Leamos la BIBLIA

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Buenos y feliz día:


Lecturas del 23/10/2010 Sábado de la 29ª Semana de Tiempo Ordinario.





1ª lectura: Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 4, 7-16

Cristo es la cabeza; de él todo el cuerpo se procura el crecimiento


Hermanos: A cada uno de nosotros se le ha dado la gracia según la medida del don de Cristo. Por eso dice la Escritura: «Subió a lo alto llevando cautivos y dio dones a los hombres.» El «subió» supone que había bajado a lo profundo de la tierra; y el que bajó es el mismo que subió por encima de todos los celos para llenar el universo. Y él ha constituido a unos, apóstoles, a otros, profetas, a otros, evangelizadores, a otros, pastores y maestros, para el perfeccionamiento de los santos, en función de su ministerio, y para la edificación del cuerpo de Cristo; hasta que lleguemos todos a la unidad en la fe y en el conocimiento del Hijo de Dios, al hombre perfecto, a la medida de Cristo en su plenitud. Para que ya no seamos niños sacudidos por las olas y llevados al retortero por todo viento de doctrina, en la trampa de los hombres, que con astucia conduce al error; sino que, realizando la verdad en el amor, hagamos crecer todas las cosas hacia él, que es la cabeza: Cristo, del cual todo el cuerpo, bien ajustado y unido a través de todo el complejo de junturas que lo nutren, actuando a la medida de cada parte, se procura el crecimiento del cuerpo, para construcción de si mismo en el amor




Evangelio: Lectura del santo evangelio según san Lucas 13, 1-9

Si no os convertís, todos pereceréis de la misma manera


En una ocasión, se presentaron algunos a contar a Jesús lo de los galileos cuya sangre vertió Pilato con la de los sacrificios que ofrecían. Jesús les contestó: _« ¿Pensáis que esos galileos eran más pecadores que los demás galileos, porque acabaron así? Os digo que no; y, si no os convertís, todos pereceréis lo mismo. Y aquellos dieciocho que murieron aplastados por la torre de Siloé, ¿pensáis que eran más culpables que los demás habitantes de Jerusalén? Os digo que no; y, si no os convertís, todos pereceréis de la misma manera.» Y les dijo esta parábola: -«Uno tenla una higuera plantada en su viña, y fue a buscar fruto en ella, y no lo encontró. Dijo entonces al viñador: “Ya ves: tres años llevo viniendo a buscar fruto en esta higuera, y no lo encuentro. Córtala. ¿Para qué va a ocupar terreno en balde? Pero el viñador contestó: “Señor, déjala todavía este año; yo cavaré alrededor y le echaré estiércol, a ver si da fruto. Si no, la cortas.” »

Palabra del Señor.
 
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Buenos y feliz día:


Lecturas del 24/10/2010, Domingo de la 30ª Semana de Tiempo Ordinario.





1ª lectura: Lectura del libro del Eclesiástico 35, 12-14. 16-18

Los gritos del pobre atraviesan las nubes


El Señor es un Dios justo, que no puede ser parcial; no es parcial contra el pobre, escucha las súplicas del oprimido; no desoye los gritos del huérfano o de la viuda cuando repite su queja; sus penas consiguen su favor, y su grito alcanza las nubes; los gritos del pobre atraviesan las nubes y hasta alcanzar a Dios no descansan; no ceja hasta que Dios le atiende, y el juez justo le hace justicia.




2ª lectura: Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 4, 6-8. 16-18

Ahora me aguarda la corona merecida


Querido hermano: Yo estoy a punto de ser sacrificado, y el momento de mi partida es inminente. He combatido bien mi combate, he corrido hasta la meta, he mantenido la fe. Ahora me aguarda la corona merecida, con la que el Señor, juez justo, me premiará en aquel día; y no sólo a mí, sino a todos los que tienen amor a su venida. La primera vez que me defendí, todos me abandonaron, y nadie me asistió. Que Dios los perdone. Pero el Señor me ayudó y me dio fuerzas para anunciar íntegro el mensaje, de modo que lo oyeran todos los gentiles. Él me libró de la boca del león. El Señor seguirá librándome de todo mal, me salvará y me llevará a su reino del cielo. A él la gloria por los siglos de los siglos. Amén.




