Re: !EL FIN DE LA LEY!
¿Qué dijo David acerca de la ley?
Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado; Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche.
El Espíritu Santo nos hace ver a través de la escritura, que el que tiene la ley en su corazón es bienaventurado.
Levítico 18:5
"Por tanto, guardaréis mis estatutos y mis leyes, por los cuales el hombre vivirá si los cumple; yo soy el SEÑOR."
Romanos 10:4,5.
Porque Cristo es el fin(la meta o el objetivo) de la ley para justicia a todo aquel que cree. Porque Moisés escribe que el hombre que practica la justicia que es de la ley, vivirá por ella.
Si Cristo es el objetivo de la ley, como dice Pablo: "la ley nos lleva a Cristo", entonces ¿Por qué quitaría Pablo la ley?
Sabemos que la ley de Dios de la que habló David, es la misma que Dios dio para el hombre(el judío y el gentil), pues por ella vivirá el hombre.
¿Qué dijo Jesús acerca de la ley?
No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido. De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos. Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.
Jesús dijo que la ley de Dios era hasta que pasen el cielo y la tierra; pero que los profetas habían profetizado cosas acerca de la ley (la ley y los profetas), y que cualquiera que enseñe lo contrario es estimado como pequeño en los cielos y que no entrará en el reino de los cielos; pues si su justicia no es mayor que el apoyo de los fariseos, no entrarán.
En otras palabras, Jesús enseñó que la ley de Dios que los fariseos enseñaban, está vigente; y que los que no tengan a Cristo en su corazón ni observen la justicia de los fariseos, no entrarán en el reino de los cielos. Está dicho por Jesús.
Sabiendo que ya no hay judío ni griego, ni gentiles; tengamos en cuenta que lo que dijo Jesús, lo aplicó para judíos y gentiles. Dios no hace diferencia entre el uno o el otro. Si alguien dice lo contrario a lo escrito acerca de la ley y a lo que dijo Jesús en su enseñanza, sea anatema. Porque toda ley está vigente y debe de cumplirse.
Pablo dijo que el pecado lo mató. Esa ley se ha cumplido, para que Pablo viva en Cristo Jesús. Jesús en el corazón, es nuestra justicia contra la condenación por la ley, y es nuestra paz con Dios, al poner su ley en nuestro corazón. Jesús magnifica la ley diciendo: "Ni siquiera pienses en el adulterio en tu corazón, porque esto conduce al pecado físico".
Mateo 5:28.
El mandamiento dice: No cometerás adulterio. Pero Jesús fue a lo que hay en tu corazón. Eso es lo que significa tener a Jesús en tu corazón. Que la ley de Dios forme parte de tu persona, sentimientos y de tu vida cotidiana.
Jesús enseñó que la justicia del fariseo era mala, pues los fariseos enseñaban mandamientos de hombre. Cosas que se inventaban que parecían buenas. Veamos algunas de ellas:
Fariseos:
Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente.
Jesús:
Mas yo os digo: No resistáis con mal; antes a cualquiera que te hiriere en tu mejilla diestra, vuélvele también la otra; y al que quisiere ponerte a pleito y tomarte tu ropa, déjale también la capa; y a cualquiera que te cargare por una milla, ve con él dos. Al que te pidiere, dale; y al que quisiere tomar de ti prestado, no se lo rehuses.
Fariseos:
Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo.
Jesús:
Mas yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os calumnian y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos; que hace que su sol salga sobre malos y buenos, y llueva sobre justos e injustos. Porque si amareis a los que os aman, ¿qué salario tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si abrazareis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los publicanos? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.
Esta es la verdadera interpretación del evangelio. La interpretación de Pablo es basada en estos estatutos de Jesús. Pero a Pablo se le adjudica de que ha enseñado que somos libres del mandamiento del sábado que está en el decálogo, razón por la cual hay tanta confusión acerca de la ley de Dios. Es la insistencia en obedecer al hombre antes que a Dios la que ha generado debates acerca de la ley.
El hombre no tiene problemas en enseñar los diez mandamientos como la ley de Dios. El problema reside en que en el decálogo está el mandamiento del sábado, y el hombre no quiere obedecer a Dios, sino al papado, el cual exige adoración y se auto adjudica la autoridad de cambiar los tiempos y la ley.
Esto es lo que dice en el canon y tradición, Página 263:
"La autoridad de la Iglesia, por tanto, no podría estar obligada a la autoridad de las Escrituras, porque la Iglesia ha cambiado ... el sábado al domingo, y no por mandato de Cristo, sino por su propia autoridad." (Canon y Tradición, p. 263)
Este es un hecho que la ICAR sostiene. Las demás dicen que no es así, mas no tiene con qué comprobar lo contrario. La llamada teología del día del Señor fue inventada por la ICAR.
Es importante que creamos en Dios antes que en los hombres. Ya hemos visto y leído lo que Dios dice en las escrituras y nada ha sido sacado de contexto, sino la pura palabra de Dios ha sido citada, con su significado directo. Pero habrá quizás alguien que la trate de interpretar para su conveniencia. NO NECESITA INTERPRETACIÓN SINO COMPRENSIÓN.
