando los mandamientos de Dios, recibirá de Dios como galardón la inmortalidad y llegaría a ser Dios (Ad Aut 2, 27).
SAN IRENEO (135-202)
1-A la manera que el olivo silvestre injertado no pierde su naturaleza de árbol, sino que cambia la cualidad de su fruto y también su mismo nombre…así el hombre injertado por la fe y que ha recibido el Espíritu Santo, no pierde su naturaleza carnal, sino que transforma la cualidad del fruto de sus obras y recibe un nombre nuevo, que expresa su mejora. Ya no se llama carne y sangre sino hombre espiritual (Adv Haer 1, 5).
2-Él ha derramado el Espíritu del Padre para operar la unión y la comunión entre Dios y el hombre (Adv Haer 1, 59.
3-¿Cómo hubiéramos podido unirnos a la incorruptibilidad y a la inmortalidad, si la incorruptibilidad y la inmortalidad no se hubiera convertido en lo que nosotros somos, para que lo que era corruptible fuera absorbido por la incorruptibilidad y lo que era mortal por la inmortalidad, y para que nosotros recibiéramos la adopción de hijos?…El Hijo de Dios se hizo hombre para que el hombre, unido al Verbo de Dios y recibiendo la adopción, se hiciera hijo de Dios (Adv Haer 3,19).
4-El Hijo de Dios asumió la carne para incitar al hombre a hacerse semejante a Él (Adv Haer 3, 20).
5-El hombre que vive es la gloria de Dios, asimismo la vida del hombre consiste en la visión de Dios (Adv Haer 4, 20).
6-¿Cómo puede el hombre llegar a ser Dios si Dios no se hace hombre? (Adv Haer 4, 33).
7-No fuimos creados dioses desde el principio, sino primero hombres, luego al fin dioses (Adv Haer 4, 33).
8-El Verbo de Dios… que por su inmenso amor se hizo lo que nosotros somos para hacernos llegar a ser lo que es Él mismo (Adv Haer 5, pref ).
9-Porque si no hubiera de salvarse la carne, en modo alguno se habría encarnado el Verbo de Dios (Adv Haer 5, 14).
10-El Verbo de Dios se hizo hombre para que por Él recibamos la adopción (Adv Haer 16, 3).
11-Por eso el Verbo se ha hecho hombre y el Hijo de Dios se ha hecho hijo del hombre, para que el hombre, uniéndose al Verbo y recibiendo la adopción, se haga hijo de Dios (Adv Haer 19,1).
CLEMENTE DE ALEJANDRÍA (150-216)
1-El Logos de Dios se hizo hombre, para que aprendas de un hombre cómo el hombre puede llegar a ser dios (Protr, 1).
2-El Logos de Dios se hizo hombre para que también tú aprendas de un hombre cómo el hombre puede llegar a ser dios (Protr 8, 64).
3-Él nos ha hecho la gracia de la herencia paterna, grande, divina y que no se pierde, divinizando al hombre por una enseñanza celeste (Protr 11, 114).
4-El hombre que ha tenido en sí al Logos, recibe la hermosa figura del Logos, y él mismo se embellece porque se asemeja a Dios. Se hace Dios, porque Dios así lo quiere (Pedag 1, 5).
5-Bautizados, somos iluminados; iluminados, somos adoptados como hijos; adoptados, llegamos a la perfección; perfectos, venimos a ser inmortales (Pedag 1, 6).
6-El hombre habitado por el Logos…es la verdadera belleza porque es Dios. El hombre se hace Dios porque quiere lo que Dios quiere (Pedag 3, 19).
TERTULIANO (+220)
Dios es capaz de hacer a otros dioses y deificar a los hombres ( Apolog 11).
SAN HIPÓLITO (+ 235)
Serás partícipe de Dios y coheredero de Cristo, liberado de la concupiscencia y de las pasiones. Has sido hecho dios…Dios ha prometido concederte estas cosas, porque has sido deificado, has renacido como inmortal (Adv Haer 1, 10).
Pero si, de todos modos, quieres llegar a ser dios también tú, obedece a aquel que te ha hecho y no le resistas ahora (Philosoph., 33).
