Otra vez con su misma idiotez??
Está usted igual que las mujercillas cargadas de pecados, leemos:
2Ti 3:6 Porque de éstos son los que se meten en las casas y llevan cautivas a las mujercillas cargadas de pecados, arrastradas por diversas concupiscencias.
2Ti 3:7 Estas siempre están aprendiendo, y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad.
LA MALDAD DEL IDÓLATRA CATÓLICO
LAS FIGURAS DE LAS COSAS CELESTIALES
Heb 9:22 Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.
Heb 9:23 Fue, pues, necesario que las figuras de las cosas celestiales fuesen purificadas así; pero las cosas celestiales mismas, con mejores sacrificios que estos.
Tales figuras poseen un contenido simbólico que relaciona al Hijo de Dios con su Sacrificio Expiatorio.
1. LA SERPIENTE DE BRONCE
Núm 21:8 Y Jehová dijo a Moisés: Hazte una serpiente ardiente, y ponla sobre una asta; y cualquiera que fuere mordido y mirare a ella, vivirá.
Núm 21:9 Y Moisés hizo una serpiente de bronce, y la puso sobre una asta; y cuando alguna serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de bronce, y vivía.
El propósito de la enseñanza del Espíritu Santo sobre el significado de izar una serpiente de bronce para dar salvación al que fuese mordido por una serpiente real, no es para justificar la construcción de imágenes, para adorarlas, como hace el diablo con el alma que le pertenece.
Esta enseñanza ha sido calculada por Dios mismo, para dar paz a las almas ansiosas, que anhelan el perdón de sus pecados y la reconciliación con el Señor, como ocurrió en el caso de Nicodemo.
El ser humano, en el desierto de este mundo, nace con el veneno del pecado inoculado por la serpiente antigua en el jardín del Edén, como está escrito:
Rom_5:12 Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.
De manera que la misma muerte se convierte en un testigo delante de la Justicia de Dios, dando testimonio que somos pecadores.
Nuestro bendito Señor expuso a Nicodemo claramente el camino de Dios en gracia con los hombres como pecadores arruinados.
El bronce es símbolo de Juicio, tal como enseña la figura del "Altar de Bronce" donde una víctima inocente era sacrificada por los pecados del ofrendante.
Y la serpiente es símbolo del diablo (Ap.12:9)
En figura, el hombre que responde al llamado del Salvador entra por la puerta del Tabernáculo de reunión en el desierto y que es lo primero que ve en el atrio?
El altar de bronce.
Sabe entonces que una víctima santa, inocente y sin mancha fue consumida allí para que no lo fuera él mismo.
En el caso de la serpiente de bronce, el testimonio de Moisés, por el Espíritu en el Antiguo Testamento, y la explicación de Cristo mismo en el Nuevo, imprimen al tema el más profundo interés e importancia.
Que se iba a imaginar el antiguo legislador, cuando levantó la serpiente de bronce para que el israelita moribundo pudiera contemplarla y vivir, que estaba siguiendo ese evento sin igual, cuando Cristo, con un amor incomparable, fue levantado voluntariamente sobre la tierra, en la Cruz para la salvación de los pecadores perdidos.
Pero así fue, como el Señor mismo testificó conmovedoramente, cuando dijo:
Jua 3:14 Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado,
Jua 3:15 para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
El magisterio católico romanista, como buen siervo del diablo que es, ha continuado con la misma tendencia a la idolatría que tuvo el pueblo de Israel, pues ellos conservaron la serpiente de bronce durante más de setecientos años.
Durante éste período, el símbolo se hizo ídolo, tomando el lugar de Dios y llevando al pueblo a la apostasía. A la serpiente se le llegó a quemar incienso como la diosa Nehustán, cuyo nombre en hebreo significa ídolo de bronce.
Hasta que surgió un hombre que se dispuso a desafiar a la tradición idolátrica y a restablecer el culto al Único y verdadero Dios, por lo cual más tarde se le consideraría como el mejor rey de Judá de todos los tiempos (2Reyes 18:5).