Evangelio: Lectura del santo evangelio según san Lucas 18, 9-14

El publicano bajó a su casa justificada, y el fariseo no


En aquel tiempo, a algunos que, teniéndose por justos, se sentían seguros de sí mismos y despreciaban a los demás, dijo Jesús esta parábola: - «Dos hombres subieron al templo a orar. Uno era fariseo; el otro, un publicano. El fariseo, erguido, oraba así en su interior: “¡OH Dios!, te doy gracias, porque no soy como los demás: ladrones, injustos, adúlteros; ni como ese publicano. Ayuno dos veces por semana y pago el diezmo de todo lo que tengo.” El publicano, en cambio, se quedó atrás y no se atrevía ni a levantar los ojos al cielo; sólo se golpeaba el pecho, diciendo: “¡OH Dios!, ten compasión de este pecador.” Os digo que éste bajó a su casa justificado, y aquél no. Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.»

Palabra del Señor.
 
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<span style="font-size:380%;color:#990000;"><strong><em>El fariseo y el publicano</em></strong></span>
</div><div align="justify"><span style="color:#009900;"><em><strong>“<span style="color:#009900;">LOS GRITOS DEL POBRE ATRAVIESAN LAS NUBES</span>”
<span style="font-size:78%;">(ECLO 35,21).</span></strong></em></span>

Los profetas de todas las épocas denunciaron la indefensión de los seres más desprotegidos de la sociedad de entonces: los huérfanos y las viudas.
Abandonados por los poderosos, se veían abocados a poner la confianza únicamente en Dios.

Hay ricos que creen que con sus bienes lo pueden comprar todo, incluso el favor divino, su bendición y su perdón mediante donaciones a obras de beneficencia o al mantenimiento de la Iglesia.
Hubo un tiempo que se compraba la bula, y los. que tenían dinero se libraban del ayuno.

Desde siempre se ha dejado a los pobres sin recursos y se ha coartado su promoción y defensa para evitar sus justas reclamaciones. Pero los gritos acallados por la represión y el olvido terminan estallando en la cara de los verdugos de la libertad y Dios, Supremo Juez, escucha su clamor, porque es su más fiel defensor, quien asume su causa.

No se puede ser buen cristiano, buen seguidor de Jesús si primero no nos identificamos con el sentimiento de los pobres, no porque sean pobres, sino por la soledad y marginación de su vida.
La raíz de toda injusticia nace del egoísmo y el desamor.
Quien ama de verdad es incapaz de hacer daño al más débil. Al contrario, gastará sus mejores desvelos en promover su dignidad.

Lo que en el trasfondo nos están comunicando los profetas y las mentes más preclaras de la actualidad es el establecimiento de un nuevo orden ético basado en la solidaridad, la fraternidad o, lo que venimos llamando: “caridad cristiana”, que no es limosna para descargar la mala conciencia, sino entrega personal y compasión interior.

<span style="color:#009900;"><em><strong>EL FARISEO Y EL PUBLICANO</strong></em></span>

El evangelio de hoy empalma con el del domingo anterior sobre la viuda y el juez injusto acerca del valor de la oración San Lucas, según su costumbre, nos presenta el contraste de dos actitudes ante Dios: la del fariseo es arrogante, orgullosa, fruto de su seguridad personal y de su interpretación de la condescendencia de Dios.
Su oración refleja la importancia de ser fiel a la Ley, pagando los diezmos al templo, ayunando, guardando el sábado y cumpliendo las numerosas normas establecidas.
Jesús no niega su compromiso social, pero su plegaria está vacía de amor al prójimo y llena de de privilegios conquistados por su propios méritos, que dejan a Dios sin margen de maniobra.

La oración del publicano es sincera, consciente de su bajeza moral. Ha sido un extorsionador, un ladrón y un sinvergüenza. No puede exhibir más mérito que el de su propia miseria e indignidad ante la misericordia infinita de Dios.
<span style="color:#3333ff;"><strong><em>“La justificación, decía San Pablo, viene por la f e en Jesucristo”.</em></strong></span>
Sin el reconocimiento de la gratuidad del don divino las obras se convertirían en un canto al orgullo.
Nuestro posicionamiento ante Dios pasa por reconocer primero, como el publicano, nuestros pecados.
Dios nos pide hoy también desechar la estrechez de miras del fariseo y dejar el círculo vicioso de nuestros ruines intereses abriendo el horizonte de nuestra vida.