ORÍGENES (185-255)
l-Para que la naturaleza humana, al unirse con una sustancia más divina, se hiciese divina, no sólo en Jesucristo, sino en todos los que, por la fe, abrazan la vida que Cristo ha enseñado, que conduce a la amistad y a la comunión con Dios a todo el que acomode sus costumbres a los preceptos de Jesucristo (Contra Celsum 1, 3).
2-Así la naturaleza humana, por su comunión con la divinidad se torna divina no sólo en Jesús, sino también en todos los que después de creer abrazan la vida que Jesús enseñó, vida que conduce a la amistad y comunión con Dios (Contra Celsum 1, 57).
3-Ellos [los discípulos] reconocieron que en Cristo había empezado la unificación de la naturaleza divina con la humana, para que la humana, gracias a esta íntima unión, se hiciera divina, no sólo en Jesús, sino también en todos los hombres (Contra Celsum 3, 28).
4-En Él la naturaleza divina y la naturaleza humana han comenzado a unirse estrechamente, a fin de que, por su comunión con lo que es más divino, la naturaleza humana llegue a ser divina, no sólo en Jesús, sino también en todos aquellos que, con la fe, abrazan la vida que Jesús ha enseñado y que conduce a la amistad y comunión con Dios (Contra Celsum, 3, 28).
5-El alma está divinizada porque contempla (In Io 32, 27).
SAN METODIO DE OLIMPO (+311)
Cristo no ha venido a cambiar o a transformar la naturaleza humana, sino a conducirla allí donde se encontraba antes de la caída, a la inmortalidad (De res. I, 49).
SAN HILARIO DE POITIERS (+367)
1-Sólo en Cristo, Hijo de Dios e Hijo del hombre, la humanidad encuentra salvación. Al asumir la naturaleza humana, unió consigo a todo hombre. Asumió en sí la naturaleza de toda carne y, convertido así en la vida verdadera, es la raíz de todo sarmiento (Tract in Ps 51, 16).
2-Realmente estamos llenos de Él, lo mismo que Él está lleno de la divinidad (De Trinit 9, 3).
DÍDIMO DE ALEJANDRÍA (314-398): Si por el bautismo junto con Dios Padre y su Hijos, el Espíritu Santo nos conduce a la imagen primera, si, comunicándose a nosotros, causa nuestra adopción y nuestra divinización y si ninguna criatura tiene el poder de adoptar y de divinizar ¿cómo no es Dios? (De Trinitate, III, 2; PG 39, 801d-804ª).
SAN ATANASIO (328-373)
1-Por medio del Espíritu todos nosotros somos llamados partícipes de Dios…Entramos a formar parte de la naturaleza divina mediante la participación en el Espíritu…He aquí por qué el Espíritu diviniza a aquellos en quienes se hace presente (Ep ad Serap 1, 14).
2-Si por la comunicación del Espíritu somos partícipes de la naturaleza divina, sería necio decir que el Espíritu es de naturaleza creada y no de la naturaleza de Dios. Aquellos en quienes Él está, son divinizados. Pues si diviniza, no hay dudas que su naturaleza es la de Dios (Ep ad Serap 1, 24).
3-Participando en el Espíritu, participamos de la naturaleza divina. Pues si el Espíritu diviniza es indudable que su naturaleza es divina (Ep ad Serap 4).
4-En el Espíritu Santo glorifica el Logos la creación, al conducirla al Padre mediante la divinización y admisión a la adopción…Mediante Él diviniza el Logos a las criaturas…A través de Él la creación es divinizada ( Ep ad Serap 25).
5-El Verbo al asumir la carne, no quedó disminuido, antes bien, convirtió en divino lo que revistió…Sólo por la participación en el Verbo mediante el Espíritu reciben [los hombres] desde el Padre esta gracia [la divinización] (Adv Ar 1,42).
6-El Verbo se hizo carne para hacer al hombre capaz de recibir la divinidad (Adv Ar 2, 59).
7-Si el Hijo no fuera verdadero Dios, el hombre unido a una criatura, no podría ser divinizado (Adv Ar 2,70).
8-Dios se hizo portador de carne [sarcóforo] para que el hombre se hiciera portador del Espíritu [pneumatóforo] (Adv Ar 8).
