¿Cómo Salvador para continuar con tu Baháʼu'lláh?
Debes recibirlo también como tú Señor.
Mi Señor y Salvador es uno, pero ha nacido, muerto y retornado varias veces.
Mi Señor y Salvador es el mismo que subió al Monte Sinaí, el que se iluminó bajo el árbol Bodhi, el que fue al desierto para ser tentado, el que recibió el llamado de Dios en el Monte Hira, y el que se retiró a las montañas de Kurdistán para preparar su misión .
Es el mismo que ha sido llamado El Primer Hombre, El Amigo de Dios, El Iluminado, El que Vio a Dios cara a cara, El Hijo de Dios, El Profeta, La Puerta, y La Gloria de Dios.
Aquel por quien todas las cosas fueron creadas. El Verbo de Dios. El Logos, La Puerta, el Punto Primordial del Amanecer.
Mi Señor y Salvador se ha expresado en hebreo, egipcio, sánscrito, farsi, arameo y árabe. Su piel ha sido morena, blanca y cobriza. Ha cabalgado caballos y camellos. Ha viajado largas distancias, y no ha salido de su pequeña provincia. Ha dirigido ejércitos y abrazado a los niños. Ha sido perseguido, encarcelado, crucificado, desterrado y fusilado.
Y en todos los casos, aún toca a mi puerta, llama.... y cada que le abro, entra y cena conmigo.