<span style="color:#009900;"><strong><em>DÍA MUNDIAL DE LAS MISIONES <span style="color:#996633;">(DOMUND)</span></em></strong></span>

Los misioneros son la avanzadilla de la Iglesia, que tiene como misión hacer presente a Cristo en el mundo por medio del evangelio.
Al celebrar el día del Domund bajo el lema: <span style="color:#3333ff;"><strong><em>”Queremos ver a Jesús” </em></strong></span>expresamos algunas ideas entresacadas del mensaje del Papa con ocasión de esta fiesta misionera.
Son muchas las necesidades que afligen en el mundo a muchos hermanos nuestros que sobreviven en condiciones infrahumanas.

Jesús vino a mostrarnos el camino para<strong><em> <span style="color:#3333ff;">“combatirlas”</span>,</em></strong> para vivir como hermanos y con la dignidad de sentirnos hijos de Dios.
Los cristianos tenemos la responsabilidad de hacer presente el Reino de Dios en una sociedad multiétnica y multicultural, marcada cada vez más por la soledad y la indiferencia. Para ello hemos de abrirnos a la esperanza y a la universalidad mediante el cultivo de los altos ideales que transforman la historia, ahuyentan los miedos e ilusionan positivamente a los hombres.
Si somos capaces con la ayuda de la gracia de reflejar las actitudes y los gestos de Jesús, podremos afirmar, al igual que San Pablo en la carta a Timoteo que hoy hemos escuchado que hemos cumplido la misión que se nos había confiado.

Todos los cristianos estamos llamados a cooperar en las tareas misioneras.
La invitación del Papa no admite tergiversaciones: </em></strong></span></a><span style="color:#3333ff;"><strong><em>Mundial de las Misiones”, en la que la mirada del corazón se dilata sobre los inmensos espacios de la misión, sintámonos protagonistas del compromiso de la Iglesia de anunciar el evangelio. El impulso misionero ha sido siempre un signo de vitalidad para nuestras Iglesias (Cfr. Redemptoris missio) y su cooperación es testimonio singular de unidad, de fraternidad y de solidaridad, que la hace creíble anunciadora del Amor que salva”.</em></strong></span>

Aportemos nuestro pequeño granito de arena con nuestras oraciones y generosas ayudas económicas para que muchos hermanos nuestros, atraídos por el testimonio de los misioneros, puedan ver el rostro de Jesús y alegrarse de su fe cristiana.
</div><div align="center">
<span style="font-family:verdana;font-size:380%;color:#990000;"><strong><em>¡Feliz Domingo!</em></strong></span></div>
 
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Buenos y feliz día:


Lecturas del 25/10/2010 Lunes de la 30ª Semana de Tiempo Ordinario.





1ª lectura: Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 4, 32-5, 8

Vivid en el amor como Cristo


Hermanos: Sed buenos, comprensivos, perdonándoos unos a otros como Dios os perdonó en Cristo. Sed imitadores de Dios, como hijos queridos, y vivid en el amor como Cristo os amó y se entregó por nosotros a Dios como oblación y víctima de suave olor. Por otra parte, de inmoralidad, indecencia o afán de dinero, ni hablar; es impropio de santos. Y nada de chabacanerías, estupideces o frases de doble sentido; todo eso está fuera de sitio. Lo vuestro es alabar a Dios. Meteos bien esto en la cabeza: nadie que se da a la inmoralidad, a la indecencia o al afán de dinero, que es una idolatría, tendrá herencia en el reino de Cristo y de Dios. Que nadie os engañe con argumentos especiosos; estas cosas son las que atraen el castigo de Dios sobre los rebeldes. No tengáis parte con ellos; porque en otro tiempo erais tinieblas, ahora sois luz en el Señor. Caminad como hijos de la luz.




Evangelio: Lectura del santo evangelio según san Lucas 13, 10-17

A ésta, que es hija de Abrahán, ¿no había que soltarla en sábado?


