Mira nomás, este tema es de marzo de 2017. Es increíble como el ¨calvinismo¨ todavía moviliza dentro del evangelicalismo.
Me dá la sensación de que el auge del calvinismo desde los años 2000 para acá fué la penúltima moda evangélica, como una reacción contra la locura carismática en la que se venía cayendo y generalizando desde los ochentas, por lo menos en latinoamérica. Se puso de moda ser ¨reformado¨, se puso de moda Spurgeon, se puso de moda balbucear algunas palabritas en latín. Y así como se puso de moda, pasó de moda.
Y es increíble porque el calvinismo es una distorsión tanto bíblica como moral :
Biblica : el calvinismo directamente desconoce la voluntad de salvación universal, que en la Biblia es clara.
El calvinismo expresa una doble predestinación, que es antibíblica.
De donde se concluye a Dios como hacedor e inclinado al mal y a la perdición arbitraria de algunos.
De lo que deduce que la fé y el arrepentimiento es irrelevante a los fines de la salvación y la perdición.
Moral : me refiero a los neocalvinistas, aquellos que se desligan de Calvino y reducen su calvinismo a los cinco puntos ¨calvinistas¨ vs. los cinco puntos ¨arminianos¨. Pero resulta que ni Arminio ni los arminianos dijeron lo que los ¨calvinistas¨ dicen que dijeron...
Entonces porqué aún hoy, el calvinismo histórico -que es antibíblico- y el neocalvinismo de los cinco puntos vs cinco puntos -que es descaradamente mentiroso y difamador- marque todavía algo de agenda dentro del evangelicalismo? Como es posible que haya negación al respecto? Como se puede predicar de la Gracia si se miente descaradamente? Es raro, muy raro.
Y a la vez muy sencillo de explicar: el calvinismo sirve para distraer, para satisfacer el ego del que se asume calvinista como del anticalvinista, para anatematizar recíprocamente e incluso generar dinero -me refiero al marketing calvinista obvio-. Exactamente como todo, como absolutamente todo dentro del evangelicalismo.