9-Por la gracia del Espíritu que nos ha sido concedida estamos en Él y Él en nosotros…mediante la participación en el Espíritu estamos unidos a la divinidad (Adv Ar 24).
10-Del mismo modo que el Señor se hizo hombre asumiendo el cuerpo, así nosotros los hombres somos asumidos por el Logos en su carne y divinizados (Adv Ar 34).
11-Cristo no fue antes hombre y luego Dios, sino viceversa: siendo Dios se hizo hombre para hacernos dioses (Adv Ar 39).
12-Con relación al Verbo dice San Atanasio: El hombre no podría quedar divinizado mediante su unión con una cosa creada (Adv Ar 70).
13-El [Cristo] es Hijo de Dios por naturaleza, nosotros por gracia (De Incar Verbi 8).
14-El Verbo de Dios se ha hecho hombre para que el hombre se hiciera Dios (De Incar Verbi 54, 3).
15-Tenemos la suma de todos los bienes por el bautismo: recibimos el perdón de los pecados, la santificación, la participación en el Espíritu, la adopción de hijos, la vida eterna (In Act Apost Hom 40, 2).
16-La pureza del alma tiene el poder de reflejar a Dios en ella (C. Gent 2, 8).
SAN BASILIO DE CESAREA (329-379)
1-Las almas portadoras del Espíritu, iluminadas por el Espíritu…de ahí la ciudadanía celestial, la danza con los ángeles, la alegría interminable, la permanencia en Dios, la asimilación a Dios y el deseo supremo de hacerse Dios….Él [el Espíritu Santo] iluminando a aquellos que se han purificado de toda mancha, los hace espirituales por medio de la comunión con Él…Así las almas que llevan el Espíritu se hacen plenamente espirituales…De ahí el cumplimiento de los deseos: convertirse en Dios (De Spiritu Sancto 9, 23).
2-Y así el que no vive ya según la carne, sino que es conducido por el Espíritu de Dios, es llamado hijo de Dios y se conforma a la imagen del Hijo de Dios(De Spiritu Sancto 26, 61).
3-¿Cómo no va a ser Dios quien hace dioses a los hombres? (Adv Eunom 3, 5).
SAN GREGORIO NACIANCENO (+390)
l-Tratemos de ser como Cristo, pues también Cristo se hizo como nosotros: Tratemos de ser dioses por medio de Él, pues Él mismo se hizo hombre por nosotros. Cargó con lo peor, para darnos lo mejor (Orat 1, 5).
2-El sacerdote haciéndose como Dios diviniza a otros (Orat 2, 71 y 73).
3-Si el Espíritu no debe ser adorado, ¿cómo es que puede divinizarme por el bautismo? (Orat 5, 28).
4-Un gran misterio me envuelve y me penetra. Pequeño soy y al mismo tiempo grande, exiguo y sublime, mortal e inmortal, terreno y celeste. Con Cristo soy sepultado, y con Cristo debo resucitar; estoy llamado a ser coheredero de Cristo e hijo de Dios; llegaré incluso a ser Dios mismo (Orat 7, 23).
5-Reconoce de dónde tienes lo que eres: hijo de Dios, coheredero de Cristo y para hablar con más audacia, incluso has sido hecho Dios (Orat 14, 23).
6-Conviértete en Dios para el desventurado, imitando la misericordia de Dios (Orat 14, 26).
7-Lo más divino en el hombre es hacer el bien. Tienes, por tanto, la posibilidad de hacerte Dios sin gran trabajo: no dejes pasar esta ocasión de divinización (Orat 17, 9)
8-Si el Espíritu no es Dios, si no tiene derecho a mi adoración, ¿cómo puede divinizarme?…Si es del mismo rango que yo, ¿cómo me hace Dios o cómo me une a la divinidad? (Orat 31, 4).
9-Si el Espíritu Santo no es Dios, que primero se divinice y luego me divinice (Orat 34, 12).
10-El hombre es un ser viviente capaz de ser divinizado (Orat 45, 7).
11-Lo que no ha sido asumido no ha sido curado (Ep 101, 32).
12-Llegar a ser dios, un dios hecho, es verdad, pero lleno de luz suprema (Poem moral., 10).
