Nuevamente yerras, fiel a los motivos anticristianos de los tJ.
Juan explica que el Verbo de Dios (que es eterno y es divino) fue hecho carne y anduvo entre nosotros.
Juan da testimonio de haberle reconocido, cono el que es, el que era, el que ha de venir, el que vive y estuvo muerto, el Todopoderoso.
Por esto dije, digo y sostengo que:
Lo que obviamente los anticristianos en su rabia contra la deidad el Hijo, invariablemente querrán negar y distorcionar todo para su propio mal, alegando - entre otros fallidos recursos- que "fue OSO el que lo dice, no la escritura".
Pamplinas!
Lo que he dicho esta escrito, y muy claro, son palabras eternas las que escribió Juan (no OSO) y que jamás se podrán borrar.
Así que dejen de mentir.
Mira lo que dice Juan tocante al verbo de Vida, al Autro d ela vida, al Autors y consumador d ela fe, al Aitor de eterna salvación, a la luz que es Jesús:
Jn 1:1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
1:2 Este era en el principio con Dios.
1:3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
1:4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
¿Que parte no te conviene creer?
Mira:
Jn1:9 Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo.
1:10 En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció.
1:11 A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.
Dios es Luz, Cristo es la Luz Verdadera que alumbra a todo hombre; es literalmente Dios en nosotros.
¿Que parte eres incapaz de creer?
Mira y lee:
Jn 1:14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
1:15 Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo.
1:16 Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia.
1:17 Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo.
1:18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.
¿Porque razón, no lo crees?
Ap 1:7 He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén.
1:8 Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.
1:9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.
1:10 Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta,
1:11 que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Efeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea.
1:12 Y me volví para ver la voz que hablaba conmigo; y vuelto, vi siete candeleros de oro,
1:13 y en medio de los siete candeleros, a uno semejante al Hijo del Hombre, vestido de una ropa que llegaba hasta los pies, y ceñido por el pecho con un cinto de oro.
1:14 Su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve; sus ojos como llama de fuego;
1:15 y sus pies semejantes al bronce bruñido, refulgente como en un horno; y su voz como estruendo de muchas aguas.
1:16 Tenía en su diestra siete estrellas; de su boca salía una espada aguda de dos filos; y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza.
1:17 Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último;
1:18 y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.
Si, es el mismo, Jesucristo; el que vive y estuvo muerto, al que traspasaron, el Todopoderoso.
Es pues Juan quien nos revela a los cristianos quien es Jesús: el Todopoderoso
Así que hazme el favor de no tener la desfatachez de decir que "no es cierto" y que es "OSO" quien lo dice, en un argumento ad homien.
OSO lo cree, lo afirma y lo comparte, no te confundas.