Desde luego, como todo lo demas falla, acudes a los insultos. Tipico.
Obvio que no sabes nada de teologia sistematica o hermeneutica. Otro autodidacta biblico miope.
NADIE habla griego Koine hoy dia. Los greco parlantes pueden leerlo pero la estructura gramatical y sintaxica del idioma cambio. Hoy dia el griego comun tiene puntos, comas y una estructura gramatical parecido al astellano e.g preposicion, sujeto, predicado, adjetivo, etc que es estructuralmente coherente para la mayoria de nosotros. Los textos griegos antiguos carecian de esas caracteristicas. No lo sabes porque nunca has estudiado los textos del NT directamente del lengua original.
Tu doctrina sectaria del siglo XIX es solo eso. Desde los Apostoles y los discipulos de Cristo Jesus y luego lo discipulos de los Apostoles en el primer y segundo siglo, TODOS testifican que fue el domingo al amanecer cuando descubrieron la tumba vacia.
El culto dominical se extendió a muchas iglesias durante las ultimas decadas del primer siglo e.C . Alrededor del año 150 d. C., Justino Mártir escribió: “En el día llamado domingo, todos los que viven en ciudades o en el campo se reúnen en un lugar, y se leen las memorias de los apóstoles o los escritos de los profetas… El domingo es el día en el que todos celebramos nuestra asamblea común, porque es el primer día en el que Dios, habiendo obrado un cambio en la oscuridad y la materia, creó el mundo; y Jesucristo nuestro Salvador, el mismo día, resucitó de entre los muertos” (Justino Mártir, Primera Apología, 67; ANF 1:186).
En la primera evidencia fehaciente de la existencia del cristianismo en Bitinia, Plinio escribe al emperador Trajano en el año 110 d. C. (Plinio, Ep. 10.5-96) que a finales del primer siglo los cristianos se reunían antes del amanecer y de nuevo al atardecer del mismo día. Plinio describió la asamblea: “Los cristianos se reunían antes del amanecer en un día determinado y se comprometían con un voto de no robar, ni cometer adulterio, ni cosas por el estilo”.
Plinio no nombró el día de la semana porque no tenía ningún nombre a su disposición. La semana planetaria, de la que obtenemos el nombre domingo, no era corriente en la época de Plinio, y es poco probable que Plinio estuviera acostumbrado a utilizar la división de siete días del tiempo por la que los judíos y los cristianos designaban el día como el “primer día de la semana”. Sin embargo, el sabbat judío era bien conocido, y si esta asamblea hubiera tenido lugar en el sabbat judío, parecería que lo habría mencionado como tal, ya que presumiblemente estaba familiarizado con él. El hecho de que no designara el día implica que no se usaba un nombre específico para él (el nombre “Día del Señor” se habría utilizado solo entre los cristianos).
Justino Martir escribe en su Primera Apología 67:
"En el día llamado domingo, todos los que viven en ciudades o en el campo se reúnen en un lugar, y se leen las memorias de los apóstoles o los escritos de los profetas, hasta que el tiempo lo permita; luego, cuando el lector ha terminado, el presidente instruye verbalmente y exhorta a la imitación de estas cosas buenas. Luego todos nos levantamos juntos y oramos, y, como dijimos antes, cuando nuestra oración ha terminado, se trae pan, vino y agua, y el presidente de la misma manera ofrece oraciones y acciones de gracias, según su capacidad, y el pueblo asiente, diciendo Amén…
Pero el domingo es el día en que todos celebramos nuestra asamblea común, porque es el primer día en que Dios, habiendo obrado un cambio en la oscuridad y la materia, hizo el mundo; y Jesucristo nuestro Salvador en el mismo día resucitó de entre los muertos. Porque fue crucificado el día anterior al de Saturno (sábado); Y el día siguiente al de Saturno, que es el día del Sol, habiéndose aparecido a sus apóstoles y discípulos, les enseñó estas cosas, que también os hemos sometido a vuestra consideración."
Clemente de Alejandría (fallecido en el año 215 d. C.) fue el principal instructor en Alejandría a fines del siglo II. Trató de asegurar a los paganos que el cristianismo no era la superstición absurda que algunos afirmaban que era. Escribió que el descanso sabático del séptimo día es simplemente una preparación para el verdadero descanso sabático del octavo día, porque el octavo día es el primer día y el primer día es Cristo, el archē (principio) de la creación y la luz de los hombres.
Gonzalez, Justo L. La historia del cristianismo. Vol. 1: La iglesia primitiva hasta el amanecer de la Reforma. San Francisco: Harper, 1984.
Aunque te aseguro este intercambio es agotador, lo hago por lo hermanos jovenes y nuevos al evangelio. Tu posicion sectaria en cuanto a la resurreccion esta completamente fuera de la hermeneutica y tradicion biblica dem la iglesia de Cristo Jesus desde sus inicios. Tu pocision es un invento del siglo XIX que incluye teologia corrupta e interpretaciones sin fundamento alguno.
Si tu, en tu limitado y equivoco pensar te encuentras en contradiccion con los Padres de la Iglesia primitiva, eso te deberia dejar en claro lo lejos que estas de la verdad.