Re: ¿JESUS DIJO QUE ERA DIOS?
Isaías 6:3: “Y el uno al otro daba voces, diciendo: “Santo, santo, santo, Jehová de los ejércitos...”
Los Trinitarios creen ver en este texto otra prueba de que Dios es Trino (3 veces Santo). Afirman que los tres santos son las tres personas de la Deidad.
Pero, ¿realmente prueba este texto que Dios es Trino?
En la cruz el hombre Jesús dice: “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?” (Lucas 23:46).
¿Significan sus palabras que Dios está compuesto de DOS Personas, y no TRES?.
En 1 Juan 5:8 se menciona una “trinidad” que da su testimonio en la tierra: “El espíritu, el agua, y la sangre, y los tres concuerdan.” ¿Son personas? ¿Son iguales? ¿Cómo se explica el pasaje?
En 1 Tesalonisenses 5:23 encontramos que el hombre está compuesto de 3 elementos: “espíritu, alma, y cuerpo.” No obstante, el cuerpo y el espíritu y el alma no son iguales por naturaleza.
En Apocalipsis 8:13 leemos de 3 ángeles y 3 “ayes”. En Lucas 22:34 leemos que Pedro niega 3 veces al Señor. En Mateo 12:40 leemos que Jonás estuvo en el vientre del pez 3 días.
En 1 Corintios 13:13 aparecen las 3 “Virtudes Teologales”: “Fe, esperanza y amor”, pero el mayor es el amor.
Cuando Jesús se transfigura, 3 de sus discípulos (Pedro, Santiago y Juan) tienen la visión gloriosa del Maestro en el monte (Marcos 9:2).
Es claro que el número ‘3’ tiene el significado de ‘Plenitud’ y no ‘Deidad’.
Los “tríos” en la Biblia se pueden hallar tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamentos, sin que impliquen nada extraordinario.
Igual ocurre con la llamada “fórmula bautismal” de Mateo 28:19. Allí leemos del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo.
Pero: ¿Es este texto una prueba de la existencia de 3 Dioses Iguales y Eternos en Uno? ¡No! Pues en otra ocasión Jesús dijo que Su Padre era Mayor que él y que todos (Juan 14:28; 10:29).
Hechos 16:31,34: “Y ellos (Pablo y Silas) dijeron (al carcelero de Filipos): Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa... y (él) se regocijó por haber creído en Dios con todos los suyos.”
Estos versículos son utilizados por los Trinitarios para “probar” que Jesucristo y Dios significan lo mismo.
Notemos que al carcelero de Filipos se le anima a creer en Jesucristo, y luego el texto nos dice que él y su familia creyeron en Dios.
La lógica es interesante, pero no para este caso. En Juan 12:44 Jesús dice algo sumamente importante: “EL QUE CREE EN MÍ, NO CREE EN MÍ, SINO EN EL QUE ME ENVIÓ.”
Siendo Jesús el Representante y Mensajero de Dios, al recibirlo a él, lo recibimos a Su Padre. Y Si creemos en Jesús, creemos también al Padre, quien le envió.
En Hechos 9:36-43 Pedro realiza un milagro al resucitar a la joven llamada Dorcas. En el verso 42 se informa que por este milagro de Pedro muchos “creyeron en el Señor”.
¿Diremos que San Pedro era el mismo Señor? Pues no, claro está.
Lucas 8:39: “Vuélvete a tu casa, y cuenta cuán grandes cosas ha hecho Dios contigo. Y él (el exorcizado) se fue, publicando por toda la ciudad cuán grandes cosas había hecho Jesús con él.”
Aquí tenemos un caso semejante al anterior. En primer lugar: Es interesante lo que le dijo Nicodemo a Jesús, después de ver los milagros realizados por el Señor en las bodas de Caná.
En esa ocasión había convertido el agua en vino excelente (Juan 2:1-11).
La confesión de Nicodemo fue: “Rabí, sabemos QUE HAS VENIDO DE DIOS como MAESTRO; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, SI NO ESTÁ DIOS CON ÉL.” (Juan 3:2).
Notemos que Nicodemo NO creyó que Jesús fuera Dios mismo por razón de sus milagros. Él admitió que Jesús era Maestro, y que Dios estaba con él dándole el poder para hacer maravillas.
En segundo lugar: En Juan 5:19 Jesús admitió que NO podía hacer nada por sí mismo, sino lo que veía hacer al Padre.
Veamos Ahora el caso de Lázaro. Después de haberlo resucitado, Jesús ora: “Gracias te doy por haberme oído.” (Juan 11:41,42).
Es claro que Dios obraba a través de Cristo, y así lo entendieron los presentes, y el mismo Evangelista Juan.
Juan 5:23: “Para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al hijo, no honra al Padre que le envió.”
Pero: ¿Por qué tendríamos que honrar al Hijo como se honra al Padre? La respuesta está en el mismo verso: “el que no honra al Hijo no honra al Padre que le envió.”