Un sábado, enseñaba Jesús en una sinagoga. Había una mujer que desde hacia dieciocho años estaba enferma por causa de un espíritu, y andaba encorvada, sin poderse enderezar. Al verla, Jesús la llamó y le dijo: -«Mujer, quedas libre de tu enfermedad.» Le impuso las manos, y en seguida se puso derecha. Y glorificaba a Dios. Pero el jefe de la sinagoga, indignado porque Jesús había curado en sábado, dijo a la gente: -«Seis días tenéis para trabajar; venid esos días a que os curen, y no los sábados.» Pero el Señor, dirigiéndose a él, dijo: -«Hipócritas: cualquiera de vosotros, ¿no desata del pesebre al buey o al burro y lo lleva a abrevar, aunque sea sábado? Y a ésta, que es hija de Abrahán, y que Satanás ha tenido atada dieciocho años, ¿no habia que soltarla en sábado?» A estas palabras, sus enemigos quedaron abochornados, y toda la gente se alegraba de los milagros que hacía.

Palabra del Señor.
 
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Buenos y feliz día:


Lecturas del 26/10/2010 Martes de la 30ª Semana de Tiempo Ordinario.





1ª lectura: Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 5, 21-33

Es éste un gran misterio: y yo lo refiero a Cristo y a la Iglesia


Hermanos: Sed sumisos unos a otros con respeto cristiano. Las mujeres, que se sometan a sus maridos como al Señor; porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la Iglesia; él, que es el salvador del cuerpo. Pues como la Iglesia se somete a Cristo, así también las mujeres a sus maridos en todo. Maridos, amad a vuestras mujeres como Cristo amó a su Iglesia. Él se entregó a si mismo por ella, para consagrarla, purificándola con el baño del agua y la palabra, y para colocarla ante sí gloriosa, la Iglesia, sin mancha ni arruga ni nada semejante, sino santa e inmaculada. Así deben también los maridos amar a sus mujeres, como cuerpos suyos que son. Amar a su mujer es amarse a si mismo. Pues nadie jamás ha odiado su propia carne, sino que le da alimento y calor, como Cristo hace con la Iglesia, porque somos miembros de su cuerpo. «Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer y serán los dos una sola carne.» Es éste un gran misterio: y yo lo refiero a Cristo y a la Iglesia. En una palabra, que cada uno de vosotros ame a su mujer como a sí mismo, y que la mujer respete al marido.




Evangelio: Lectura del santo evangelio según san Lucas 13, 18-21

Crece el grano y se hace un arbusto


En aquel tiempo, decía Jesús: - ¿ A qué se parece el reino de Dios? ¿A qué lo compararé? Se parece a un grano de mostaza que un hombre toma y siembra en su huerto; crece, se hace un arbusto y los pájaros anidan en sus ramas. » Y añadió: -¿ A qué compararé el reino de Dios? Se parece a la levadura que una mujer toma y mete en tres medidas de harina, hasta que todo fermenta.»

Palabra del Señor.
 
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Buenos y feliz día:


Lecturas del 27/10/2010 Miércoles de la 30ª Semana de Tiempo Ordinario.





1ª lectura: Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 6, 1-9

No como quien sirve a hombres, sino como esclavos de Cristo


Hijos, obedeced a vuestros padres como el Señor quiere, porque eso es justo. «Honra a tu padre y a tu madre» es el primer mandamiento al que se añade una promesa: «Te irá bien y vivirás largo tiempo en la tierra. » Padres, vosotros no exasperéis a vuestros hijos; criadlos educándolos y corrigiéndolos como haría el Señor. Esclavos, obedeced a vuestros amos según la carne con temor y temblor, de todo corazón, como a Cristo. No por las apariencias, para quedar bien, sino como esclavos de Cristo que hacen lo que Dios quiere; con toda el alma, de buena gana, como quien sirve al Señor y no a hombres. Sabed que lo que uno haga de bueno, sea esclavo o libre se lo pagará el Señor. Amos, correspondedles dejándoos de amenazas; sabéis que ellos y vosotros tenéis un amo en el cielo y que ése no es parcial con nadie.




Evangelio: Lectura del santo evangelio según san Lucas 13, 22-30

Vendrán de oriente y occidente y se sentarán a la mesa en el reino de Dios


En aquel tiempo, Jesús, de camino hacia Jerusalén, recorría ciudades y aldeas enseñando. Uno le preguntó: -«Señor, ¿serán pocos los que se salven?» Jesús les dijo: -«Esforzaos en entrar por la puerta estrecha. Os digo que muchos intentarán entrar y no podrán. Cuando el amo de la casa se levante y cierre la puerta, os quedaréis fuera y llamaréis a la puerta, diciendo: “Señor, ábrenos”; y él os replicará: “No sé quiénes sois.” Entonces comenzaréis a decir: “Hemos comido y bebido contigo, y tú has enseñado en nuestras plazas. “ Pero él os replicará: “No sé quiénes sois. Alejaos de mí, malvados.” Entonces será el llanto y el rechinar de dientes, cuando veáis a Abrahán, Isaac y Jacob y a todos los profetas en el reino de Dios, y vosotros os veáis echados fuera. Y vendrán de oriente y occidente, del norte y del sur, y se sentarán a la mesa en el reino de Dios. Mirad: hay últimos que serán primeros, y primeros que serán últimos.»