Bendiciones.
¿Qué dijo David acerca de la ley?
Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado; Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche.
El Espíritu Santo nos hace ver a través de la escritura, que el que tiene la ley en su corazón es bienaventurado.
Levítico 18:5
"Por tanto, guardaréis mis estatutos y mis leyes, por los cuales el hombre vivirá si los cumple; yo soy el SEÑOR."
Romanos 10:4,5.
Porque Cristo es el fin(la meta o el objetivo) de la ley para justicia a todo aquel que cree. Porque Moisés escribe que el hombre que practica la justicia que es de la ley, vivirá por ella.
Si Cristo es el objetivo de la ley, como dice Pablo: "la ley nos lleva a Cristo", entonces ¿Por qué quitaría Pablo la ley?
Sabemos que la ley de Dios de la que habló David, es la misma que Dios dio para el hombre(el judío y el gentil), pues por ella vivirá el hombre.
¿Qué dijo Jesús acerca de la ley?
No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido. De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos. Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.
Jesús dijo que la ley de Dios era hasta que pasen el cielo y la tierra; pero que los profetas habían profetizado cosas acerca de la ley (la ley y los profetas), y que cualquiera que enseñe lo contrario es estimado como pequeño en los cielos y que no entrará en el reino de los cielos; pues si su justicia no es mayor que el apoyo de los fariseos, no entrarán.
En otras palabras, Jesús enseñó que la ley de Dios que los fariseos enseñaban, está vigente; y que los que no tengan a Cristo en su corazón ni observen la justicia de los fariseos, no entrarán en el reino de los cielos. Está dicho por Jesús.
Sabiendo que ya no hay judío ni griego, ni gentiles; tengamos en cuenta que lo que dijo Jesús, lo aplicó para judíos y gentiles. Dios no hace diferencia entre el uno o el otro. Si alguien dice lo contrario a lo escrito acerca de la ley y a lo que dijo Jesús en su enseñanza, sea anatema. Porque toda ley está vigente y debe de cumplirse.
Pablo dijo que el pecado lo mató. Esa ley se ha cumplido, para que Pablo viva en Cristo Jesús. Jesús en el corazón, es nuestra justicia contra la condenación por la ley, y es nuestra paz con Dios, al poner su ley en nuestro corazón. Jesús magnifica la ley diciendo: "Ni siquiera pienses en el adulterio en tu corazón, porque esto conduce al pecado físico".
Mateo 5:28.
El mandamiento dice: No cometerás adulterio. Pero Jesús fue a lo que hay en tu corazón. Eso es lo que significa tener a Jesús en tu corazón. Que la ley de Dios forme parte de tu persona, sentimientos y de tu vida cotidiana.
Jesús enseñó que la justicia del fariseo era mala, pues los fariseos enseñaban mandamientos de hombre. Cosas que se inventaban que parecían buenas. Veamos algunas de ellas:
Fariseos:
Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente.
Jesús:
Mas yo os digo: No resistáis con mal; antes a cualquiera que te hiriere en tu mejilla diestra, vuélvele también la otra; y al que quisiere ponerte a pleito y tomarte tu ropa, déjale también la capa; y a cualquiera que te cargare por una milla, ve con él dos. Al que te pidiere, dale; y al que quisiere tomar de ti prestado, no se lo rehuses.
Fariseos:
Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo.
Jesús:
Mas yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os calumnian y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos; que hace que su sol salga sobre malos y buenos, y llueva sobre justos e injustos. Porque si amareis a los que os aman, ¿qué salario tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si abrazareis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los publicanos? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.
Esta es la verdadera interpretación del evangelio. La interpretación de Pablo es basada en estos estatutos de Jesús. Pero a Pablo se le adjudica de que ha enseñado que somos libres del mandamiento del sábado que está en el decálogo, razón por la cual hay tanta confusión acerca de la ley de Dios. Es la insistencia en obedecer al hombre antes que a Dios la que ha generado debates acerca de la ley.
El hombre no tiene problemas en enseñar los diez mandamientos como la ley de Dios. El problema reside en que en el decálogo está el mandamiento del sábado, y el hombre no quiere obedecer a Dios, sino al papado, el cual exige adoración y se auto adjudica la autoridad de cambiar los tiempos y la ley.
Esto es lo que dice en el canon y tradición, Página 263:
"La autoridad de la Iglesia, por tanto, no podría estar obligada a la autoridad de las Escrituras, porque la Iglesia ha cambiado ... el sábado al domingo, y no por mandato de Cristo, sino por su propia autoridad." (Canon y Tradición, p. 263)
Este es un hecho que la ICAR sostiene. Las demás dicen que no es así, mas no tiene con qué comprobar lo contrario. La llamada teología del día del Señor fue inventada por la ICAR.
Es importante que creamos en Dios antes que en los hombres. Ya hemos visto y leído lo que Dios dice en las escrituras y nada ha sido sacado de contexto, sino la pura palabra de Dios ha sido citada, con su significado directo. Pero habrá quizás alguien que la trate de interpretar para su conveniencia. NO NECESITA INTERPRETACIÓN SINO COMPRENSIÓN.
Bendiciones.