¡Aquí está la razón verdadera! Jesús debe ser honrado como si fuera el mismo Padre Dios, porque es Su Representante o Mensajero, o también, Su Embajador Real.
Él vino como el Hijo del Rey...¡Un Príncipe, un Noble Real! Él es el heredero al trono del Reino de Dios. De modo que los honores que se le rinden a él deben ser los mismos como se le rendirían a Su Padre, el Rey.
Además, Jesús NO dice que él debe ser ADORADO como se le ADORA al Padre, el Único Dios Verdadero (Juan 17:3).
Recordemos cuando él estaba siendo tentado por el Diablo. Jesús le replicó a Satanás que en la Escritura estaba escrito que sólo al Señor Dios se le debía adorar y servir, refiriéndose a Jehová(Mateo 4:10).
¡Pero Jesús no es Jehová! El texto más claro que prueba que Jehová no es Jesucristo está en el Salmo 110:1 que dice: “El Señor (Adonai: YHWH) dijo a mi señor (Adoni) siéntate a mi diestra...”
Aquí ‘Adonai’ o YHWH o Yaweh, le dice a Su Mesías elegido y entronizado ‘Adoni’, que se siente a Su diestra.
Por supuesto que este “adoni” es Su Hijo glorificado. Por tanto, ‘Adon’ (Jehová o Yavé) No es el mismo ‘Adoni’ (Su Hijo entronizado).
En el Antiguo Testamento, el rey humano David recibió, JUNTO con Jehová, “la adoración postrada” de la congregación del pueblo (1 Crónicas 29:20).
Sin duda, este reconocimiento del pueblo hacia Dios y Su rey, no lo hacía al rey David igual a Dios o ‘Dios Eterno’.
La honra que recibió Jehová y Su rey por parte de Su pueblo era un símbolo de sujeción, de subordinación a Dios a través de Su rey ungido, David.
Así, el “David Mayor”, el Señor Jesucristo, debe ser honrado como se honra a Dios, pues es Su Representante, Su Rey humano glorificado, del Reino que se restaurará.
Hebreos 1:8: Aquí Pablo cita un pasaje del Salmo 45 para referirse a Jesús y que dice: “Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; cetro de equidad es el cetro de tu reino.”
¿No prueba este pasaje que Cristo es Dios? Pero parece que este texto es una cita del Salmo 45:6, donde la palabra ‘Dios’ se refiere a un hombre, un hombre en una exaltada posición, particularmente, el Rey.
Los tres primeros capítulos de Hebreos contienen una discusión de Cristo en una variedad de roles que posee y títulos que se le han dado; por ejemplo, “el resplandor de su gloria” (1:3); “hecho tanto superior a los ángeles” (1:4); “Apóstol y Sumo Sacerdote de nuestra profesión” (3:1).
Cada verso que conduce al verso 8 en Hebreos 1 enfatiza la grandeza de Cristo y lo que hizo; de esta suerte el título ‘Dios’. Es solamente un título formal, usado acá para indicar Su poder y gloria.
El llamar a una persona ‘Dios’ en el uso oriental difiere del occidental. Sabemos que el título ‘Dios’ es usado por Moisés (Éxodo 7:1), por los Jueces de Israel (Éxodo 22:28), los hijos del Altísimo (Salmo 82:6).
Mateo 28:17:
“Y cuando le vieron, le adoraron (Gr. ‘Proskuneo’); pero algunos dudaban”. Los Trinitarios sostienen que si Cristo fue adorado, entonces él era Dios. Pero la palabra Griega ‘Proskuneo’ tiene un significado más amplio, como puede ser visto en Mateo 18:26 y Apocalipsis 3:9.
Ver también cómo muchas Biblias traducen Hebreos 1:6. Pero lo cierto es que la forma o palabra Griega ‘Proskuneo’ puede ser usada para hombres con autoridad que ¡NO son divinos!
Así ocurre en Mateo 18:26.
Pero existe otra palabra Griega ‘Latreuo’ que es usada EXCLUSIVAMENTE por el Padre: Mateo 4.10; Hechos 7:7; 24:14; 26:7; 27:23; Romanos 1:9; Apocalipsis 7:15; 22:3, etc. John Nelson Darby, en una nota al pie de la página sobre Mateo 4:10 dice: ‘Proskuneo’: “Un acto de reverencia personal y homenaje”.
Lo que en el lenguaje moderno es llamado ‘adoración’ es ‘Latreuo’. Ver también la “New English Bible” (La Nueva Biblia Inglesa), donde traduce ‘Proskuneo’ como ‘homenaje’ y ‘Latreuo’ como adoración en Mateo 4:10.
Y en muchos pasajes del libro del Apocalipsis aclaran que sólo el Padre, y nunca el Hijo (el Cordero), es adorado: comparar 7:10-12; 11:15-17; 14:7; 15:2-4; 19:4,10; 22:9. Ver También 7:15 y 22:3 donde el Griego ‘Latreuo’ es usado.