Así es,
En el doble discurso adventista, dirán que creen lo que dice la Palabra pero con los hechos lo niegan.
Sea el caso del relato del rico y Lázaro,
Dado que la mojigatería de la secta adventista se cree más buena que nadie, apelan al sentimentalismo, la bondad, el amor de un modo totalmente equivocado, pasando por alto la justicia de Dios a fine de exonerar a los impíos, incluyendo al diablo, del tormento eterno
Para lograrlo se han inventado una serie de falacias en su filosofía:
1.- Niegan que se preserva el espíritu y el alma del hombre, aduciendo que son dos o tres seres. Esta falacia, aunque infantil, la repiten cual loras.
2.- Acusan en falso a los cristianos, aduciendo -equivocada y maliciosamente- que decimos que el hombre no muere, que será eterno y que decimos eso tal y como Satanás dijo. Esta acusación se basa en una falacia, igualmente infantiloide que desde luego, cae por su propio peso, pues sabido es, que todo los hombres morimos.
3.- Dicen que el hombre muere dos veces. Esta falacia la hacen a partir de la confusión tendenciosa que quieren hacer de las palabras "muerte segunda" que, aunque no tiene que ver con la primera, intercalan en un juego de palabras, para torcer la Palabra de Dios, alegando que:
a) El hombre muere dos veces
b) Quienes digan que no es así, entonces están diciendo como Satanás "no moriréis"
¿Pero, este cuento bien montado tiene algo de cierto?. No, desde luego que no, pues escrito está que "está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio," (Heb 9:27), esto significa que no existen dos muertes bajo el sol para el hombre y, después del juicio, la escritura es clara, pues dice claramente que "su gusano no muere" (Is 66:24; Mr 9:48: )
Confunden intencionadamente las palabras "muerte segunda" que es el lago de fuego, con una segunda muerte del cuerpo, alma y espíritu hasta desaparece el hombre.
Esta retorcida idea es igualmente infantil, pues la Palabra de Dios dice que la muerte segunda es un lugar (el Lago de fuego) donde ocurre no una desaparición, sino el tormento eterno, ilustrado vívidamente como el "ahí será" el lloro y crujir de dientes, un estado de confusión perpetua, apartados de Dios y donde el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos.
Es igualmente infantil pensar siquiera que Dios tenga preparado un lugar de tormento eterno, si quien va a dar a ese lugar no permaneciera ahí atormentado por la eternidad .
Lógico es que, si después de la resurrección de los muertos, unos van a lo gozo eterno, otros irán al tormento eterno. Dan 12:2; Jn 5:29.
4.- Acusan a los cristianos de que decimos que "el hombre es eterno", el impío "tendrá vida eterna", "tendrá la vida eterna", "tendrá signos vitales". Esa acusación totalmente infundada la hacen a partir de un juego de palabras.
Si bien es cierto el hombre sella su destino con la muerte, y se perfila hacia el resto de la eternidad, sea para gozo eterno o para tormento eterno, es totalmente falso que los cristianos digamos que los hombres somos eternos pues tenemos un comienzo en un punto de la eternidad y, solo Dios es eterno.
5.- Acusan a los cristianos de que creemos en un Dios cruel y torturador. Esa acusación totalmente falsa es un invento de la secta para poner en entredicho la voluntad, la sola potestad y la justicia de Dios, bajo el argumento de que Dios es amor, es misericordioso, pero sin considerar que cada hombre es llamado a hacer el bien y que hacer el mal, es contrario a la ley de Dios, la conciencia del hombre, la luz que Dios ha dado a cada hombre y que es el hombre quien prefiere las tinieblas a la luz.
Hay muchas otras acusaciones, descontextualizaciones, perversiones y mentiras que han hecho algunos fanatiquillos de la secta adventista y que pululan en este cristiano foro pero que irá describiendo si Dios me lo permite.