"LA NOCHE QUE FUE ENTREGADO"
Nos habla de la solemnidad de ese momento.
Conociendo perfectamente lo que estaba por delante, el Señor instituyó esta Cena, con estos símbolos de su cuerpo y de su sangre, representados en el Pan y la Copa con su contenido de vino, sangre que iba a ser derrramada en el Altar de la cruz como precio de nuestra redención.
"TOMO PAN"
Aquí vemos la sencillez de este acto de la Cena del Señor.
El catolicismo romano lo ha rodeado de ceremonias y añadiduras, pero es algo sumamente sencillo.
Incluso, se usa la misma acción que se usaba en aquel tiempo para acompañar las comidas, partir el pan.
1Co 11:24 y habiendo dado gracias,
lo partió, y dijo:
Esta acción de él mismo "partir el pan", está relacionada, espiritualmente, con esta expresión de su muerte voluntaria:
Jua_10:17 Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar.
Y dentro del contexto de esa muerte voluntaria, su santo cuerpo, sería partido, en el sentido de las heridas recibidas por parte de sus enemigos, rumbo al altar de la Cruz, leemos:
"Tomad, comed; esto es mi cuerpo
que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí."
LOS SALMOS TESTIFICAN SOBRE EL PARTIMIENTO DEL PAN
Sal_129:3 Sobre mis espaldas araron los aradores;
Hicieron largos surcos. (Jua 19:1)
Sal_22:16 Porque perros me han rodeado; me ha cercado cuadrilla de malhechores; me horadaron las manos y los pies.
EL PROFETA TESTIFICA SOBRE EL PARTIMIENTO DE SU SANTO ROSTRO
Isa 52:14 Como se asombraron de ti muchos, de tal manera
fue desfigurado de los hombres su parecer, y su hermosura más que la de los hijos de los hombres, (Mt.26:67).
LA COPA CON SU CONTENIDO DE VINO
1Co 11:25 Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí.
PRECIO DE NUESTRA REDENCIÓN
1Pe 1:18 sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata,
1Pe 1:19
sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación,
La sangre la escogió el mismo Dios del cielo, para expiar el pecado del ser humano, mucho antes de la fundación del mundo por medio del Cordero que vio Juan el Bautista:
Jua 1:29 El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.
Y así enseñó a su pueblo, Israel, leemos:
Lev 17:11 Porque la vida de la carne en la sangre está,
y yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona.
Y así nos enseña a nosotros, Su Iglesia:
Heb_9:22 Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.
1Jn_1:7 pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.
CONCLUSIÓN
Los símbolos del Pan y de la Copa con su contenido de vino, puestos sobre la mesa cada primer día de la semana en el solemne memorial de la Cena del Señor, nos habla del altísimo precio, lleno de dolor y sufrimiento, pagado por el Señor en el Altar de la Cruz.
NADA TIENE QUE CON LA EUCARISTÍA CATÓLICA, DONDE POR MEDIO DE UNA HOJUELA DE HARINA DE TRIGO, SE TRAGAN ENTERO, AL ÍDOLO QUE ELLOS LLAMAN "JESÚS", EL MISMO QUE SE LO CUELGAN EN EL PECHO COMO UN AMULETO DE BUENA SUERTE.
Lev 10:9 Tú, y tus hijos contigo, no beberéis vino ni sidra cuando entréis en el tabernáculo de reunión, para que no muráis; estatuto perpetuo será para vuestras generaciones,
Lev 10:10 para poder discernir
entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio,