¿Dónde dice que cumpliendo la LEY, un judío no necesita a Cristo para salvarse y puede resucitar y tener vida eterna sin Jesús?
Por tanto, guardaréis mis estatutos y mis ordenanzas, los cuales haciendo el hombre, vivirá en ellos. Yo Jehová. Levíticos 18:5.
No dice que pueda resucitar y tener vida eterna sin Jesús, lo que dice es que Dios les promete que si guardan la ley perfectamente vivirán por ello, dice
“YO JEHOVÀ”. Les prometo que si lo logran vivirán por ello.
¿Si entiendes que Dios les está prometiendo la vida si guardan la ley a la perfección?
¿O no crees a la palabra de Dios?
Mas Dios y ellos saben que no lo pueden lograr, si lees la ley completa es imposible que alguien pueda pensar que puede lograr lo imposible, son 613 instrucciones léelas y veras.
Y Dios se los dijo que no lo podrían hacer, pero hay los tienes corriendo tras la justicia de la ley.
Se los dijo en los Salmos y en los profetas:
Porque no se justificará delante de ti ningún ser humano. Salmo 143:2.
20:25 Por eso yo también les di estatutos que no eran buenos, y decretos por los cuales no podrían vivir. Ezequiel 20:25.
Y en lugar de buscar a Dios de corazón sin dejar de hacer lo que pactaron, se aferraron a buscar su propia justicia pasando por alto (dice Cristo) la justicia y el amor de Dios.
Es lo que Cristo les dijo:
Mas ¡ay de vosotros, fariseos! que diezmáis la menta, y la ruda, y toda hortaliza, y pasáis por alto la justicia y el amor de Dios. Esto os era necesario hacer, sin dejar aquello. Lucas 11:42.
Cristo les dijo que era necesario no pasar por alto la justicia y el amor de Dios sin dejar de guardar la ley, no podían dejar de guardar la ley porque prometieron a Dios guardarla, pero dejaron a un lado lo más importante de la ley, “DIOS” y su justicia su misericordia y la fe en Él.
23:23 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.
Dejaron a Dios por abrazar la ley, con honrosas excepciones (los menos) por supuesto, triste historia pero real. Y aún hay quienes se aferran al pacto antiguo para salvación pasando por alto la existencia de un nuevo pacto.