SAN MACARIO DE EGIPTO (300-390)
1-El Señor ha venido para cambiar y recrear nuestras almas, para hacerles participar de la naturaleza divina, como está escrito, para dar a nuestra alma un alma celestial, a saber, el Espíritu de la divinidad, para cnducirnos a través de las virtudes, para que nosotros podamos vivir la vida eterna (Homilía IV).
2-Por la fuerza del Espíritu y el nuevo nacimiento espiritual…el hombre llega a ser más grande que el primer Adán, porque el hombre es deificado (Homilía XXVI).
3-En la oración por la cual somos dignos de llamar a Dios Padre, se nos da la verdadera filiación adoptiva en la gracia del Espíritu Santo; en la santa participación de los inmaculados misterios de vida se nos da la comunión y la identidad con él, recibida participadamente por semejanza, y por ella, el hombre es juzgado digno de pasar a ser de hombre a Dios (Mystagogia, C. 24).
SAN GREGORIO DE NISA (+396)
1-Dios se ha mezclado a nuestra naturaleza, a fin de que, gracias a su mezcla con lo divino, nuestra naturaleza llegue a ser divina (Orat Cat 25).
2-El Dios que se ha manifestado se ha mezclado a la naturaleza perecedera, a fin de que, por su participación en la divinidad, la humanidad fuera con-divinizada (Orat Cat 37).
3-Por la unión con aquel que es inmortal también el hombre se hace partícipe de la incorrupción (Orat Cat 37).
4-Dios mismo modela el bloque…limando y puliendo nuestro espíritu, forma en nosotros a Cristo (In Ps 2, 11).
5-El llegar a ser semejantes a Dios no es obra nuestra, ni resultado de una potencia humana, es obra de la generosidad de Dios, que desde su origen ofreció a nuestra naturaleza la gracia de la semejanza con él (De virginitate 12, 2).
6-Para el alma no se trata de conocer algo de Dios, sino de tener a Dios en sí misma…La divinidad es pureza, es liberación de las pasiones y remoción de todo mal: si todo esto está en ti, Dios está realmente en ti (De beatitudinibus 6).
SAN AMBROSIO (340-397)
l-Cristo envía el Espíritu Santo a las almas de los creyentes y hace que more en ellos…Cuando por la santificación somos configurados a su imagen, somos formados a imagen de Dios…y así nos llamamos y somos templos de Dios y hasta dioses…Nos llamamos también dioses porque por la unión con Él somos hechos partícipes de la naturaleza divina (De Spiritu Sancto 1).
SAN JUAN CRISÓSTOMO (+407)
l-El Logos se hizo hijo del hombre, siendo Hijo de Dios por generación, para hacer hijos de Dios a los hijos de los hombres (In Io Hom 11, 1).
2-Por eso se mezcla Él con nosotros y por eso injerta su cuerpo con nosotros: así nos haremos uno con Él como un cuerpo unido a su cabeza (In Io Hom 46).
3-Yo [dice Cristo] estoy identificado, entretejido contigo. No quiero que en adelante haya nada en medio de nosotros: deseo ser uno contigo (In Tim Hom 15).
TEODORO DE MOPSUESTIA (350-428)
l- Así nos uniremos todos en la comunión con los santos misterios y, por medio de ella, nos uniremos a nuestra cabeza, nuestro Señor Cristo, del que –como creemos- somos el Cuerpo y por el que obtenemos la comunión con la naturaleza divina [ 2 Pe 1, 4] (Hom 16, 13).
TEXTOS PATRÍSTICOS
SAN IGNACIO DE ANTIOQUÍA (+107)
1-Es justo que vosotros glorifiquéis de todas las maneras a Jesucristo, que os ha glorificado a vosotros (Ephes 2, 2).
2-Sois, pues, vosotros y todos vuestros compañeros de viaje deíferos, templíferos, cristíferos, santíferos (Ephes 9, 1-3).
3-Él mismo se llama en varias ocasiones “Teóforo” [Portador de Dios]: Ephes 9, 2; Magn , Trall.
4-Hagamos, pues, todas las cosas con la fe de que Él mora en nosotros, a fin de ser nosotros templos suyos y Él Dios nuestro (Ephes 15, 3).
