JESUS ES JEHOVÁ
Por don Santiago Walmsley
Desde el principio Dios se ha dado a conocer mediante muchos nombres y títulos.
La Biblia comienza con la declaración:
“En el principio creó Dios (Elohim) los cielos y la tierra”.
“Elohim” es un nombre plural, a diferencia de “Jehová” que es singular.
Con frecuencia, estos dos nombres se juntan en la combinación “Jehová Elohim”.
Esta unión de nombres, singular y plural, es una de las primeras revelaciones dadas por Dios para indicar que hay un solo Dios conocido en una pluralidad de personas.
Esta verdad se confirma a través de toda La Biblia, culminando en la revelación plena del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo.
Los apóstoles, al traducir “Jehová”, emplearon uniformemente en su texto griego la palabra “Kúrios”, que quiere decir “Señor”.
Así, “Preparad camino a Jehová” (Is.40:3) en el hebreo, llegó a ser “Preparad el camino del Señor -Kúrios--” (Mt.3:3), en el griego.
En ésta, como en 133 referencias más, “Jehová” fue vertido al griego empleándose la palabra “kúrios” como equivalente del Nombre sagrado.
La misma palabra “kúrios” se ha usado más de 500 veces con referencia al Señor Jesucristo.
Los apóstoles no han escrito ni una sola palabra para indicar que “kúrios” pudiera tener diferencia alguna de sentido, o de aplicación, en ninguna de estas porciones, las cuales suman más de 600 en total. Para ellos, la misma palabra servía para referirse indistintamente a Jehová, al Padre o al Señor Jesucristo.
Algunos niegan que Jesús sea Jehová.
Pero, ni la traducción “Nuevo Mundo”, con todo y ser mala, basta para encubrir que Jesús, verdaderamente, es Jehová.
Como prueba de ello, las citas que siguen fueron tomadas de esa versión.
El Libro de Apocalipsis dice, en el cap. l:
“Viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron”.
Obviamente El que viene es el Señor, el traspasado.
Así empieza el libro.
Al llegar al último capítulo, se encuentran tres referencias a esta misma persona.
“¡Mira! vengo pronto”, y el que habla se identifica como “Jehová”, vs. 6 y 7. “¡Mira! vengo pronto”, se pronuncia por “el Alfa y la Omega, el primero y el último, el principio y el fin”, según los vs. 12 y 13.
Por tercera vez se dice, “Sí; vengo pronto”, a la cual se responde “¡Amén! Ven, Señor Jesús”, v.20.
Las referencias citadas demuestran que el Señor Jesús es el Alfa y la Omega, y el mismo Jehová.
Ciertísimamente, Jesús es Jehová.
La versión “Nuevo Mundo” dice, “Es a Jehová tu Dios que tienes que adorar, y es a él solo que tienes que rendir servicio sagrado”, Lucas 4:8.
La palabra adorar (proskuneo) se usa 60 veces en el Nuevo Testamento.
De éstas hay un total de 14 veces cuando se rinde adoración al Señor Jesucristo.
Es notable que la misma palabra se emplee de Cornelio, cuando cayó a los pies de Pedro para adorarle, pero Pedro no aceptó su adoración. Dijo Pedro:
“Levántate; yo mismo también soy hombre”.
Sucedió lo mismo en el caso de Juan, el apóstol, cuando adoró al ángel.
Dice la versión “Nuevo Mundo”:
“Y cuando hube oído y visto, caí para adorar delante de los pies del ángel que me había estado mostrando estas cosas. Pero me dice: ¡Ten cuidado! ¡No hagas eso!”. Ni Pedro ni el ángel estaban dispuestos a aceptar ninguna adoración, pero el Señor Jesucristo la aceptó en muchas ocasiones.
Ante la Escritura:
“Es a Jehová tu Dios que tienes que adorar”, no puede quedar duda de que Jesucristo es Jehová y el verdadero Dios.
En Romanos 9:28,29; 10:13,16; 11:3,34 la Biblia “Nuevo Mundo” traduce “kúrios” como “Jehová”.
Altera, intencional y tendenciosamente, su traducción de “kúrios” en Ro.10:9.
De otra manera habría sido: Porque si declaras públicamente aquella “palabra en tu propia boca”, que Jesús es Jehová... serás salvado”.
Tal declaración de fe no la hace ningún Ruselista, pero sí la hace todo verdadero creyente en Cristo.
Esta misma confesión de fe es fruto de la presencia del Espíritu Santo en el creyente, y acredita su servicio, según 1 Cor. 12:3. “Nadie puede decir: ¡Jesús es (Kúrios) Jehová! salvo por el Espíritu Santo”.
Ningún servicio es aceptable a Dios sino aquel que se basa en esta confesión.
Y, que nadie podrá esconderse en el sepulcro, o la supuesta aniquilación, para no hacer esta confesión es evidente, pues, dice:
“Para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en el cielo y de los que están sobre la tierra y de los que están debajo de la tierra, y reconozca abiertamente toda lengua que Jesucristo es (Kúrios) Jehová para la gloria de Dios Padre”, Fil. 2:10-11.
No hay salvación, ni servicio aceptable a Dios, ni escondedero de Su presencia, para aquellos que niegan que “Jesús es Jehová”.
Fue el mismo Señor Jesucristo que dijo, con profundo pesar en el alma, pero con toda claridad: ¡Guías ciegos, que coláis el mosquito, y tragáis el camello!
Ojalá que los lectores, que son miembros de la Watchtower Society … Organización comercial, nacida en Estados Unidos, que se opone a las transfusiones de sangre para salvar la vida de un niño, porque encubiertamente están reviviendo el culto a Moloc, ojalá, digo, sean redargüidos y se vuelvan a Cristo como su único y suficiente Señor y Salvador.
Que el Señor prospere su Palabra.