LA FALACIA DE LOS MUERTOS QUE TIENEN LIBRE ALBEDRÍO AL DESCUBIERTO
Dicen que el pez muere por su propia boca, y algunos arminianos en su afán por deshacerse de verdades bíblicas que los despojan de toda posibilidad de gloriarse a sí mismos, sacan pasajes fuera de contexto, no llegando a percatarse, de que lo que para ellos es una “prueba irrefutable” de que el hombre tiene “libre albedrío”, en verdad los hunde aún más en un profundo mar de contradicciones.
Por ejemplo, hemos visto en algunos muros que hay quienes citan los siguientes pasajes como prueba argumental de que a pesar de estar muerto espiritualmente el hombre aún tiene la capacidad de dar el primer paso hacia la salvación:
Juan 11:25 Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
Juan 11:26 Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?
Juan 5:25 De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que la oyeren vivirán.
Lo que para esta gente son pruebas irrefutables de que el hombre tiene “libre albedrío”, no son más que textos sacados fuera de contexto, que cuando se los analiza no solo en su contexto sino a la luz de todo el cuerpo de verdad referente a la doctrina de la total incapacidad, se llega a la inequívoca conclusión de que esos textos prueban todo lo contrario.
A continuación vamos a analizar Juan 11:25-26 , y como ya dijimos, veremos que como es habitual en la “teología” arminiana , se tiene que apelar a sacar textos fuera de contexto, para así hacerle decir a esos textos lo que en verdad no dicen.
¿El que Jesús haya dicho “el que cree en mi aunque este muerto vivirá”, ¿es prueba de que el hombre tiene libre albedrío?
Ahora veamos el contexto donde Jesús declaró esas palabras que se presentan como prueba argumental del supuesto libre albedrío:
Juan 11:23 Jesús le dijo: Tu hermano resucitará.
Juan 11:24 Marta le dijo: Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día postrero.
Juan 11:25 Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
Juan 11:26 Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?
Como todos pueden ver aquí el contexto de donde extraen el “argumento irrefutable”, es el pasaje de la resurrección de Lázaro. Ahora bien, para quienes rechazan la doctrina de la total depravación, esto constituye una “prueba irrefutable” de que aunque el hombre esté muerto espiritualmente, aun así, puede venir a Cristo si así lo determina por un acto de la voluntad. AHORA LO CIERTO ES QUE EL CONTEXTO ES UNA PRUEBA IRREFUTABLE, DE QUE A NO SER QUE ALGUIEN SEA RESUCITADO POR UN MILAGRO OPERADO POR DIOS, JAMÁS PODRÍA SALIR DE UNA TUMBA COMO EN ESTE CASO LO HIZO LÁZARO, Y DE LA MISMA MANERA , UN MUERTO ESPIRITUAL JAMÁS PODRÍA SALIR DE LA TUMBA DEL PECADO Y DE LA SEPARACIÓN EN QUE SE ENCUENTRA, A NO SER QUE PRIMERO SEA RESUCITADO MEDIANTE LA REGENERACIÓN.
Ahora vamos analizar Juan 5:25, que también es presentado como prueba de que el hombre tiene “libre albedrío”, y nuevamente nos encontraremos con que se está sacando un texto fuera de su contexto para hacerle decir lo que el texto no dice:
Juan 5:25 De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que la oyeren vivirán.
A continuación citaremos el contexto de donde ha sido aislado ese versículo para hacerle decir lo que en verdad el versículo no dice.
Este texto debe interpretarse no solo a la luz de todo el contexto sino también se lo debe interpretar a la luz de otras declaraciones del Señor Jesucristo:
Juan 5:21 Porque como el Padre levanta a los muertos, y les da vida, así también el Hijo a los que quiere da vida.
Juan 5:22 Porque el Padre a nadie juzga, sino que todo el juicio dio al Hijo,
Juan 5:23 para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que le envió.
Juan 5:24 De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.
Juan 5:25 De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que la oyeren vivirán.
Juan 5:26 Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha dado al Hijo el tener vida en sí mismo;
Juan 5:27 y también le dio autoridad de hacer juicio, por cuanto es el Hijo del Hombre.