5-Aguarda al que está por encima del tiempo, al Intemporal, al Invisible que por nosotros se hizo visible, al Impasible que por nosotros se hizo pasible: al que por todos los modos sufrió por nosotros (Polyc 3, 2).
6-Jesucristo es nuestro solo Maestro, ¿cómo podemos nosotros vivir fuera de Él? (Magn 9, 1).
SAN JUSTINO (100-165)
1-El Verbo que procede del mismo Dios ingénito e inefable; pues Él, por amor nuestro, se hizo hombre para participar de nuestros sufrimientos y curarlos (Apol II 10,2-8).
2-Habiendo sido creados impasibles e inmortales, como Dios, con tal de guardar sus mandamientos, y habiéndoles Él concedido ser llamados hijos de Dios…Sea la interpretación del salmo [81] la que vosotros queráis; aun así queda demostrado que a los hombres se les concede llegar a ser dioses y que pueden convertirse en hijos del Altísimo (Dial con Tryph 124, 4).
SAN TEÓFILO DE ANTIOQUÍA (+181)
Y así, si el hombre se inclina a la inmortalidad, guardando los mandamientos de Dios, recibirá de Dios como galardón la inmortalidad y llegaría a ser Dios (Ad Aut 2, 27).
SAN IRENEO (135-202)
1-A la manera que el olivo silvestre injertado no pierde su naturaleza de árbol, sino que cambia la cualidad de su fruto y también su mismo nombre…así el hombre injertado por la fe y que ha recibido el Espíritu Santo, no pierde su naturaleza carnal, sino que transforma la cualidad del fruto de sus obras y recibe un nombre nuevo, que expresa su mejora. Ya no se llama carne y sangre sino hombre espiritual (Adv Haer 1, 5).
2-Él ha derramado el Espíritu del Padre para operar la unión y la comunión entre Dios y el hombre (Adv Haer 1, 59.
3-¿Cómo hubiéramos podido unirnos a la incorruptibilidad y a la inmortalidad, si la incorruptibilidad y la inmortalidad no se hubiera convertido en lo que nosotros somos, para que lo que era corruptible fuera absorbido por la incorruptibilidad y lo que era mortal por la inmortalidad, y para que nosotros recibiéramos la adopción de hijos?…El Hijo de Dios se hizo hombre para que el hombre, unido al Verbo de Dios y recibiendo la adopción, se hiciera hijo de Dios (Adv Haer 3,19).
4-El Hijo de Dios asumió la carne para incitar al hombre a hacerse semejante a Él (Adv Haer 3, 20).
5-El hombre que vive es la gloria de Dios, asimismo la vida del hombre consiste en la visión de Dios (Adv Haer 4, 20).
6-¿Cómo puede el hombre llegar a ser Dios si Dios no se hace hombre? (Adv Haer 4, 33).
7-No fuimos creados dioses desde el principio, sino primero hombres, luego al fin dioses (Adv Haer 4, 33).
8-El Verbo de Dios… que por su inmenso amor se hizo lo que nosotros somos para hacernos llegar a ser lo que es Él mismo (Adv Haer 5, pref ).
9-Porque si no hubiera de salvarse la carne, en modo alguno se habría encarnado el Verbo de Dios (Adv Haer 5, 14).
10-El Verbo de Dios se hizo hombre para que por Él recibamos la adopción (Adv Haer 16, 3).
11-Por eso el Verbo se ha hecho hombre y el Hijo de Dios se ha hecho hijo del hombre, para que el hombre, uniéndose al Verbo y recibiendo la adopción, se haga hijo de Dios (Adv Haer 19,1).
CLEMENTE DE ALEJANDRÍA (150-216)
1-El Logos de Dios se hizo hombre, para que aprendas de un hombre cómo el hombre puede llegar a ser dios (Protr, 1).
2-El Logos de Dios se hizo hombre para que también tú aprendas de un hombre cómo el hombre puede llegar a ser dios (Protr 8, 64).
3-Él nos ha hecho la gracia de la herencia paterna, grande, divina y que no se pierde, divinizando al hombre por una enseñanza celeste (Protr 11, 114).
