Juan1981;n3192746 dijo:
Si lo piensa detenidamente, amigo, la resurrección, aceptando los términos que la presentas (literalmente), “fue” algo prodigioso pero no público o manifiesto. Lo vio la Magdalena y pocos más, muy pobre bagaje. Además, si Jesús pretendía imponer sus ascendente celestial a través de los milagros ¿por qué esperar a ser ajusticiado? No hubiera sido más inteligente antes, en vida.
Parece claro que, como manifestaba Jesús, aborrecía los milagros y, en tanto tales, nadie sería cristiano a día de hoy ya que en su época existía un mercado en competencia de creencias paganas, cuyos dioses, realizaron prodigiosos mucho más llamativos y asombrosos.
Jesús advierte:
Porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas que harán grandes señales y milagros…mateo 24:24
Y los falsos profetas también pueden hacer milagros por tanto no sirve para distinguirlos:
Aquí tienes una confirmación de que sus los discípulos lo reconocieron por su palabra sagrada y sus enseñanzas provenientes de DIOS, y no por las señales auspiciadas por la profecía o los milagros:
Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os saciasteis. Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece, la cual el Hijo del Hombre os dará; porque a éste señaló Dios el Padre. Juan 6:25-27
Es gracias al poder de DIOS emanado y transmitido a través de estos santos personajes es lo que permita que cada hombre en cada época ascienda a las alturas de Fe y realce espiritual. Es La palabra creativa, el poder espiritual que insufla a través de ellas. Esta palabra y el ejemplo de sus vidas, de entrega, de autoridad, de sacrificio, de santidad,… de los santos enviados purifican el corazón de las impurezas mundanas para que resplandezcan los atributos de DIOS con el espíritu de una fe renacida en los hombres.
En cuanto que no hay otro hombre no es cierto en los términos que lo expresas, reitero:
“Mirad a Mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque Yo soy Dios, y no hay más” (Isaías 45:22)
Es bien claro lo que dice: mirarme a mí, Isaías, y eres salvo. Además asegura que Él es Dios. Tú exegesis naufraga con este versículo, hemos de arrancarlo de la Biblia? Es evidente que adquiere sentido cuando consideramos que, los enviados de Dios, son Dios cuando Dios habla por ellos y transmite su palabra, enseñanzas y mandatos. Aquellos que reconocen, aceptan y obedecen de plena Fe obtienen la complacencia de DIOS, ello supone la Salvación. Y enviados de DIOS a lo largo de los tiempos ha habido muchisimos, algunos perdidos en los registros de la historia.
Un saludo