Juan 5:28 No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz;
Juan 5:29 y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.
La primera conclusión que se hace evidente al tener en perspectiva el contexto , considerando el versículo 21: “así también el Hijo a los que quiere da vida”, es que este pasaje de las Escrituras está en perfecta sintonía con lo que nos presenta el apóstol Pablo en Romanos Cap 9, referente a la elección incondicional, es decir, que no depende del que quiere ni del que corre sino de quien Dios tiene misericordia. Pero además la declaración de Juan 5:21 está en perfecta armonía con otra declaración del Señor Jesucristo que habla con contundente claridad sobre la elección incondicional, veamos:
Mat 11:27 Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar.
Es decir, los muertos que recibirán vida, la recibirán no porque ellos tengan la capacidad de creer aún estando muertos, sino que recibirán la vida por un acto de la gracia soberana de Dios, que da vida a todos aquellos, que según el puro afecto de la voluntad de Dios, han sido escogidos para ser resucitados espiritualmente mediante la regeneración.
Todo lo anteriormente expuesto esta también en perfecta armonía con la verdad escritural que enseña que la regeneración es un acto 100 % de Dios en donde el hombre no tiene participación alguna:
Juan 1:12 Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;
Juan 1:13 los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.
¿Por qué será que quienes niegan la elección y el llamamiento eficaz, nunca, nunca, mencionan el versículo 13, sino sólo el 12, PUES SENCILLAMENTE SE NIEGA PORQUE AHÍ SE DEJA EXPRESAMENTE ACLARADO QUE EL ACTO DE RECIBIR A CRISTO POR LA FE TIENE QUE VER CON UN ACTO DE LA GRACIA SOBERANA DE DIOS . Porque si bien es el hombre el que cree y recibe a Cristo, esto no es sino el efecto de una causa y esa causa es Dios.
Y ES POR ESTO QUE A FALTA DE UNA VEZ, TRES VECES SE ENFATIZA QUE LA VOLUNTAD DEL HOMBRE NADA TIENE QUE VER CON SER ENGENDRADOS COMO NUEVAS CRIATURAS EN CRISTO.
DICE: “LOS CUALES NO SON ENGENDRADOS DE SANGRE, NI DE VOLUNTAD DE CARNE, NI DE VOLUNTAD DE VARÓN, SINO DE DIOS”.
NO SE TRATA DE ROBOTS COMO DICEN LOS ARMINIANOS, SE TRATA DE NUEVAS CRIATURAS EN CRISTO, QUE AHORA TIENEN LA CAPACIDAD DE VER EL REINO DE DIOS.
SE TRATA DE NUEVAS CRIATURAS EN CRISTO, QUE AHORA PUEDEN ENTENDER LAS COSAS DEL ESPÍRITU DE DIOS.
SE TRATA DE NUEVAS CRIATURAS EN CRISTO, QUE AHORA PUEDEN AMAR A DIOS
REPITO: NUEVAS CRIATURAS EN CRISTO, NO ROBOTS; NUEVAS CRIATURAS EN CRISTO, QUE HAN SIDO ENGENDRADAS POR UN ACTO DE LA GRACIA SOBERANA DE DIOS.
2Co 5:17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
2Co 5:18 Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación;
Y AQUÍ TAMBIÉN TENEMOS QUE OBSERVAR QUE SISTEMÁTICAMENTE SE OCULTA LA VERDAD REVELADA EN EL VERSÍCULO 18 QUE DICE: “Y TODO ESTO PROVIENE DE DIOS”; SE OCULTAN ESTAS VERDADES , PARA ASÍ NEGAR DOCTRINAS FUNDAMENTALES DE LA FE CRISTIANA COMO LA ELECCIÓN Y LA GRACIA IRRESISTIBLE DE LA CUAL SON OBJETO LOS ELEGIDOS.
C o n c l u s i ó n: Lo único que puede levantar a un muerto físico de la tumba es un acto de la omnipotencia de Dios , de la misma manera lo único que puede sacar a un muerto espiritual de la tumba del pecado y la separación, es la Gracia irresistible o llamamiento eficaz del que son objeto los elegidos.
Soli Deo Gloria.