¿El presidente de tu país no ha hecho público su nombre, edad, foto, lugar de nacimiento o dirección?
Esto es cuestión de hombres y mujeres honestos.
Algunas de mis creencias son distintas a las de Marcelino. Pero yo defiendo su integridad no solo para esta vida, sino para la siguiente.
Tú te sientes incapaz de atar a Marcelino a un palo y prenderle fuego en una hoguera en medio de la plaza. El solo pensarlo te da horror.
Pero en cambio, crees que es JUSTO que Dios le prenda fuego a Marcelino en una hoguera para siempre. De hecho, crees que Marcelino MERECE retorcerse de dolor sin perder la conciencia, día y noche, día y noche.
Si no crees tal cosa, este es el momento de decirlo, mi hermano.