Re: La estrella que condujo a los Magos hasta Jesús
Aprecio sus palabras, aunqué ya en otra oportunidad me advirtió similarmente, me reconforta cuando leo a foristas que son atentos a lo que leen, es el primer paso en un diálogo que pueda ser tal.
El texto que pegue es del evangelio Armenio de la infancia. Y por lo menos demuestra para aquellos que no crean en que pueda haber algo de verdad historica o espiritual en el (el texto); que cualquier plagiario puede pasar por inspirado, si encuentra incautos que le crean.
Yo sé que es muy difísil luego que uno entrego su libertad para pensar de acuerdo a la mente de otro, admitirlo. Hay un proceso de enajenación muy complejo; que Saulo resume en Ro.6.16
Hombres venerables y reyes poderosos, explicadnos el motivo de vuestro advenimiento a nuestro país. Los magos dijeron: ¿Por qué nos hacéis esa pregunta, si somos nosotros los que venimos a interrogaros? Procedemos de Persia, comarca lejana, y tenemos prisa en proseguir nuestra ruta. Los príncipes dijeron: Escuchadnos, por amor de Dios. Nuestro rey está en la ciudad, y, al notar que os establecíais aquí en observación, esperaba que os presentaseis a él, pues querría veros, oíros, hablaros, y conversar con vosotros. Mas, como no os apresuraseis a ir a visitarlo, nos ha enviado en vuestra busca, para invitaros a que os personéis en su palacio, a fin de informarse, con todo respeto, de vuestras intenciones, y saber lo que deseáis.
7. Los magos dijeron: ¿Y para qué nos requiere vuestro rey? Si él tiene alguna cuestión que plantearnos, nosotros, por nuestra parte, nada tenemos que ver, nada que oír, nada que manifestar a nadie. Los príncipes dijeron: ¿Venís, pues, como amigos o con designios violentos? Los magos dijeron: Libre y gozosamente hemos venido de nuestra nación aquí. Nadie nos ha sometido a semejante interrogatorio, ¡y vosotros pretendéis ahora sondearnos! Los príncipes dijeron: El rey es quien nos ha mandado venir a veros, a oíros y a hablaros. Desde que habéis acampado en las afueras, un olor de esencias aromáticas ha salido de vuestras tiendas, y llenado toda nuestra ciudad. ¿Sois mercaderes, que os dedicáis al gran comercio, o poderosos señores familiares de reyes, que traéis en abundancia perfumes refinados de todas las flores preciosas, los cuales tratan de cambiar en algún país rico? Los magos dijeron: Nada de eso somos, ni nada tenemos que vender, y sólo preguntamos por nuestro camino.
8. Los príncipes preguntaron: ¿Qué camino? Y los magos contestaron: Aquel por el que el Señor nos conducirá, en la justicia, hasta el país del bien. Por orden de Dios y de común acuerdo, hemos venido aquí. Hace nueve meses que nos pusimos en marcha, y no pudimos aún llegar a tiempo a nuestro destino. La estrella que nos guiaba, nos precedía de continuo, y, al terminar cada etapa de nuestro viaje, se estacionaba sobre nuestras cabezas. Cuando, puestos de nuevo en camino, apresurábamos la marcha, la estrella, dejada atrás, tomaba otra vez la delantera, y así hasta este lugar. Ahora, su luz, ha desaparecido de nuestra vista, y, sumidos en la incertidumbre, no sabemos qué hacer.
9. Y los príncipes fueron a contar al rey todo lo que les participaron los magos. Entonces Herodes se decidió a ir en persona a entrevistarse con ellos, y, así que estuvo en su campamento, les preguntó: ¿Con qué propósito habéis hecho tan largo viaje a esta tierra, con ejército tan numeroso y con presentes tan ricos? Y los magos contestaron: Venimos de Persia, del Oriente. Por razón de nuestra nacionalidad, se nos llama magos. Hemos llegado aquí conducidos por una estrella, y la causa de nuestro viaje es haber visto en nuestro país que un rey ha nacido en el país de Judea. Nuestro objeto es visitarlo y adorarlo.
10. Herodes, que tal oyó, quedó profundamente turbado y empavorecido. Él interrogó a los extranjeros: ¿De quién habéis sabido lo que decís, o quién os lo ha contado? Y los magos respondieron: ..........................