4-El hombre que ha tenido en sí al Logos, recibe la hermosa figura del Logos, y él mismo se embellece porque se asemeja a Dios. Se hace Dios, porque Dios así lo quiere (Pedag 1, 5).
5-Bautizados, somos iluminados; iluminados, somos adoptados como hijos; adoptados, llegamos a la perfección; perfectos, venimos a ser inmortales (Pedag 1, 6).
6-El hombre habitado por el Logos…es la verdadera belleza porque es Dios. El hombre se hace Dios porque quiere lo que Dios quiere (Pedag 3, 19).
TERTULIANO (+220)
Dios es capaz de hacer a otros dioses y deificar a los hombres ( Apolog 11).
SAN HIPÓLITO (+ 235)
Serás partícipe de Dios y coheredero de Cristo, liberado de la concupiscencia y de las pasiones. Has sido hecho dios…Dios ha prometido concederte estas cosas, porque has sido deificado, has renacido como inmortal (Adv Haer 1, 10).
Pero si, de todos modos, quieres llegar a ser dios también tú, obedece a aquel que te ha hecho y no le resistas ahora (Philosoph., 33).
ORÍGENES (185-255)
l-Para que la naturaleza humana, al unirse con una sustancia más divina, se hiciese divina, no sólo en Jesucristo, sino en todos los que, por la fe, abrazan la vida que Cristo ha enseñado, que conduce a la amistad y a la comunión con Dios a todo el que acomode sus costumbres a los preceptos de Jesucristo (Contra Celsum 1, 3).
2-Así la naturaleza humana, por su comunión con la divinidad se torna divina no sólo en Jesús, sino también en todos los que después de creer abrazan la vida que Jesús enseñó, vida que conduce a la amistad y comunión con Dios (Contra Celsum 1, 57).
3-Ellos [los discípulos] reconocieron que en Cristo había empezado la unificación de la naturaleza divina con la humana, para que la humana, gracias a esta íntima unión, se hiciera divina, no sólo en Jesús, sino también en todos los hombres (Contra Celsum 3, 28).
4-En Él la naturaleza divina y la naturaleza humana han comenzado a unirse estrechamente, a fin de que, por su comunión con lo que es más divino, la naturaleza humana llegue a ser divina, no sólo en Jesús, sino también en todos aquellos que, con la fe, abrazan la vida que Jesús ha enseñado y que conduce a la amistad y comunión con Dios (Contra Celsum, 3, 28).
5-El alma está divinizada porque contempla (In Io 32, 27).
SAN METODIO DE OLIMPO (+311)
Cristo no ha venido a cambiar o a transformar la naturaleza humana, sino a conducirla allí donde se encontraba antes de la caída, a la inmortalidad (De res. I, 49).
SAN HILARIO DE POITIERS (+367)
1-Sólo en Cristo, Hijo de Dios e Hijo del hombre, la humanidad encuentra salvación. Al asumir la naturaleza humana, unió consigo a todo hombre. Asumió en sí la naturaleza de toda carne y, convertido así en la vida verdadera, es la raíz de todo sarmiento (Tract in Ps 51, 16).
2-Realmente estamos llenos de Él, lo mismo que Él está lleno de la divinidad (De Trinit 9, 3).
DÍDIMO DE ALEJANDRÍA (314-398): Si por el bautismo junto con Dios Padre y su Hijos, el Espíritu Santo nos conduce a la imagen primera, si, comunicándose a nosotros, causa nuestra adopción y nuestra divinización y si ninguna criatura tiene el poder de adoptar y de divinizar ¿cómo no es Dios? (De Trinitate, III, 2; PG 39, 801d-804ª).
SAN ATANASIO (328-373)
1-Por medio del Espíritu todos nosotros somos llamados partícipes de Dios…Entramos a formar parte de la naturaleza divina mediante la participación en el Espíritu…He aquí por qué el Espíritu diviniza a aquellos en quienes se hace presente (Ep ad Serap 1, 14).
2-Si por la comunicación del Espíritu somos partícipes de la naturaleza divina, sería necio decir que el Espíritu es de naturaleza creada y no de la naturaleza de Dios. Aquellos en quienes Él está, son divinizados. Pues si diviniza, no hay dudas que su naturaleza es la de Dios (Ep ad Serap 1, 24).
