No es una alegoría.
Ahí está el kid de la cuestión.
Para Dios no es una alegoría.
Tal vez lo eran los corderos pero Jesús vino en carne para que la muerte y la resurrección nuestra se sostuvieran en hechos reales.
* El VIEJO HOMBRE CRUCIFICADO....
Romanos 6:6
sabiendo esto, que nuestro VIEJO HOMBRE fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado.
¿Por qué viejo?
Porque hay uno nuevo.
¿Y que hay de la muerte?
Es muy fácil y comprensible tomar nuestra muerte en el bautismo como algo figurado, no real.
Al fin y al cabo yo entro al agua y confieso que muero, pero no es difícil notar que no muero nada.
Luego confieso que resucito y cualquiera ve, que en los hechos, ni morí, ni resucité.
Pero también yo podría confesar lo mismo con un cordero.
El cordero es muerto en lugar mío.
De todas maneras en Cristo, lo que era figurativo, pasó a ser real.
Jesús viene como hombre sin pecado y es muy real.
Acá tenemos a un hombre nuevo de verdad.
No es una forma de decir sino una realidad.
Luego este hombre sin pecado pero real, es muerto.
Pero no es muerto alegóricamente.
Lo capturan y lo matan en serio.
Es un hombre de verdad que muere enserio.
Y no es alegóricamente sepultado.
Más tarde se produce una resurrección verdadera.
Todos estos hechos son reales y son tomados por Dios para justificarnos por fe.
Pero hubo que suceder una justificación humana real y por obras bajo la ley.
* El VIEJO HOMBRE ES DESPOJADO..
Efesios 4:22
En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del VIEJO HOMBRE, que está viciado conforme a los deseos engañosos,
Colosenses 3:9
No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del VIEJO HOMBRE con sus hechos,
Pero no es un despojo alegórico.
Es un despojo por fe que es distinto.
Jesús no es el autor de nuestras alegorías sino de nuestra fe.
No somos justificados por medio de alegorías sino por medio de la fe en los hechos reales de Cristo.
El NUEVO HOMBRE es CRISTO... No hay NUEVOS HOMBRES.
Obvio.
Pero de nuevo.
No nos vestimos del nuevo hombre como algo alegórico o figurado.
Nos vestimos del nuevo por fe.
Jesús vivió lo que vivió para convertirse en el autor de nuestra fe.
No es alegoría sino una referencia real a sucesos reales.
Imagínate que tenés una foto real en tu ordenador en la carpeta Imágenes.
Y en el escritorio tenés un acceso directo a esa foto que se ve como la foto real pero simplemente es un puntero.
Puedo tener miles de punteros a la foto real con distintos nombres y sobre cualquiera de ellos que haga doble click se abrirá la misma foto veintena de veces.
¿Pero que pasa si borro la foto real de la carpeta Imágenes?
Todos los accesos directos de mí escritorio ya no abren nada.
Los hechos reales de Cristo vienen a ser esa foto y la fe de cada uno el acceso directo.
Cuando Dios pincha sobre mí muerte en el bautismo es dirigido a la muerte real de Cristo y dice:
Ah... Pucha. Este pibe murió en serio. Mira como lo mataron.
No está viendo mí muerte trucha en la bañadera sino la de su hijo en la cruz.
De igual manera cuando yo le digo que resucité y estoy sentado allá arriba, Dios pincha sobre nuestra resurrección y se le abre la resurrección de Jesús, que ocurrió de verdad.