Ese hombre fue Ezequías. Tan pronto asumió el trono, derribó los lugares altos, quebró las imágenes, y cortó los símbolos de Asera, así como también hizo pedazos la serpiente de bronce que había hecho Moisés, leemos:
2Re_18:4 El quitó los lugares altos, y quebró las imágenes, y cortó los símbolos de Asera, e hizo pedazos la serpiente de bronce que había hecho Moisés, porque hasta entonces le quemaban incienso los hijos de Israel; y la llamó Nehustán.
Cuánta falta hace en este tema hombres con el espíritu de Ezequías. Pero lo que hallamos son foristas defensores de la idolatría de su magisterio, como es el caso de Jima40, quién en su infernal ignorancia se burla de Dios, leemos:
2. LOS QUERUBINES DEL ARCA
Éxo 25:18 Harás también dos querubines de oro; labrados a martillo los harás en los dos extremos del propiciatorio.
Éxo 25:19 Harás, pues, un querubín en un extremo, y un querubín en el otro extremo; de una pieza con el propiciatorio harás los querubines en sus dos extremos.
Éxo 25:20 Y los querubines extenderán por encima las alas, cubriendo con sus alas el propiciatorio; sus rostros el uno enfrente del otro, mirando al propiciatorio los rostros de los querubines.
Esta mirada hacia el propiciatorio de los dos querubines de oro, cobra singular importancia, cuando en el día de la Expiación Nacional por los pecados del pueblo, la sangre de una víctima inocente había sido esparcida sobre el propiciatorio, leemos:
Éxo 25:21 Y pondrás el propiciatorio encima del arca, y en el arca pondrás el testimonio que yo te daré.
El propiciatorio era una especie de tabla de oro puro sobre el cajón o arca, y el testimonio que Dios le dio estaba formado por las tablas de la ley, una copa que contenía el maná del cielo, dado en el desierto, y la vara de Aarón que reverdeció. Todas estas cosas nos habla de Cristo en sus debidos contextos simbólicos.
Éxo 25:22 Y de allí me declararé a ti, y hablaré contigo de sobre el propiciatorio, de entre los dos querubines que están sobre el arca del testimonio, todo lo que yo te mandare para los hijos de Israel.
La voz de Dios se escuchaba allí, no sin sangre.
Tenía que, el Sumo Sacerdote, haber hecho expiación previa por sí mismo y por su casa (Lev.16:6,11) y luego por el pecado del pueblo (Lev.16:15)
De manera que los rostros de los dos Querubines de oro, uno en un extremo y otro en el otro extremo, ambos, apuntaban hacia la sangre de la ofrenda sacrificada por los pecados del pueblo.
Esto es algo muy solemne, solo apto para mentes reverentes, el idólatra, nada tiene que hacer aquí, leemos:
Jua 20:11 Pero María estaba fuera llorando junto al sepulcro; y mientras lloraba, se inclinó para mirar dentro del sepulcro;
Jua 20:12 y vio a dos ángeles con vestiduras blancas, que estaban sentados el uno a la cabecera, y el otro a los pies, donde el cuerpo de Jesús había sido puesto.
El propósito por el cual Dios mandó hacer dos Querubines de oro mirando hacia el Propiciatorio, se había cumplido.
LA OFRENDA SANTÍSIMA PUESTA SOBRE EL ALTAR DE LA CRUZ.... HABÍA RESUCITADO!!
Jua 20:13 Y le dijeron: Mujer, ¿por qué lloras? Les dijo: Porque se han llevado a mi Señor, y no sé dónde le han puesto.
Jua 20:14 Cuando había dicho esto, se volvió, y vio a Jesús que estaba allí; mas no sabía que era Jesús.
Jamás en el corazón del Señor, hubo la intención que se adorase un pedazo de yeso, esto lo hace es el diablo, como jefe supremo del catolicismo romano.
Que el Señor bendiga su Palabra y abra el entendimiento de estos idólatras, y escapen de lazo del diablo donde están cautivos a voluntad de él.