Pero su creencia judeomesiánica no tiene que verse afectada ya que ellos lo creen igual que cualquier cristiano amigo Valenzuela aún que ellos tengan el escrito traducido al hebreo no tan original que digamos pero es lo que ellos creen.
Para judeomesiánico tenemos a Pablo de Tarso. No nos hace falta un personaje obcecado y egocéntrico, irrespetuoso, falto de empatía desparramando soberbia en cada mensaje.