3-Participando en el Espíritu, participamos de la naturaleza divina. Pues si el Espíritu diviniza es indudable que su naturaleza es divina (Ep ad Serap 4).
4-En el Espíritu Santo glorifica el Logos la creación, al conducirla al Padre mediante la divinización y admisión a la adopción…Mediante Él diviniza el Logos a las criaturas…A través de Él la creación es divinizada ( Ep ad Serap 25).
5-El Verbo al asumir la carne, no quedó disminuido, antes bien, convirtió en divino lo que revistió…Sólo por la participación en el Verbo mediante el Espíritu reciben [los hombres] desde el Padre esta gracia [la divinización] (Adv Ar 1,42).
6-El Verbo se hizo carne para hacer al hombre capaz de recibir la divinidad (Adv Ar 2, 59).
7-Si el Hijo no fuera verdadero Dios, el hombre unido a una criatura, no podría ser divinizado (Adv Ar 2,70).
8-Dios se hizo portador de carne [sarcóforo] para que el hombre se hiciera portador del Espíritu [pneumatóforo] (Adv Ar 8).
9-Por la gracia del Espíritu que nos ha sido concedida estamos en Él y Él en nosotros…mediante la participación en el Espíritu estamos unidos a la divinidad (Adv Ar 24).
10-Del mismo modo que el Señor se hizo hombre asumiendo el cuerpo, así nosotros los hombres somos asumidos por el Logos en su carne y divinizados (Adv Ar 34).
11-Cristo no fue antes hombre y luego Dios, sino viceversa: siendo Dios se hizo hombre para hacernos dioses (Adv Ar 39).
12-Con relación al Verbo dice San Atanasio: El hombre no podría quedar divinizado mediante su unión con una cosa creada (Adv Ar 70).
13-El [Cristo] es Hijo de Dios por naturaleza, nosotros por gracia (De Incar Verbi 8).
14-El Verbo de Dios se ha hecho hombre para que el hombre se hiciera Dios (De Incar Verbi 54, 3).
15-Tenemos la suma de todos los bienes por el bautismo: recibimos el perdón de los pecados, la santificación, la participación en el Espíritu, la adopción de hijos, la vida eterna (In Act Apost Hom 40, 2).
16-La pureza del alma tiene el poder de reflejar a Dios en ella (C. Gent 2, 8).
SAN BASILIO DE CESAREA (329-379)
1-Las almas portadoras del Espíritu, iluminadas por el Espíritu…de ahí la ciudadanía celestial, la danza con los ángeles, la alegría interminable, la permanencia en Dios, la asimilación a Dios y el deseo supremo de hacerse Dios….Él [el Espíritu Santo] iluminando a aquellos que se han purificado de toda mancha, los hace espirituales por medio de la comunión con Él…Así las almas que llevan el Espíritu se hacen plenamente espirituales…De ahí el cumplimiento de los deseos: convertirse en Dios (De Spiritu Sancto 9, 23).
2-Y así el que no vive ya según la carne, sino que es conducido por el Espíritu de Dios, es llamado hijo de Dios y se conforma a la imagen del Hijo de Dios(De Spiritu Sancto 26, 61).
3-¿Cómo no va a ser Dios quien hace dioses a los hombres? (Adv Eunom 3, 5).
SAN GREGORIO NACIANCENO (+390)
l-Tratemos de ser como Cristo, pues también Cristo se hizo como nosotros: Tratemos de ser dioses por medio de Él, pues Él mismo se hizo hombre por nosotros. Cargó con lo peor, para darnos lo mejor (Orat 1, 5).
2-El sacerdote haciéndose como Dios diviniza a otros (Orat 2, 71 y 73).
3-Si el Espíritu no debe ser adorado, ¿cómo es que puede divinizarme por el bautismo? (Orat 5, 28).
4-Un gran misterio me envuelve y me penetra. Pequeño soy y al mismo tiempo grande, exiguo y sublime, mortal e inmortal, terreno y celeste. Con Cristo soy sepultado, y con Cristo debo resucitar; estoy llamado a ser coheredero de Cristo e hijo de Dios; llegaré incluso a ser Dios mismo (Orat 7, 23).
