Solo Escritura;n3128101 dijo:
Saludos Humberto: Es que realmente no sabes donde se halla respuesta?
Dices bien en cuanto a la misericordia del Dios Vivo, ahora te diré que Él siempre está dispuesto a perdonar, la única condición que aplica, es el arrepentimiento sincero, de corazón, y "ellos" -Adan y Eva-, jamás mostraron el mínimo arrepentimiento; Eva dijo 'la serpiente', Adán, "la mujer', hechandose la culpa unos a otros, pero ninguno dijo "sí cometí el error, peque, perdóname".
Por lo cual fueron condenados a muerte.
A eso iba.
Es la actitud común que hemos heredado de Adán y Eva.
El pecado de la desobediencia no fue la causa de tal desagrado de Dios para con ellos dos, puesto que Adán y Eva eran "carne" y la carne está sujeta al pecado.
Teniendo un conocimiento distinto después de comer el fruto prohibido, tanto Eva como Adán no se arrepintieron, porque de haberlo hecho el destino de la humanidad hubiera sido muy distinto. Esta falta de no arrepentirse y buscar excusas es lo que realmente sacó a Dios de sus casillas.
El único que ha contestado la respuesta correcta basado en conocimiento bíblico has sido tú.
Está aún la pregunta anterior que hice con respecto a este tema, de para quién era el fruto de ese árbol del conocimiento del bien y del mal si no era para Adán y Eva. ¿Decoración acaso?
Y así, otras muchas preguntas, como por ejemplo... hay un pacto de Dios con los hombres, y en todo pacto las dos partes involucradas sacarán provecho, por eso se llama pacto o convenio.
Si los hombres recibirán de provecho la vida eterna, pues por el otro lado, ¿Qué saca Dios de provecho del pacto que hizo con los hombres?
Un líder de los adventistas fue muy bueno en contestar esta última interrogativa, aunque lo hizo sin darse cuenta cuando estaba explicando otro tema que no era el pacto. Este hombre fue Herbert Armstrong.
Y esta última pregunta también es parte de todo este principio, en el cual Dios, a pesar de la falta de Adán y Eva, continúa con el hombre, ya que bien pudo intentar así como lo hizo con Moisés cuando por su desobediencia decidió destruir a los hijos de Israel y darle a Moisés un pueblo nuevo.
Dios no decidió hacer un hombre nuevo después de la falta de Adán y Eva..