No sólo podemos descansar en la expectativa de que recibiremos de Dios una buena respuesta, sino que ésta será la mejor posible, aunque nos cueste verlo o, incluso, creerlo.
La Redención provista por nuestro justo y misericordioso Dios es tan real que marca una clara división en la humanidad: los que viven por fe y los que viven en la incredulidad.
Tener fe en Dios es buscar lo imposible: sonreír cuando tus días se encuentran nublados y tus ojos se han secado de tanto llorar. Tener fe es no dejar nunca de desnudar tus labios con una sonrisa, ni siquiera cuando estés triste, porque nunca sabes cuándo tu sonrisa puede dar luz y esperanza a la vida de alguien que se encuentre en peor situación que la tuya.
Una persona agredecida a Dios sera una persona cercana a El.
La gratitud es como ese hilo invisible que te conecta a Dios, que no te permite separarte de El, que te impulsa una y otra vez a venir ante Dios y recordar, que en El somos lo que somos, y que por El tenemos lo que tenemos, es como ese resorte en nuestro corazon que nos hace siempre mirar hacia arriba y ver de donde vienen las buenas dadivas.
“Lo infinito de Dios siempre nos sorprende. Cada día la ciencia encuentra algo Nuevo.
Y no es para menos Dios dice en su palabra que Él hace nuevas todas las cosas”
"Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor será salvo."
"¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creido? ¿Y como oirán sin haber quien les predique"? ¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito:
¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!.
Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.
Algunas veces me pregunto por qué Dios le da tanto valor a la honestidad en nuestras oraciones.
Dios quiere que nos acerquemos a Él con nuestras peticiones. Si marchamos por la vida fingiendo sonreir mientras sangramos por dentro, deshonramos la relación con Él.
Quien vive de espaldas a la muerte, está alejándose de la vida y de la resurrección. Quien afronta la muerte y encuentra respuesta a ella en Jesús, llenará de luz y esperanza su vida para siempre, también para la eternidad.
¡Te amo, Señor!