Palabra del Señor.
 
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Buenos y feliz día:


Lecturas del 28/10/2010 Jueves de la 30ª Semana de Tiempo Ordinario.





1ª lectura: Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 2,19-22

Estáis edificando sobre el cimiento de los apóstoles


Hermanos: Ya no sois extranjeros ni forasteros, sino que sois ciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios. Estáis edificados sobre el cimiento de los apóstoles y profetas, y el mismo Cristo Jesús es la piedra angular. Por él todo el edificio queda ensamblado, y se va levantando hasta formar un templo consagrado al Señor. Por él también vosotros os vais integrando en la construcción, para ser morada de Dios, por el Espíritu.




Evangelio: Lectura del santo evangelio según san Lucas 6, 12-19

Escogió a doce de ellos y los nombró apóstoles


En aquel tiempo, subió Jesús a la montaña a orar, y pasó la noche orando a Dios. Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, escogió a doce de ellos y los nombró apóstoles: Simón, al que puso de nombre Pedro, y Andrés, su hermano, Santiago, Juan, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago Alfeo, Simón, apodado el Celotes, Judas el de Santiago y Judas Iscariote, que fue el traidor. Bajó del monte con ellos y se paró en un llano, con un grupo grande de discípulos y de pueblo, procedente de toda Judea, de Jerusalén y de la costa de Tiro y de Sidón. Venían a oírlo y a que los curara de sus enfermedades; los atormentados por espíritus inmundos quedaban curados, y la gente trataba de tocarlo, porque salía de él una fuerza que los curaba a todos.

Palabra del Señor.
 
Re: Leamos la BIBLIA




Buenos y feliz día:


Lecturas del 29/10/2010 Viernes de la 30ª Semana de Tiempo Ordinario.





1ª lectura: Comienzo de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses 1, 1 - 11

El que ha inaugurado entre vosotros una empresa buena la llevará adelante hasta el día de Cristo


Pablo y Timoteo, siervos de Cristo Jesús, a todos los santos que residen en Filipos, con sus obispos y diáconos. Os deseamos la gracia y la paz de Dios, nuestro Padre, y del Señor Jesucristo. Doy gracias a mi Dios cada vez que os menciono; siempre que rezo por todos vosotros, lo hago con gran alegría. Porque habéis sido colaboradores míos en la obra del Evangelio, desde el primer día hasta hoy. Ésta es mi convicción: que el que ha inaugurado entre vosotros una empresa buena la llevará adelante hasta el día de Cristo Jesús. Esto que siento por vosotros está plenamente justificado: os llevo dentro, porque, tanto en la prisión como en mi defensa y prueba del Evangelio, todos compartís la gracia que me ha tocado. Testigo me es Dios de lo entrañablemente que os echo de menos, en Cristo Jesús. Y ésta es mi oración: que vuestro amor siga creciendo más y más en penetración y en sensibilidad para apreciar los valores. Así llegaréis al día de Cristo limpios e irreprochables, cargados de frutos de justicia, por medio de Cristo Jesús, a gloria y alabanza de Dios.




Evangelio: Lectura del santo evangelio según san Lucas 14, 1-6

Si a uno se le cae al pozo el hijo o el buey, ¿no lo saca, aunque sea sábado?


Un sábado, entró Jesús en casa de uno de los principales fariseos para comer, y ellos le estaban espiando. Se encontró delante un hombre enfermo de hidropesía y, dirigiéndose a los maestros de la Ley y fariseos, preguntó: -«¿Es lícito curar los sábados, o no?» Ellos se quedaron callados. Jesús, tocando al enfermo, lo curó y lo despidió. Y a ellos les dijo: -«Si a uno de vosotros se le cae al pozo el hijo o el buey, ¿no lo saca en seguida, aunque sea sábado?» Y se quedaron sin respuesta.

