Hay a quien se le olvida (o aparenta olvidar) que la Iglesia es el Cuerpo Místico de Cristo.
1 Cor. 12;
12 Pues del mismo modo que el cuerpo es uno, aunque tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, no obstante su pluralidad, no forman más que un solo cuerpo, así también Cristo
27 Ahora bien, vosotros sois el cuerpo de Cristo, y sus miembros cada uno por su parte.
Efesios 1; 22 = Bajo sus pies sometió todas la cosas = y le constituyó Cabeza suprema de la Iglesia,
23 que es su Cuerpo, la Plenitud del que lo llena todo en todo.
Juan Cap.15
1 «Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el viñador.
2 Todo sarmiento que en mí no da fruto, lo corta, y todo el que da fruto, lo limpia, para que dé más fruto.
3 Vosotros estáis ya limpios gracias a la Palabra que os he anunciado.
4 Permaneced en mí, como yo en vosotros. Lo mismo que el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid; así tampoco vosotros si no permanecéis en mí.
5 Yo soy la vid; vosotros los sarmientos. El que permanece en mí y yo en él, ése da mucho fruto; porque separados de mí no podéis hacer nada.
Así que si contrastamos lo que ataca Oso con estos pasajes encuentan plena justificación.