5-Reconoce de dónde tienes lo que eres: hijo de Dios, coheredero de Cristo y para hablar con más audacia, incluso has sido hecho Dios (Orat 14, 23).
6-Conviértete en Dios para el desventurado, imitando la misericordia de Dios (Orat 14, 26).
7-Lo más divino en el hombre es hacer el bien. Tienes, por tanto, la posibilidad de hacerte Dios sin gran trabajo: no dejes pasar esta ocasión de divinización (Orat 17, 9)
8-Si el Espíritu no es Dios, si no tiene derecho a mi adoración, ¿cómo puede divinizarme?…Si es del mismo rango que yo, ¿cómo me hace Dios o cómo me une a la divinidad? (Orat 31, 4).
9-Si el Espíritu Santo no es Dios, que primero se divinice y luego me divinice (Orat 34, 12).
10-El hombre es un ser viviente capaz de ser divinizado (Orat 45, 7).
11-Lo que no ha sido asumido no ha sido curado (Ep 101, 32).
12-Llegar a ser dios, un dios hecho, es verdad, pero lleno de luz suprema (Poem moral., 10).
SAN MACARIO DE EGIPTO (300-390)
1-El Señor ha venido para cambiar y recrear nuestras almas, para hacerles participar de la naturaleza divina, como está escrito, para dar a nuestra alma un alma celestial, a saber, el Espíritu de la divinidad, para cnducirnos a través de las virtudes, para que nosotros podamos vivir la vida eterna (Homilía IV).
2-Por la fuerza del Espíritu y el nuevo nacimiento espiritual…el hombre llega a ser más grande que el primer Adán, porque el hombre es deificado (Homilía XXVI).
3-En la oración por la cual somos dignos de llamar a Dios Padre, se nos da la verdadera filiación adoptiva en la gracia del Espíritu Santo; en la santa participación de los inmaculados misterios de vida se nos da la comunión y la identidad con él, recibida participadamente por semejanza, y por ella, el hombre es juzgado digno de pasar a ser de hombre a Dios (Mystagogia, C. 24).
SAN GREGORIO DE NISA (+396)
1-Dios se ha mezclado a nuestra naturaleza, a fin de que, gracias a su mezcla con lo divino, nuestra naturaleza llegue a ser divina (Orat Cat 25).
2-El Dios que se ha manifestado se ha mezclado a la naturaleza perecedera, a fin de que, por su participación en la divinidad, la humanidad fuera con-divinizada (Orat Cat 37).
3-Por la unión con aquel que es inmortal también el hombre se hace partícipe de la incorrupción (Orat Cat 37).
4-Dios mismo modela el bloque…limando y puliendo nuestro espíritu, forma en nosotros a Cristo (In Ps 2, 11).
5-El llegar a ser semejantes a Dios no es obra nuestra, ni resultado de una potencia humana, es obra de la generosidad de Dios, que desde su origen ofreció a nuestra naturaleza la gracia de la semejanza con él (De virginitate 12, 2).
6-Para el alma no se trata de conocer algo de Dios, sino de tener a Dios en sí misma…La divinidad es pureza, es liberación de las pasiones y remoción de todo mal: si todo esto está en ti, Dios está realmente en ti (De beatitudinibus 6).
SAN AMBROSIO (340-397)
l-Cristo envía el Espíritu Santo a las almas de los creyentes y hace que more en ellos…Cuando por la santificación somos configurados a su imagen, somos formados a imagen de Dios…y así nos llamamos y somos templos de Dios y hasta dioses…Nos llamamos también dioses porque por la unión con Él somos hechos partícipes de la naturaleza divina (De Spiritu Sancto 1).
SAN JUAN CRISÓSTOMO (+407)
l-El Logos se hizo hijo del hombre, siendo Hijo de Dios por generación, para hacer hijos de Dios a los hijos de los hombres (In Io Hom 11, 1).
2-Por eso se mezcla Él con nosotros y por eso injerta su cuerpo con nosotros: así nos haremos uno con Él como un cuerpo unido a su cabeza (In Io Hom 46).
3-Yo [dice Cristo] estoy identificado, entretejido contigo. No quiero que en adelante haya nada en medio de nosotros: deseo ser uno contigo (In Tim Hom 15).