Palabra del Señor.
 
Re: Leamos la BIBLIA




Buenos y feliz día:


Lecturas del 30/10/2010 Sábado de la 30ª Semana de Tiempo Ordinario.





1ª lectura: Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses 1, 18b-26

Para mí la vida es Cristo, y una ganancia el morir


Hermanos: De la manera que sea, con segundas intenciones o con sinceridad, se anuncia a Cristo, y yo me alegro; y me seguiré alegrando, porque sé que esto será para mi bien, gracias a vuestras oraciones y al Espíritu de Jesucristo que me socorre. Lo espero con impaciencia, porque en ningún caso saldré derrotado; al contrario, ahora, como siempre, Cristo será glorificado abiertamente en mi cuerpo, sea por mi vida o por mi muerte. Para mi la vida es Cristo, y una ganancia el morir. Pero, si el vivir esta vida mortal me supone trabajo fructífero, no sé qué escoger. Me encuentro en este dilema: por un lado, deseo partir para estar con Cristo, que es con mucho lo mejor; pero, por otro, quedarme en esta vida veo que es más necesario para vosotros. Convencido de esto, siento que me quedaré y estaré a vuestro lado, para que avancéis alegres en la fe, de modo que el orgullo que sentís por mi en Jesucristo rebose cuando me encuentre de nuevo entre vosotros.




Evangelio: Lectura del santo evangelio según san Lucas 14, 1. 7-11

El que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido


Un sábado, entró Jesús en casa de uno de los principales fariseos para comer, y ellos le estaban espiando. Notando que los convidados escogían los primeros puestos, les propuso esta parábola: -«Cuando te conviden a una boda, no te sientes en el puesto principal, no sea que hayan convidado a otro de más categoría que tú; y vendrá el que os convidó a ti y al otro y te dirá: “Cédele el puesto a éste.” Entonces, avergonzado, irás a ocupar el último puesto. Al revés, cuando te conviden, vete a sentarte en el último puesto, para que, cuando venga el que te convidó, te diga: “Amigo, sube más arriba.” Entonces quedarás muy bien ante todos los comensales. Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.»

Palabra del Señor.
 
Re: Leamos la BIBLIA

Que razón tienes, me gusta pensar en la biblia como en un libro de historia.
Me hace olvidar el intenso flujo de criticas que recibe de si Jesus realmente existio o no...
Te mando un abrazo y te dejo una pagina que me encanta que tiene un video de amor de pareja que me pareció precioso.
www.pazinterior.net

Un abrazo!
 
Re: Leamos la BIBLIA




Buenos y feliz día:


Lecturas del 03/11/2010 Miércoles de la 31ª Semana de Tiempo Ordinario.





1ª lectura: Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses 2, 12-18

Seguid actuando vuestra salvación, porque es Dios quien activa en vosotros el querer y la actividad


Queridos hermanos, ya que siempre habéis obedecido, no sólo cuando yo estaba presente, sino mucho más ahora en mi ausencia, seguid actuando vuestra salvación con temor y temblor, porque es Dios quien activa en vosotros el querer y la actividad para realizar su designio de amor. Cualquier cosa que hagáis, sea sin protestas ni discusiones, así seréis irreprochables y límpidos, hijos de Dios sin tacha, en medio de una gente torcida y depravada, entre la cual brilláis como lumbreras del mundo, mostrando una razón para vivir. El día de Cristo, eso será una honra para mí, que no he corrido ni me he fatigado en vano. Y, aun en el caso de que mi sangre haya de derramarse, rociando el sacrificio litúrgico que es vuestra fe, yo estoy alegre y me asocio a vuestra alegría; por vuestra parte, estad alegres y asociaos a la mía.




Evangelio: Lectura del santo evangelio según san Lucas 14, 25-33

El que no renuncia a todos sus bienes, no puede ser discípulo mío


En aquel tiempo, mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo: "Si alguno se viene conmigo y no pospone a su padre y a su madre, y a su mujer y a sus hijos, y a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío. Quien no lleve su cruz detrás de mí, no puede ser discípulo mío. Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla? No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo: "Este hombre empezó a construir y no ha sido capaz de acabar". ¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que le ataca con veinte mil? Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz. Lo mismo vosotros: el que no renuncia a todos sus bienes, no puede ser discípulo mío.

Palabra del Señor.