Continuará.
Aprecio sus palabras, aunqué ya en otra oportunidad me advirtió similarmente, me reconforta cuando leo a foristas que son atentos a lo que leen, es el primer paso en un diálogo que pueda ser tal.
El texto que pegue es del evangelio Armenio de la infancia. Y por lo menos demuestra para aquellos que no crean en que pueda haber algo de verdad historica o espiritual en el (el texto); que cualquier plagiario puede pasar por inspirado, si encuentra incautos que le crean.
Yo sé que es muy difísil luego que uno entrego su libertad para pensar de acuerdo a la mente de otro, admitirlo. Hay un proceso de enajenación muy complejo; que Saulo resume en Ro.6.16
Hombres venerables y reyes poderosos, explicadnos el motivo de vuestro advenimiento a nuestro país. Los magos dijeron: ¿Por qué nos hacéis esa pregunta, si somos nosotros los que venimos a interrogaros? Procedemos de Persia, comarca lejana, y tenemos prisa en proseguir nuestra ruta. Los príncipes dijeron: Escuchadnos, por amor de Dios. Nuestro rey está en la ciudad, y, al notar que os establecíais aquí en observación, esperaba que os presentaseis a él, pues querría veros, oíros, hablaros, y conversar con vosotros. Mas, como no os apresuraseis a ir a visitarlo, nos ha enviado en vuestra busca, para invitaros a que os personéis en su palacio, a fin de informarse, con todo respeto, de vuestras intenciones, y saber lo que deseáis.
7. Los magos dijeron: ¿Y para qué nos requiere vuestro rey? Si él tiene alguna cuestión que plantearnos, nosotros, por nuestra parte, nada tenemos que ver, nada que oír, nada que manifestar a nadie. Los príncipes dijeron: ¿Venís, pues, como amigos o con designios violentos? Los magos dijeron: Libre y gozosamente hemos venido de nuestra nación aquí. Nadie nos ha sometido a semejante interrogatorio, ¡y vosotros pretendéis ahora sondearnos! Los príncipes dijeron: El rey es quien nos ha mandado venir a veros, a oíros y a hablaros. Desde que habéis acampado en las afueras, un olor de esencias aromáticas ha salido de vuestras tiendas, y llenado toda nuestra ciudad. ¿Sois mercaderes, que os dedicáis al gran comercio, o poderosos señores familiares de reyes, que traéis en abundancia perfumes refinados de todas las flores preciosas, los cuales tratan de cambiar en algún país rico? Los magos dijeron: Nada de eso somos, ni nada tenemos que vender, y sólo preguntamos por nuestro camino.
8. Los príncipes preguntaron: ¿Qué camino? Y los magos contestaron: Aquel por el que el Señor nos conducirá, en la justicia, hasta el país del bien. Por orden de Dios y de común acuerdo, hemos venido aquí. Hace nueve meses que nos pusimos en marcha, y no pudimos aún llegar a tiempo a nuestro destino. La estrella que nos guiaba, nos precedía de continuo, y, al terminar cada etapa de nuestro viaje, se estacionaba sobre nuestras cabezas. Cuando, puestos de nuevo en camino, apresurábamos la marcha, la estrella, dejada atrás, tomaba otra vez la delantera, y así hasta este lugar. Ahora, su luz, ha desaparecido de nuestra vista, y, sumidos en la incertidumbre, no sabemos qué hacer.
9. Y los príncipes fueron a contar al rey todo lo que les participaron los magos. Entonces Herodes se decidió a ir en persona a entrevistarse con ellos, y, así que estuvo en su campamento, les preguntó: ¿Con qué propósito habéis hecho tan largo viaje a esta tierra, con ejército tan numeroso y con presentes tan ricos? Y los magos contestaron: Venimos de Persia, del Oriente. Por razón de nuestra nacionalidad, se nos llama magos. Hemos llegado aquí conducidos por una estrella, y la causa de nuestro viaje es haber visto en nuestro país que un rey ha nacido en el país de Judea. Nuestro objeto es visitarlo y adorarlo.
10. Herodes, que tal oyó, quedó profundamente turbado y empavorecido. Él interrogó a los extranjeros: ¿De quién habéis sabido lo que decís, o quién os lo ha contado? Y los magos respondieron: ..........................
Continuará.