En general estoy de acuerdo contigo.
Existen, sin embargo, ciertos adventistas que creen que la observancia del séptimo día será justo el rasgo que distinga, justo antes de la Segunda Venida de Cristo, a los salvos de los condenados. El que observe el sábado recibirá el sello de Dios y quien observe el domingo recibirá la marca de la bestia.
Esa doctrina en particular me parece condenable, similar a la de los judaizantes que solo permitían aceptar a Cristo a quien aceptara circuncidarse y seguir los ritos judíos.
Yo fui adventista por 6 años y conocí a adventistas que en realidad no creen en su corazón tal cosa. Guardan el sábado como una disciplina espiritual para dedicar tiempo a la oración y al servicio a su próijmo, además del reposo mental y físico. Eso me parece estupendo. Pero también conocí los que creían a pie juntillas lo que Elena G de White habla sobre la futura división entre observadores del sábado y domingo.
el creerse que su religión es la única y verdadera no descalifican a una persona de ser o no ser cristiana
de otro modo ya no hay cristianos en el mundo