Re: NO HAY ALMA INMORTAL ... POR TANTO NO HAY VIDA MÁS ALLÁ COMO ESPÍRITU, NI INFIERN
No fue mi intención hacer un análisis detallado, solo explicar las posibles interpretaciones de un modo simple que cualquiera pueda entender.
El problema es que cuando se intenta dar sentido completo a los textos bíblicos (Exégesis Bíblica), se debe dar una interpretación a la luz del contexto inmediato, gramatical/literario, el trasfondo histórico/costumbrista y la coherencia lógica y doctrinal (esto es, dando las lecturas como correctas, sino hay que agregar a la crítica textual) sino se tiene una visión sesgada que resulta en conclusiones erróneas. Todo esto no quita que un análisis detallado se pueda expresar en términos simples (además en muy raras ocasiones, todas son simultáneamente relevantes en el análisis). Yo expuse, brevemente, el trasfondo costumbrista (que revela de por sí que la expresión usada por Jesús SIEMPRE fue "En verdad les/te digo..." a continuación la enseñanza; por lo que sería la única vez que se expresaría así, si fuera cierta tu tesis. A esto le sumé la evidencia gramatical/literaria por cuanto señalé:
Ni siquiera desde el punto de vista literario es admisible, pues es una redundancia considerando que el verbo usado λέγω está en presente con lo que no es necesario reforzar con "hoy".
Esta es una evidencia irrefutable…sin embargo el resto de las evidencias te las presentaré en mis contraargumentos:
Que Jesús no se haya expresado así antes, vuelve improbable, pero no imposible la interpretación: "De cierto te digo hoy,...". Por lo tanto no es evidencia definitiva.
Así es, pero ya la probabilidad de que tu lectura sea correcta sigue disminuyendo y aún no hemos llegado a la evidencia histórico/costumbrista que desacredita tu interpretación y sigue reforzando que la lectura del texto es “En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el Paraíso”.
La palabra que Jesus utilizo paradeisos se la utiliza en el NT siempre como sinónimo de "cielo".
Siguiendo tu interpretación, Jesús le dijo al ladrón que ambos estarían ese mismo día en el "paraíso/cielo". Pero Jesús todavía no había ascendido al cielo tres días después (Juan 20:17), menos el día de su muerte.
Como te dije con anterioridad, no es tan simple como relacionar pasajes buscando sólo la coherencia lógica y luego forzar los textos, pues el trasfondo histórico/cultural en que está inserta la mentalidad judía es fundamental en el momento de interpretar correctamente:
¿Qué significa Paredeisos?
Paraíso proviene del griego παράδεισος, (paradeisos) usado en los LXX para aludir al Jardín del Edén. El término griego procede a su vez del persa pairidaeµza ‘Jardín con muro’ que tiene su raíz en el término پرديس paerdís, ‘cercado’, que es un compuesto de paer-, ‘alrededor’ (un cognado del griego peri-) y -dis, ‘crear’, ‘hacer’. Cenofont alude al famoso jardín «paraíso» persa (Anábasis, siglo IV a. C.). Así, su significado original hace referencia a un jardín extenso y bien arreglado, que se presenta como un lugar bello y agradable, donde además de árboles y flores se ven animales enjaulados o en libertad.
En el Antiguo Testamento
La voz paraíso (heb. pardeµs) aparece en Neh. 2.8; Ec. 2.5; Cnt. 4.13. La traducción en °VRV2 es “bosque del rey” en Neh., “jardines” en Ec., y “paraíso” en Cnt. Es decir que la palabra misma no se utiliza en sentido escatológico en ninguna parte del AT, significado que apareció en el mundo judío posterior. Podemos discernir las siguientes tendencias. El término paraíso (arm. pardeµsaµ<) se utilizaba para dar expresión al significado de tiempos primitivos (Urzeit en alemán), y luego se amplió para incluir especulaciones fantásticas sobre la gloria y la dicha de esos tiempos. Estaba relacionado con las expectativas de una maravillosa época mesiánica en el futuro. Este futuro tiempo de gloria sería idéntico al jardín del Edén de épocas antiguas. Los judíos creían también que el paraíso existía en sus propios días, pero que estaba oculto. Este paraíso escondido era el lugar al que fueron llevadas las almas de los patriarcas, las personas elegidas y las justas. Se consideraba que el paraíso antiguo, presente, y futuro eran la misma cosa.
En el Nuevo Testamento
La voz paraíso (gr. paradeisos) sólo aparece en tres ocasiones en el NT (Lc 23.43; 2 Co 12.3; Ap 2:7). El contexto muestra que el sentido predominante es el de la evolución tardía del término. En Lc. 23.43 la palabra “paraíso” es utilizada por Jesús para designar el lugar al que van las almas inmediatamente después de la muerte, lo cual se puede contrastar con el paraíso oculto en el pensamiento judío tardío. La misma idea se halla presente en la parábola del rico y Lázaro (Lc. 16.19–31).
En 2 Co. 12.2–4 Pablo escribe en tercera persona sobre su experiencia de haber sido transportado al paraíso, donde escuchó palabras que no se podían pronunciar (gr. arrheµta rheµmata). En este caso paraíso es el “tercer cielo” con toda su gloria, quizás lo mismo que vemos en Lc. 23. El único lugar en que se emplea paraíso en sentido escatológico es en Ap. 2.7. La promesa proviene de Cristo, de que dará el paraíso como regalo al que venciere. El paraíso actual vendrá en toda su gloria con la consumación final. La idea de un huerto de Dios en el mundo venidero se destaca nítidamente en los últimos capítulos de Apocalipsis. Los símbolos del árbol de la vida, del agua de vida, y de las doce clases de frutos son todos testimonios de la gloria del paraíso futuro (Ap. 22).
Lo anterior denota un sentido evolutivo a través de la historia del término en cuestión, sin embargo, claramente Jesús se refería el término a la usanza judía tardía, de modo que el “malhechor” le pudiese entender claramente a lo que se referiría, es decir, al lugar mencionado en Lucas 16:23, que no era el lugar donde Jesús se encontraría con el Padre.
Es mas, Jesús mismo dijo poco tiempo antes de su muerte que volvería otra vez a buscar a sus discípulos para que "donde yo estoy, vosotros vosotros también estéis" (Juan 14:1-3). Es decir, solo estaremos con Jesús después de su Segunda Venida, no después de nuestra muerte.
Totalmente falsa la conclusión que sacas pues aunque que el evangelista conserva el giro del retorno de Jesús, pero incorporándola a otra concepción. Es probable que Juan haya pensado la cosa así: en cada caso Jesús “viene” en la muerte del discípulo para acogerlo en la casa del Padre. La sentencia colectiva «de nuevo vendré para tomaros conmigo» quiere decir que esa promesa cuenta para todos los discípulos.
Traducir el versiculo de este modo: "De cierto te digo, hoy...". Solo trae contradicciones e incoherencias al texto bíblico.
No es así, pues expuse que la traducción “En verdad te digo hoy: estarás conmigo en el Paraíso”, no tiene en cuenta muchas evidencias, revelándose, por tanto, errónea.
La "falacia" en la que creo mantiene la coherencia de la Biblia, en cambio tu interpretación solo trae contradicciones.
La interpretación que le da la inmensa mayoría de la cristiandad tiene coherencia literaria, histórica, lógica, contextual y es está en armonía con el resto de las Escrituras.
Bendiciones,
GCR.