Re: LA LEY que dio Dios a Israel FUE LA LEY DEL EVANGELIO Y NO TODAS LAS LEYES DEL A.
JESÚS SIGUE RESTAURANDO LA VERDADERA LEY DE DIOS
"Además habéis oído que fue dicho a los antiguos: No perjurarás, sino cumplirás al Señor tus juramentos. Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey. Ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello. Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más de esto, de mal procede". (Mateo 5:...)
Los judíos tenían costumbre de jurar en muchos casos, y así lo dejan escrito en las leyes del viejo testamento... El Señor deja abolidos estos preceptos sobre los juramentos.
LA LEY DEL TALIÓN ("Ojo por ojo, y diente por diente") ABOLIDA POR JESUCRISTO
"Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses". (Mateo 5:...)
Los judíos tenían la costumbre de aplicar la ley del Talión en sus juicios (ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura..., etc.), y así lo dejan escrito en las leyes del viejo testamento (Éxodo 21:24-25), pero esta ley faltaba a la misericordia y no contemplaba el perdón que debemos a los hermanos... El que mucho ama, mucho perdona. Aquellos que no aman a sus semejantes, en muchos casos pueden desear aplicar la ley del Talión. Pero Jesucristo abolió para siempre esta ley tan cruel, la ley del Talión. El Señor deja abolida la ley del Talión, y la deja abolida porque no era Ley de Dios, pues el Señor no vino a abolir la verdadera Ley de Dios sino a "darla a conocer plenamente".
El Señor no aplicó la ley del Talión a sus hijos e hijas sino que los perdonó y los amó con misericordia.
La ley del Talión escrita en el viejo testamento no contempla la misericordia ni el perdón, pero la verdadera Ley de Dios es misericordiosa... Jesucristo es Dios, y la Ley de Jesucristo nos manda que perdonemos y tengamos misericordia. El Evangelio así nos dice:
Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete. (Mateo 18:21)
Un deudor fue perdonado y el no perdonó a quien le debía. El Señor, entonces Le dijo a aquel hombre: ¿No debías tú también tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti?... (Mateo 18:33)
"Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto". (Mateo 5:21-48)
Los judíos, siguiendo las tradiciones de los pueblos vecinos, habían endurecido sus corazones con las guerras y las penas de muerte, y en muchos casos no tenían compasión con los enemigos vencidos, pues en muchos casos los degollaban o los ahorcaban, y no solamente a ellos, sino que luego, como nos dicen las leyes del viejo testamento, entraban en los pueblos vencidos y en muchos casos también degollaban a los niños y a las mujeres..., diciendo que era mandato de Dios. Jesucristo dejó abolidas estas leyes y nos manda que amemos a nuestros enemigos. El Señor deja abolida esta costumbre de aborrecer y odiar a los enemigos, y la deja abolida porque no era Ley de Dios, pues el Señor no vino a abolir la verdadera Ley de Dios sino a "darla a conocer plenamente". Y un ejemplo maravilloso lo tenemos en el Evangelio, pues Jesucristo, cuando estaba siendo crucificado, pidió a Dios perdón para aquellos que le hacían tanto daño, pues el Señor dijo: "Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen".
JESÚS SIGUE RESTAURANDO LA VERDADERA LEY DE DIOS
"Además habéis oído que fue dicho a los antiguos: No perjurarás, sino cumplirás al Señor tus juramentos. Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey. Ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello. Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más de esto, de mal procede". (Mateo 5:...)
Los judíos tenían costumbre de jurar en muchos casos, y así lo dejan escrito en las leyes del viejo testamento... El Señor deja abolidos estos preceptos sobre los juramentos.
LA LEY DEL TALIÓN ("Ojo por ojo, y diente por diente") ABOLIDA POR JESUCRISTO
"Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses". (Mateo 5:...)
Los judíos tenían la costumbre de aplicar la ley del Talión en sus juicios (ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura..., etc.), y así lo dejan escrito en las leyes del viejo testamento (Éxodo 21:24-25), pero esta ley faltaba a la misericordia y no contemplaba el perdón que debemos a los hermanos... El que mucho ama, mucho perdona. Aquellos que no aman a sus semejantes, en muchos casos pueden desear aplicar la ley del Talión. Pero Jesucristo abolió para siempre esta ley tan cruel, la ley del Talión. El Señor deja abolida la ley del Talión, y la deja abolida porque no era Ley de Dios, pues el Señor no vino a abolir la verdadera Ley de Dios sino a "darla a conocer plenamente".
El Señor no aplicó la ley del Talión a sus hijos e hijas sino que los perdonó y los amó con misericordia.
La ley del Talión escrita en el viejo testamento no contempla la misericordia ni el perdón, pero la verdadera Ley de Dios es misericordiosa... Jesucristo es Dios, y la Ley de Jesucristo nos manda que perdonemos y tengamos misericordia. El Evangelio así nos dice:
Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete. (Mateo 18:21)
Un deudor fue perdonado y el no perdonó a quien le debía. El Señor, entonces Le dijo a aquel hombre: ¿No debías tú también tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti?... (Mateo 18:33)
"Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto". (Mateo 5:21-48)
Los judíos, siguiendo las tradiciones de los pueblos vecinos, habían endurecido sus corazones con las guerras y las penas de muerte, y en muchos casos no tenían compasión con los enemigos vencidos, pues en muchos casos los degollaban o los ahorcaban, y no solamente a ellos, sino que luego, como nos dicen las leyes del viejo testamento, entraban en los pueblos vencidos y en muchos casos también degollaban a los niños y a las mujeres..., diciendo que era mandato de Dios. Jesucristo dejó abolidas estas leyes y nos manda que amemos a nuestros enemigos. El Señor deja abolida esta costumbre de aborrecer y odiar a los enemigos, y la deja abolida porque no era Ley de Dios, pues el Señor no vino a abolir la verdadera Ley de Dios sino a "darla a conocer plenamente". Y un ejemplo maravilloso lo tenemos en el Evangelio, pues Jesucristo, cuando estaba siendo crucificado, pidió a Dios perdón para aquellos que le hacían tanto daño, pues el Señor dijo: "Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen".