Una cosa es ser llamados, y otra es serlo. O sea, como ya señalé oportunamente, una cosa es ser llamado Emperador, y otra es serlo. Jesús es Dios por el simple hecho de haber creado los cielos y la tierra, y todas las cosas, y es el Autor de la vida. Esa es la gran diferencia que te niegas reconocer.
Cuidado.
Unigénito NO significa “otro ser.”
Unigénito significa “uno,” “único,” “único en su género.”
La expresión literal de Jesús fue, “Yo y el Padre uno somos” en base a lo cual fue acusado de blasfemia porque, siendo hombre, se declaraba Dios. A lo cual Jesús preguntó y dijo, “¿Vosotros decís que blasfemo porque dije: «Yo soy el Hijo de Dios»? Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis; pero si las hago, aunque a mí no me creáis, creed las obras; para que sepáis y entendáis que el Padre está en mí y yo en el Padre” (Jn 10:30-38). O sea, en síntesis, “Yo y el Padre uno somos para que sepáis y entendáis que el Padre está en mí y yo en Él.” Como verás, todo el conflicto giraba en torno a la Deidad de Jesús.